¿A menudo sientes ansiedad por tus relaciones o te cuesta establecer límites o comportamientos aceptables porque temes perder a tu pareja? No estás solo/a. La codependencia es un tipo de relación disfuncional en donde una persona codependiente siente que necesita de su pareja para funcionar, a menudo acompañado de sentimientos de baja autoestima y culpa.
La codependencia puede superarse con una combinación de consciencia, pensamiento consciente y terapia. ¡Hemos elaborado un test completo para ayudarte a identificar los posibles patrones codependientes a fin de que puedas superarlos, y disfrutar de relaciones felices y saludables en el futuro!
Resumen de preguntas
- No. Mi pareja y yo somos igualmente responsables para nuestra relación.
- Ocasionalmente, pero generalmente puedo hablarlo con mi pareja.
- A veces, siento que soy el/la único/a que intenta mantener la relación.
- Sí. Me preocupo por esto todo el tiempo y siento que me equivoco frecuentemente.
- Todo el tiempo. Los límites son importantes, así que me ciño a ellos.
- A veces. Establezco límites, pero generalmente termino transgrediéndolos.
- Rara vez. No me gusta establecer límites y tengo problemas para mantenerlos.
- Nunca. No quiero límites, tengo miedo de que a mi pareja no le gusten.
- Lo siento por ella, pero entiendo si necesita lidiar con él por su cuenta.
- Me incomoda un poco si no acepta mi ayuda. No me sienta bien.
- Me siento como una pareja poco confiable si no puedo ayudarle con su problema.
- Me siento ansioso/a y culpable. Si tiene problemas, es mi trabajo solucionarlo todo.
- ¡Es lindo verla feliz! La amo, así que con gusto la ayudaré si lo necesita.
- Me hace sentir un poco mejor conmigo mismo/a cuando puedo ayudarle.
- Ayudar a mi pareja me hace sentir que soy digno/a de su amor y sus necesidades.
- Siento menos miedo de que me deje... al menos por un tiempo.
- No. Creo que las personas me aman exactamente por lo que soy.
- A veces, me preocupo por eso, incluso si sé que no es sano.
- Sí, tengo ese miedo la mayor parte del tiempo.
- Definitivamente. Ya pasó antes y creo que volverá a pasar.
- Daría una caminata para tomar un poco de aire, pero no tengo miedo de expresarme.
- Intentaré negociar, pero cederé y me disculparé si no funciona.
- Intento decir lo que siento, pero la mayor parte del tiempo, termino haciendo las cosas a su manera.
- Haré lo que quiera y nunca mencionaré que me siento diferente. También puedo ocultar mis sentimientos.
- Bien. Tengo necesidades al igual que cualquiera y me merezco que se satisfagan.
- Me siento mayormente bien, pero a veces me preocupa lo que los demás piensan de mí.
- Hago cosas para mí mismo/a de vez en cuando, pero normalmente me siento culpable.
- Incluso pensar en eso me hace sentir culpable. ¿Cómo se sentirá mi pareja?
- No lo creo. Creo que es increíble, por supuesto, pero nadie es perfecto.
- Ocasionalmente. Es realmente genial y me preocupa estar a la altura.
- A veces, siento que es realmente perfecta y definitivamente yo no lo soy.
- Sí. No sé lo que alguien así de maravilloso ve en mí.
- A nadie le gusta el rechazo, pero tampoco le temo.
- Puedo soportarlo, pero emocionalmente me deja una cicatriz.
- El rechazo me destruye y me cuesta superarlo.
- El rechazo es una de las cosas más terroríficas para mí y haré cualquier cosa para evitarlo.
- Me disculparé si genuinamente he hecho algo para lastimarlas.
- A veces, me disculpo demasiado, pero estoy trabajando en ello.
- Me disculpo instintivamente, aun cuando probablemente no sea necesario.
- Me disculpo todo el tiempo porque no me siento digno/a en comparación con los demás.
- En realidad, lo disfruto. ¡No necesito una pareja para ser feliz!
- Definitivamente no me gusta estar soltero/a, pero sé que tampoco debería conformarme.
- Eso creo. Generalmente, termino saliendo de nuevo con alguien inmediatamente después de una ruptura.
- Sí. Tengo miedo a estar solo/a, así que nunca permito que las relaciones terminen si puedo evitarlo.
- No. Soy responsable por mí y no puedo controlar las acciones de las demás personas.
- Me he sorprendido haciéndolo varias veces, pero procuro no hacerlo.
- A veces, simplemente no puedo evitarlo. Me preocupa lo que pasará si no lo hago.
- Todo el tiempo. Me siento responsable por las acciones de los demás.
Otros test
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Señales de una relación codependiente
Idealizar a una pareja. Admirar las mejores cualidades de tu pareja es algo de esperar, pero eso no significa que sea perfecta. Las personas codependientes tienden a ignorar los errores y defectos de sus parejas, incluso cuando afectan negativamente la relación. Pueden fantasear con la idea de su pareja en lugar de con quién es en realidad.
Sentir culpa cuando no satisfaces las necesidades de tu pareja. Si eres codependiente, podrías sentir que es tu trabajo solucionar los problemas de tu pareja y que su felicidad está antes que la tuya. Esto puede llevarte a sentir una culpa intensa cuando haces cosas por ti mismo/a en lugar de por ella o te enfocas en algo fuera de la relación.
Evitar conflictos por miedo a molestar a tu pareja. El conflicto es una parte natural de cualquier relación. No obstante, si eres codependiente, probablemente te preocupe que cualquier conflicto cause que la relación fracase y hagas todo lo posible para evitarlo. Esto puede dar lugar a una indisposición para establecer límites o expresarle tus necesidades a tu pareja.
