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Muchos gatos desarrollan nódulos en algún momento de sus vidas. Aun así, puede resultar alarmante encontrar un nódulo nuevo en tu mascota. Algunos son completamente inofensivos, mientras que otros deben ser revisados por un veterinario lo antes posible. En general, vale la pena que el veterinario revise los nódulos si no estás seguro. Busca otros síntomas que puedan indicar el tipo de nódulo que tiene el gato y comparte esta información con el veterinario.
Pasos
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Acude al veterinario lo antes posible para mostrarle los nódulos nuevos. En general, los nódulos que duran más de una o dos semanas, se deben revisar. Sin embargo, vale la pena destacar que los nódulos pequeños que no aumentan de tamaño, no supuran nada, ni molestan al gato, seguramente no son peligrosos. [1] X Fuente de investigación
- Si un nódulo aparece de repente y crece notablemente, lleva al gato con el veterinario lo antes posible.
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Revisa los nódulos que parezcan inocuos. Algunos nódulos son completamente inofensivos. Por ejemplo, el tejido duro que se forma en el lugar de una herida o después de una cirugía seguramente se trata solo de tejido cicatrizante. Sin embargo, si un nódulo parece molestar al gato o se ve infectado, llévalo de inmediato al veterinario. [2] X Fuente de investigación
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Deja que el veterinario haga pruebas. El veterinario seguro será capaz de determinar si un nódulo en particular está lleno de fluido, como un absceso, o si es sólido como un tumor o un quiste. Sin embargo, no podrá determinar si el tumor es inofensivo o peligroso sin hacer pruebas. Tendrá que usar una aguja o un bisturí para retirar un poco del tejido en el nódulo y hacerle pruebas de laboratorio. [3] X Fuente de investigación
- Ten en cuenta que las primeras pruebas serán rápidas, fáciles y seguras. Estas se realizan mientras el gato está despierto y le causarán poco o nada de dolor.
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Permite que le practiquen una biopsia. El veterinario recomendará una biopsia si no puede determinar la causa del nódulo mediante las primeras pruebas. El gato estará anestesiado para retirar el nódulo o parte de este. Esto es provechoso porque le permite al veterinario obtener un diagnóstico definitivo de la causa del nódulo. [4] X Fuente de investigaciónAnuncio
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Determina si el gato ha estado en una pelea. Los abscesos son nódulos comunes que normalmente se forman unos días después de una pelea con otro gato o perro. Son grandes y están llenos de fluido. Si notas que el gato tiene fiebre o se siente mal y tiene un nódulo con costra en el centro, seguramente es un absceso. [5] X Fuente de investigación
- Los abscesos son infecciones bacterianas. Aunque normalmente no son muy peligrosos, es mejor que el veterinario los revise. El veterinario puede drenar el fluido y recetarle antibióticos al gato para que su cuerpo se deshaga de la infección.
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Determina si un nódulo en la oreja es un hematoma. La sangre se puede acumular debajo de la piel en el sitio de una herida menor. Esto formará un nódulo hinchado y lleno de líquido llamado hematoma. Los hematomas son comunes en gatos que sacuden la cabeza con fuerza y se dañan los capilares entre el cartílago y la piel de la oreja. [6] X Fuente de investigación
- Los hematomas deben ser revisados por un veterinario. Normalmente, existe una causa subyacente para un hematoma, la cual requiere tratamiento. Por ejemplo, podría ser el resultado de tener ácaros en los oídos o una infección que le pudo ocasionar un daño a la oreja del gato.
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Retírale los quistes. Algunos quistes pueden producirse por folículos de pelo tapados o conductos de grasa. Si un nódulo aparece de repente, pero no cambia y tiene un pelo creciendo en el centro, podría ser un quiste. Puedes dejarlos intactos si no se infectan en repetidas ocasiones y no incomodan al gato. [7] X Fuente de investigación
- Si no estás seguro, la mejor opción es dejar que el veterinario revise el quiste y decida si se debe retirar o no.
