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La mayoría de las personas tienen la capacidad de enrollar la lengua. [1] Sin embargo, existen factores genéticos y del entorno que cumplen una función para hacerlo. [2] Si formas parte de la minoría y no puedes enrollar la lengua, podría parecerte algo imposible. Quizás hayas tenido que hacer un gran esfuerzo para hacer que tu lengua obedezca sin obtener resultados. [3] No existe ninguna garantía de éxito, ¡pero sigue intentándolo y quizás te des cuenta de que puedes hacer algo que nunca habías hecho!

Método 1
Método 1 de 3:

Hacer un taco con la lengua

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  1. También puedes llamarle la base de la boca. Este será un límite de fácil acceso para la lengua. Usarás el interior de la boca como guía mientras aprendes. En realidad, no necesitarás nada más. La parte inferior de la boca junto con los dientes y los labios deben proporcionarte todas las superficies necesarias para formar el taco con la lengua.
  2. Trata de tocar los tres lados (no te preocupes por la parte de atrás) de la boca al mismo tiempo. Estira la lengua para presionar todos los lados. Incluso puedes sentir que la lengua se introduce debajo de los dientes.
  3. Ahora trata de mover cada lado de la lengua de forma independiente. Mantén la lengua plana. Presiona todos los lados de la boca, suelta un poco un lado y muévelo hacia arriba en ese lado de la boca. Por ejemplo, mientras presionas el lado izquierdo, trata de tocar los dientes con el lado derecho. Trata de tocar la parte superior de la boca. Pasa al otro lado y repite el proceso.
  4. Tendrás más destreza con la lengua al aprender a mover cada lado de forma independiente. Mantén la lengua plana y mueve un lado hacia arriba. Luego, mueve el otro lado. Ahora deberás mantener la lengua plana mientras los lados tocan cada lado de la boca en los dientes o por encima de ellos. Si te miras en el espejo, verás que la lengua empieza a doblarse.
    • Si te miras en el espejo y la lengua no luce plana, sigue practicando al aplanar la lengua y mover las partes de forma independiente. Lo que sucede es que usas los músculos del centro de la lengua para elevarla. Estos músculos deben mantener la lengua en la parte inferior de la boca.
  5. Al abrir la boca, debes tener el inicio de la forma de taco en el interior. Al presionar la lengua para sacarla de la boca, mantén la presión en los lados. Presiona la parte inferior de la lengua contra los dientes frontales inferiores. Al sacar la lengua, usa los labios para mantener la forma redondeada.
    • Quizás te parezca más fácil mantener la lengua enrollada alrededor de un objeto (como una pajilla) al sacar la lengua. Mantén los lados de la lengua contra los lados de la pajilla. Si sientes que la parte inferior de la lengua empuja la pajilla hacia arriba y la aleja de los lados, retrocede y recupera la forma de la lengua. Sigue intentándolo hasta que ya no necesites la pajilla.
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Método 2
Método 2 de 3:

Hacer un trébol de dos hojas

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  1. Trata de tocar los tres lados (no te preocupes por la parte de atrás) de la boca al mismo tiempo. Estira la lengua para presionar todos los lados. Incluso puedes sentir que la lengua se introduce debajo de los dientes. Debes mantener la lengua lo más plana posible al practicar esta forma de trébol.
  2. Si no puedes hacer la forma de taco, practícala primero. Debes poder hacer y mantener la forma de taco sin ningún apoyo. Esto significa que si aún debes sostener la forma de taco con los labios, no estás listo para hacer este truco.
  3. El objetivo es que practiques mover la punta sin mover los lados y el centro. Tendrás que empezar por tocar la parte inferior de los dientes frontales con la punta de la lengua. Trata de mantener los lados en la parte superior de la boca. Es posible que tengas que presionar los lados contra la parte superior de la boca para mantener la forma.
    • Toca solo con la punta de la lengua la parte inferior de los dientes frontales superiores. Si alguna otra parte de la lengua toca la parte inferior de los dientes frontales o algún otro diente, trata de llevar la lengua hacia atrás. Mantén la punta de la lengua en los dientes frontales mientras lo hagas. Esto en sí, te ayudará a diferenciar los músculos de la lengua (es decir, los frontales centrales y los frontales de los lados).
  4. Hazlo solo con la punta de la lengua y sin mover los lados de la misma. No dejes que se deslicen hacia la parte de atrás de la boca. Si se mueven, empieza de nuevo. Sabrás que lo has logrado cuando la lengua se doble sobre sí misma en el centro.
    • Esta será la parte más difícil y que te llevará más tiempo practicar y perfeccionar. Si te quedas atascado, será en este paso.
    • Si tienes dificultades en este paso, es posible que se deba a que mueves todo el frente de la lengua en lugar de mover solo la punta. Puede ser algo difícil de lograr. Si sientes que los lados de la parte frontal de la lengua se mueven junto con la punta, hazlo más despacio y empieza de nuevo. Deben estar relajados, ya que, de lo contrario, presionarán los lados de la lengua hacia la parte de atrás de la boca.
  5. Lo más probable es que los lados de la boca aún sostengan con firmeza los lados de la lengua. Quizás incluso uses los dientes superiores para mantener el doblez del centro. Practica sacando la lengua de la boca mientras mantienes la forma. Con la práctica suficiente, podrás crear el doblez sin la ayuda de los dientes.
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Método 3
Método 3 de 3:

