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Los hipnotizadores de escenario son buenos animadores que pueden convencer a grupos de completos desconocidos de que hagan lo que sea (dentro de los límites de la razón). Aunque aparentemente las personas hipnotizadas pierden el control de sí mismas, en realidad solo se encuentran en un estado de calma y relajación en el que están muy abiertas a las sugestiones. Aprender a hacer hipnotismo en un escenario de forma segura y con confianza será un gran truco que podrás presumir con los amigos o que te permitirá incluso ser parte de un show y ganar dinero adicional.

Parte 1
Parte 1 de 3:

Calmar al participante

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  1. Los hipnotizadores de escenario suelen invitar a grupos grandes de desconocidos para hipnotizarlos al mismo tiempo, lo cual hace que el show sea entretenido. Sin embargo, si acabas de aprender a hacer hipnotismo en un escenario, es mejor empezar hipnotizando a un familiar o un amigo cercano para desarrollar una estrategia.
    • Invita a alguien que sepas que se lo tomará en serio y que estará entusiasmado. Di algo como “Tengo muchas ganas de aprender a hacer hipnotismo en un escenario, pero antes de que pueda hacer una presentación necesito practicar con alguien que conozca. ¿Estarías dispuesto a ayudarme?”.
    • Prepárate para hacer la hipnosis en una habitación privada y cómoda.
  2. Dale una silla cómoda para que se siente o deja que se recueste en un sofá. Sonríe y agradécele por su disposición a ser hipnotizado. Una parte importante de la hipnosis es ayudar al participante a que se relaje. Ser amigable y acogedor con este ayudará a que se sienta cómodo rápidamente.
    • Dale uno o dos minutos para que se adapte y se ponga cómodo. Pregúntale cómo se siente y si desea algo, como agua, antes de empezar.
  3. Pídele al participante que mire a algo que esté inmóvil o que se mueva lentamente y que esté un poco elevado. Habla con una voz lenta y relajante, y di algo como “Todo lo que quiero que hagas es que mantengas los ojos en esa luz de ahí arriba. No mires alrededor, ni a mí ni a ninguna otra cosa. Solo concéntrate en esa luz sin parpadear, sin mirar a otro lado”. Has empezado el proceso de la hipnosis “induciendo” al participante o ayudándolo a que se relaje. Los siguientes son algunos objetos a los que puedes hacer que mire: [1]
    • tu dedo
    • un teléfono celular sostenido
    • un punto determinado en el techo
    • un disco que gire lentamente
    • un péndulo o un reloj de bolsillo oscilante
  4. Anímalo a inhalar por la nariz y exhalar por la boca, lenta y profundamente. Respira lenta y profundamente con el participante y pídele que haga que su respiración coincida de manera precisa con la tuya. [2]
    • Por ejemplo, puedes decir algo como “Inhala por la nariz y exhala por la boca, despacio y con calma. Exhala expulsando toda la tensión y el estrés, y empieza a relajarte. Solo concéntrate en la respiración, deja que tu mente descanse”.
    • Es posible que el participante tenga problemas para hacerlo si está nervioso o emocionado con respecto a ser hipnotizado. Hazlo lentamente, habla con voz relajante y dale al participante tanto tiempo como necesite para calmarse.
  5. Una vez que el participante se haya acostumbrado a la respiración profunda y relajada, anímalo a cerrar los ojos y a relajar el cuello y la cabeza. Esto ayudará a estimular aun más el sueño y hará que el participante entre en un estado de mayor calma. [3]
    • Por ejemplo, puedes decir algo como “Sigue respirando profundamente y siente como todo tu cuerpo se pone pesado. Los brazos, las piernas y especialmente la cabeza. Relaja el cuello y deja que tu cabeza se incline hacia adelante suave y lentamente, hasta que toque el pecho”.
    • También es normal que la cabeza de un participante se incline hacia atrás en vez de hacia adelante. Si eso sucede, empuja suavemente su cabeza sobre su pecho para evitar la incomodidad o el dolor de cuello.
  6. Dile que abra los ojos despacio y que mire al objeto en el que se concentró previamente. Luego, pídele que empiece a parpadear rápidamente manteniéndose concentrado en el objeto durante el breve momento en que tenga los ojos abiertos. Parpadear rápidamente es la respuesta natural del cuerpo a la sensación de somnolencia, así que pedirle al participante que lo haga es enviar una señal al cuerpo para que entre en un estado de mayor somnolencia. [4]
    • Por ejemplo, puedes decir algo como “Ahora que estás relajado y que te sientes bien, quiero que abras un poco los ojos, mira mi dedo como lo hiciste anteriormente, luego cierra de nuevo los ojos. Sigue parpadeando rápidamente, mirando mi dedo”.
  7. Con este “bloqueo de ojos” mandarás al participante efectivamente a “dormir”. Si bien seguirá despierto, su cuerpo habrá pasado por todo el proceso de quedarse dormido y estará extremadamente relajado. [5]
    • Por ejemplo, di algo como “A partir de este momento, tus ojos permanecerán firmemente cerrados hasta que te diga que los abras. Siente cuánto te pesan los ojos. Están tan pesados que es como si estuvieran atascados. Ni siquiera puedes levantarlos”.
    • Para hacer que este “bloqueo de ojos” sea aun más efectivo, chasquea los dedos y di algo como “Cada vez que chasquee los dedos, tus párpados se pondrán más pesados”.
  8. Anímalo a que note cómo su cuerpo se hunde y prácticamente se derrite en la silla. A medida que hables, mantén la voz cálida y neutral, recordándole lo bien y lo relajado que se siente. Poner sus sensaciones físicas en palabras hará que la hipnosis sea más poderosa.
    • Por ejemplo, puedes decir algo como “Ahora que estás más relajado, puedes sentir un hormigueo cálido que te recorre el cuello, el pecho, los brazos, los dedos de las manos, las piernas y los dedos de los pies”.
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Parte 2
Parte 2 de 3:

