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Tacita de té no es una raza específica de cachorros. Se trata de una versión muy pequeña de un perro de juguete, como Yorkshire terrier, chihuahua o poodle. En cierta forma, se cuidan de la misma forma en que cuidarías a cualquier perro. Proporciónales alimento fresco y agua, y aséalos de manera regular. Sin embargo, debido a su tamaño, los cachorros de tacita de té son propensos a problemas de salud causados por sus huesos frágiles. Estos problemas pueden convertirse rápido en emergencias potencialmente mortales. Tendrás que tener mucho cuidado al tener un cachorro de tacita de té y llevarlo al veterinario de manera regular, además de tener un plan para posibles emergencias médicas.

Método 1
Método 1 de 3:

Proporcionar los cuidados básicos

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  1. Los cachorros de tacita de té deben llevar una dieta rica en fibra. Compra alimentos secos o en lata que contengan ingredientes como huevos, pollo, frutas, vegetales y ácidos grasos omega 3. Además, asegúrate de que el alimento que escojas tenga jarabe de Karo. Los cachorros de tacita de té son propensos a niveles bajos de azúcar en sangre, y este ingrediente puede contrarrestarlos. [1]
    • Habla con el veterinario acerca del tipo de comida que debes comprar. Quizás pueda hacerte sugerencias en función de la raza específica del cachorro.
    • La etiqueta del alimento escogido contará con instrucciones de alimentación para que sepas cuánto debes darle cada día al cachorro, pero, de todas formas, asegúrate de hablarlo con el veterinario.
  2. Los cachorros de tacita de té suelen jugar fuerte. Suelen estar muy cansados después de la actividad, en especial después de los juegos extenuantes Si tu cachorro se ve somnoliento, es importante que le des tiempo para que descanse. [2]
    • Proporciónale una cama cómoda. Después de jugar con el cachorro, llévalo a su cama. Déjalo solo y permite que descanse por algunas horas.
    • Los cachorros de tacita de té necesitan cerca de 14 horas de sueño por día. Limita el horario de juego a sesiones de una hora para que el cachorro esté bien descansado.
  3. Los cachorros de tacita de té son como cualquier otro perro en el sentido de que necesitan agua fresca disponible todo el tiempo. Asegúrate de proporcionarle un recipiente con agua al que pueda llegar fácilmente. Rellénalo cada vez que notes que hay poca agua o está sucia.
    • Dado que los cachorros de tacita de té son pequeños, escoge bien el tamaño del recipiente de agua. Asegúrate de que sea lo suficientemente corto para que el cachorro pueda beber.
  4. Comienza a entrenar al cachorro de inmediato para que aprenda un buen comportamiento. Muchos dueños ignoran los comportamientos negativos de los animales muy pequeños, dado que los perros pequeños no pueden causar tanto daño. Sin embargo, es importante que el tuyo se comporte bien, así que asegúrate de disciplinarlo en aspectos como masticar cosas de la casa, ladrar de forma indeseada, hacer sus necesidades adentro, y ser agresivo con las personas u otros animales. [3]
    • Si un cachorro tacita de té muestra un comportamiento negativo, simplemente di "no" con firmeza y luego ignora el comportamiento hasta que se detenga. Si eres constante, aprenderá cuáles son los comportamientos apropiados con el tiempo.
    • No lo regañes, grites ni aísles como castigo. Esto no es efectivo y solo le creará estrés.
  5. La frecuencia dependerá de su edad. Las razas de pelo corto (como algunos chihuahuas) no necesitan un acicalamiento tan frecuente como las razas de pelo largo (como los Yorkshire terriers y Toy poodles). [4]
    • Es importante cepillar a los cachorros de pelo largo a medida que se enreda con un cepillo engominado. Los enredos se pueden deshacer con un peine para perros metálico con dientes anchos. Además, recoge cuidadosamente cualquier pelo enmarañado durante el proceso de cepillado. Planifica cepillados profesionales regulares durante la vida de un cachorro de tacita de té con pelo largo.
    • Los cachorros con pelo corto solo necesitan un cepillado leve ocasional.
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Método 2
Método 2 de 3:

Obtener atención veterinaria regular

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  1. Tan pronto como recojas al cachorro del refugio o criadero, llévalo al veterinario. Si aún no ha recibido la ronda completa de vacunas, haz que reciba las vacunas para prevenir enfermedades como la rabia. Si nadie ha revisado al cachorro para ver si tiene parásitos, lleva una muestra de sus heces para que se evalúe por posibles parásitos. En el caso de que tenga, el veterinario realizará un tratamiento antiparasitario. [5]
    • Si has encontrado al cachorro en un refugio de animales, existe un mayor riesgo de que tenga parásitos. Es importante llevar una muestra de sus heces al veterinario para que la analice.
  2. Dado que los cachorros de tacita de té tienen dientes muy pequeños, los mismos se amontonan muy cerca, lo que los hace susceptibles a la acumulación de placa, y no tienen la fuerza en la mandíbula para limpiarse los dientes al masticar. Esto puede causar problemas dentales. Haz que un veterinario examine los dientes del cachorro. Si cree que tiene un riesgo de desarrollar problemas dentales, te informará las opciones de tratamiento.
    • El veterinario también podría sugerir alimentos o golosinas especiales.
    • También podría sugerirte que le cepilles los dientes al cachorro de forma regular.
  3. Desafortunadamente, debido a su tamaño, los cachorros de tacita de té pueden ser muy frágiles. El tuyo podría ser susceptible a problemas cardíacos y pulmonares, además de problemas con la densidad ósea. Durante su crecimiento, tendrás que llevarlo al veterinario con una mayor frecuencia para asegurarte de que esté saludable. El veterinario te hará saber con qué frecuencia debes llevar al cachorro. La cantidad precisa de visitas dependerá del estado de salud de tu cachorro, su raza y su edad. [6]
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Método 3
Método 3 de 3:

Proteger al cachorro de tacita de té de problemas relacionados con el tamaño

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  1. Los cachorros de tacita de té son muy delicados. Debes tener mucho cuidado al sostenerlo. Si se cayera, podría sufrir daños graves. Ten mucho cuidado y sujétalo con mucha suavidad. Solo debes sujetarlo cuando sea necesario, y evita sostenerlo muy lejos del suelo. [7]
    • No permitas que salte de la cama o el sofá, dado que es posible que se quiebre las piernas de esta forma. Proporciónale un peldaño de algún tipo o colócalo en el suelo.
  2. Los niños pueden jugar fuerte con los cachorros, lo que puede lastimar fácilmente a un cachorro de tacita de té. Observa a los niños pequeños cuando sujeten al cachorro y procura intervenir si el juego se vuelve muy fuerte. [8]
    • Quizás sea una mala idea tener un cachorro de tacita de té si tienes niños muy pequeños.
  3. Los cachorros de tacita de té son más vulnerables a los peligros como los autos y otros perros. También tienen un riesgo de ser pisados si se ponen debajo de los pies. Asegúrate de prestarle mucha atención a tu cachorro durante las caminatas para llevar un registro de su ubicación. Tira suavemente la correa para alejarlo de otros perros o el tráfico que se aproxima. [9]
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