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El líquido amniótico es un líquido transparente e inoloro que rodea y amortigua a tu bebé en el útero. Por lo general, una pérdida empieza cuando el saco amniótico se rompe cerca del final del embarazo, indicando el inicio del parto. Sin embargo, el saco puede romperse más pronto en el embarazo, y es importante acudir al doctor si esto ocurre. Podrías tener pérdidas de distintos líquidos durante el embarazo, así que usa la vista y el olfato para ayudarte a determinar si es líquido amniótico. Si te preocupa, lo mejor siempre es hablar con tu doctor, ya que él puede aconsejarte en cuanto a la mejor forma de proceder.

Método 1
Método 1 de 3:

Observar el color, la cantidad y el olor de la secreción

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  1. Si empiezas a perder líquido, atrapa un poco con una toalla sanitaria. Hacerlo te facilitará más identificar lo que sea. Además, si crees que tienes un problema, puedes llevar la toalla contigo al doctor para ayudar a determinar cuál es el problema. [1]
  2. Este líquido suele ser inoloro y de un color muy claro. Si rompes fuentes, es posible que sientas un torrente de agua, pero no siempre es así. En ocasiones, es un goteo ligero. [2]
    • Es posible que la zona vaginal tan solo se sienta mojada o húmeda.
    • Presta atención a la cantidad de secreción de forma que puedas informárselo a tu doctor.
  3. Esta mucosidad está calzada en la entrada del útero durante el embarazo para mantener a raya las bacterias. A medida que te acerques a dar a luz, por lo general en el espacio de unos días o incluso solo unas horas, tu cuerpo empujará este tapón hacia afuera de forma natural. [3]
    • Puede estar ensangrentado o rosado, pero también puede ser transparente.
  4. Durante las últimas etapas del embarazo, el bebé puede ejercer presión sobre la vejiga, haciendo que pierdas orina. Es un poco desagradable, pero olfatéalo para determinar si parece ser orina. Si no huele a orina, podría ser en cambio líquido amniótico. [4]
    • Es probable que sea orina si únicamente sale un poco de líquido al estornudar o toser.
  5. Si te sale un líquido de un color más verde, podría indicar una infección, sobre todo si tiene mal olor. Asimismo, podría indicar meconio, el cual se encuentra en el sistema digestivo del bebé. En cualquiera de estos casos se necesita atención médica inmediata. [5]
    • El meconio puede ser de un color más amarronado.
  6. Ver sangre en las secreciones es relativamente común durante el embarazo. Sin embargo, siempre es mejor acudir de inmediato al doctor para estar segura. Si se ha roto el saco amniótico, es probable que veas sangre si aún estás en tu primer trimestre. De lo contrario, podría tan solo ser secreción vaginal, la cual en algunos casos sí incrementa durante el embarazo. [6]
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Método 2
Método 2 de 3:

Diagnosticar un bajo nivel de líquido amniótico

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  1. La mejor forma de diagnosticar este problema es mediante chequeos regulares. Tu doctor o partera te medirá el vientre para revisar el crecimiento de tu bebé. Si es bajo, es posible que recomiende que te hagas una ecografía. [7]
    • Entre los factores de riesgo para este problema se encuentran la presión baja o alta, un bebé anterior con una tasa de natalidad baja y determinadas enfermedades (por ejemplo, lupus).
  2. En ocasiones, una pérdida pequeña podría ser la causa del problema de bajo nivel de líquido amniótico. Sin embargo, este es un síntoma relativamente raro. El líquido será transparente y en su mayoría inoloro, y el flujo puede ser en intervalos aleatorios o constante. [8]
    • Si únicamente ocurre cuando estornudas o toses, es más probable que sea orina. Sin embargo, no está de más que te revise un doctor.
  3. Con una ecografía, un profesional médico puede medir los bolsillos de líquido en el útero. Luego, puede determinar si se encuentra por debajo de donde debería estar. [9]
    • El método más confiable es medir el bolsillo más grande, el cual debe medir más de 2 cm (0,8 pulgadas) al final del segundo trimestre.
  4. A partir de la semana 28, es probable que tu doctor te pida que cuentes las patadas. Por lo general, podrías sentir alrededor de 10 patadas en una hora, pero no todos los bebés son iguales. La clave es observar si el movimiento disminuye de repente o se ausenta por completo. De ser así, debes acudir a la sala de urgencias o comunicarte de inmediato con tu doctor. [10]
    • Es posible que todo esté bien, pero lo mejor es pecar de cuidadosa. Si algo anda mal, mientras más pronto puedan recibir atención médica tú y tu bebé, mejor.
    • Es probable que tu doctor realice un examen pélvico para tomar una muestra de líquido y realice una prueba de colorante.
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Método 3
Método 3 de 3:

Saber cuándo has roto fuentes

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  1. Es posible que no salga a borbotones, pero probablemente sientas que se filtra un poco de humedad. Por lo general, lo sentirás en la vagina o entre la vagina y el ano. Quizás observes que tu ropa se moja. [11]
    • Puedes llevar contigo al doctor cualquier toalla sanitaria que tenga líquido si consideras que podría ser líquido amniótico. Puede usarla para hacer una prueba de qué tipo de líquido es.
  2. Es probable que hayas visto las escenas dramáticas en películas y programas de televisión en las que el agua sale a borbotones de una persona embarazada. Esto no suele ocurrir con tanta frecuencia en la vida real, pero es posible. Quizás sientas que corre un chorro de agua por tus piernas, en cuyo caso, es casi definitivamente líquido amniótico. [12]
  3. Cuando esto ocurra, es probable que estés entrando en trabajo de parto o quizás se te deba inducir el parto. Si tienes 34 semanas de embarazo en adelante, es probable que se te induzca el parto. A las 37 semanas, quizás se te dé la opción de esperar para ver si entras directamente en trabajo de parto. Antes de las 34 semanas, es probable que tu doctor te diga que hagas reposo absoluto para evitar que entres en trabajo de parto. [13]
    • Antes de las 34 semanas, tu bebé será prematuro, por lo que tu doctor querrá posponer el nacimiento lo más posible. Es probable que te dé esteroides para ayudar a que maduren los pulmones de tu bebé antes de que des a luz.
  4. Aunque tengas una sensación de secreción a borbotones, el personal médico querrá revisarte para asegurarse de que sea una ruptura en el saco amniótico. Quizás realicen una prueba con un espéculo en la que introducen este instrumento en la vagina para revisar si hay un charco de líquido. [14]
    • Asimismo, tomarán una muestra para hacerle una prueba al líquido y asegurarse de que sea líquido amniótico.
    • Algunos doctores usarán una revisión menos invasiva y te pedirán que uses un protector diario y luego le tomes una muestra al líquido con un hisopo. [15]
    • Si no es líquido amniótico, es probable que te envíen de regreso a casa. Sin embargo, no te preocupes. Las falsas alarmas ocurren todo el tiempo, y no es nada de lo que avergonzarse.
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Consejos

  • Podrías conseguir un kit de AmniCheck para hacerle una prueba al líquido o secreción y ver si es líquido amniótico sin ir al hospital.
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