Descargar el PDF Descargar el PDF

Las hemorroides (que también se conocen como almorranas) son venas dilatadas e inflamadas que se localizan en la parte inferior del recto y el ano. Son bastante comunes y casi la mitad de los adultos ha lidiado con estas al menos una vez antes de cumplir los 50 años. Las hemorroides surgen como resultado del aumento de la presión en la parte inferior del recto y el ano. El aumento de la presión dentro de las venas hemorroidales provoca que se inflamen. [1] Entre los síntomas que puedes notar se encuentran los siguientes: sangrado sin dolor durante las deposiciones, dolor rectal (o anal), prurito anal y protuberancias sensibles y cercanas al ano. [2] Tienes una amplia variedad de opciones a la hora de tratar tus hemorroides (y el dolor que producen) tanto en casa como en el consultorio de un médico.

Método 1
Método 1 de 3:

Tratar el dolor de las hemorroides en casa

Descargar el PDF
  1. Las hemorroides pueden ser internas o externas. El dolor se asocia más con las hemorroides externas. Sin embargo, lo ideal es que acudas al médico para que obtengas un diagnóstico positivo.
    • Las hemorroides internas se desarrollan en la parte inferior del recto y por lo general no producen dolor, ya que el cuerpo no presenta receptores sensoriales en el recto. Es probable que ni siquiera te des cuenta que tienes una hemorroide interna hasta que observes la sangre en tus heces o se origine un prolapso hemorroidal (que sobresale del ano).
    • Si tus hemorroides te producen dolor, es probable que se traten de hemorroides externas (que se desarrollan bajo la piel alrededor del ano). Si se forma un coágulo de sangre dentro de la hemorroide, esto se conoce como "trombosis hemorroidal" y, por lo general, el dolor se describe como repentino e intenso. Los pacientes pueden observar (o sentir) una protuberancia en la proximidad del ano. Por lo general, el coágulo se disuelve y puede dejar una marca (o exceso de piel) sobre el área del ano. [3]
  2. Estos baños pueden proporcionar un alivio inmediato del dolor y la picazón que producen las hemorroides. Luego de evacuar las heces, debes remojar el área del ano con agua tibia durante 10 o 20 minutos de 3 a 4 veces al día. Las farmacias venden tinas de plástico pequeñas que se colocan sobre el asiento del inodoro. Como alternativa, puedes llenar la tina con agua tibia hasta aproximadamente el nivel de tu cadera. [4] [5]
    • Después de cada tratamiento, debes presionar suavemente el área anal para secarla utilizando una toalla o una secadora de cabello.
  3. Este tipo de tratamientos ayuda a aliviar la inflamación y el dolor que producen las hemorroides. Puedes utilizar un condón lleno de agua congelada o envolver cubos de hielo en un paño para colocarlo sobre el área anal durante 5 o 10 minutos de 3 a 4 veces al día. [6]
    • Después de cada tratamiento, debes presionar suavemente el área anal para secarla utilizando una toalla o una secadora de cabello.
  4. Puedes encontrar una variedad de productos de venta libre en tu farmacia local diseñados para contrarrestar el dolor y las molestias que producen las hemorroides. Entre algunos de estos productos se encuentran los siguientes: [7] [8]
    • Puedes utilizar almohadillas (por ejemplo, las de la marca Tucks) como compresas sobre las hemorroides irritadas y aplicártelas hasta seis veces al día para aliviar el dolor y la picazón. Estas almohadillas vienen con hamamelis (que es un agente calmante, natural y antiinflamatorio).
    • La crema de Preparation H es un anestésico tópico que estrecha los vasos sanguíneos (vasoconstrictores) y protege la piel. Resulta muy útil en el tratamiento de las hemorroides. La crema bloquea los signos de dolor provenientes de las terminaciones nerviosas del área anal y además reduce el tejido inflamado.
    • Las cremas o supositorios de venta libre que contienen hidrocortisona también pueden resultar útiles en el tratamiento de las hemorroides. La hidrocortisona es un agente antiinflamatorio potente que ayuda a aliviar el dolor y la picazón que producen las hemorroides. Los esteroides tópicos (como la hidrocortisona) no deben utilizarse por más de una semana, ya que pueden atrofiar (o adelgazar) la piel en el área anal.
    • La pramoxina (que se puede adquirir con o sin receta médica) es otro anestésico tópico que se utiliza para tratar las hemorroides.
  5. Puedes utilizar productos de venta libre como el paracetamol (Tylenol), el ibuprofeno (Advil) o la aspirina para ayudar a aliviar el malestar que ocasionan las hemorroides.
    • Puedes tomar de 650 a 1000 mg de acetaminofeno cada 4 o 6 horas. No debes consumir más de 4 gramos (0,14 onzas) en un período de 24 horas.
    • Puedes tomar 800 mg de ibuprofeno hasta 4 veces al día.
    • Puedes tomar de 325 a 650 mg de aspirina cada 4 horas, según sea necesario. No debes consumir más de 4 gramos (0,14 onzas) en un período de 24 horas.
  6. Los ablandadores de heces pueden ser útiles en caso de estreñimiento por hemorroides. Los ablandadores de heces de venta libre como el docusato (Colace) sirven para mantener las heces blandas y reducir el estreñimiento y la presión. Puedes tomar de 100 a 300 mg de docusato al día durante una semana. [9]
    Anuncio
Método 2
Método 2 de 3:

