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Al momento de elegir un transportador para tu gato, asegúrate de que sea del tamaño adecuado. Como regla general, el transportador debe ser una vez y media más grande que el gato. Otro aspecto importante es el material; si tu gato es un viajero tranquilo, no dudes en usar uno de nailon o de un género blando. No obstante, si se pone ansioso cuando está dentro del transportador, es mejor que elijas uno de plástico que es más resistente. Si cuando intentas hacerlo entrar, se resiste, tendrás que optar por un transportador con techo desmontable.

Método 1
Método 1 de 3:

Elegir el tamaño correcto

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  1. En uno muy grande, el gato podría ir dando tumbos en el camino, lo que resulta bastante incómodo e inseguro. Por otro lado, en uno muy pequeño el gato puede sentirse muy apretado, lo que podría incrementar su estado de ansiedad. [1]
    • Asimismo, es difícil mantener la estabilidad de un transportador grande especialmente si el gato está adentro.
  2. El gato debe tener la facilidad de tumbarse, ponerse de pie y darse la vuelta cómodamente. De otro modo, significa que el transportador es muy pequeño. [2]
    • Por ejemplo, si tu gato mide 25 cm (10 pulgadas) y pesa 4,5 kg (10 lb), deberás optar por un transportador de 65 cm (25 pulgadas) de alto que soporte un peso de 11 a 14 kg (de 25 a 30 lb).
    • Si tienes pensado viajar y vas a llevar a tu gato, asegúrate de que entre cómodamente en el transportador junto con sus envases de agua y comida.
  3. Aunque tengas un gatito bebé, elige un transportador del tamaño adecuado para cuando sea un adulto. Mientras sea un bebé, forra el transportador con una sábana o con una toalla gruesa para evitar que se resbale mientras lo trasladas. [3]
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Método 2
Método 2 de 3:

Elegir el material adecuado

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  1. Los transportadores de nailon o de género blando son ideales para los gatos que están tranquilos durante el viaje. Cuando vayas a comprarlo, introduce un libro u otro objeto pesado para asegurarte de que la base no se hunda. [4]
    • Si se hunde, elige en su lugar uno de nailon con una base más resistente o uno de plástico.
    • De ser posible, escoge uno que cuente con aberturas laterales y en la parte superior, lo que facilitará sacar y poner al gato en el transportador.
  2. Los transportadores de plástico son una alternativa excelente para los gatos que se sienten agobiados por la ansiedad, ya que son lo suficientemente compactos para resistir los arañazos y destrozos de un gato ansioso. Además, los transportadores de plástico con puertas de acero son más resistentes que otros que tienen puertas de plástico. [5]
    • Asimismo, los transportadores de plástico son muy fáciles de limpiar.
    • Si decides comprar uno, asegúrate de que el asa sea lo suficientemente fuerte como para soportar el peso de tu gato.
  3. Las cajas de cartón no resisten los arañazos de un gato ansioso. Además, no solo es fácil para el gato escapar de ellas, sino que no protegen los asientos de los autos si se orina o se derrama el agua. Sin embargo, si se trata de una emergencia y no tienes un transportador para llevarlo al veterinario, utiliza una caja de cartón resistente. [6]
    • Asegúrate de colocar una sábana o una toalla gruesa en la base de la caja y de cortar orificios de ventilación en las partes laterales.
    • Evita el uso de fundas para almohada o de canastas de ropa sucia para transportar a tu gato, ya que podría escaparse muy fácilmente o lastimarse.
    • Ten en cuenta que, si el gato se orina en el transportador, la base quedará húmeda y fácil de romperse. Si vas a usar una caja de cartón, forra la base con una bolsa de plástico para basura, y ponle encima una toalla o una sábana.
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Método 3
Método 3 de 3:

Tomar en cuenta otras características

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  1. Aunque es preferible que el transportador cuente con tres aberturas o ventanas, podrías elegir uno que tenga aberturas en al menos dos de los lados. De esta manera, evitarás que tu gato sufra un golpe de calor o se sofoque dentro del transportador. [7]
  2. Si tu gato se muestra reacio, un transportador con abertura en la parte superior o con techo desmontable sería sumamente útil, ya que ayudaría a sacar y meter al gato con más facilidad. [8]
    • Asimismo, este tipo de transportadores le permiten al veterinario sujetar al gato más fácilmente sin incomodarlo.
    • Además, al tener una abertura en la parte superior, podrá examinarlo sin sacarlo en ningún momento; lo cual resulta ventajoso en el caso de gatos que sienten miedo o ansiedad cuando llegan al consultorio del veterinario.
  3. Estas presillas permiten sujetar el transportador al asiento del auto. Este elemento adicional de seguridad es justo lo que necesitas para garantizar la seguridad de tu gato mientras lo trasladas. [9]
  4. . Deja el transportador a la vista para que lo explore y lo olfatee. Coloca en el interior una de las sábanas que tenga su olor junto con algunas golosinas para inducirlo a que entre a investigar. Una vez que haya entrado por sí mismo, deberás felicitarlo y premiarlo con una golosina. [10]
    • Deja el transportador a la vista en todo momento para que tu gato se acostumbre a él y lo relacione con experiencias positivas. Incluso podría convertirse en su lugar favorito para dormir.
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Consejos

  • Si tienes más de un gato, cada uno de ellos debe tener su propio transportador aparte.
  • Un transportador convencional para gato puede costar entre $ 20 y $ 40 de acuerdo al tamaño y a la calidad.
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