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La mayoría de las culturas tiene algún tipo de postre de manzana al horno, muchos de ellos parecidos al crumble de manzana. Si bien existen muchas variaciones, en su forma más simple, el crumble de manzana consiste en rodajas de este fruto cubiertas por una capa crujiente con sabor a mantequilla. Este postre es pegajoso, burbujeante, jugoso y tiene un delicioso aroma. Empieza con la receta básica, luego experimenta con las demás variaciones. Verás rápidamente por qué este postre de manzana es tan apreciado por todo el mundo.
Para 1 bandeja de 23 cm (9 pulgadas).
Ingredientes
- 5 a 6 manzanas para hornear
- 2/3 taza de harina
- 2 cucharadas de azúcar granulada
- 1/2 taza de azúcar morena
- 1 cucharadita de sal kosher
- 1/2 cucharadita de canela molida
- 6 cucharadas de mantequilla sin sal
Pasos
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Calienta el horno y prepara la bandeja. Enciende el horno a 180 °C (350 °F). Enmantequilla una bandeja para hornear o de tarta de 20 o 23 cm (8 o 9 pulgadas).
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Prepara las manzanas. Pela y descorazona las manzanas. Luego, córtalas en rodajas de 6 mm (¼ pulgada) o pícalas en trozos pequeños. Ponlas en la bandeja preparada.
- Quizá necesites más manzanas, dependiendo de su tamaño. Asegúrate de que las manzanas llenen unos ¾ de la bandeja.
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Haz la cubierta del crumble. Bate la harina, la azúcar, la sal y la canela en un tazón mediano.
- También podrás tamizar los ingredientes juntos en un tazón, pero es más rápido solo batiéndolos.
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Añade la mantequilla a los ingredientes secos del crumble. Con un cortador de masa, tenedor o con tus manos, integra la mantequilla a la mezcla seca. Integrar sencillamente implica combinar la mantequilla y la harina hasta que obtengan una textura arenosa.
- Si lo haces con tus manos, asegúrate de no manipular demasiado la mantequilla, sino se suavizará y será difícil de trabajar. Mantén tus manos frías y hazlo con rapidez.
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Cubre las manzanas con la cubierta del crumble. Espolvorea toda la cubierta por todas las manzanas de la bandeja de manera uniforme. Presiónalas ligeramente y envuelve el montículo de manzanas.
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Cocina el crumble de manzana. Hornéalo de 45 minutos a 1 hora o hasta que se vea dorado, los jugos burbujeen y las manzanas estén bien cocidas.
- Te recomendamos poner una bandeja debajo del crumble en el horno. De esta manera, en esa bandeja extra caerán las gotas del burbujeante crumble de manzana.
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Sácalo y sírvelo. Deja que el crumble de manzana descanse unos cuantos minutos antes de emplatarlo. Sírvelo con crema de leche, salsa o helado.
- Tápalo y refrigera lo que sobra. El crumble de manzana se conservará unos cuantos días, pero podría perder su textura crocante.
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Varía de fruta. Podrás hacer crumble todo el año con frutas frescas de temporada. Prueba las moras y las fresas durante el verano o las peras y el ruibarbo durante la primavera. Si usas frutas que son considerablemente más ácidas, tendrás que adaptar la cantidad de azúcar. Por ejemplo, para el ruibarbo, tendrás que echar más azúcar.
- También podrás usar fruta congelada en los crumbles. No la descongeles antes de espolvorearle la cubierta del crumble. Solo échasela y ponla al horno.
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Para la cubierta, ponle avena. Para añadirle una textura más sustanciosa a la cubierta del crumble, podrías echarle avena. Reemplaza la mitad de la harina con avena. Así tendrá un poco sabor a granola.
- Recuerda conservar parte de la harina en la cubierta del crumble, aunque uses avena. La harina será el agente ligante y mantendrá la cubierta unida. También ayudará a absorber los jugos de la fruta.
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Ponle nueces. Las nueces le darán sabor, nutrientes y crocancia al crumble. Ponle tus nueces favoritas o prueba las pecanas, las almendras o las avellanas. Lo mejor será que las tuestes y las piques antes de agregarlas a la cubierta del crumble.
- Asegúrate de que las nueces estén bien integradas con la cubierta del crumble. Si solo están por encima, es probable que se quemen.
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Sírvelo con crema batida, helado o crema inglesa. Si bien el crumble de manzana es excelente por sí solo, prueba comerlo con un poco de crema batida, 1 cucharada de helado o crema inglesa (una natilla espesa) encima.
- No tendrá que ser necesariamente helado de vainilla. El crumble de manzana sabe bien con helado de caramelo o de dulce de leche.
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Vídeo
Consejos
- Si prefieres que el crumble esté más decorado, agrégale unas cuantas rodajas de manzana con un poco de azúcar encima. Así tendrá una hermosa presentación.
- Ten cuidado y vigila el crumble para asegurarte de que no se queme.
- Ponte guantes de cocina y sé cuidadoso al manipular recipientes calientes.
Cosas que necesitarás
- Descorazonador de manzanas
- Pelador de manzanas
- Cuchillo
- Bandeja para hornear o de tartas
- Cortador de masa o tenedor
- Cucharas y tazas medidoras
Referencias
Acerca de este wikiHow
Para hacer crumble de manzana primero precalienta el horno a 175 °C. Luego pela unas 5 a 6 manzanas y sácales el centro. Corta las manzanas en rodajas de 6 mm y espárcelas en una bandeja para hornear de 20 cm. Luego mezcla 2/3 de taza de harina, 2 cucharadas de azúcar granulada, media taza de azúcar morena y media cucharadita de canela en un tazón grande. Integra 6 cucharadas de mantequilla fría sin sal a la mezcla con un tenedor o cortador de masa. Integrar significa simplemente combinar la mantequilla con la harina hasta que quede con una textura arenosa y que se desmigaje. Ten cuidado de no manipular demasiado la mantequilla, si no se suavizará y será difícil de trabajar. Vierte la cubierta del crumble sobre las manzanas y hornéalas durante 45 minutos o hasta que se doren. ¡Sírvelas y disfrútalas! Si quieres aprender a hacer otras variedades de crumble de manzana, incluyendo algunas con nueces o avena, ¡sigue leyendo!
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