Hay muchas teorías sobre por qué soñamos, cómo soñamos y qué significado le podemos dar a nuestros sueños. Muchas personas creen que los sueños pueden proporcionarnos una comprensión de nuestra vida y nuestros sentimientos, pero el problema es que resulta muy difícil recordarlos. Con esfuerzo de nuestra consciencia podríamos recordar la mayoría de nuestros sueños y con muchos detalles.
Pasos
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Concéntrate en recordar tus sueños ni bien te despiertes. Por lo general, solo puedes recordar el último sueño que tuviste antes de despertar. No te muevas ni hagas nada. Mantente en la misma posición en la que estabas e intenta recordar lo que soñaste antes de pensar en otra cosa.
- Mientras estás recordando, centra tu vista en el primer objeto que veas al despertar. Obsérvalo y concéntrate en él, dado que a menudo lleva un vago recuerdo del sueño al lugar de tu memoria donde es más fácil recordar detalles. Por ejemplo, la perilla de la puerta, un foco, o un clavo en la pared, te ayudarán a recordar las cosas que viviste mientras dormías.
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Escribe los sueños en tu cuaderno. Anota lo más que puedas, empezando con las cosas básicas como la ubicación, la trama básica, los personajes, los sentimientos (si estabas asustado o contento) y cualquier imagen que recuerdes.
- Si no recuerdas nada del sueño, anota lo primero que te venga a la mente al despertar porque puede que estar relacionado de alguna manera y ayudarte a recordarlo. También anota cómo te sientes al despertar, debido a que las emociones que experimentas en los sueños perduran al despertarte, al menos por un corto período. Por lo tanto, si te despiertas ansioso o feliz, pregúntate por qué.
Nota: si recuerdas algún diálogo, anótalo primero, ya que las palabras se olvidan fácilmente. Describe todo lo que puedas, incluso si solo puedes recordar una imagen. A medida que anotas lo básico, el resto del sueño puede venir a tu mente.
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Aumenta la cantidad de sueños que puedes recordar despertándote a la noche más a menudo. Tenemos varios ciclos REM durante la noche que se hacen más y más largos hacia la mañana. Si solo recuerdas el último sueño que tuviste, entonces hay muchos más sueños que olvidaste. Siempre es tentador volver a dormir cuando te despiertas en la madrugada, pero toma la oportunidad para recordar lo que estabas soñando, ya que con toda certeza lo olvidarás en la mañana.
- Esto solo se recomienda para las personas que tienen un sueño adecuado y que se pueden volver a dormir fácilmente. De lo contrario, omite este paso.
- Debido a que solo recordamos el último sueño, si te despiertas varias veces durante la noche, podrás recordar más sueños. Nuestros ciclos de sueños son de 90 minutos aproximadamente, por lo que puedes activar tu alarma para que te despierte varias veces cada 90 minutos (por ejemplo 4,5, 6 o 7 horas) después de irte a dormir. Los sueños que tienes durante la última media hora de la noche son más largos que los que tuviste después de irte a dormir, así que es aconsejable que esperes hasta al menos 4,5 horas para despertarte intencionalmente.
CONSEJO DE ESPECIALISTAProfesional de medicina del sueño y psiquiatríaEl Dr. Alex Dimitriu es el propietario de Menlo Park Psychiatry and Sleep Medicine, una clínica con sede en el Área de la Bahía de San Francisco que cuenta con experiencia en psiquiatría, sueño y terapia transformacional. Alex obtuvo su doctorado en Medicina en la Universidad Stony Brook en 2005 y se graduó del Programa de Residencia de Medicina del Sueño en la Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford en 2010. Profesionalmente, Alex tiene doble certificación en psiquiatría y medicina del sueño.Eres más propenso a recordar un sueño si te despiertas mientras está ocurriendo. Las personas tienen una mayor tendencia a recordar sus sueños si tienen apnea del sueño, vecinos ruidosos o cualquier otra cosa que perturbe su descanso. Incluso hay investigadores en Stanford que analizaron a personas para que recuerden sus sueños al observarlas en busca de un movimiento ocular rápido y luego despertarlas durante esa fase en particular.
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Planea tener un buen descanso a la noche. Los sueños se producen cuando nuestros cuerpos están en la etapa de sueño conocida como REM, cuyas siglas en inglés corresponden a movimientos oculares rápidos. Mientras el cuerpo descansa, la mente sigue activa con los sueños. Si no duermes mucho de noche, o interrumpes el sueño a menudo, tienes menos sueño REM y sueñas poco. Intenta irte a dormir y despertarte a la misma hora todos días para tener un descanso adecuado.
- La mayoría de las personas necesitan entre 7 y 9 horas de sueño por noche para alcanzar la cantidad de descanso adecuado. A las personas que duermen menos de 6 horas les cuesta recordar los sueños, dado que los más largos y más vívidos ocurren al final del ciclo de sueño.