Pedirle al participante que se mueva

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  1. Ahora debes hacer que el estado de profunda relajación del participante se traduzca en un movimiento físico y una sensación. Anímalo a dejar salir toda la tensión de cada parte de su cuerpo y haz que imite a algo concreto, como un muñeco de trapo o un puñado suelto de bandas elásticas. Desde esta posición relajada, será más fácil probar la profundidad de la hipnosis del participante. [6]
    • Por ejemplo, puedes decir algo como “Ahora, a la cuenta de 3, quiero que sientas que te vuelves completamente flácido, tan suelto como un muñeco de trapo”.
    • También puedes decir “¡Ahora!” o chasquear los dedos para decirle al participante que se ponga flácido.
    • También puedes decirle al participante que esté “tan rígido y duro como una barra de acero”. Esto puede ser más difícil, porque acabas de hacer que se relaje bastante. Si el participante está más naturalmente alerta, la orden “rígido y duro” puede ser más efectiva.
  2. Dile que vas a tomar su mano brevemente y que vas a soltarla. Agarra su muñeca con cuidado, levántala algunos centímetros y déjala caer en su regazo. Si sientes que hace algo de resistencia, anímalo tranquilamente a soltarse un poco. [7]
    • Di algo como “Ahora voy a alzar unos centímetros tu muñeca. No trates de ayudarme o de levantar la mano. En el momento que te suelte la mano, volverá a caer en tu regazo, tan flácida y suelta como la de un muñeco de trapo”.
    • Si le has dicho al participante que se ponga tieso y rígido, dile que su brazo se eleva por el aire. Di algo como “Puedes sentir que tu brazo sale disparado frente a ti como una barra de acero”. Haz presión en su brazo cuando lo levante. Si no se mueve, entonces se encuentra en una hipnosis profunda. Si lo hace, sigue hablándole con firmeza, pero suavemente.
  3. Esta es una manera de hacer que la mente del participante divague, como puede suceder cuando está por conciliar el sueño. No le pidas que imagine un lugar específico, porque eso puede desencadenar distintas emociones en él. En cambio, déjale escoger el lugar que mejor le parezca. [8]
    • Di algo como “Ahora que estás relajado y suelto, imagina que estás en un lugar seguro y cálido. Imagina que estás en el lugar más seguro y más cálido en el que has estado y siente esa sensación de confort que fluye a través de ti”.
  4. Ahora que has conseguido que el participante esté en un punto relajado de la hipnosis, puedes empezar a prepararlo para que haga ciertas cosas. Una buena manera de llevarlo a cabo es hacer que empiece a hacer una cuenta regresiva partiendo de 100, lo cual hará que se relaje y le ayudará a prever lo que vendrá después. Habla despacio y con calma, haciendo un conteo breve. [9]
    • Por ejemplo, puedes decir algo como “Ahora haz una cuenta regresiva mentalmente partiendo de 100. Tan pronto como pienses en un número, imagina que se aleja”.
    • Si deseas un método más visual, dile al participante que imagine que está en la parte superior de una escalera y pídele que cada vez que digas un número baje un peldaño. Esto hará que sienta que desciende lentamente, como sucede cuando concilia el sueño.
  5. Ahora que el participante está en el estado hipnótico más influenciable, puedes usar algunas herramientas para profundizar la hipnosis, llamadas “intensificadores”. Los intensificadores pueden ser un chasquido de dedos, un aplauso o una frase como "Vuelve a dormir". Puedes usarlos luego de despertar al participante si sientes que se sale de la hipnosis. [10]
    • Por ejemplo, di algo como “Cuando te diga que abras los ojos y me mires, te darás cuenta que cada vez que chasquee los dedos, tus ojos se cerrarán inmediatamente y te llevarán a un estado aún más profundo de hipnosis”.
  6. Ayúdalo a que se prepare para despertar diciéndole que se despertará cuando chasquees los dedos o cuentes hasta 3. Cuando esté despierto, dile que haga algunas tareas simples, como aplaudir lenta y luego rápidamente o que muestre distintas emociones en el rostro, como euforia o furia.
    • Para que se despierte, puedes decir algo como “Ahora, a la cuenta de 3, cuando diga que te despiertes, levantarás inmediatamente la cabeza y me mirarás”.
    • Cuando tengas más confianza en tus habilidades como hipnotizador, puedes asignarle tareas más difíciles, como “salta alrededor como si fueras un conejo” o “no toques el suelo, porque te produce una terrible alergia”.
  7. Cuando estés listo para liberar al participante, dile que se vuelva a dormir. Luego, dile que harás una cuenta regresiva y que se despertará cuando llegues a 1.
    • Por ejemplo, di algo como “Ahora haré una cuenta regresiva partiendo de 5 y saldrás del trance hipnótico cuando llegue a 1. Recordarás todo lo que hiciste, pero estarás totalmente despierto y volverás a la normalidad”.
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Parte 3
Parte 3 de 3:

Hacer una presentación para el público en general

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  1. Antes de empezar a pedir voluntarios, explícale al público lo que vas a hacer. Dile que los participantes estarán completamente conscientes de lo que van a hacer y que solo estarán profundamente relajados. Explícales que no puedes obligarlos a hacer nada que no quieran hacer. [11]
    • La hipnosis reduce las inhibiciones del participante, pero no elimina completamente su autocontrol o la conciencia de sí mismo.
    • Por ejemplo, puedes decir algo como “Estoy convencido de que has escuchado acerca de la hipnosis y que estás pensando “¡Qué extraño! ¡Nunca lo haría!”. Sin embargo, antes de que cambies totalmente de opinión, déjame aclararte algunas cosas”.
  2. Sonríele al público y habla usando un tono de voz calmado y uniforme al presentarte y explicar qué es lo que vas a hacer. Habla por 2 o 3 minutos de ti mismo y de tu trasfondo. Incluso puedes contar algunos chistes para hacer que todos se relajen.
    • Cualquier persona del público es un participante potencial. Siendo amigable y estando calmado, puedes hacer que las personas estén más abiertas y relajadas antes de que empieces a realizar la hipnosis.
  3. Pide voluntarios y busca entre el público a alguien que parezca interesado y emocionado. Los mejores participantes son los “creyentes” que están dispuestos a ser hipnotizados, puesto que ya se encuentran en un estado mental abierto que hará que sean fáciles de hipnotizar. [12]
    • No escojas a un participante cuyos amigos lo obliguen a ser voluntario o que no parezca tomárselo en serio.
  4. El proceso de hipnotizar a los participantes será exactamente el mismo que has practicado. Tendrás que proyectar la voz para que tanto el público como los participantes puedan escucharte. Además, tendrás que confiar en tus habilidades. Sabes que puedes hacerlo, así que convencer a los participantes de lo mismo hará que la hipnosis sea exitosa.
  5. En cualquier punto de la inducción, es posible que notes que alguno de los participantes se rezaga con respecto a los demás. Es posible que mire alrededor en vez de fijar los ojos en un punto o que se mueva en la silla aunque le pidas que se quede quieto y se relaje. Pídele amablemente al participante que no puede concentrarse que vuelva a su asiento. [13]
    • Simplemente puedes tocarlo ligeramente en el hombro y decirle algo como “Gracias por venir, puedes irte y tomar asiento”. Si te pregunta por qué, dile algo como “Necesito que los participantes se concentren mucho. Eso no quiere decir que no se te pueda hipnotizar en absoluto, es solo que no esta noche”.
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Consejos

  • Mantén una conversación monótona y relajante mientras hipnotizas a un participante para que se sienta cómodo con tu voz y tus instrucciones.
  • Esta técnica popular de hipnosis se conoce como la inducción de Elman.
  • Otros métodos incluyen la inducción de la caída de la mano, en la que debes decirle al participante que cierre los ojos y que empuje tu mano hacia abajo. Saca la mano rápidamente. En ese breve instante de susceptibilidad, dile al participante que se duerma.
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Advertencias

  • Nunca realices ninguna forma de hipnosis en personas con enfermedades mentales o desequilibradas. Asegúrate de que el participante esté perfectamente sano y sepa lo que le va a pasar.
  • Nunca trates de hacer que el participante haga algo que no quiera hacer. Además de abusar de su confianza, es probable que no tengas éxito; la hipnosis solo disminuye las inhibiciones del participante, no hace que pierda totalmente el control.
  • Algunos gobiernos locales y estatales exigen que tengas una licencia gubernamental para realizar cualquier tipo de hipnotismo. Consulta con el gobierno local para ver si necesitas una y busca en Internet o pídele al personal que te diga cómo puedes conseguirla. [14]
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