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El sangrado es una pérdida de sangre en los vasos sanguíneos de cualquier parte del cuerpo. Si hirieron a alguien y está sangrando, es muy importante actuar rápido para controlar la pérdida de sangre. En la mayoría de casos, deberías ser capaz de mantener bajo control la pérdida de sangre sin mucha dificultad. Sin embargo, en los casos más graves, el sangrado descontrolado o severo puede llevar a la persona a entrar en estado de shock , alterar la circulación sanguínea, u otras consecuencias graves a la salud como daño a los tejidos y órganos importantes, lo que puede ser causa de muerte. Sigue esta guía para aprender a controlar el sangrado.

Método 1
Método 1 de 3:

Detén el sangrado menor causado por cortes pequeños

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  1. El agua no solo limpia la herida, también ayuda a detener el sangrado. Limpia el corte con agua fría para comprimir los vasos sanguíneos y detener el sangrado. Hacer lo mismo con agua tibia cauteriza el corte, dejando que la sangre se coagule. No utilices agua fría y agua caliente al mismo tiempo, utiliza solo un tipo de agua.
    • Puedes utilizar un cubo de hielo en lugar de agua fría, para cerrar las arterias. Pon el hielo sobre el corte durante algunos segundos hasta que la herida cierre o hasta que se detenga el sangrado.
    • Si se presentan pequeños cortes a lo largo del cuerpo, toma una ducha fría para limpiar toda la sangre y cauterizar varías heridas al mismo tiempo.
  2. Aplicar una pequeña cantidad de vaselina sobre los cortes menores bloquea el flujo sanguíneo como resultado de la textura cerosa de la vaselina, y le da a la herida el tiempo para coagularse. Puedes utilizar humectante labial si no tienes vaselina.
  3. Las propiedades astringentes del vinagre ayudan a desinfectar y a coagular los cortes pequeños. Frota un poco de vinagre blanco sobre el corte utilizando una bola de algodón, y espera a que el sangrado se detenga.
  4. Similar al vinagre blanco, el hamamelis actúa como un astringente natural especial para coagular los cortes pequeños. Vierte un poco sobre el corte o frota utilizando una bola de algodón para obtener el mismo efecto.
  5. Rocía un poco de maicena sobre el corte, teniendo cuidado de no frotarla, ya que puede causar más ardor. Puedes presionar ligeramente la maicena sobre el corte para acelerar el proceso. Cuando el corte pare de sangrar, utiliza agua para limpiar la maicena.
  6. Vierte un poco de azúcar sobre el corte. Las propiedades antisépticas del azúcar ayudan a limpiar, y simultáneamente contribuyen con el proceso de coagulación de la sangre.
  7. Esta es una excelente opción si te cortas durante una excursión o si te encuentras fuera de casa. Agarra algunas telarañas (¡sin arañas!) y colócalas sobre el corte, enrollándolas si es necesario. Las telarañas contienen el flujo sanguíneo y le dan tiempo al corte para que coagule internamente. [1]
  8. Estos lápices se utilizaron originalmente para las cortaduras al afeitarse pero funcionan de maravilla con cualquier tipo de corte pequeño. Frota el lápiz contra la piel y deja que los minerales astringentes que contiene hagan efecto. Pica un poco al contacto, pero después de algunos segundos el dolor y el sangrado desaparecerán.
  9. Similar al lápiz hemostático, el desodorante tiene cloruro de aluminio, el cual funciona como astringente para detener la salida de sangre. Coloca un poco en tu dedo y luego aplica sobre el corte, o utilízalo directamente sobre la herida.
  10. En un principio se creó como un enjuague bucal, pero también se usa para detener el flujo de sangre. Vierte un poco directamente sobre el corte o humedece una bola de algodón con Listerine y aplica. Deberías ver una disminución en la salida de sangre después de uno o dos minutos.
  11. La pimienta roja ayuda a cerrar la herida rápidamente y a detener el sangrado. Sin embargo, este es uno de los métodos más dolorosos. Si te urge detener el sangrado y no te importa sentir un poco de escozor, rocía un poco de pimienta roja sobre el corte y deja que actúe. Cuando el sangrado pare, enjuaga la pimienta con un poco de agua fría. [2]
  12. Esta es una piedra con forma de jabón creada con minerales que ayudan a detener el sangrado. Moja la piedra de alumbre y utilízala para masajear el corte suavemente. No hay necesidad de aplicar presión, los minerales hacen el trabajo por sí solos.
  13. ¿Has visto la membrana blanca que queda en el interior del huevo cuando lo rompes? Bueno, esta membrana de hecho sirve para cerrar los cortes y darle a la sangre tiempo para que coagule. Pela la membrana de un huevo (intenta sacar un pedazo lo más grande posible) y colócala sobre el corte. En solo unos segundos deberías notar una disminución en la salida de sangre.
  14. Aplica una venda o vendaje esterilizado sobre la herida para mantenerla limpia y detener el sangrado. Puedes utilizar una curita o un pedazo de gaza limpia.
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Método 2
Método 2 de 3:

