Descargar el PDF Descargar el PDF

No puedes elegir a tu familia y quizás no tengas más remedio que lidiar con algunos parientes difíciles. En este caso, debes saber cómo interactuar con ellos sin volverte loco en el intento. Para hacerlo, debes mantenerte tranquilo y ser asertivo. Luego, puedes emplear algunas estrategias para lograr que las interacciones sean más agradables. Además, puedes distanciarte cuando sea necesario para no perder la razón.

Método 1
Método 1 de 3:

Resolver las dificultades

Descargar el PDF
  1. Mantén la calma . Los parientes tienen una habilidad especial para sacarte de quicio. Sin embargo, si lo permites, podrías explotar y las cosas se empeorarán. Controla tus emociones cuando se presenten las dificultades. Aprende a reconocer cuando empiezas a enojarte o a perder la paciencia. Cuando te provoquen, aléjate y toma un poco de aire fresco, cuenta hasta 100 o practica la respiración profunda . [1]
  2. Si tienes un desacuerdo con un pariente difícil, sé asertivo para evitar que te pongan contra las cuerdas. Di lo que debas decir de la forma más breve que puedas. Usa oraciones en primera persona que te permitan responsabilizarte por tus sentimientos y pedir lo que necesites sin hacer que la otra persona se ponga a la defensiva. [2]
    • Por ejemplo, podrías decirle “No me siento bien cuando hablas por mí. ¿Podrías permitirme responder por mí mismo?”.
  3. Los parientes difíciles suelen tratar de hacerte sentir culpable. Tratar de influenciar tus decisiones por medio de la culpa es una forma de abuso emocional, así que no caigas en la trampa. [3]
    • Supongamos que una tía tuya quiere hacerte sentir culpable diciendo “Bueno, hice un largo viaje hasta aquí. Pensé que al menos me dejarían elegir el menú para el evento”. Podrías responderle algo así como “Tía Margarita, por favor no trates de hacerme sentir culpable. Te dejamos elegir el postre y una de las entradas, así que votaremos como grupo para elegir el resto del menú”.
  4. ¿De verdad has escuchado y prestado atención a lo que tu pariente difícil tiene que decir? Algunas veces, lo único que la gente quiere es que la escuchen. Además, es posible que una parte de lo que diga sea cierto. Escucha de forma activa lo que diga la persona para hacer que se sienta reconocida y quizás resolver un malentendido. [4]
    • Si tu pariente tiene la reputación de ser una persona difícil, quizás ignores todo lo que diga por costumbre. Tómate el tiempo para escucharlo. Piensa cuáles podrían ser sus motivaciones y analiza si tiene razón en algún aspecto.
  5. Algunos parientes complican las situaciones porque están desesperados por sentirse involucrados. Asígnale a tu pariente una tarea sobre la que tenga el control por completo. Si le das un propósito, podrás mantenerlo ocupado y alejado por un momento. [5]
    • Por ejemplo, si un primo tuyo se queja de estar apartado mientras los demás cocinan, pídele que prepare la mesa y organice el área para que todos se sienten.
    Anuncio
Método 2
Método 2 de 3:

Mejorar las interacciones con ellos

Descargar el PDF
  1. Quizás la realidad sea dura, pero tendrás que aceptar a tu pariente difícil. Esto significa que debes dejar de fantasear con que algún día será muy fácil lidiar con él. [6]
    • Acéptalo por quién es, así como las dificultades que surjan en la interacción. Para hacerlo, puedes demostrarle empatía . Evita los juicios y respeta a la persona por lo que es, aunque no concuerdes con ella.
    • Cuando aprendas a aceptar a la persona, quizá te des cuenta de que no es tan difícil lidiar con ella.
  2. Los parientes difíciles tienen una mala reputación. Cuando se aparecen, todos empiezan a lamentarse y a quejarse por sus características negativas. Si te enfocas solo en sus malas cualidades, no podrás ver las buenas. Hasta los peores parientes tienen un lado bueno, así que trata de encontrarlo. [7]
    • Por ejemplo, ¿el gruñón de tu tío Carlos tiene una esposa muy dulce? Si la eligió es porque debe haber algo bueno en él. Quizás tenga un punto débil bajo la superficie. Si pasas más tiempo con él, podrías descubrirlo.
  3. Podrías cambiar la forma de interactuar con un pariente difícil si estableces una intención. Antes de reunirte con él, comprométete contigo mismo a tener una interacción agradable y llevadera. Si lo haces, tu cerebro podría crear formas de lograrlo.
    • Por ejemplo, podrías pensar “El almuerzo con mis suegros será muy grato”.
    • Luego, piensa en algunas formas para asegurarte de que la reunión sea grata. Podrías pensar en algunos temas neutrales para conversar o formular un enunciado positivo que puedas repetir si las cosas empiezan a salir mal. [8]
  4. Los parientes difíciles pueden agotarte muchísimo. Es posible que consuman una gran cantidad de tu energía y te quedes con muy poco para cuidarte. Para contrarrestar ese problema, atiende tus necesidades antes de interactuar con ellos. [9]
    • Por ejemplo, si te quedarás con tus parientes durante el fin de semana, reserva un día relajante en una spa antes de irte. También, asegúrate de comer alimentos nutritivos y descansar lo suficiente.
    • Si es posible, dedica también un tiempo para cuidarte durante la visita. Por ejemplo, si visitarás a tu familia durante una semana, programa una salida relajante a solas. Incluso puedes disculparte y dar una caminata breve por el vecindario para relajarte y aclarar tu mente.
    Anuncio
Método 3
Método 3 de 3:

Distanciarte un poco

Descargar el PDF
  1. Cuando las cosas se compliquen, debes preocuparte por ti. Si te resulta muy difícil lidiar con un pariente difícil, establece tus límites personales . Los límites son restricciones que debes establecer con los demás para proteger tu salud y tu bienestar. Hazle saber a tu pariente cuando sobrepase los límites y aclárale que necesitas un espacio. [10]
    • Por ejemplo, puedes decirle algo así como “Tío Rafael, por favor llámame antes de visitarme. Me agrada mucho verte, pero no siempre es un buen momento para recibir a los invitados y necesito que me avises con anticipación”.
  2. Si tus parientes difíciles siguen sobrepasando los límites, tendrás que hacerlos valer. Según los límites que hayas establecido, puedes decidir por fin defenderte y expresarle tus restricciones a un pariente difícil. [11]
    • Por ejemplo, es posible que un pariente te exija demasiado, así que podrías decirle “Tía Lisa, estoy haciendo mi mejor esfuerzo. De verdad necesito que te retires y me dejes lidiar con el asunto. Controlarme de forma excesiva solo empeorará la situación para ambos”.
    CONSEJO DE ESPECIALISTA

    Klare Heston, LCSW

    Trabajadora social clínica
    Klare Heston es una trabajadora social clínica independiente licenciada que reside en Cleveland, Ohio. Con experiencia en asesoría académica y supervisión clínica, Klare obtuvo su maestría en trabajo social en la Universidad de la Mancomunidad de Virginia en 1983. También tiene un certificado de posgrado de 2 años del Instituto Gestalt de Cleveland, además de una certificación en terapia familiar, mediación, y recuperación y tratamiento de traumas (EMDR).
    Klare Heston, LCSW
    Trabajadora social clínica

    Sé amable pero firme al reforzar tus límites. Klare Heston, trabajadora social, aconseja: "Pídele a tu familiar que deje de comportarse de una determinada forma que te resulte molesta. Dile que no te gusta su comportamiento y que te lastima, pero también deja en claro que te importa como persona".

  3. Si tus parientes te sacan de quicio, puedes tomarte unos días para aclarar tus pensamientos. Esto es completamente aceptable si te resulta necesario para controlar el estrés o disminuir los conflictos. [12]
    • Puedes informarle a tu familia de tus intenciones diciendo algo así como “Todo esto es demasiado para mí y necesito un descanso. Iré a la ciudad durante el fin de semana para aclarar mis pensamientos”.
  4. Si te sientes muy solo como para lidiar con un pariente difícil, puedes contactar a otros familiares. Si formas algunas alianzas, podrás intercambiar ideas y descubrir otras formas más eficaces para lidiar con las dificultades. Además, si otra persona entiende lo que sientes, no te sentirás solo. [13]
    • Por ejemplo, puedes hablar con un hermano y decirle “Necesitaré refuerzos este fin de semana para lidiar con el primo Hugo. ¿Podrías apoyarme?”.
  5. Nadie puede comprender la disfunción en una familia como sus integrantes. Sin embargo, algunas veces es de utilidad salir para expresar tus frustraciones o simplemente distraerte. Además, es posible que las personas externas puedan ver la situación de una forma más objetiva. Busca el apoyo de tus amigos más cercanos cuando necesites relajarte. [14]
    • Pídele a tu mejor amigo que salgan a tomar algo durante una reunión familiar. Anhelarás el escape y podrás hablar con alguien imparcial.
  6. Si tus parientes difíciles representan una amenaza para tu bienestar y tu salud mental, quizás no quede más remedio que ponerle fin al contacto por completo. Si pasas mucho tiempo preocupándote por tus parientes o tratando de solucionar sus problemas, tu vida podría consumirse.
    • Puedes terminar por completo la relación con la persona difícil o simplemente puedes decidir no dejarte arrastrar por el caos que cree. [15]
    • Por ejemplo, si tienes un pariente adicto a las drogas que se rehúsa a recibir ayuda, puedes decirle “Lo siento, pero debo distanciarme un poco por mí y por mi familia. No quiero que mis hijos vivan en este ambiente”.
    • Decide qué forma de romper el vínculo es la mejor para tu situación e infórmales a todos los involucrados sobre tus deseos.
    • No es necesario que el contacto se rompa de forma permanente. Algunas veces, simplemente se necesita un poco de distancia y tiempo para recobrar el equilibrio en la relación.
    Anuncio

Acerca de este wikiHow

Esta página ha recibido 23 037 visitas.

¿Te ayudó este artículo?

Anuncio