PDF download Descargar el PDF PDF download Descargar el PDF

A finales de octubre, a medida que se acerca Halloween, las noches asumen un halo especial de anticipación y misterio. Las malas hierbas secas, las hojas y otra vegetación crujen debajo de los pies, e incluso la persona menos supersticiosa podría tratar de esquivar un gato negro en el camino. Afortunadamente, al pintar un gato, tú decides lo feroz, travieso o tierno que va a ser. Añádele calabazas y expón con orgullo la pintura final para ahuyentar todos los miedos a Halloween y los presentimientos que estén en el aire.

Parte 1
Parte 1 de 3:

Bosquejar la escena

PDF download Descargar el PDF
  1. Usa un trozo de papel de calco de 22 × 28 cm (8 ½ × 11 pulgadas) de un bloc. Con lápiz, en el centro de la página, traza un óvalo grande para el cuerpo, un círculo más pequeño para la cabeza y une los dos con un óvalo aplanado para el cuello.
  2. 2
    Termina el gato. Añádele las dos patas y garras delanteras. Dibuja el indicio de patas traseras a ambos lados y una cola que se salga del lado y haga una curva por delante.
  3. Parte la cara con líneas curvas para hacer las líneas directrices para los rasgos. Dibújale los ojos, el hocico y la boca y colócale las orejas.
  4. Es fácil y divertido trazar sus formas, así que coloca uno debajo del gatito como si estuviera sentado delante de ella. Agrega otras dos calabazas más pequeñas, una en cada lado. Agrégale líneas de crecimiento y unos tallos rizados para darles un aspecto fresco del huerto. También puedes convertirla en una linterna de Halloween si le agregas algunos trazos de lápiz. Igual que la expresión facial nos dice cómo nos sentimos, la expresión de la calabaza (feliz, enojada o aterradora), puede expresar mucho el estado de ánimo. Por otra parte, las posibilidades son infinitas.
  5. 5
    Añádele una luna. Encima del gato, dibuja una luna: traza un círculo para una luna llena y, si quieres una luna parcial, traza una forma de medialuna.
    Anuncio
Parte 2
Parte 2 de 3:

Trasladar el dibujo

PDF download Descargar el PDF
  1. Traza allí solo las formas principales y ten pensado perfeccionarlo más tarde. Trasládalo a un trozo de papel de acuarela prensado en frío de 24 × 28 cm (9 ½ × 11 pulgadas) y 300 g/m² (140 libras) sacado de un bloc. Sujeta el bosquejo detrás del papel e hilvánalo con cinta adhesiva sobre una ventana.
  2. Usa un lápiz para copiar las líneas, ya claramente visibles, de la luz que pasa por la ventana para el gato, las calabazas y la luna. Asegúrate de agregar las orejas y la cola al gato.
  3. Piénsalo y, si quieres, prueba el pelo sobre unos pedazos de papel suelto y distintos dibujos: con manchas multicolores con rayas de tigre como un leopardo o un color sólido de pies a cabeza. Presta atención a los ojos del gato, ya que expresan mucho su estado de ánimo. Las orejas levantadas y alegres también significan que está feliz y tranquilo, mientras que las caídas y contra la cabeza significan que está en guardia y dispuesto a enfrentarse al mundo.
    Anuncio
Parte 3
Parte 3 de 3:

Pintar el dibujo

PDF download Descargar el PDF
  1. Es lo que llama la atención y da dramatismo a la pieza. ¿Qué disposición va a tener sobre la página? Lo más probable es que las calabazas sean de unos tonos de naranja, aunque hoy en día las hay blancas, de rayas e incluso con lunares verdes.
  2. Ten pensado tener una amplia gama de colores. Sobre un trocito de papel de acuarela, practica con las combinaciones de colores.
  3. 3
    Piensa en cómo, aplicando la acuarela, las pinceladas que eliges pueden indicar su estado de ánimo. ¿Los colores van a ser llamativos y las pinceladas fuertes y dinámicas? ¿O vas a emplear un toque ligero como una pluma?
  4. 4
    Piensa en si vas a añadirle atrezos. Es posible que sea divertido incluir flores, frutas y verduras, y otras criaturas vivas que se encuentran en el huerto; o murciélagos, ranas, lagartijas, insectos, saltamontes, pájaros, incluso uno o dos ratones confiados.
  5. No hay donde empezar en particular ni ningún orden especial para trabajar. Por lo general, puedes empezar una acuarela realizando una aplicación clara y uniforme para bajar los colores. Estas pinceladas a mano clara, con pintura bien diluida, te ayudarán a establecer la composición. Como los colores son transparentes, es fácil hacerles modificaciones una vez que se seque la capa inferior. Ten presente que la acuarela se seca con un treinta por ciento más de luz que si está fresca. Deja secar bien la primera capa.
  6. 6
    Coloca la obra de pie lejos de ti, y examínala. Ahora es el momento de bosquejar, usando un lápiz, los detalles. Empieza con la cara del gato.
  7. 7
    Pinta el cielo. Da otra capa a toda la pieza. Esta debe acabarse rápidamente y con seguridad, y se notará en los resultados. Por otra parte, déjala que se seque bien.
  8. A veces es bueno esperar hasta el día siguiente para conseguir distancia. Haz las modificaciones y adiciones finales, vuelve a secarlo y retrocede para examinarla. Cuando esté terminada, detente. Es fácil hacer trabajar demasiado la acuarela, así que usa la moderación.
  9. 9
    Colócala en un paspartú, enmárcala y cuélgala muy a la vista para que todos la disfruten. Aunque esta pintura tiene una vida útil corta antes de que se acerque el Día de Acción de Gracias y llame la atención, agrega muchísima vitalidad al cuarto. ¿Quién sabe si incluso podría conjurar a los espíritus maliginos? Ja, ja.
    Anuncio

Consejos

  • Admite tu obra y tu destreza como lo son hoy en día. Es fácil imaginar un estilo más sofisticado pero, con paciencia y trabajo, eso ocurrirá. No te disculpes por tu obra. Es lo que sabes hacer hoy y tiene su propio encanto.
  • No dejes de trabajar, pensar, dibujar ni pintar. Lo que sigue mojando esas pinturas y pinceles es saber que puedes mejorar la pintura o hacerla diferente. Guarda todas las pinturas y, en cosa de meses, verás el crecimiento. Si te desanimas, dale algunos días y vuelve a acabar de emprenderla.


Anuncio

Acerca de este wikiHow

Esta página ha recibido 555 visitas.

¿Te ayudó este artículo?

Anuncio