- Crea un ambiente de descanso tranquilo. Elimina los ruidos y las distracciones que puedan evitar que sueñes profundo. Si es necesario, utiliza tapones en los oídos y asegúrate de tener cortinas oscuras que bloqueen la luz del exterior.
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Coloca un bolígrafo o un lápiz y un cuaderno cerca de tu cama. Usa este cuaderno solo para anotar tus sueños; es mejor si tiene hojas lisas sin diseños u otras distracciones. Asegúrate de dejarlo abierto en una página en blanco para no tener que buscar una cuando despiertes.
- Siempre coloca el lápiz en la misma posición así no tienes que buscarlo tampoco. Puedes escribir el lugar donde pones tu bolígrafo u otras cosas antes de irte a dormir para que puedas encontrarlos luego.
- Una alternativa es dejar una grabadora cerca de tu cama o debajo de la almohada para describir el sueño verbalmente.
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Pon tu alarma cerca de tu cama. Es probable que olvides lo que soñaste si tienes que levantarte a apagar la alarma. Configura la alarma para que se apague luego de que hayas tenido una cantidad de descanso adecuada. Intenta no usar la alarma de la radio porque las propagandas y las charlas del programa matutino te pueden distraer. [1] X Fuente de investigación
- Si puedes despertarte sin la alarma, no tendrás que preocuparte por apagarla.
- Si es posible, intenta usar una forma más gentil de despertarte. Pídele a alguien que te despierte amablemente y sin hablarte, o conecta un despertador a las luces de tu habitación. Muchas personas notan que pueden recordar mejor los sueños si no utilizan un reloj despertador.
Consejo: coloca una nota en la alarma que diga en letra grande “¿qué soñaste?”, o algo similar, para que sea lo primero que veas al abrir los ojos (y apagar el despertador).
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No comas, ni bebas alcohol ni tomes medicamentos justo antes de irte a dormir. Los químicos de esos elementos afectan la habilidad del cerebro de recordar los sueños, así que intenta no ingerir nada al menos unas horas antes de irte a dormir para que nada interfiera con tu memoria o los patrones de sueño.
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Relaja tu mente y tu cuerpo antes de la hora de dormir. Por lo general, ¿murmuras en tu mente antes de dormir? Tener un montón de pensamientos estresantes en tu cabeza te puede dificultar recordar los sueños, los cuales requieren de una concentración profunda. Antes de ir a la cama, relaja tu mente y libérala de pensamientos negativos; déjala que se duerma de forma calmada.
- Evita llevar tu teléfono o la computadora portátil a la cama, ya que enviar correos y controlar mensajes de texto justo antes de dormir no le proporciona a tu mente el tiempo que necesita para relajarse.
- Prueba meditar o usar la técnica clásica de contar ovejas para liberar tu mente.
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Decide de forma consciente que quieres recordar los sueños. Tienes más probabilidad de recordar los sueños, si realmente quieres hacerlo. Asumiendo que así lo deseas, dite a ti mismo que vas a recordar tus sueños y sigue estos pasos conscientemente para hacer realidad ese deseo. [2] X Fuente de investigación Los sueños y las pesadillas: el origen y el significado de los sueños de Ernest Hartmann, pág. 142 (Dreams and Nightmares: The Origin and Meaning of Dreams), ISBN 0738203599
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Piensa en un problema o en algo que te preocupe antes de dormir. Piensa profundamente en la situación sin buscar una solución o sacar conclusiones. Pensar en eso ayuda en cierto sentido a recordar los sueños de forma más lúcida, existiendo la posibilidad de que estos generen un conocimiento más profundo sobre el problema. [3] X Fuente de investigación Los sueños y las pesadillas: el origen y el significado de los sueños de Ernest Hartmann, pág. 142 (Dreams and Nightmares: The Origin and Meaning of Dreams), ISBN 0738203599Anuncio
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Lleva contigo un cuaderno o una grabadora de voz durante el día. Muchas veces escuchamos o vemos algo que nos recuerda lo que soñamos la noche anterior. Anota estos recuerdos enseguida y piensa en ellos para tratar de recordar el resto del sueño. También puede ayudarte si piensas constantemente en tus sueños durante el día.
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Ve de nuevo a tu cama y recuéstate. A veces, puedes refrescar la memoria cuando te colocas en la misma posición que estabas mientras dormías. Intenta colocar tu cabeza en el mismo lugar de la almohada, coloca tu cuerpo de la misma forma y todo lo demás. Si lo que soñaste se ve viene a la mente, piénsalo bien antes de levantarte a escribirlo.
- Puede serte útil abrir los ojos y mirar el primer objeto que ves cuando te despiertas.
Consejo: intenta crear la misma atmósfera en la habitación, como cerrar las cortinas, apagar las luces y evitar los ruidos.
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Practica de nuevo la siguiente noche. Recordar los sueños requiere de esfuerzo y práctica. Cuánto más seas consciente de tus sueños, más probable es que los recuerdes. Acostúmbrate a comprometerte en recordar los sueños y las pesadillas y escribirlas cuando te despiertes. El proceso será más fácil con el tiempo.
