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Si crees que eres víctima de un ataque espiritual, el Señor luchará por ti. Para invocar su poder y protección contra las fuerzas del mal, tan solo expresa tu devoción a él y mantente constante con tus prácticas de fe. Te explicaremos qué son los ataques espirituales y cómo usar las oraciones para protegerte. También te enseñaremos oraciones para ayudarte en esta lucha. Sigue leyendo para recibir la luz del Señor y salir victorioso.

Método 1
Método 1 de 5:

¿Qué es una guerra espiritual?

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  1. Si eres cristiano, esto significa que eres un “soldado de la cruz” y parte del ejército de Dios. Tu enemigo es Satanás, el cual hará que te enfoques demasiado en los placeres terrenales de este mundo o te sientas totalmente desesperado por tu vida. Si rezas para invocar al Señor y usar su armadura, te guiará a la victoria. [1]
    • Básicamente, la guerra espiritual es una manera de oponer resistencia a Satanás. Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar (1 Pedro 5:8).
    • Satanás tratará de realizar ataques espirituales para debilitar tu fe, por lo que es importante que te mantengas fuerte a nivel espiritual para que no pueda influir en ti.
    • Si rindes homenaje al Creador, protegerá tu alma.
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Método 2
Método 2 de 5:

¿Qué oraciones usar para una guerra espiritual?

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  1. .
    • Extracto : “ Padre Celestial, me inclino en adoración y alabanza ante ti. Me cubro con la sangre del Señor Jesucristo como mi protección durante este tiempo de oración. Me rindo completamente y sin reservas en cada área de mi vida a ti… Me opongo a todos los trabajos de Satanás que me obstaculicen en este tiempo de oración, y me dirijo solo al Dios vivo y verdadero... ”.

      Extracto : “ Estoy agradecido por la armadura que me has proporcionado, y me pongo el cinturón de la verdad, la coraza de la justicia, el calzado de la paz, el yelmo de la salvación. Levanto el escudo de la fe contra todos los dardos ardientes del enemigo, y tomo en mi mano la espada del espíritu, la Palabra de Dios, y uso tu palabra contra todas las fuerzas del mal en mi vida; y me pongo esta armadura y vivo y oro en completa dependencia de ti. El señor Jesucristo derrotó a todos los principados y potestades, y los exhibió abiertamente y triunfó sobre ellos por medio de él mismo. Reclamo toda esa victoria para mi vida hoy .”.
    • 1. Inclina, oh Jehová, tu oído, respóndeme, porque estoy afligido y necesitado .” (Salmo 86:1).
    • 2. Afirma mis pasos con tu palabra .” (Salmo 119:133).
    • 3. ¡Venga pronto tu misericordia a nuestro encuentro, porque estamos totalmente abatidos! .” (Salmo 79:8).
    • 4. Guárdame, oh Dios, porque en ti he confiado. Oh alma mía, dijiste a Jehová: Tú eres mi Señor; ningún bien tengo fuera de ti .” (Salmo 16:1). [2]
    • Padre, renuévame, transfórmame, cámbiame para asemejarme cada vez más a tu hijo, Jesucristo. Espíritu Santo, enséñame y renueva mi mente. Señor Jesús, establece tu hogar en mi corazón. Ayúdame a convertirme en todo lo que desees. En el nombre de Jesús. Amen .”. [3]
    • " Oh Señor, hoy tu palabra me dice que buscas un seguidor fiel. Ahora, Señor, me pongo a tu disposición. Sé que buscas un sirviente leal para luchar contra Satanás. ¡Aquí estoy Señor! ¡Úsame! ”. [4]
    • Oh Señor, mi fuerza, pongo mi confianza en ti. Nunca has desamparado a quienes te buscan. Nunca me has decepcionado. Sé que nunca me decepcionarás porque mi vida hasta este punto ha sido un testimonio de tu grandeza. Amóldame a tu imagen y mantenme cerca de ti. Enséñame a madurar como cristiano y mejorar en mi camino a la fe. Afianza mi confianza en ti para que nunca vacile, sin importar las batallas que afronte en este mundo. Declaro que mi lealtad a ti será fuerte en todo momento. Amén .”. [5]
    • Sabemos que el enemigo no pelearía tanto con nosotros si no pudiéramos marcar una diferencia en tu reino. No se esforzaría tanto por detenernos si no pensara que tienes tanta bondad por ofrecer. Recuérdanos hoy Señor que la batalla te pertenece, y sin importar lo que enfrentemos, tu mano poderosa podrá vencerlo de un solo golpe. Por favor ayúdanos a confiar más en ti, dejar de perder el tiempo esforzándonos sin conseguir resultados o peleando solo con nuestra fuerza. Perdónanos por las ocasiones en las que dejamos de fijar nuestros ojos y corazón en ti, por los días en los que olvidamos acudir primero a ti. Danos el poder del Espíritu Santo. Danos tu sabiduría y discernimiento para estar al tanto de las trampas del enemigo, y así poder mantenernos fuertes contra sus argucias. Gracias por siempre recordarnos que tu presencia estará con nosotros, sin importar lo que enfrentemos, y que nos darás descanso. Amén .”. [6]
    • Ninguna arma forjada contra ti prosperará, y condenarás toda lengua que se levante contra ti en juicio. Esta es la herencia de los siervos de Jehová, y su salvación de mí vendrá, dijo Jehová .”.
    • Es verdad que vivimos en este mundo, pero no actuamos como todo el mundo, ni luchamos con las armas de este mundo. Al contrario, usamos el poder de Dios para destruir las fuerzas del mal, las acusaciones y el orgullo de quienes quieren impedir que todos conozcan a Dios. Con ese poder hacemos que los pecadores cambien su manera de pensar y obedezcan a Cristo .”.
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Método 3
Método 3 de 5:

¿De qué maneras protegerte de un ataque espiritual?