Hacer un trébol de tres hojas

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  1. Debes empezar por estirar la lengua lo más que puedas. Puedes tratar de presionar la lengua en la parte inferior de la boca. Tendrás que usar la mayor parte posible de la lengua para hacer el trébol de tres hojas.
  2. Si no puedes hacer y mantener la forma de taco con la lengua, no intentes hacer esta técnica porque solo te frustrarás. Las habilidades aprendidas para hacer el taco y el trébol de dos hojas son requisitos previos para hacer el trébol de tres hojas.
  3. Es preferible que uses el dedo índice con el lado de la huella digital hacia la lengua. Sin importar el dedo que uses, debe ser lo suficientemente fuerte como para sostener la lengua. Presionarás la lengua contra el mismo para formar el trébol de tres hojas. No es necesario que lo pongas en los labios, pero debe estar lo suficientemente cerca como para que no puedas sacar la lengua por completo sin mover el dedo.
  4. No sostengas la forma de taco con la boca. Mueve el dedo para que quede cerca de la boca, pero no en el interior. Necesitarás un espacio para mover la lengua hacia adelante y hacia atrás al aprender este truco.
    • Una forma de colocar el dedo es sacar la lengua en forma de taco. Coloca el dedo debajo de la lengua y apunta hacia el techo. La uña del dedo debe quedar bajo la punta de la lengua. Mueve la lengua hacia atrás y deja que el dedo se extienda hacia arriba. Este es un buen lugar en donde el dedo puede quedarse.
  5. Sostén la punta y los lados de la lengua, y deja que los bordes que estén a la izquierda y a la derecha del dedo se doblen hacia dentro. Durante el truco del trébol de dos hojas, los músculos que están a la izquierda y a la derecha del dedo se relajarán. En este caso, también deben relajarse. La punta en forma de taco apuntará hacia arriba, con lo cual creará la tercera hoja. Esta es la parte más difícil. Si te quedas atascado, será en este paso.
    • Si aún no puedes hacer el trébol de dos hojas, practica ese truco. El trébol de tres hojas requiere mucha más destreza en la lengua. Mientras practiques el trébol de dos hojas, aprenderás a manipular la punta de forma independiente de los lados. Es necesario que tengas esta habilidad para formar con éxito el trébol de tres hojas.
  6. Cuanto más practiques enrollando la lengua, menos apoyo necesitarás y podrás formar el trébol de tres hojas sin apoyo. Retira el dedo de la lengua mientras mantienes la forma. Es posible que necesites hacerlo varias veces, pero con el tiempo podrás mantener la forma.
    • Quizás tengas que tomar un descanso mientras practiques. Los músculos de la lengua pueden fatigarse al moverlos excesivamente de maneras que no se han movido antes. Esto puede hacer que sea imposible mantener la forma y que no puedas lograrlo ahora, sino hasta más tarde.
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Advertencias

  • Ten en cuenta que quizás no puedas enrollar la lengua si tienes una condición médica conocida como "frenillo", "lengua anclada" o “anquiloglosia”. Las personas que tienen esta enfermedad tienen una banda de tejido llamada frenillo lingual, que conecta la parte inferior de la lengua a la base de la boca, lo cual dificulta el movimiento de la punta de la lengua. [4] A la mayoría de las personas se les corrige esta condición a una edad temprana para facilitar el habla correcta.
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