Los champús disponibles en el mercado contienen unos ingredientes agresivos, llamados sulfatos, que puede resecar y debilitar el pelo a la larga. Si quieres tener un pelo sano y brillante, puedes fabricar tu propio champú utilizando ingredientes de precio asequible. Aprende a hacer champú con jabón de Castilla, con escamas de jabón, y con bicarbonato sódico.
Pasos
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Reúne los ingredientes. Este champú casero puede elaborarse con cualquier tipo de escamas de jabón. Las de jabón de Castilla suelen utilizarse para el champú, pero también servirán las escamas de cualquier pastilla de jabón. Eso sí, asegúrate de que sea un jabón fabricado con ingredientes naturales que no resulten agresivos para tu pelo. Necesitarás:
- Escamas de jabón
- Agua hirviendo
- Aceite de almendra
- Aceites esenciales
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Haz escamas de jabón. Si no has comprado escamas de jabón ya preparadas, utiliza un cortador de queso o un cuchillo para cortar escamas de jabón lo suficientemente finas para que se disuelvan con facilidad en agua caliente. Necesitarás unos 120 g de escamas para hacer un litro de champú. Coloca las escamas en un bol grande.
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Hierve el agua. Vierte un litro de agua en una cacerola y caliéntala al fuego hasta que hierva. También puedes hacer esto en el microondas utilizando un recipiente apropiado.
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Vierte el agua sobre las escamas de jabón. El agua hirviendo disolverá inmediatamente las escamas de jabón. Utiliza una cuchara para remover la mezcla, asegurándote de que las escamas se disuelvan por completo.
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Añade los aceites. Vierte 1/4 de una taza de aceite de almendra y 8 gotas de tu aceite esencial favorito, como podría ser el bálsamo de limón o el aceite de menta. Remueve bien la mezcla y deja que se enfríe.
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Pasa el champú a una botella. Utiliza un embudo o, simplemente, vierte el champú con cuidado en un bote (puedes usar el de algún champú comercial que esté vacío).Anuncio
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Reúne los ingredientes. El champú para pelo seco contiene ingredientes que aportan una hidratación extra y evitan el encrespamiento del pelo. El pelo seco suele tender a quebrarse y estropearse con facilidad, por lo que este champú está hecho para fortalecer el pelo desde la raíz. Puedes conseguir estos ingredientes en cualquier tienda de productos naturales:
- Infusión de camomila o manzanilla
- Jabón de Castilla líquido
- Aceite de oliva
- Aceite esencial de árbol de té
- Aceite esencial de menta
- Aceite esencial de romero
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Haz una infusión. Introduce una bolsita de manzanilla en un cazo con 60 ml de agua hirviendo y déjala reposar durante 10 minutos. Si en lugar de bolsitas tienes flores enteras de manzanilla, utiliza una cucharada aproximadamente. Cuela la infusión y deja que se enfríe.
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Calienta el jabón de Castilla. Vierte jabón de Castilla líquido en taza medidora hasta que llegue a 350 ml. Calienta el jabón en el microondas en sesiones de un minuto hasta que esté caliente pero sin llegar a hervir.
- También puedes calentar el jabón en el fogón de la cocina utilizando una olla pequeña; pero asegúrate siempre de que no se caliente demasiado.
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Añade los aceites. Echa en la olla de jabón caliente 15 ml de aceite de oliva, 8 ml de aceite de árbol de té, 4 ml de aceite de menta y 4 ml de aceite de romero. Remueve la mezcla suavemente, una vez que hayas añadido todos los aceites. Si se forman burbujas o espuma, rocía el contenido de la olla con alcohol isopropílico en espray.
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Añade la infusión. Añade la infusión de manzanilla a la mezcla de jabón caliente. Viértela lentamente para evitar que se forme espuma. Deja que se enfríe el champú y, después, pásalo a un bote de 450 ml.Anuncio
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Reúne los ingredientes. El champú de bicarbonato sódico es una alternativa para el lavado en seco . Puedes utilizarlo entre lavado y lavado para absorber la grasa del pelo y mantener un aspecto limpio y un olor fresco. Además del bicarbonato, necesitarás los siguientes ingredientes:
- Harina de maíz
- Harina de avena
- Lavanda seca
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Mezcla los ingredientes. Mezcla 1/2 taza de bicarbonato sódico, 1/2 taza de harina de maíz, 1/4 de taza de harina de avena y 1/8 de taza de lavanda seca. Coloca la mezcla en la licuadora y muélela hasta reducirla a polvo muy fino.
- Si no quieres moler los ingredientes, puedes prescindir de la lavanda y de la harina de avena. El champú hará su función sin estos ingredientes.
- En lugar de una licuadora, puedes utilizar una batidora o un molinillo de café.
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Introduce la mezcla en un salero o un pimentero. Mete la mezcla en un salero o un pimentero limpio y seco para poder esparcir el polvo sobre tu cabeza cuando quieras usarlo. Guarda el resto del champú seco en un recipiente cerrado al vacío para poder rellenar el salero cuando haga falta.
- Utiliza el champú seco sólo con el pelo totalmente seco. Si te lo echas con el pelo húmedo o mojado, el polvo quedará adherido y podría formarse una pasta.
- Aplica el champú sobre las raíces del pelo, utilizando un cepillo para distribuirlo en todo tu pelo. Deja que actúe durante 10 minutos y después cepíllate el pelo vigorosamente hasta eliminar todo el exceso de polvo.
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Consejos
- Experimenta con distintos aceites esenciales para dar con la combinación más apropiada para tu pelo. Si tienes el pelo seco, utiliza más aceite; si lo tiene graso, utiliza menos.
Acerca de este wikiHow
Para hacer tu propio champú, primero compra una barra de jabón hecho solo con ingredientes naturales. Luego, usa un rallador de queso o cuchillo para cortar el jabón hasta obtener 120 g de hojuelas de jabón. Luego, pon a hervir 1 litro de agua y échale las hojuelas de jabón, las cuales se derretirán. Cuando todas las hojuelas de jabón se hayan disuelto, añade 1/4 de taza de aceite de almendras y 8 gotas de tus aceites esenciales favoritos, que pueden ser de menta y de lavanda. Por último, deja que el champú enfríe antes de transferirlo a una botella. Para aprender a hacer champú con jabón de Castilla o bicarbonato de sodio, ¡sigue leyendo!