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  1. Elige un espacio tranquilo que esté libre de desorden o distracciones. Solo úsalo para concentrarte en el Señor y pedir su ayuda. Cuando te sientas débil o en duda, ve a esta habitación para aislarte del mundo y conectarte con Dios. [7]
    • Reflexiona sobre el diseño de la habitación. Por ejemplo, determina si fotos y cuadros con citas mejorarán tu práctica espiritual o si te distraerán.
    • Crea un espacio sagrado que sea cómodo y tranquilo. Podrías colocar una alfombra para proteger tus rodillas mientras rezas.
    • A pesar de llamarse habitación de lucha, es totalmente aceptable que la conviertas en un santuario. Si tu mente está tranquila, podrás enfocarte en las oraciones.
  2. Establece un horario confiable que siempre te permita dedicarle un tiempo al Señor. Reserva un momento especial del día que esté dedicado a él. Si haces que las oraciones rutinarias se vuelvan una prioridad que siempre cumplirás, Satanás verá que estás dedicado a Dios. [8]
    • Si rezas a diario, superarás a las fuerzas del mal porque siempre estarás protegido contra ellas.
    • Elige una hora del día en la que tengas más energía y puedas concentrarte en las oraciones. Podrías hacerlo por la mañana o la noche.
  3. La armadura de Dios es un conjunto de dones espirituales que el Señor les brinda a sus leales seguidores. Estas fuentes de protección te ayudarán a oponer resistencia contra Satanás. Para ponerte la armadura de Dios , reflexiona sobre Efesios 6:10-18 . Luego expresa agradecimiento por la fuerza que el Creador puede concederte. Halaga estas defensas que te ofrece: [9]
    • cinturón de la verdad
    • coraza de la justicia
    • calzado de la paz
    • escudo de la fe
    • yelmo de la salvación
    • espada del espíritu
  4. Comunícate con líderes de iglesias, amigos y seres queridos que celebren a Cristo y sus poderes sagrados. Cuéntales tus dificultades y pídeles que te guíen. Conversen sobre la gloria de Dios y recen juntos. Si se unen como seguidores del Señor, tendrán altas probabilidades de vencer a las fuerzas del mal. [10]
    • Como aliados, su fe conjunta hará que Satanás tenga dificultades para influir en alguno de ustedes.
    • Reza una novena con otros seguidores para luchar contra la actividad demoniaca. [11]
    • Programen sesiones de oración constantes para desarrollar su fuerza espiritual juntos.
  5. Indícale al Creador de qué te abstendrás. Si muestras autodisciplina y te alejas de los “deseos de la carne”, como los alimentos ricos y complacientes, mostrarás que solo anhelas la guía del Señor. Tu devoción por Dios será una defensa poderosa contra el demonio. [12]
    • Si decides ayunar , puedes realizar un “ayuno espiritual” de las actividades que desvíen tu atención de la oración. Por ejemplo, renuncia a las redes sociales por un mes.
  6. Si los placeres terrenales (como el alcohol) te distraen y evitan que nutras tu alma, debes decírselo al Señor . Confiesa tus pecados y demuéstrale que no le ocultarás nada. [13] Arrepiéntete para estar bajo la luz de Dios e irradiar su poder divino. Satanás verá que no vivirás en las sombras y no podrá atacarte de forma espiritual. [14]
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Método 4
Método 4 de 5:

¿Cómo luce un ataque espiritual?

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  1. Los ataques espirituales son comunes porque Satanás fija la mira en el rebaño del Señor. El demonio está muy decidido a dañar a los seguidores justos, por lo que usará tácticas sutiles y estrategias crueles. Estas son señales de que has sufrido un ataque espiritual:
    • Te sientes desanimado o derrotado.
    • Experimentas mucha fatiga física.
    • Adoptas patrones poco saludables.
    • Crees que todos están en tu contra.
    • Tienes dificultades para conectarte con Dios.
    • Tienes dificultades para mantener tu fe.
    • Crees que el Señor te está castigando.
Método 5
Método 5 de 5:

¿Por qué debes rezar durante un ataque espiritual?

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  1. Si rezas para invocar al Espíritu Santo , le demostrarás a Satanás que estás bajo la protección del Señor. El demonio tratará de convencer a los seguidores de Dios de que están indefensos, pero quedará derrotado si ve que estás protegido por la luz del Creador. [15]
    • Adopta el hábito de rezar con frecuencia. Si lo haces, abrirás la mente, el corazón y el alma al Señor; y bloquearás la influencia del demonio. [16]
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