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El mejor momento del día para regar el jardín es por la mañana. De esta forma, las plantas tienen el tiempo suficiente para secarse antes de que anochezca, ya que si el agua permanece allí durante la noche, podría provocar moho. Si riegas el jardín en el momento correcto y con el método adecuado, mantendrás tus plantas saludables.
Pasos
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Riega en la mañana si es posible. Este es el mejor momento para regar el jardín porque se adapta al ciclo natural de crecimiento de las plantas, las cuales estarán listas para beber muy temprano por la mañana, cuando el sol ya salió pero aún no está muy alto en el cielo. El resto del día, podrán recibir el agua antes de que el sol empiece a calentar. Las plantas hidratadas soportarán mejor el calor extremo. [1] X Fuente de investigación
- Si esperas hasta el mediodía o más tarde, cuando el sol calienta demasiado, el agua podría quemar las plantas, ya que calentará en exceso las hojas y los tallos frágiles, y los dañará a su paso.
- Procura regar el jardín antes de las 10 a. m. para asegurarte de que el agua tenga el tiempo suficiente para filtrarse en el suelo y secarse un poco antes de que el sol se ponga más fuerte. Si riegas por la tarde, el agua se desperdiciará, porque se evaporará antes de que la tierra la absorba.
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Riega al final de la tarde si no puedes hacerlo por la mañana. No siempre te resultará conveniente regar a primera hora de la mañana, cuando tienes que hacer muchísimas otras cosas. Si no puedes hacerlo por la mañana, espera hasta el atardecer, cuando el sol ya no esté tan fuerte. De esta forma, las plantas no se quemarán y aún tendrán tiempo de secarse un poco antes de que anochezca. [2] X Fuente de investigación
- Si esperas hasta la tarde, riega a partir de las 4 p. m. porque, antes de esa hora, el sol aún podría quemar las plantas.
- Si no tienes otra opción que regar cuando el sol está muy fuerte, hazlo solo de vez en cuando y no lo conviertas en un hábito diario.
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No riegues el jardín por la noche. Cuando riegas por la noche, el agua se queda sobre las hojas y los tallos en lugar de evaporarse, y podrían formarse charcos en la tierra en lugar de que el agua se drene correctamente con la ayuda del sol. Esto es dañino para las plantas porque produce moho y hongos alrededor de las raíces, y sobre los tallos y las hojas.
- Riega por la noche solo como último recurso, si las plantas están muy secas y no puedes esperar hasta la mañana.
- Si debes hacerlo por la noche, riega la tierra sin mojar la planta y usa menos agua para evitar que se inunde. Esto será mucho más fácil si usas una cinta de riego o una manguera microporosa.
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Riega el jardín con la frecuencia correcta. La regla general es que los jardines necesitan aproximadamente 3 cm (1 pulgada) de agua cada semana. Sin embargo, algunas plantas necesitan más que esto y otras necesitan menos. Lo mejor será que investigues cuánta agua necesitan tus plantas y vigiles su estado de salud. [3] X Fuente de investigación Si una planta se marchita, significa que necesita más agua.
- Otra buena prueba es meter un dedo unos cuantos centímetros en la tierra. Si se siente totalmente seca, quizás sea el momento de regarla. Si se siente mojada justo debajo de la superficie, espera más tiempo.
- Usa el sentido común en cuanto a la frecuencia para regar las plantas. Por ejemplo, si ha llovido durante la semana, las plantas no necesitan tanta agua. Si estás en una sequía, es posible que necesiten agua adicional.
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Riega cerca de las raíces y no sobre las hojas. Las raíces absorben el agua que nutre a la planta; el agua que cae en las hojas simplemente gotea o se evapora. Cuando riegues, dirige la manguera, la regadera o el aspersor a la parte baja de la planta, cerca de las raíces, para asegurarte de regarlas de la forma adecuada.
- Regar sobre la planta y mojar todas las hojas también es dañino para la salud de la planta, ya que el agua que se queda sobre las hojas puede provocar moho o sobrecalentar la planta.
- Si tienes dificultades para regar las raíces con la manguera, busca otro sistema que riegue cerca del suelo, como una manguera microporosa o una cinta de riego por goteo.
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Riega de manera profunda y con suficiente agua. La mayoría de las plantas son más saludables cuando tienen las raíces profundas y no cerca de la superficie. Si riegas de manera profunda y saturas la tierra por completo, te asegurarás de que el agua llegue a las puntas de las raíces, lo cual estimula su crecimiento hacia abajo.
- Por esa razón, es más saludable regar las plantas con moderación, pero de manera profunda. En lugar de regar con un poquito de agua todos los días, elige uno o dos días de la semana para hacer un buen riego profundo.
- Eso significa quedarte treinta segundos o más en cada área, en lugar de rociar rápidamente el jardín.
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Detecta si hay señales de exceso de riego. Las plantas que reciben demasiada agua tienen la misma probabilidad de morir que las plantas que reciben muy poca agua. Asegúrate de regarlas con la frecuencia correcta y sin exagerar. Verifica la presencia de estas señales que indican que el jardín podría estar recibiendo demasiada agua:
- hojas con las puntas amarillas o marrones
- follaje empapado y débil
- señales de podredumbre
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Consejos
- Elige la mejor herramienta para regar según el tamaño de tu jardín. Si es un gran jardín que debes regar todos los días, puedes adquirir un aspersor y un temporizador automático.
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Referencias
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