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Las personas poderosas son puestas en posiciones de poder por otras personas; sin embargo, eso no significa que permanecen inactivas durante todo el proceso. Para ser poderoso, deberás demostrar las características y acciones comunes a las personas que tienen autoridad e influencia. Posiblemente tengas que convencer a tus amigos para poder influir a las personas .

Parte 1
Parte 1 de 2:

Desarrollar una personalidad poderosa

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  1. Ser poderoso llegará de una forma más natural si te pones en una posición que también se sienta natural. Encuentra algo con lo que te sientas cómodo de hacer, luego ponte en el medio del campo y esfuérzate para llegar al poder desde ahí. [1]
    • En particular, debes tratar de ponerte en roles de liderazgo que te sientas cómodo de mantener, incluso si tales roles no están directamente relacionados con el campo en el que deseas ser poderoso. Por ejemplo, podrías dirigir un grupo pequeño en la iglesia aun cuando no quieras ser poderoso en una oficina.
    • Al ponerte en posiciones de autoridad, puedes desarrollar una personalidad más poderosa. Así, esa personalidad podrás llevarla a otras áreas de tu vida.
  2. Probablemente hayas experimentado momentos de poder en el pasado, incluso si parecen menores en comparación con el tipo de poder que buscas en la actualidad. Cuando sientas que tu determinación empieza a temblar, recuerda esos momentos pasados y pasa un momento meditando sobre la sensación de poder que una vez suscitaste. [2]
    • Los momentos que recuerdes pueden prácticamente tratar cualquier aspecto de la vida. Por ejemplo, puedes elegir un logro académico notable, como graduarte con honores, o incluso un logro personal, como dejar de fumar con éxito. Independientemente de lo que elijas, el punto es enfocarte en la sensación de ser poderoso en vez de hacerlo en el evento real en sí.
  3. Si bien no siempre es cierto, las personas poderosas tienden a utilizar un lenguaje corporal expansivo que ocupa más espacio. Este tipo de lenguaje corporal puede transmitir confianza a otras personas, lo cual puede hacer que te vean como alguien más poderoso. [3]
    • El lenguaje corporal expansivo puede incluir cruzar los brazos, cruzar las piernas para que la rodilla sobresalga, estirar las piernas para que se extiendan más allá del borde de la silla o sostener las manos sobre las caderas.
    • En contraste, demostrarás una postura contraída cuando haces cosas como doblar las piernas debajo de la silla, dejar caer los hombros o sostener las manos a los lados.
  4. Hacerlo requerirá que demuestres valentía y una cantidad considerable de confianza en ti mismo. Si esperas hasta que tengas el poder para respaldar tus reclamos, es probable que esperes indefinidamente. [4]
    • No tengas miedo de hacer cambios o correr riesgos dado que incluso si tienes miedo debes actuar como si no lo tuvieras. El poder funciona en un ciclo. Cuando los demás te ven como alguien poderoso, te tratarán de forma natural como si fueras una persona poderosa, incluso hasta el punto de otorgarte un poder que no tenías antes.
  5. Recuerda lo que quieres y ve tras ello, independientemente de si los demás están de acuerdo o no. Con el mismo objetivo, nunca sigas un curso de acción solo porque es lo más popular de hacer.
    • Cuando sigas tu propio camino, no lo transmitas de forma constante. Si lo haces, parecerá que buscas aprobación, lo cual te pondrá en una posición menos poderosa de la que buscas ante los demás.
  6. No tengas miedo de pensar con originalidad y romper algunas reglas menores o convenciones sociales. La innovación con frecuencia requiere un acto de fe. Además, violar de forma discreta una convención menor también puede sugerir a los demás que eres una persona lo suficientemente poderosa como para conseguir lo que quieres. [5]
    • La clave es entender las reglas que se deben mantener y las que se pueden romper. No hay una única forma de definir cuál es cuál, ya que cada conjunto de circunstancias puede variar drásticamente; no obstante, como regla general, solo rompe una regla que debe romperse. Busca áreas que se podrían mejorar si las reglas actuales se flexibilizan un poco y mira qué puedes hacer para liberarte de las restricciones innecesarias.
  7. Cuando las cosas van mal, no señales con los dedos ni dediques tiempo a pensar en los errores que se cometieron en el pasado. En vez de eso, acepta la responsabilidad de corregir el error en el presente y aprovecha al máximo una mala situación. [6]
    • El fracaso es parte de la historia de vida de todos y las personas poderosas no temen admitirlo. La clave es aceptarlo y trabajar de forma proactiva a fin de corregirlo. En vez de discutir quién tiene la mayor parte de culpa en una situación, puedes demostrar más poder al responder con un simple “Yo me ocuparé de eso”.
  8. Esto incluye tanto el bienestar físico como mental. Si no estás en tu mejor forma, no emitirás una presencia muy poderosa.
    • Cuidar tu salud física es un asunto sencillo. Come bien, haz suficiente ejercicio a fin de mantenerte en forma y consigue el sueño que tu cuerpo necesita para funcionar.
    • Cuidar tu salud mental y emocional puede ser más complicado; no obstante, en general, debe tomarte un tiempo para relajarte y volver a conectarte con las personas y cosas que son importantes para ti. No te enredes demasiado persiguiendo el poder al punto de dejar que la búsqueda te consuma.
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Parte 2
Parte 2 de 2:

Utilizar habilidades sociales poderosas

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  1. En vez de esperar que los demás tomen decisiones, toma esas decisiones tú mismo. Deja a un lado tus dudas y sé directo con tus pedidos y deseos, de modo que así establezcas el ritmo de cada interacción. [7]
    • En vez de pedir permiso para hacer algo, declara tus planes sin pedir confirmación. Incluso si las cosas terminaran de la misma manera independientemente de si hicieras el primer movimiento, declarar primero tus expectativas te permitirá reclamar la posición más poderosa en la interacción.
  2. Para exigir respeto, deberás estar dispuesto a darlo. El tiempo de la otra parte es tan valioso como el tuyo y tendrás que demostrar tu comprensión de ese hecho clave.
    • Sigue la regla de oro: trata a los demás como te gustaría que te traten. No te gustaría que alguien llegara tarde a una reunión y que no te avisara con anticipación, ni te gustaría que le hicieras un favor a alguien y que esa persona ni te lo agradezca. Si alguien que demuestra este tipo de comportamiento pierde tu confianza, probablemente perderá la confianza de otra persona si actúa así.
  3. Una buena comunicación es absolutamente esencial si quieres ser poderoso. No pongas a las personas en la posición de tener que adivinar o preocuparse por lo que sucederá. En vez de eso, bríndales todos los detalles que te gustaría saber si las posiciones cambiaran. [8]
    • Por ejemplo, si investigas algo para alguien y te ha dicho que tienes que dar una respuesta el martes por la tarde, deberás contactar a esa persona antes de esa fecha. Incluso si no tienes la respuesta, tendrás que escribirle e informarle que no lo has olvidado y que todavía tienes la intención de cumplir.
  4. La buena comunicación deja poco espacio para los errores o confusiones. Cuando expliques algo, hazlo de la forma menos confusa posible. Asegúrate de solucionar todos los detalles importantes antes de descartar el asunto. [9]
    • La comunicación detallada es importante si deseas evitar contratiempos y colapsos posteriores. Todos deben estar de acuerdo. Incluso si las cosas van mal, mantener previamente una comunicación clara reducirá la cantidad de acusaciones que resulten de la desgracia, ya que nadie podrá afirmar simplemente que “no sabía”.
    • En particular en los negocios también debes comunicarte por escrito con la mayor frecuencia posible a fin de que los detalles se puedan consultar y revisar fácilmente más adelante.
  5. Trata de no esperar a que alguien te lo pida antes de completar tareas o favores. Si puedes anticipar una futura necesidad antes de que sea urgente, demostrarás un alto grado de aptitud.
    • Por supuesto, existen ocasiones en las que tendrás que esperar las instrucciones antes de actuar. Por ejemplo, si tienes un trabajo nuevo, te tomará tiempo antes de que sepas todo lo suficientemente bien como para actuar por tu cuenta.
    • Lo principal que debes evitar es forzar a las personas a pedirte algo repetidamente. Sin importar qué tan bien completes una tarea, la persona que reciba los resultados probablemente se sentirá frustrada si tiene que recordártelo varias veces.
  6. Lucir ocupado y distraído no te hará ver tan poderoso como podrías pensar, por lo tanto, no te distraigas cuando hables con alguien. Asegúrate de que cada persona con la que hables tenga toda tu atención.
    • En particular, debes dejar de obsesionarte con los mensajes de texto, llamadas y correos electrónicos a expensas de las personas que tienes adelante. La tecnología puede mantenerte en contacto constante con los demás y eso es algo bueno; sin embargo, no puedes depender de ella.
    • Debes reaccionar a todo nivel (mental y emocional) cuando trates con los demás y eso requiere atención y autenticidad.
  7. Si las personas le temen a la idea de trabajar contigo , es probable que rechacen la idea de trabajar para ti . Aprende a aceptar ideas de otras personas y permítete aprender de ellas. Si surge un conflicto, manéjalo de manera justa en vez de arremeter de forma mezquina.
    • En vez de obsesionarte con las fallas de los demás, ayúdalos a superarlas. Asimismo, cuando alguien señale tus propias fallas, acepta la crítica amablemente y aprende a mejorar.
  8. Aun cuando debes tener una reputación positiva con todos los que se cruzan en tu camino, debes prestar atención especial a las relaciones que tienes con las personas que ya ocupan puestos de poder.
    • De hecho, debes buscar personas en puestos de poder de forma activa. Hacer conexiones con las personas adecuadas hará que te sea más fácil ponerte en el camino correcto.
  9. El conflicto es inevitable, por lo tanto, no hay un punto real al querer huir de él. Maneja las cosas de la manera más racional y tranquila posible, pero tampoco temas expresar enojo. En términos de poder, el enojo es al menos mejor que el arrepentimiento o tristeza.
    • Siempre hay un lugar para el perdón y comprensión. Dicho esto, las personas por lo general no buscarán el perdón si estás muy ocupado disculpándote y arrepintiéndote con ellos. Permitir que expreses tu enojo no significa que tengas que ser despiadado; no obstante, significa que tendrás que demostrar que no te pueden mangonear.
  10. Debes tratar de llevarte bien con la mayoría de las personas; sin embargo, al mismo tiempo no podrás complacer a todos. No tengas miedo de ir contra la corriente y de ponerte en el lado malo de alguien. Si siempre te ajustas a las expectativas de los demás, nunca conseguirás ningún poder o prestigio.
    • En general, ser directo sin tirar ningún puñetazo afectará de forma negativa a algunas personas; sin embargo, no puedes permitir que ese conocimiento te impida actuar de la forma en que debes actuar. Sé discreto, de mente abierta y además muéstrate dispuesto a comprometerte según sea necesario. Sin embargo, cuando se trate de empujar, no tengas miedo de pisar algunos dedos de los pies para hacer las cosas de la manera correcta.
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