Descargar el PDF Descargar el PDF

La lechuga romana es una variedad de lechuga arrepollada que es saludable y popular. Asimismo, es relativamente fácil de cultivar en el jardín de una casa o en una maceta. Se puede cosechar una de una forma: puedes cosechar toda la cabeza de la lechuga de una sola vez, ya sea al sacarla con todas las raíces o al cortarla desde la base. También puedes cosechar las hojas externas, y dejar que las internas sigan creciendo y madurando como alternativa.

Método 1
Método 1 de 2:

Cosechar toda la cabeza de la lechuga

Descargar el PDF
  1. Si crecen a partir de semillas, estas lechugas se demorarán menos de 3 meses para madurar por completo. Sabrás que han madurado por su apariencia: tendrán un color verde oscuro, y se verán frondosas y abiertas. [1]
    • A diferencia de la lechuga iceberg, la romana no estará cerrada de forma espesa cuando madure.
  2. Si te gustaría cosechar toda la cabeza de una lechuga romana de una sola vez, corta la base con un par de tijeras de jardinería. Realiza el corte 2,5 cm (1 pulgada) por encima de la superficie del suelo. [2]
    • Ten cuidado de no chocar con ninguna roca o el suelo ya que podrías terminar desafilando las cuchillas de las tijeras.
  3. Si sacas toda la cabeza de una sola, las raíces producirán más hojas de lechuga. Luego de crecer y madurar, podrás recoger una segunda cosecha. Espera otros 55 o 60 días para obtener esta segunda cosecha. [3]
    • Ten en cuenta que estas hojas no formarán otra “cabeza”. Asimismo, estarán más sueltas y serán menos numerosas que las hojas de la primera cabeza.
    CONSEJO DE ESPECIALISTA

    Maggie Moran

    Especialista del hogar y jardinería
    Maggie Moran es profesional en jardinería en Pensilvania.
    Maggie Moran
    Especialista del hogar y jardinería

    También puedes cultivar lechugas nuevas a partir de un tallo cortado. La horticulturista Maggie Moran explica: "Corta la lechuga a unos 2,5 cm desde la base. Pon el tallo en un plato superficial lleno con 1,3 cm de agua. En unos 10 a 12 días, la lechuga habrá crecido por completo".

  4. Si prefieres no tener una segunda cosecha de lechugas, puedes cosechar todas las cabezas de una sola vez. No necesitaras tijeras de jardinería para ello. Solo agarra la planta desde la base con una mano y tira de ella hacia arriba con firmeza hasta que salga del suelo. [4]
    • Si sacas toda la planta del suelo, también sacarás las raíces.
  5. Saca la tierra que quede en las raíces de la planta para no alterar relativamente esa parte del jardín y evitar ensuciar el interior de tu casa. Puedes jalar la lechuga hacia arriba con la mano. [5]
    • Una vez que la lechuga esté desarraigada, da pequeños golpes sobre la tierra para no quede un agujero en el jardín.
    • También puedes cavar un poco alrededor de la tierra para sacar las raíces restantes que pueden estar atrapadas en ella. Si las dejas en ese lugar, es posible que vuelvan a germinar y producir más lechugas.
  6. Una vez que hayas llevado la verdura al interior, desintégrala al sacar cada hoja desde la base. Luego, enjuaga las hojas individuales con agua fresca del grifo.
    • Puedes usar la lechuga de inmediato para hacer una ensalada o guardar las hojas hasta por 10 días en un contenedor hermético en el refrigerador.
    Anuncio
Método 2
Método 2 de 2:

Cosechar las hojas externas

Descargar el PDF
  1. Si las sacas temprano en el día, no se habrán secado por el sol. Si esperas demasiado tiempo y las sacas en la tarde o en la noche, es posible que estén ligeramente marchitas. [6]
    • Si pierdes la noción del tiempo y te olvidas de cosechar en la mañana, lo mejor es esperar hasta el siguiente día para hacerlo.
    • Las hojas de una lechuga romana son por lo general de un color verde oscuro y tienen una altura de 10 a 15 cm (4 a 6 pulgadas).
  2. Si te gustaría tener una cosecha solo de hojas maduras, saca las 6 u 8 externas. [7] La ventaja de este método es que podrás disfrutar de un cultivo más prolongado, ya que cada grupo de hojas internas tardará aproximadamente otra semana en madurar.
    • La desventaja es que cada cosecha será relativamente pequeña.
  3. Para sacar hojas individuales, sujeta cada una con firmeza desde la base y pellízcala con fuerza hacia abajo hasta que salga.
    • Si las pellizcas hacia arriba, es posible que desarraigues la planta.
  4. Controla las hojas internas de la lechuga romana y dales tiempo para seguir creciendo. Una vez que se abran y estén maduras, estarán listas para cosecharlas. Este proceso puede ocurrir rápidamente, así que revisa el jardín a diario. [8]
    • Podrás obtener 3 o 4 cosechas más si eliges solo las hojas maduras y externas cada vez.
  5. Una vez que hayas cosechado las hojas externas de cada planta, lava las hojas con agua fresca del grifo. Luego, sécalas y guárdalas en una bolsa de plástico en el refrigerador. [9]
    • Si las mantienes secas en el refrigerador, las hojas deben durar por aproximadamente 10 días.
    Anuncio

Consejos

  • Asegúrate de desinfectar las herramientas que uses para cortar antes y después de cosechar las lechugas.
  • Siempre asegúrate de lavar las lechugas por completo con agua tibia antes de comerlas, sobre todo si has usado algún insecticida o fungicida mientras crecían.
  • Si dejas que maduren por demasiado tiempo, las hojas se desarrollarán en exceso y tendrán una textura leñosa poco agradable. [10]
Anuncio

Acerca de este wikiHow

Esta página ha recibido 13 171 visitas.

¿Te ayudó este artículo?

Anuncio