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Observa los patrones. Con el tiempo te darás cuenta de qué factores te ayudan a recordar los sueños. Trata de notar los patrones relacionados con la hora a la que te vas a dormir y a la que te despiertas, la temperatura de la habitación, lo que comiste en la cena. ¿Alguna de estas variables parecen influenciar tu habilidad para recordar los sueños?CONSEJO DE ESPECIALISTAProfesional de medicina del sueño y psiquiatríaEl Dr. Alex Dimitriu es el propietario de Menlo Park Psychiatry and Sleep Medicine, una clínica con sede en el Área de la Bahía de San Francisco que cuenta con experiencia en psiquiatría, sueño y terapia transformacional. Alex obtuvo su doctorado en Medicina en la Universidad Stony Brook en 2005 y se graduó del Programa de Residencia de Medicina del Sueño en la Escuela de Medicina de la Universidad de Stanford en 2010. Profesionalmente, Alex tiene doble certificación en psiquiatría y medicina del sueño.
Ten en cuenta que es normal olvidar los sueños. En realidad, estamos diseñados para no recordar nuestros sueños. Al soñar, tu cerebro realiza una gran limpieza, como al resolver problemas, solucionar hipótesis y ensayar situaciones con mucha emoción.
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Consejos
- Hay canciones que hacen que recordemos los sueños mejor, así que intenta escuchar un poco de música antes de dormir ¡y observa lo que sucede!
- Después de haber recordado la mayor parte de tu sueño, trata de ponerlo en el orden correcto. Esto te ayudará porque es más fácil de memorizar las cosas si sabes lo que pasó primero, y siempre escribe eso en primer lugar.
- Si ya soñaste algo y quieres recordarlo, no te preocupes. Cuando estás soñando, estás en un estado mental totalmente diferente; intenta tener sueños lúcidos. Cuando estás en este estado mental y tienes un sueño lúcido, ¡a veces puedes recordar los sueños anteriores! Piensa en ello como si tuvieras un lugar en la mente que guarda los sueños que tuviste y que solo puedes acceder a ellos soñando.
- Mejor aún, no utilices ninguna luz en absoluto, ya que puede dificultarte recordar los sueños. Simplemente coloca un lápiz y un papel donde los alcances fácilmente y sin que tengas que abrir los ojos (ten cuidado de no volverte a dormir). Con la práctica vas a mejorar la escritura sin ver el papel.
- Si eres de los que hablan durante los sueños, puedes filmarte con una cámara de video o con tu teléfono celular, o bien, puedes usar tu grabadora de voz. Reprodúcelo después de haber escrito lo que recuerdas. Esto puede refrescar recuerdos de sueños que tuviste y que olvidaste al despertar.
- Cuando grabes el sueño, puedes recordarlo más fácil si escribes (o hablas) en tiempo presente (es decir, estoy…, en lugar de estaba…).
- Cuando grabes los sueños, recuerda que es algo personal. No escribas de forma que tenga sentido para los demás porque puedes alterar las cosas para que resulte más fácil que ellos lo entiendan. Siempre escribe lo que creas que es verdad, no lo que tiene sentido.
- Anota exactamente lo que sucedió sin tampoco tener la necesidad de darle sentido para ti. Por ejemplo, si tu sueño comienza dentro de una casa y luego te encuentras en un bosque, evita la tentación de suponer que te fuiste de la casa. Los sueños que son ajenos a la experiencia cotidiana se pueden perder al tratar de aplicarle la lógica a los acontecimientos.
- Si tienes el mismo sueño al día o la semana siguiente, anótalo también. Un sueño que se repite es un sueño en el que todos debemos concentrarnos porque puede tener un significado especial.
- Si tienes una computadora o un teléfono celular cerca, puedes registrarte en alguna página de sueños como Uprophecy o Dream moods, donde puedas escribir tus sueños y mantener un registro de ellos.
Advertencias
- Si tienes dificultades para dormir, o para dormir lo suficiente, no trates de anotar tus sueños en medio de la noche. Simplemente sigue durmiendo.
- Ten cuidado al interpretar tus sueños. La interpretación de los sueños no es una ciencia, así es que no saques tus propias conclusiones y no le pongas demasiada importancia a un sueño. Por ejemplo, si sueñas que alguien muere, no significa que morirá o que le va a pasar algo malo.
Cosas que necesitarás
- Algo donde plasmar tus sueños
- Algo con qué despertarte (preferentemente algo gentil)
- Una grabadora de voz (opcional)
Referencias
- ↑ http://www.buildyourmemory.com/dreams.php
- ↑ Los sueños y las pesadillas: el origen y el significado de los sueños de Ernest Hartmann, pág. 142 (Dreams and Nightmares: The Origin and Meaning of Dreams), ISBN 0738203599
- ↑ Los sueños y las pesadillas: el origen y el significado de los sueños de Ernest Hartmann, pág. 142 (Dreams and Nightmares: The Origin and Meaning of Dreams), ISBN 0738203599