Recibir un tratamiento médico profesional

Descargar el PDF
  1. En ocasiones, las hemorroides mejorarán con métodos caseros, por los tratamientos médicos podrían no ser necesarios. No obstante, debes acudir al médico si los síntomas no muestran una mejora luego de una semana con tratamientos caseros. Tu médico puede recomendarte medicamentos que solo puedes adquirir con receta médica u ofrecerte opciones quirúrgicas.
    • Acude al médico inmediatamente en caso de que tus hemorroides te provoquen dolor.
    • Tu médico puede aconsejarte que modifiques tu dieta y estilo de vida antes de recurrir a métodos demasiado drásticos. Estos cambios pueden incluir un aumento en tu consumo de fibra así como un mayor nivel de ejercicios.
  2. Si tu médico no considera necesario que te sometas a una cirugía, aún tiene que tratar el dolor que te producen las hemorroides. Puede recetarte un anestésico (por ejemplo, lidocaína o xilocaína) para ayudarte a lidiar con las molestias y la picazón.
  3. Este es el procedimiento más común que los médicos utilizan al tratar las hemorroides. Se coloca una pequeña banda elástica alrededor de la base de la hemorroide interna con el objetivo de cortarle la circulación. Al quedar sin circulación, la hemorroide se encoge y se marchita en una semana. [10]
  4. En este procedimiento, el médico inyecta una solución química dentro de la hemorroide, lo que provoca la cicatrización y el encogimiento de los tejidos. La escleroterapia es menos eficaz que la ligadura con banda elástica. [11]
    • Sin embargo, varios médicos no recomiendan el tratamiento por escleroterapia debido a que existen estudios que demuestran que, si bien resulta efectivo en el corto plazo, la mayoría de los pacientes desarrollan hemorroides recurrentes. [12]
  5. En este tipo de técnicas, se utiliza láser, luz infrarroja o calor para detener el sangrado en las hemorroides pequeñas y además hacer que se cicatricen y se arruguen. La coagulación genera más probabilidades de que las hemorroides se produzcan nuevamente a diferencia de la ligadura con banda elástica. [13]
    • A menudo, se utiliza esta técnica sobre tejido hemorroidal pequeño para el cual la ligadura con banda elástica no es una opción. Además, se puede realizar en conjunto con la ligadura con banda elástica, ya que se ha demostrado que la combinación de ambas técnicas presenta una tasa de éxito del 97 %. [14]
    • Este método cuenta con uno de los períodos de recuperación más breves para la cirugía de hemorroides (de una a dos semanas). [15]
  6. Este procedimiento se conoce como hemorroidectomía. La hemorroide externa (o interna) se extirpa quirúrgicamente. Este es el método más eficaz para el tratamiento de las hemorroides graves o recurrentes. El 95 % de los pacientes que se someten a esta cirugía logran curarse y además presentan una tasa baja de complicaciones. [16] [17]
    • Por lo general, este procedimiento suele realizarse cuando el paciente presenta hemorroides internas estranguladas, hemorroides internas y externas mixtas o enfermedades anorrectales preexistentes que requieren cirugía. [18] Además, esta opción presenta el mayor grado de dolor asociado con el tiempo de curación. [19]
    • El período de recuperación para las opciones de extirpación es de aproximadamente 2 a 3 semanas. Durante este período, el cirujano debe realizar visitas seguimiento. [20]
  7. En la hemorroidectomía grapada (o hemorroidopexia con grapas), el médico utiliza un dispositivo de grapado para anclar el sangrado o el prolapso hemorroidal en su posición normal. Este procedimiento bloquea el flujo de sangre hacia la hemorroide, lo que hace que se encoja.
    • En comparación con la hemorroidectomía, el grapado presenta un mayor riesgo de desarrollar hemorroides recurrentes y prolapso rectal (que se produce cuando el recto sobresale por el ano). [21] [22] Sin embargo, este procedimiento quirúrgico también se conoce por su marcada disminución del dolor posoperatorio en el paciente frente a la hemorroidectomía estándar. [23]
    Anuncio
Método 3
Método 3 de 3:

Prevenir las hemorroides

Descargar el PDF
  1. Aumentar tu consumo de fibra puede ayudarte a prevenir el estreñimiento, el cual resulta ser la causa principal de las hemorroides. Puedes consumir fibra por medio de frutas, verduras y granos enteros. El aumento en el consumo de fibra ayudará a suavizar tus heces y evitar el esfuerzo al momento evacuarlas (lo que constituye la causa principal por la que se producen las hemorroides).
    • La cantidad de fibra recomendada por día varía de entre 20 a 35 g, dependiendo de tu edad y sexo. Las mujeres menores de 51 años necesitan unos 25 g mientras que las mayores, unos 21 g. Los hombres menores de 51 años necesitan 38 g de fibra al día mientras que los mayores, unos 30 g. [24]
    • Además, puedes complementar tu consumo de fibra con fuentes de venta libre, como la cáscara de psilio (Metamucil, Citrucel).
    • Eleva el consumo de fibra en tu dieta de manera gradual para evitar la producción excesiva de gases.
    • Si el aumento de los niveles de fibra en tu dieta no ayuda a aliviar tu estreñimiento, podrías considerar la posibilidad de tomar un ablandador de eses (p.ej. Colace) como solución a corto plazo. [25]
  2. Mantenerte hidratado también puede ayudarte a prevenir el estreñimiento. Trata de beber entre 6 y 8 vasos de agua (230 ml) al día. De esta manera, ablandarás tus heces y ayudarás a evacuarlas con mayor facilidad. Esto es especialmente importante para las personas que utilizan suplementos de fibra, ya que al no beber suficiente agua, el aumento de fibra puede provocarles estreñimiento (o empeorar el estreñimiento preexistente). [26]
  3. El ejercicio aumenta la motilidad del intestino. De esta manera, se previene el estreñimiento. Además, ayuda a bajar de peso, lo que podría disminuir la presión sobre la parte inferior del recto y el ano (que constituye otra medida para prevenir las hemorroides). [27]
    • Opta por realizar 30 minutos de ejercicio al menos cinco días a la semana. También puedes dividir tus sesiones de ejercicio en unas más cortas. Por ejemplo, puedes ejercitarte durante 15 minutos dos veces al día, o 10 minutos tres veces al día en caso de que sea más sencillo para ti. [28]
    • Busca una actividad que disfrutes de modo que haya más probabilidades de apegarte a ella. Procura dar un paseo después de cenar, ir al trabajo en bicicleta o inscribirte en una clase de aeróbicos algunas veces por semana.
  4. El retraso en la defecación puede empeorar el estreñimiento, el cual agrava aún más las hemorroides. Trata de mantenerte cerca de un cuarto de baño durante las horas en las que normalmente haces tus deposiciones con el fin de acudir tan pronto como sientas la necesidad. [29]
    • Si no puedes defecar después de permanecer sentado durante unos cinco minutos, sal del baño e inténtalo más tarde. Permanecer sentado en el baño durante periodos prolongados puede empeorar las hemorroides. [30]
  5. Si permaneces sentado por mucho tiempo, aumentarás la presión sobre las venas de la parte inferior del recto y el ano, lo que puede contribuir a que se desarrollen las hemorroides. Si tienes un trabajo en el que requieres permanecer sentado durante mucho tiempo, trata de ponerte de pie y caminar aunque sea por algunos minutos durante los descansos. [31]
    Anuncio

