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La palabra "talento" tiende a referirse a una habilidad innata con la que cada persona nace. Es cierto que tener un talento puede ayudarte y que es bueno intentar identificar y practicar esa habilidad. Sin embargo, evita darle demasiada importancia a encontrar un talento. Muchísima gente vive perfectamente feliz sin tener un talento especializado específico y es perfectamente capaz de aprender ciertas habilidades.

Parte 1
Parte 1 de 3:

Descubre tu talento

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  1. Una buena forma de descubrir cuál es tu talento es recordando tu infancia y pensando qué es lo que te gustaba hacer cuando eras niño. Con frecuencia esta es la época en la que tenías planes que no conocían los límites que la gente tiende a considerar como “realidad”.
    • El miedo al fracaso es una de las cosas que tiende a alejarte de poder encontrar tu talento. Al volver a la infancia eliminas el miedo al fracaso o las limitaciones en tu pensamiento.
    • Considera aquello que deseabas hacer cuando eras niño y toma en cuenta las cosas que te encantaban hacer de niño. Esto no significa que pretendas criar dragones o algo parecido, pero puede encaminarte para que encuentres tu talento. Por ejemplo, no es posible que críes dragones, pero puedes convertir ese deseo en un talento para escribir historias o para que lideres un campamento inspirado en los dragones.
  2. Una de las principales cosas que puedes hacer es enfocarte en algo que te gusta tanto hacer que tiendes a olvidar todo lo demás por un momento. Recuerda, no todos los talentos serán totalmente obvios. Quizás tendrás que hurgar con mayor profundidad en aquello que disfrutas hacer para así poder descubrir tu talento.
    • Por ejemplo: si lo que realmente te gusta es jugar videojuegos, evidentemente eso puede ser un talento. Aunque probablemente no puedas jugar como parte de tu trabajo, puedes encontrar formas de utilizar ese talento (por ejemplo, escribir sobre videojuegos en un blog).
    • Considera estas preguntas: ¿Qué es lo que te encantaría hacer en aquellos momentos en que estás aburrido en el trabajo o la escuela? Si tuvieras un presupuesto ilimitado, ¿qué harías con ese dinero? Si pudieras ir a cualquier parte del mundo, ¿a dónde irías? Si no tuvieras que trabajar, ¿cómo ocuparías tu tiempo? Responder estas preguntas podría ayudarte a descubrir aquello en lo que eres bueno y que te inspira.
  3. En ocasiones, cuando te es difícil pensar en algo con claridad, es bueno tener una opinión externa. Tus amigos y familiares te conocen bien y podrían proporcionarte puntos de vista respecto a áreas en las que consideran que tienes talento.
    • A veces, las áreas en las que deseas tener talento no son necesariamente en las que otros consideran que tienes talento. Está bien, solo porque no tengas un talento innato para algo no significa que no puedas ser bueno en eso, y solo porque tengas talento para algo no significa que tengas que ir tras de eso en tu vida.
    • Por ejemplo: tu familia y amigos pueden opinar que tu talento está en el área de las matemáticas, especialmente para la contabilidad y las cifras, pero tu verdadera pasión es la escalada en roca. En lugar de dejar de lado tu pasión por la escalada en roca, considera utilizar tus habilidades matemáticas para ayudarte a financiar tu pasión por la escalada en roca.
  4. Especialmente si no estás seguro de cuál es tu talento, debes probar hacer nuevas cosas, de este modo tendrás más posibilidades de descubrir para qué eres realmente bueno y qué realmente te motiva.
    • Observa y disfruta de los talentos de otras personas. En la búsqueda de tu propio talento, debes prestar atención a los talentos de otras personas. Piensa en las personas que conoces que son talentosas (quizás tu padre es un excelente cocinero o tu madre tiene una increíble habilidad para escuchar) y disfruta de sus talentos. [1]
    • Sal en tu comunidad. Toma clases que brindan las universidades de tu localidad, asiste a lecturas o encuentros de autores en la biblioteca o librería de tu ciudad, intenta cocinar, escalar en roca o enseñar en una escuela local.
  5. Aunque es bueno conocer la opinión de los demás, a veces necesitas tiempo y espacio para ti mismo para descubrir las cosas por ti mismo. No desearás dejarte llevar completamente por las opiniones de otros. [2]
    • Muchas personas encuentran sus talentos a través de momentos que cambiaron sus vidas, de algo que no fue planeado o esperado. Puede suceder que un músico brillante asista a cierta actuación que repentinamente despierta su amor por la música. Así que si algún día te encuentras frente a algo que genera un cambio en ti, siéntate tranquilo y aprovecha la experiencia.
    • Haz actividades solo. Haz algunas cosas solo, especialmente cosas nuevas. Esto te dará tiempo para descubrir si tienes el talento para algo sin tener la sensación de que tienes que actuar de cierta forma debido a la presencia de alguien.
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Parte 2
Parte 2 de 3:

Desarrolla tu talento

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  1. Aunque el talento puede ser importante para hacer las cosas bien, algo realmente determinante es la práctica. No importa cuán talentoso seas, si no practicas simplemente no llegarás a ser tan bueno como podrías ser. De hecho, en muchos casos, las personas que poseen talentos innatos no progresan debido a que consideran que no necesitan practicar. [3]
    • Programa un espacio de tiempo específico en el día para dedicarlo a practicar tu talento. Por ejemplo, si tu talento es escribir, todas las mañanas separa una hora antes de ir a trabajar para escribir. Si tu talento es el baloncesto, sal a practicar a una cancha.
    • Enfócate en los aspectos que tienes menos talento. Incluso si tienes un talento, no significa que debas ser talentoso en todos los aspectos de esa área. Por ejemplo, puedes ser talentoso para crear diálogos, pero te es difícil crear una trama coherente.
  2. Con o sin talento, los pensamientos negativos pueden detener el desarrollo de tus habilidades más rápido que cualquier cosa. Mientras más combatas tus pensamientos negativo, más fácil será descubrir y desarrollas tu talento, dado que no estarás dudando constantemente de ti mismo. [4] [5]
    • Identifica tus patrones de pensamiento. El primer paso para combatir la negatividad es prestar atención a lo que haces y cuándo lo haces. Quizás solo dejas que surjan pensamientos negativos (esto se llama filtrar) o tiendes a dramatizar todo. Presta atención a lo que piensas sobre ti, sobre tu situación y sobre tu talento (por ejemplo, ¿le das demasiada importancia a tu talento?).
    • Consulta tus pensamientos todos los días. Debes vigilar lo que piensas antes de trabajar en ello. Cuando te des cuenta de que estás dramatizando las cosas (por ejemplo, cuando te dices a ti mismo: “Soy un fracaso porque siempre olvido devolver los libros a la biblioteca”), detente e identifica el pensamiento tal y como es.
    • Practica las charlas positivas y neutrales contigo mismo. El truco es remplazar tus pensamientos negativos por pensamientos positivos o neutrales. Por ejemplo, cuando comiences a pensar que eres un fracaso porque has estado teniendo problemas con una pieza de piano, cambia ese pensamiento y comienza a pensar “esta es una pieza desafiante y tendré que practicar más para tocarla del modo que quiero hacerlo”. Con un pensamiento así dejarás de expresar juicios de valor contra ti.
  3. La gente tiene la mala tendencia de ligar sus talentos con ellos mismos y cuando fallan (lo que sucede en algunas ocasiones) sienten que son un fracaso. Para mantener tu buen estado mental y tu felicidad, sé amable contigo mismo con respecto a tus talentos. [6]
    • Tus talentos te harán el mejor en todo siempre. Al ser amable contigo mismo y no dejar que el hecho de ser talentoso o no en algo determine tu bienestar, tendrás mayores probabilidades de sentirte más feliz.
    • Puedes utilizar tus talentos para ser amable. Esto puede ayudarte a sentirte pleno, en lugar de enfocarte en cómo puede beneficiarte tu talento, estarás utilizando tu talento a favor de los demás. Por ejemplo, si eres escritor, puedes escribir una historia para un amigo enfermo y animarlo.
  4. Con mucha frecuencia las personas con talento se chocan con paredes en términos de crecimiento. Su talento los lleva tan lejos como puede y no sienten que deban hacer algo para seguir desarrollándolo y creciendo. Quedarte siempre en tu zona de confort es una forma segura de estancarte en tu área de talento. [7]
    • Además, desafiarte es una buena forma conservar la humildad. No hay nada malo en estar orgulloso de tus logros, pero alardear o creer que nunca te equivocas es una forma segura de hacer que no le agrades a tu entorno o hacer que sufras una gran caída.
    • Desafíate yendo más allá de donde estás. ¿Aprendiste a hablar inglés de manera fluida?, pues ve más allá y traduce tu libro favorito al inglés, o comienza a aprender un nuevo idioma, algo más difícil, como el árabe o el chino.
    • Lleva a un nuevo nivel aquel aspecto de tu talento que consideres que ya dominas o en el que te has estancado.
  5. Enfocarte en tu talento (ya sea obtener un PhD en estudios sobre el Nuevo Testamento o composición musical) es sumamente importante para mejorar. Sin embargo, debes asegurarte de dedicarte a otras cosas, además de tu talento, de modo que no enfoques todas tus energías en una sola cosa.
    • Haz cosas que no tengan nada que ver con tu talento, cosas en las que eres realmente malo o simplemente cosas que te parezcan divertidas. De esta forma no te limitarás y tendrás una amplia gama de experiencias que puedas explorar. Por ejemplo: si tu talento se encuentra en el campo de las matemáticas, intenta probar algo diferente como el arte, la gimnasia o el yoga.
    • Evita basar tu valor personal o toda tu vida en tu talento. Puedes estar motivado y enfocado sin dejar que tu talento absorba toda tu vida. [8]
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Parte 3
Parte 3 de 3:

Utiliza tu talento

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  1. Existen formas muy buenas e inesperadas de utilizar tu talento, especialmente en términos de oportunidades laborales que pueden surgir gracias a tus talentos. Puede ser un trabajo que encontraste o un trabajo que creaste basándote en lo que viste que se necesitaba.
    • Por ejemplo, solo porque seas un cantante que hizo un curso de canto no significa que debas pertenecer a un grupo profesional de ópera. Puedes utilizar tus habilidades musicales para iniciar un campamento de canto para niños o ayudar a aliviar a enfermos graves.
    • Busca para qué es necesario tu talento. Puedes identificar una necesidad perdida que puede servirte para empezar tu nuevo negocio. Por ejemplo: si tu talento es conocer gente, podrías comenzar un negocio que se dedique a hacer que las personas se conozcan en tu comunidad.
  2. No necesariamente debes tener un trabajo completamente relacionado a tu talento; sin embargo, no existe una razón para que no intentes incorporarlo a tu trabajo. De hecho, utilizar tus talento en tu trabajo es una excelente forma de incrementar tu entusiasmo por tu trabajo.
    • Por ejemplo, si te encanta hacer trabajos de arte y trabajas en una cafetería, considera decorar la pizarra donde están los especiales del día, o puedes transformar tu pasión por el arte y aprender a hacer arte sobre café latte.
    • Piensa cómo podría beneficiar tu talento a tu lugar de trabajo. ¿Qué tienes para ofrecer que podría proporcionar una solución diferente o creativa a cierto problema?
  3. Si no encuentras una forma de aplicar tus talentos en tu trabajo (y generalmente existe al menos una forma), busca la manera de aplicarlo en tu espacio personal. Existen muchas formas en las que puedes disfrutar tu talento y hacer que otros lo disfruten también. [9]
    • Considera crear videos o blogs sobre tu talento. Por ejemplo, puedes utilizar tus habilidades para los idiomas para ayudar a otros a aprender árabe.
    • Busca a otras personas que tengan los mismos talentos y trabajen juntos, ya sea de forma virtual o presencial. Esta es otra excelente forma de guardar la humildad con respecto a tus habilidades, y además puede ser divertido. Estas personas compartirán tu pasión y te ayudarán a desarrollar más tu habilidad.
  4. Haz que tu talento pueda ayudar a crear un espíritu de comunidad y que ayude a otras personas. Piensa en todas las personas que te han ayudado en tu camino al éxito e intenta hacer lo mismo por otros.
    • Si las matemáticas son tu especialidad, puedes brindar tutorías a bajo costo para los niños de tu comunidad. Si tu talento es la actuación, participa en la creación de un campamento de teatro local, de este modo podrás ayudar de acuerdo al talento que tengas. Podrás encontrar miles de formas de ayudar a los demás.
    • Sé el maestro de alguien en el área en que tienes talento. Si ya conseguiste una cátedra, por ejemplo, ofrece clases en el área de tu talento para estudiantes graduados o que estén por graduarse y ayúdalos a identificar sus propios talentos.
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Consejos

  • Nunca dejes de aprender o explorar debido a que piensas que es muy difícil. Si dejas de lado aquello que estás cultivando, entonces nunca progresarás.
  • Recuerda, lo que parece difícil de aprender al principio, se vuelve fácil una vez que ya lo aprendiste.
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Advertencias

  • Evita pensar que un talento tiene que ser algo específico como el arte, la escritura o el baile. Puede ser algo tan vago como “ser talentoso para escuchar a la gente” o “ser talentoso para congeniar con la gente”. Estos son tan buenos como los talentos específicos y son mucho más sencillos se incorporar a cualquier trabajo.
  • Intenta no enfocarte en el aspecto monetario de tu talento. Sí, en esta sociedad necesitarás dinero, pero si solo te enfocas en ganar dinero con tu talento, entonces no lo harás porque sea algo que te apasione y con el tiempo terminarás odiándolo.
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