El miedo al conflicto también puede llevarte a asumir la culpa por cosas que no hiciste y a disculparte por el solo hecho de evitar una discusión. Dependiendo de qué tan grave sea la codependencia, incluso puedes estar dispuesto/a a soportar que tu pareja te insulte o se burle de ti a pesar de lo dañino que es.
Asumir mucha responsabilidad para hacer feliz a tu pareja. En una relación codependiente, probablemente sientas que es tu deber solucionar los problemas de tu pareja, sin importar lo que te cueste hacerlo. Incluso si ayudarla te causa estrés y ansiedad, o te lleva a descuidar tus propias necesidades, puedes hacerlo para asegurarte de que tu pareja sea feliz. Podrías sentir que las necesidades de tu pareja siempre son más importantes que las tuyas propias.
Preocuparte por lo que tu pareja piensa y siente. Si eres codependiente, quizás te preocupes obsesivamente por si tu pareja está contenta o enfadada contigo. Si sientes que está molesta, esto también puede influir en tu deseo de ayudarle sin importar cómo eso te afecte.
Sentir que estás perdiendo tu identidad. Si eres codependiente, es posible que seas reacio/a a hacer cualquier cosa que tu pareja no quiera hacer. Cuando tu sentido de identidad esté vinculado a la relación, puede ser más difícil mantener otras relaciones con amigos y familiares, o seguir dedicándote a tus pasatiempos y otros intereses independientes.
Tratar de controlar el comportamiento de tu pareja. En ocasiones, la codependencia puede llevarte a tratar de manipular a tu pareja para que haga lo que deseas. Esto suele surgir de una creencia de que puedes ser feliz en una relación si puedes controlar la conducta de tu pareja.
Superar la codependencia
La terapia con un profesional autorizado siempre es el tratamiento más eficaz para un problema de conducta como la codependencia, pero también hay medidas que puedes tomar por tu cuenta para mejorar la conducta codependiente.
Expresa tus necesidades y deseos. Tu pareja y tú son iguales, y ambos tienen necesidades que se deben respetar. Ten en cuenta que, cuanto más reprimas tus sentimientos, más resentimiento tendrás hacia tu pareja en el futuro. Es más saludable para ambos si te expresas, le haces saber a tu pareja lo que necesitas de ella y si también eres receptivo/a a sus necesidades.
Por ejemplo, supongamos que te preocupas mucho cuando no tienes tiempo para conectarte y hablar con tu pareja, sobre todo durante las semanas en las que ambos están ocupados, estresados o lidiando con otros temas. Si te das cuenta de que necesitas más tiempo e intimidad emocional con tu pareja, está bien decírselo y preguntar si ambos pueden reservar un poco de tiempo cada semana (tal vez un par de horas en una noche en particular) para ustedes. ¡Esto no te convierte en mandón/a ni en un inconveniente! Una pareja verdaderamente atenta te escuchará y estará abierta a encontrar soluciones.
Establece y mantén límites sanos. Establecer límites va de la mano con defender tus necesidades y deseos. Cuando los límites no se imponen, tus necesidades y las de tu pareja pueden mezclarse hasta que no haya ningún límite y, con el tiempo, puede sentirse que no tienes espacio o independencia. Para superar la codependencia, es importante reestablecer límites firmes y mantenerlos aun cuando exista un conflicto personal.
Por ejemplo, podrías decirle a tu pareja que no irás a una fiesta el fin de semana porque estás agotado/a por el trabajo y necesitas tiempo para descansar. Tal vez podría considerar tu decisión decepcionante y eso está bien; estás cuidando de ti, así que no tienes por qué sentirte culpable. Además, incluso si está decepcionada, una pareja compasiva y respetuosa también entenderá por qué estás estableciendo dicho límite.
Evita tomar las cosas personalmente. Puede ser difícil separar los sentimientos y acciones de tu pareja de los tuyos, pero es una parte importante de cualquier relación saludable. No es tu trabajo personal asegurarte de que tu pareja nunca tenga ningún problema. Recuerda que puedes brindarle apoyo y aceptar a tu pareja tal como es sin intentar “arreglarla” y asegurarte de que esté dispuesta a hacer lo mismo por ti.
Tómate un tiempo para el cuidado personal. Si tienes tendencias codependientes, podría sentirse que cualquier cosa para tu beneficio propio es algo egoísta. No obstante, el cuidado personal es de vital importancia, tanto para tu propia salud mental como para el bien de tu relación. ¡La verdad es que es difícil cuidar de otra persona si no cuidas también de ti! Asegúrate de reservar tiempo para ti con regularidad a fin de hacer cosas que te relajen y te traigan felicidad, incluso si se trata únicamente de un relajante baño de burbujas después del trabajo o un momento de tranquilidad leyendo un libro.
Abraza tu independencia. Es crucial tener una vida fuera de tu relación. Reserva un tiempo para ti a fin de dedicarte a tus pasatiempos y pasiones. Sal con amigos y pasa tiempo con familiares cercanos. Asegúrate de pasar tiempo lejos de tu pareja a fin de mantener tu sentido de individualidad. Seguirás haciendo algunas cosas con tu pareja y pasar algún tiempo separados no dañará una relación, sino más bien la mejorará. Recuerda también que, al principio, puede resultarte difícil hacer las cosas solo/a, pero con el tiempo, aprenderás a apreciar tu independencia.
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