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Piensa en una posible alergia a algún alimento. Si le cambiaste el tipo de alimento al gato y notas nódulos en su cabeza y cuello, estos seguramente son evidencia de una reacción alérgica. Deja de darle ese alimento y ve si los nódulos disminuyen. [8] X Fuente de investigación
- Este tipo de nódulos son pequeños, pálidos y están llenos de líquido.
- Aunque los nódulos por sí mismos no son peligrosos, el gato podría lastimarse si se rasca.
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Descarta picaduras de pulgas. Si los nódulos son pequeños, rojizos y ligeramente puntiagudos, es muy probable que sean piquetes de pulgas. Estos normalmente vienen acompañados de comezón y, tal vez, pérdida de pelo. Habla con el veterinario acerca de cómo deshacerte de las pulgas y ten cuidado con las heridas en la piel del gato donde se da lengüetazos y se rasca continuamente. [9] X Fuente de investigaciónAnuncio
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Revisa regularmente que el gato no tenga tumores. Revisa los nódulos en el gato cada mes y cada vez que su comportamiento cambie. Si un nódulo se vuelve tumor, cuanto más pronto lo atiendas, mejor. Comienza colocando ambas manos sobre la cabeza del gato y acarícialo alrededor de las orejas y bajo el cuello. Después revisa sus patas delanteras, debajo de los hombros y baja a la espalda y la panza. Por último, tócale las caderas y las patas traseras. [10] X Fuente de investigación
- Haz una cita con el veterinario para que revise los nódulos nuevos.
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Reconoce un tumor benigno. Los tumores benignos, es decir, aquellos que no son cancerosos, normalmente crecen muy lentamente. Puedes notar uno cuando aún es pequeño y podría nunca cambiar de tamaño. Los nódulos de tumores benignos son redondos y duros. Puedes moverlos por debajo de la piel. La piel no parece estar enferma. [11] X Fuente de investigación
- Los tumores benignos generalmente no son un riesgo para el gato, pero vale la pena que un veterinario los revise. Algunos tumores que parecen benignos pueden ser cancerosos.
- El veterinario seguro te recomendará retirar el tumor de la cara o patas del gato, incluso si es benigno. De otra forma, te recomendará dejar el tumor en paz.
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Lleva a revisar los tumores que aumenten de tamaño. Los tumores malignos o cancerosos suponen un riesgo para el gato y deben ser tratados de inmediato. Afortunadamente, también son relativamente fáciles de identificar. Principalmente, los tumores malignos aparecen de repente, son muy grandes y crecen muy rápido. Pueden tener una forma extraña y la piel debajo de estos podría lucir descolorida o enferma. [12] X Fuente de investigaciónAnuncio
Referencias
- ↑ https://www.bobmartinvetcare.co.uk/info/how-to-identify-lumps-and-bumps-on-your-pet
- ↑ https://www.bobmartinvetcare.co.uk/info/how-to-identify-lumps-and-bumps-on-your-pet
- ↑ https://www.bobmartinvetcare.co.uk/info/how-to-identify-lumps-and-bumps-on-your-pet
- ↑ https://www.bobmartinvetcare.co.uk/info/how-to-identify-lumps-and-bumps-on-your-pet
- ↑ http://www.vetstreet.com/care/abscesses-and-bite-wounds-in-cats-and-dogs
- ↑ https://www.bobmartinvetcare.co.uk/info/how-to-identify-lumps-and-bumps-on-your-pet
- ↑ https://www.bobmartinvetcare.co.uk/info/how-to-identify-lumps-and-bumps-on-your-pet
- ↑ http://www.vet.cornell.edu/fhc/Health_Information/foodallergies.cfm
- ↑ http://www.fleabites.net/flea-bites-on-dogs-and-cats-how-to-tell-if-your-pet-has-fleas/
Acerca de este wikiHow
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