Advertencias

  • Aunque en este artículo te proporcionamos información concerniente a las hemorroides, no debes tomarla como un diagnóstico médico. Siempre debes acudir al médico para que te sugiera la mejor manera de abordar un problema específico.
  • Debes acudir al médico de inmediato para que te realice una evaluación si presentas sangrado anorrectal y te han administrado disolventes sanguíneos (anticoagulantes), como la warfarina (Coumadin), el clopidogrel (Plavix), la enoxaparina (Lovenox), el rivaroxabán (Xarelto), el dabigatrán (Pradaxa) o el apixaban (Eliquis).
  • Debes buscar atención médica de inmediato si el sangrado anorrectal se presenta junto con dolor abdominal, ya que las hemorroides no producen dolor abdominal.
  • Si el sangrado anorrectal se presenta con otros síntomas como mareos, aturdimiento o desmayo (síncope), también debes acudir al médico de inmediato para que te realice una evaluación. Estos síntomas pueden desencadenar una pérdida importante de sangre que podría además requerir una transfusión.
  • El prolapso de las hemorroides internas que no se puedan empujar hacia atrás (reducir) a través del ano requiere atención médica de emergencia.
  • Las hemorroides trombosadas producen un dolor insoportable que puede requerir una evaluación médica y la evacuación del coágulo de sangre (si así lo indica el médico). [32]
Anuncio
  1. http://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/hemorrhoids/basics/definition/con-20029852
  2. http://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/hemorrhoids/basics/definition/con-20029852
  3. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2780175/
  4. http://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/hemorrhoids/basics/definition/con-20029852
  5. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2780175/
  6. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC3786491/
  7. http://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/hemorrhoids/basics/definition/con-20029852
  8. http://www.health.harvard.edu/diseases-and-conditions/hemorrhoids_and_what_to_do_about_them
  9. http://colorectal.surgery.ucsf.edu/conditions--procedures/hemorrhoidectomy.aspx
  10. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2780175/
  11. http://www.webmd.com/digestive-disorders/hemorrhoidectomy-for-hemorrhoids#abj8647
  12. http://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/hemorrhoids/basics/definition/con-20029852
  13. http://www.health.harvard.edu/diseases-and-conditions/hemorrhoids_and_what_to_do_about_them
  14. http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC2780175/
  15. http://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/hemorrhoids/basics/definition/con-20029852
  16. http://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/constipation/in-depth/laxatives/art-20045906
  17. http://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/hemorrhoids/basics/definition/con-20029852
  18. http://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/hemorrhoids/basics/definition/con-20029852
  19. http://www.heart.org/HEARTORG/HealthyLiving/PhysicalActivity/FitnessBasics/American-Heart-Association-Recommendations-for-Physical-Activity-in-Adults_UCM_307976_Article.jsp
  20. http://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/hemorrhoids/basics/definition/con-20029852
  21. http://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/hemorrhoids/basics/prevention/con-20029852
  22. http://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/hemorrhoids/basics/definition/con-20029852
  23. http://www.emedicinehealth.com/hemorrhoids/article_em.htm

Acerca de este wikiHow

Esta página ha recibido 251 538 visitas.

¿Te ayudó este artículo?

Anuncio