Tratamiento para heridas más graves

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  1. Esto ayuda a disminuir las probabilidades de entrar en shock, si puedes elevar las piernas o posicionar la cabeza por debajo del tronco, mucho mejor. Revisa la respiración y pulso del afectado antes de proceder.
  2. Levantar la extremidad herida (asumiendo que la herida se encuentra en una extremidad) por encima del corazón reduce el sangrado severo. Sin embargo, si sospechas que hay un hueso roto, no intentes mover la extremidad.
  3. Limpia la suciedad y cualquier cuerpo extraño visible, pero no limpies la herida exageradamente ya que puedes crear más daño. [3] Tu principal prioridad es detener el sangrado. Limpiar la herida puede esperar.
    • Sin embargo, si el cuerpo extraño es algo grande (como un pedazo grande de vidrio, un cuchillo, o un objeto similar) no lo quites. Lo más probable es que esté deteniendo el flujo de sangre. Solo coloca presión y vendaje alrededor del objeto, teniendo cuidado de no empujarlo más.
  4. Utiliza un pedazo de prenda, vendaje, o gasa limpia. (Incluso puedes utilizar tu mano si no hay ningún objeto disponible). Coloca tu mano sobre la gasa y aplica presión firme con tus dedos o manos sobre la herida.
  5. Si la herida se encuentra sobre una extremidad, puedes utilizar cinta o un trozo de ropa envuelto sobre la herida para mantener la presión (un vendaje con pliegue triangular atado sobre la herida es lo ideal). Para la ingle u otros partes del cuerpo que no se pueden envolver, utiliza un relleno fuerte y sigue utilizando tus manos para presionar la herida.
  6. Si la sangre se filtra después de colocar el primer vendaje, coloca más gasa o vendaje. Sin embargo, no envuelvas en exceso, ya que con el aumento de grosor del vendaje te arriesgas a reducir la presión que se ejerce sobre la herida. Si sospechas que el vendaje no funciona, quita el vendaje junto con el relleno y aplica de nuevo. [4] Si el sangrado parece estar bajo control, mantén la presión hasta que estés completamente seguro de que se ha detenido o hasta que llegue la ayuda médica.

  7. Si no puedes detener el sangrado aplicando presión sobre el lugar de la herida, intenta aplicando presión directa sobre la herida en combinación con presión sobre uno de los puntos de presión. Utiliza tus dedos para presionar el vaso sanguíneo contra el hueso. Los puntos de presión que generalmente se utilizan más se describirán a continuación:
    • La arteria braquial: para las heridas sobre la parte baja del brazo. Está en la parte interna del brazo entre el codo y la axila.
    • La arteria femoral: para heridas en el muslo. Va desde lo largo de la ingle cerca de la línea de bikini. [5]
    • La arteria poplítea: para heridas sobre la parte baja de la pierna. Esta se encuentra detrás de la rodilla.
    • No utilices un torniquete, a menos que sea el último recurso para salvar una vida. Aprende cómo y cuándo aplicar un torniquete. Si lo haces incorrectamente, podrías causar heridas más grave o la perdida de una pierna o brazo.
  8. Revisa que los vendajes no estén muy ajustados, si la víctima tiene la piel o los dedos de los pies o manos fríos y pálidos, y si no recuperan su color normal después de dejar de aplicar presión. Si la víctima se queja de entumecimientos u hormigueo, entonces el vendaje probablemente esté muy ajustado. [6]
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Método 3
Método 3 de 3:

Sangrado interno

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  1. Lleva a la víctima del sangrado al hospital lo más rápido posible. El sangrado interno no se puede tratar en casa; se debe tratar únicamente por un especialista en medicina.
  2. Mantén a la víctima calmada, descansando cómodamente, y evita causar más daño. No realices movimientos forzosos, y permanece acostado si es posible.
  3. Revisa la respiración . Vigila las vías respiratorias de la víctima, el pulso y la respiración. Atiende cualquier sangrado externo, si es que hay alguno.
  4. Evita los cambios bruscos de temperatura aplicando paños húmedos en la frente.
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Consejos

  • Cuando apliques presión sobre la herida, no quites el vendaje para saber si ya se ha detenido el sangrado. En lugar de eso, continúa aplicando presión.
  • El sangrado arterial necesita de presión más exacta sobre el vaso sanguíneo que la presión generalizada aplicada en los tipos de sangrado venoso. Es posible que necesites aplicar presión con un dedo en el punto exacto de donde viene el sangrado, no una presión generalizada sobre la herida. Esto se debe a la alta presión del sistema arterial. En los casos de sangrado arterial, busca ayuda médica profesional lo más rápido posible.
  • Si es posible, colócate guantes de goma o látex antes de entrar en contacto con la sangre de otra persona. Incluso puedes utilizar bolsas plásticas limpias para proteger tus manos.
  • Si tomas algún anticoagulante, podría ser necesario más tiempo y presión para detener el sangrado. Si la víctima de sangrado es otra persona, busca si tiene un brazalete o collar médico que indique si toma anticoagulantes.
  • Para sangrados más graves, llama a pedir ayuda, o pídele a alguien más que llame a pedir ayuda, lo más pronto posible.
  • Si la persona sufrió lesiones abdominales graves, no intentes colocar de vuelta los órganos. Cúbrelos con una vendaje hasta que las personas con entrenamiento médico de emergencia puedan moverlo. [3]
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Advertencias

  • Para evitar la transmisión de enfermedades entre tú y la víctima, es muy importante tomar precauciones específicas: [7]
    • Utiliza una barrera entre tu piel y el sangrado. Utiliza guantes (preferiblemente que no sean de látex, ya que algunas personas puede presentar reacciones alérgicas al mismo), o utiliza un paño limpio doblado.
    • Lávate bien las manos con agua y jabón después de atender a la víctima. Utiliza un lavabo para manos, no el lavabo que se suele utilizar para la preparación de los alimentos.
    • No tomes, comas, ni te toques la nariz, ojos, o boca, hasta que te hayas lavado bien las manos después de tratar a la víctima.
  • Por lo general, no se recomienda el uso de un torniquete. Sin embargo, en el caso de heridas graves o extremidades con daño severo, puede que tengas que hacerlo para salvar la vida de la persona. Debes entender que aplicar un torniquete puede costarle la extremidad a la persona. [8]
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Referencias

  1. http://www.myhomeremedies.com/topic.cgi?topicid=28
  2. http://www.artofmanliness.com/2012/10/16/beyond-toilet-paper-how-to-treat-shaving-nicks-and-cuts/
  3. 3,0 3,1 MayoClinic.com - Severe Bleeding:First Aid
  4. Australian Red Cross, First Aid, Responding to Emergencies, p. 89, (2002), ISBN 9-780909-896744
  5. http://firstaid.about.com/od/bleedingcontrol/ss/bleedingsteps_3.htm
  6. Australian Red Cross, First Aid, Responding to Emergencies, p. 89, (2002), ISBN 9-780909-896744
  7. Australian Red Cross, First Aid, Responding to Emergencies, p. 90, (2002), ISBN 9-780909-896744
  8. Survival, Evasion and Recovery - U.S. Military Field Manual FM 21-76-1 (1999)

Acerca de este wikiHow

Resumen del artículo X

Para detener el sangrado de una cortadura pequeña, enjuágala con agua fría para contraer los vasos sanguíneos y limpiarla. Presiónala con una gasa limpia para reducir el sangrado y luego desinféctala con vinagre o con hamamelis antes de vendarla. Si se trata de una herida grave, eleva la parte lastimada del cuerpo y presiona la herida con una gasa limpia o con la mano hasta detener el sangrado. Si el sangrado no se detiene después de unos minutos o si sospechas que tienes un sangrado interno, llama de inmediato a una ambulancia. Para aprender más de nuestra coautora médica certificada y saber, por ejemplo, cómo vendar una herida, ¡sigue leyendo el artículo!

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