Descargar el PDF Descargar el PDF

Los bonos de carbono permiten que las personas individuales y las empresas participen en soluciones para el calentamiento global compensando por sus contribuciones personales a este problema. Entre las actividades mediante las cuales se produce dióxido de carbono, el principal gas de invernadero, se encuentran conducir autos , volar en avión o utilizar electricidad en casa. A esta contribución se le conoce como la "huella de carbono". Si bien tu primer paso siempre debe ser tratar de reducir tus emisiones de manera directa, los bonos de carbono pueden servirte para reducir aún más tu huella de carbono o incluso eliminarla si inviertes en proyectos como los parques eólicos. [1]

Parte 1
Parte 1 de 3:

Elegir a un proveedor de bonos

Descargar el PDF
  1. Al comprar un bono de carbono, tu dinero se usa para apoyar un proyecto que se lleva a cabo en otra parte del mundo que reduce las emisiones de dióxido de carbono. Los proyectos para plantar árboles y administrar el suelo eliminan el dióxido de carbono de la atmósfera de manera activa, en tanto que los proyectos energéticamente eficientes (por ejemplo, los parques eólicos y solares) reducen las emisiones en general.
    • Debido a que estos proyectos se llevan a cabo en todo el planeta, puedes elegir de varios a los que puedes apoyar con el dinero de un bono de carbono. Debes elegir uno según tus intereses personales.
  2. 2
    Revisa los principales proveedores de bonos de carbono para encontrar opciones de confianza. Debido a que la elección de un proveedor de bonos de carbono puede parecer abrumadora, puedes empezar tu búsqueda revisando listas de los principales proveedores. Revisa sus sitios web como una forma de hacerte una idea en cuanto a cómo es un proveedor legítimo y cuáles son sus productos. Estos son algunos de los principales proveedores de confianza: [2]
  3. Si quieres que tu bono de carbono sea eficaz, debes optar por un proveedor que financie un proyecto de verdad para llevar a cabo un cambio permanente. Asimismo, un proveedor legítimo estará verificado y ejecutado por organizaciones externas. [3]
    • Busca artículos e informes sobre el proveedor del bono para así determinar si es un proyecto legítimo.
    • Ten cuidado de que el proveedor del bono tome medidas para que sus cambios sean permanentes y duraderos. En caso de que un proyecto involucre plantar árboles, por ejemplo, el proveedor debería ayudarlos a alcanzar la madurez protegiéndolos de los incendios.
    • Sabrás que un proveedor de bonos es de confianza si una organización sin ánimo de lucro (por ejemplo, Climate Action Reserve, Green-e Climate, Gold Standard o el programa Climate Leaders de la Agencia de Protección Ambiental en los EE.UU.) lo ha revisado y certificado.
  4. Existen muchas empresas de servicios públicos que venden bonos de carbono a sus clientes con los que ayudan a compensar por el dióxido de carbono que se produce mediante el consumo de electricidad en tu casa u oficina. Estos bonos se miden y se venden de manera directa y, por ende, es posible que sean una opción más conveniente para ti.
    • Por lo general, se te cobra una prima sobre tu factura regular de servicios públicos para compensar por el dióxido de carbono que se produce a través de tu consumo promedio de energía durante ese mes.
  5. La "adicionalidad" quiere decir que el bono debe brindar una protección adicional para el medio ambiente. En otras palabras, tus contribuciones no deben ayudar a lograr algo que de todos modos habría ocurrido sino que deben brindar una protección adicional. [4]
    • Por ejemplo, en caso de que el proveedor del bono de carbono vaya a pagar a agricultores en la Amazonía para que protejan a los árboles que haya en su propiedad de los leñadores pero uno de ellos no tenía la intención de dejar que leñadores cortaran árboles en su propiedad de todos modos, tu bono de carbono no habrá hecho nada que de por sí no fuera a hacerse.
    • Asimismo, debes estar pendiente de las pérdidas. Si les pagas a los agricultores en la Amazonía para proteger a los árboles como una forma de evitar la deforestación, en realidad no harás nada adicional para proteger al medio ambiente si es que una empresa de explotación forestal puede tan solo cortar los árboles que se encuentren junto a la propiedad de ese agricultor.
  6. Por lo general, el proyecto se auditará con regularidad por parte de la misma organización que le proporcione la certificación por el producto o el vendedor. Estas auditorías son exactamente iguales a las auditorías financieras que cualquier empresa u organización realiza.
    • En caso de que el proveedor de un bono de carbono sea una organización sin ánimo de lucro, por lo general podrás tener acceso también a sus informes financieros. Con estos informes, puedes saber con exactitud cuánto del dinero que pagues por un bono se utilizará directamente en los proyectos mencionados. Los proveedores de bonos con ánimo de lucro rara vez dejan que estos informes estén a disposición de los consumidores.
    Anuncio
Parte 2
Parte 2 de 3:

Hacer la compra

Descargar el PDF
  1. El costo de los bonos de carbono varía en gran medida según los gastos del proyecto y las leyes generales de la oferta y la demanda. Ten en cuenta que puedes pagar entre $10 y $50 por tonelada métrica de emisiones de dióxido de carbono.
    • Ten en cuenta que el que un bono cueste más que otro no implica necesariamente que vaya a ser de mejor calidad. Investiga sobre los proyectos al margen del precio y luego opta por un bono de buena calidad que se adapte mejor a tu presupuesto.
  2. No es posible obtener el beneficio de tu bono de carbono hasta que se retire. Cuando el bono se retira, no puede revenderse a nadie más. El retiro de un bono implica que la cantidad específica de dióxido de carbono que compraste en realidad se redujo o se eliminó.
    • En el caso de las transacciones de menor escala, por lo general no debes preocuparte por el retiro, ya que los vendedores minoristas retiran los bonos de carbono de manera automática al comprarlos. Sin embargo, para una compra más grande de bonos de carbono, es posible que tome un tiempo antes de que pueda ocurrir el retiro.
  3. Después de decidir el proyecto de bonos de carbono al que quieras apoyar, por lo general es posible comprar el bono en línea con tu tarjeta de crédito. Determina la cantidad de bonos que quieras comprar y ten cuidado de que el proveedor tenga esa cantidad disponible. [5]
    • Debes asegurarte de que se te dé un recibo por tu compra. Es posible que los bonos de carbono sean deducibles de impuestos en algunos países.
  4. Los aviones contribuyen de manera considerable a las emisiones globales de carbono. En muchos casos, las aerolíneas y también las agencias de viajes te dan la oportunidad de comprar un bono al reservar un pasaje.
    • Estos bonos se calculan personalmente para ti según el impacto medioambiental del vuelo que vayas a tomar.
    • En caso de que compres un bono a través de la aerolínea, por lo general el costo simplemente se sumará al precio de tu pasaje.
  5. Tus clientes querrán saber que tu negocio es social y medioambientalmente responsable, sobre todo si vas a comprar bonos de carbono para un negocio pequeño.
    • No publicites la neutralidad de carbono hasta que se retiren tus bonos de carbono. Asimismo, podrías certificar tu neutralidad de carbono a través de una organización externa.
    Anuncio
Parte 3
Parte 3 de 3:

Reducir tu huella de carbono de manera directa

Descargar el PDF
  1. No es posible reducir tus emisiones de carbono si es que no sabes de dónde provienen. Después de identificar fuentes de producción de dióxido de carbono en tu vida diaria, podrás idear formas de reducir tu dependencia de ellas.
    • La fuente principal de las emisiones de dióxido de carbono para la mayoría de las personas es conducir autos. Entre otras fuentes se encuentran los viajes en avión y el consumo de energía en el hogar.
    • Asimismo, debes considerar los productos que compres y utilices. En caso de que se hayan enviado a través de largas distancias para llegar a ti, hubo emisiones de carbono involucradas en su transporte. También se emite dióxido de carbono cuando se elaboran productos en las fábricas. En caso de que compres este tipo de productos, también contribuirás de este modo a las emisiones de carbono.
  2. Elabora una lista de las formas en las que produzcas dióxido de carbono (por ejemplo, conducir autos, viajar en avión y consumir energía en el hogar) y luego busca en línea una calculadora de huellas de carbono con la que puedas obtener un estimado aproximado del tamaño de la tuya.
    • Tan solo debes buscar en línea "calculadora de huella de carbono" o bien revisar el sitio web de una organización medioambiental sin ánimo de lucro para determinar si recomienda alguna.
    • Las metodologías de estas calculadoras pueden variar, por lo que quizás debas utilizar más de una y calcular el promedio de los resultados.
    • Mientras más información puedas ingresar en la calculadora, el estimado se acercará más a la realidad.
  3. Conducir un auto suele constituir una parte importante de tu huella de carbono, por lo que una forma fácil de reducir tus emisiones de dióxido de carbono de manera directa es utilizando menos tu auto. Toma el transporte público, camina o monta bicicleta cada vez que puedas. [6]
    • Podrías realizar varios mandados al mismo tiempo de forma que hagas menos viajes, así como también empezar a compartir tu vehículo en el trabajo.
    • Puedes incrementar el rendimiento del combustible de tu auto de diversas formas, o bien podrías considerar la posibilidad de vivir sin auto del todo.
    • En caso de que estés buscando un auto nuevo, puedes reducir tu huella de carbono si compras uno híbrido o completamente eléctrico.
  4. Ahorra en calefacción y electricidad en tu hogar. El dióxido de carbono que se produce mediante la electricidad u otros combustibles con los cuales ilumines y calientes tu hogar constituye otra fuente importante de emisiones de dióxido de carbono. [7]
    • Con solo bajar el termostato uno o dos grados en el invierno (y subirlo uno o dos grados en el verano) puedes reducir tus emisiones de dióxido de carbono de una manera sustancial.
    • Asimismo, debes apagar las luces cuando no te encuentres en una habitación. Abre las cortinas y las persianas para así poder usar la luz natural y no la electricidad durante el día.
    • Compra bombillos energéticamente eficientes. Estos también te ahorrarán dinero en la factura de la electricidad y tienen una mayor duración que los bombillos regulares. En caso de que puedas, también debes considerar la posibilidad de reemplazar otros electrodomésticos con unos más nuevos que sean más energéticamente eficientes.
    • En caso de que te sientas ambicioso, podrías calentar tu piscina usando energía solar o producir electricidad tú mismo .
  5. En caso de que seas el propietario de tu casa, puede serte de ayuda que adquieras un mejor aislamiento y puertas y ventanas que sean energéticamente eficientes para conservar electricidad. En algunos casos, los gobiernos ofrecen también incentivos fiscales para que hagas estas mejoras a tu hogar. [8]
  6. El transporte de alimentos cultivados en lugares distantes conlleva emisiones significativas de dióxido de carbono. Asimismo, los alimentos que se preparan y procesan en plantas también tienen como consecuencia la emisión de una gran cantidad de dióxido de carbono. Con los alimentos orgánicos cultivados de manera local, ayudarás a reducir tu huella de carbono, además de que serán más saludables para ti. [9]
    • También podrías ahorrar dinero comprando en un mercado de productores local.
  7. Si lo que quieres es reducir tu huella de carbono y apoyar un medio ambiente limpio y saludable, no debes usar productos desechables que generen residuos. Reutiliza las cosas lo más que puedas, aunque hayan sido diseñadas originalmente para desecharlas después de usarlas una vez. [10]
    • En el caso de los productos domésticos que no puedan reutilizarse con eficacia (por ejemplo, el papel higiénico), considera la posibilidad de comprar productos que contengan un gran porcentaje de material reciclado postconsumo.
    • Compra productos en mayores cantidades para así reducir la cantidad de embalaje. Reutiliza los recipientes o bien dispón reciclaje para materiales que puedan reciclarse (por ejemplo, el plástico, el metal y el papel).
    • No imprimas documentos a menos que una copia física sea absolutamente necesaria. Inscríbete para la facturación electrónica en lugar de que recibas una factura física por correo. Utiliza cada hoja de papel por ambos lados y recicla todos los papeles cuando ya no los necesites en lugar de tirarlos al basurero.
    • Asimismo, quizás debas averiguar sobre compostar tus desechos orgánicos (por ejemplo, las sobras de comida).
  8. La producción y envío de bienes de consumo contribuye a las emisiones de carbono, por lo que limitar la cantidad de cosas nuevas que compres puede servir para reducir tu huella de carbono. No compres nada sin antes pensar con cuidado si de verdad lo necesitas. [11]
    • Haz el intento de comprar productos de empresas que sean neutras en carbono o, como mínimo, que luchen por ser medioambientalmente responsables.
    • Compra artículos usados en lo posible. Por ejemplo, generalmente puedes conseguir libros o ropa usados en las tiendas de segunda mano. Estos satisfarán tus necesidades tan bien como algo nuevo, además de que los artículos usados suelen ser más baratos que comprar algo nuevo.
    Anuncio

Acerca de este wikiHow

Esta página ha recibido 3450 visitas.

¿Te ayudó este artículo?

Anuncio