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Si sufres un brote de acné tras otro en un mismo lugar de tu rostro, puede resultarte algo realmente molesto. Sin embargo, no debes preocuparte, ya que tenemos la solución para ti. Hemos realizado una investigación y descubrimos que el primer paso es cuidar bien de la piel. Si aún presentas problemas, debes detener los brotes de acné antes de que aparezcan tomando algunas medidas preventivas. Si el acné se encuentra alrededor de tu cuerpo y no en tu rostro, debes asegurarte de utilizar prendas hechas con telas transpirables y mantener tu cuerpo y ropa de cama limpios.

Método 1
Método 1 de 3:

Cuidar de tu piel

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  1. Si continuamente presentas brotes de acné en partes específicas de tu cuerpo, debes tener en cuenta todas las cosas con las que esa área entra en contacto de manera regular. Es probable que tus manos o una prenda de vestir la rocen y provoquen los brotes. Evita tocarte el rostro con las manos sucias o utilizar ropa muy ajustada o contaminada.
    • Por ejemplo, si utilizas una gorra de béisbol y presentas acné con regularidad en la frente, trata de no utilizarlo más y verificar si el acné desaparece.
    • Además, el acné puede brotar en lugares que se encuentran en contacto de manera regular con tu cabello (por ejemplo, en la frente debajo del flequillo). Esto puede constituir un problema particular si utilizas productos para el cuidado del cabello grasoso. Trata de mantener tu cabello alejado del área afectada y utiliza productos que no contengan aceite. [1]
  2. Para evitar el acné, debes lavar las áreas propensas a los brotes solo dos veces al día. Al lavarte la piel, eliminas el aceite y las células muertas que pueden provocar los brotes. Mientras buscas cremas o geles para combatir el acné, debes verificar que tengan peróxido de benzoilo o ácido salicílico como un ingrediente activo. [2]
    • Evita lavarte la piel en exceso, ya que puede resecarse e irritarse.
    • Si no estás seguro del tipo de lavado que debes conseguir, puedes consultar con tu médico o un dermatólogo.
  3. Aunque la idea de que consumir ciertos alimentos (como el chocolate) puede provocar acné es un mito, la dieta sí influye en los niveles hormonales del cuerpo (lo que puede provocar brotes). Procura tener una dieta equilibrada de manera que sea rica en frutas, verduras sin almidón y granos integrales. Además, debes evitar alimentos que sean grasosos, azucarados o procesados. Llevar una dieta sana y equilibrada te ayuda a regular tus niveles hormonales y evitar brotes problemáticos. [3]
  4. Reduce tu nivel de estrés . Aunque este factor no produce acné, puede empeorarlo. El estrés hace que tu cuerpo libere hormonas que pueden provocar brotes. Para limitar el impacto de la ansiedad en tu acné, debes intentar relajarte y practicar la conciencia plena . También puedes realizar ejercicios, ya que estos ayudan a reducir la ansiedad. [4]
  5. Con estos procedimientos, puedes provocarte infecciones y cicatrices. Además, reduces la posibilidad de que las imperfecciones se curen y desaparezcan. Si te molesta la desagradable apariencia de tu acné, puedes utilizar un corrector cosmético para cubrir las marcas hasta que se curen. [5]
  6. Si tienes problemas para tratar o lidiar con el acné, debes hablar con tu médico o un dermatólogo. Es importante que recibas un tratamiento contra el acné para prevenir las cicatrices. Es probable que te receten medicamentos, ungüentos o lavados diseñados para combatir este problema. Además, existen diversas terapias (como exfoliaciones químicas e inyecciones de esteroides) para los casos más graves. [6]
    • Es probable que muchos tratamientos prescritos te tomen varias semanas de trabajo, por lo que debes tener paciencia.
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Método 2
Método 2 de 3:

Prevenir los brotes sobre el rostro

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  1. Aunque el uso de maquillaje puede ser ideal para ocultar el acné, también puede causar brotes. La aplicación de maquillaje o el uso de productos particularmente grasosos pueden obstruir los poros y provocar infecciones. Si presentas brotes en ciertas partes de tu rostro, puedes probar con un producto diferente y verificar si estos desaparecen. [7]
    • En general, debes tratar de utilizar productos que no contengan aceite o que sean no comedogénicos. También debes buscar maquillaje que contenga ingredientes para combatir el acné.
    • Siempre debes quitarte el maquillaje antes de irte a dormir. Si tu piel es particularmente grasosa, es probable que necesites utilizar un desmaquillador especial en lugar de simplemente lavarte el rostro.
  2. Si presentas brotes sobre la frente, el cuero cabelludo , el cuello y la espalda, es probable que se deba a los productos para el cabello que utilizas. Ciertos productos (como los geles, las pomadas y los aerosoles) tienden a bloquear los poros e irritar la piel. Además, pueden causar reacciones alérgicas que a su vez provocan brotes de acné. Para evitar esto, debes experimentar con diferentes productos para encontrar uno que no te irrite la piel. [8]
    • En general, debes buscar productos que cuenten con listas de ingredientes más cortas y naturales. En particular, busca productos que no contengan fragancias y que sean no comedogénicos (o sea, que no obstruyan los poros).
    • Para evitar utilizar un determinado producto en exceso, considera la posibilidad de lavarte el cabello dos o tres veces a la semana o enjuagártelo con un acondicionador todos los días. Además, debes considerar la posibilidad de recogerte el cabello antes de irte dormir para evitar que tu rostro se revuelva entre tus cabellos sucios durante toda la noche.
    • Si crees que tienes una reacción alérgica a ciertos productos, debes suspender su uso, y hablar con tu médico o un dermatólogo. Es probable que tengas que realizar pruebas para saber lo que debes evitar en el futuro.
  3. Debido a que tus manos entran en contacto con numerosos objetos durante todo el día, pueden transferir innumerables bacterias a tu rostro (lo que provoca los brotes de acné). Si descansas la cabeza sobre las manos, puedes provocarte brotes sobre el mentón o las mejillas. Para evitar esto, debes lavarte las manos con regularidad y tratar de tocarte el rostro lo menos posible. [9]
  4. Si sueles tener brotes alrededor de la nariz, es probable que los anteojos sean los culpables. Estos elementos contienen bacterias que pueden causar infecciones. Además, frotan y ejercen presión sobre la piel, lo que puede irritarla y estimular la producción de grasa. Si los anteojos te producen acné, considera la posibilidad de recibir un tratamiento localizado o dejar de utilizarlos por completo y cambiarlos por unos lentes de contacto. [10]
    • Asegúrate de limpiar de manera regular los apoyos nasales de tus anteojos. Lávalos con agua caliente y jabón. De esta manera, lograrás eliminar todas las bacterias que puedan causar los brotes de acné.
  5. Cada vez que extraes el vello de un folículo, generas una abertura que se vuelve susceptible a una infección. Si te depilas las cejas o te extraes el vello facial con cera (por ejemplo, alrededor de la boca y el mentón), es probable que notes algunos brotes de acné. Para evitar esto, debes limitar la frecuencia con la que te depilas. [11]
    • Si te afeitas, es probable que generes un efecto similar, en especial si utilizas una maquinilla de afeitar desafilada que jala el vello del folículo en lugar de cortarlo.
    • Puedes utilizar una pasta azucarada o depilarte con un hilo como alternativas a la depilación con pinzas o con cera.
  6. Si es necesario que te depiles, debes tomar algunas precauciones básicas para evitar posibles brotes de acné: [12]
    • Debes exfoliarte y limpiarte la piel suavemente antes de depilarte. Puedes utilizar un limpiador antimicrobiano antes de aplicarte la cera.
    • Límpiate cuidadosamente las manos y las uñas antes de depilarte. Puedes utilizar guantes desechables durante todo el proceso de depilación y limpieza.
    • Después de depilarte, debes limpiarte la piel una vez más y exfoliarte suavemente al día siguiente. Debes mantener las áreas recién depiladas limpias y libres de sudor, suciedad o productos que causen irritación.
  7. Debido a que la mayoría de las personas los llevan a todas partes (incluso al baño) y los tocan constantemente, los teléfonos celulares se encuentran cubiertos de bacterias. Cada vez que hablas por teléfono, te frotas el rostro con todas esas bacterias. Esto puede provocar brotes de acné en las mejillas y el mentón. [13]
    • Para evitar brotes asociados con el teléfono, considera la posibilidad de utilizar la función de altavoz u obtener un auricular de manos libres que funcione con bluetooth.
    • Además, puedes minimizar los brotes limpiando regularmente tu teléfono con toallitas antibacterianas. [14]
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Método 3
Método 3 de 3:

Evitar el acné corporal

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  1. Si presentas brotes de acné en el pecho, la espalda o las nalgas, debes considerar la posibilidad de utilizar ropa que le permita a tu piel respirar. La ropa ajustada puede atrapar la humedad e irritar la piel, lo que provoca los brotes de acné. En su lugar, debes utilizar ropa hecha con fibras naturales (como el algodón o la seda) que permiten el flujo de aire y eliminan la humedad. [15]
    • Esto resulta particularmente importante cuando utilizas ropa con la que sudas mucho (por ejemplo, un conjunto deportivo).
    • Si presentas acné en la espalda por utilizar una mochila, considera la posibilidad de utilizar un bolso o una cartera.
  2. Una vez que termines tu rutina de ejercicios, siempre debes quitarte la ropa sudada y ducharte. Esto le permite a tu piel respirar y lavar el aceite y el sudor que provocan los brotes de acné. Si tu gimnasio no tiene un vestuario con duchas, debes ducharte en cuanto llegues a casa. [16]
    • Si no puedes ducharte de inmediato, considera la posibilidad de utilizar toallitas húmedas que contengan ácido salicílico.
  3. Debido a que los poros y los folículos se vuelven susceptibles a las bacterias, puedes provocar brotes de acné al depilarte o afeitarte el vello corporal. En su lugar, debes considerar la depilación con láser, que resulta menos irritante para la piel. Si es necesario que te afeites, asegúrate de utilizar una crema de afeitar diseñada para pieles sensibles. [17]
    • Esto es particularmente importante si presentas acné alrededor de la línea del bikini.
    • También puedes probar alternativas más suaves (por ejemplo, utilizar una pasta azucarada o depilarte con hilo).
  4. Debido a que las bacterias pueden vivir en la ropa de cama y tus prendas, debes lavar todas las telas que entran en contacto con tu piel de manera regular. Las bacterias de las almohadas pueden provocar brotes en el rostro y la ropa sucia puede provocar acné corporal. Asegúrate de lavar tus prendas con regularidad y la ropa de cama al menos cada dos semanas. [18]
    • Si utilizas sombreros, debes asegurarte de lavarlos con regularidad para evitar que se produzcan brotes sobre tu frente.
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