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Los corsés pueden hacerte pensar en algo anticuado, pero realmente no han pasado de moda. Además de ser unos accesorios atractivos, también proporcionan beneficios de corrección de postura y de soporte. Sin embargo, son un poco difíciles de poner. Comienza atándolo y ajustándolo correctamente para que puedas sentir un corsé más cómodo de lo que jamás te hubieras imaginado.

Parte 1
Parte 1 de 3:

Atar el corsé

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  1. Al comprar un corsé, puede que este ya venga atado. Si este es el caso, no te preocupes por hacerlo a menos que esté mal atado. Debe verse similar a la forma en que se ata un zapato (con X), pero con las cuerdas encontrándose en el centro de la espalda y no en uno de los extremos. [1]
    • Si el corsé ya viene atado, asegúrate de que los cordones se encuentren en el medio. Los dos cordones deben formar una "X" donde se encuentran en el centro de la columna vertebral.
  2. Si tienes un número par de ojales (el orificio donde se coloca el cordón), comienza tirando del cordón hacia arriba a través de la parte inferior de los ojales superiores. Si tienes un número impar de ojales, átalos desde abajo hacia arriba.
    • Los cordones suelen venir con el corsé cuando lo compras. Si no es así, evita usar cinta si quieres tener un corsé bien atado. Debes usar un cordón.
  3. Toma la cuerda derecha y tira de ella hacia el lado izquierdo. Si el primer ojal tiene cordones que salen por la parte superior del orificio, tira entonces hacia abajo a través de la parte superior del orificio en el otro lado. Si el primer ojal tiene los cordones que van hacia abajo en el agujero, entonces tira de los cordones hacia arriba a través de la parte inferior del otro orificio. Repite en el lado izquierdo después de que hayas terminado con el derecho. [2]
    • Mantén los cordones nivelados. Asegúrate de mantener las puntas de los cordones iguales entre sí mientras tiras de estos a través de los ojales.
  4. Con la “X” completa, sigue bajando hasta llegar al centro. Debes terminar con varias “X” alternando entre "encima" y "debajo" del corsé. [3]
  5. Con la sección superior hecha, repite el mismo proceso con la segunda cuerda, pero comienza por el centro. Continúa hasta que llegues a la parte inferior del corsé. [4]
Parte 2
Parte 2 de 3:

Ponerte el corsé

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  1. Sería genial y definitivamente haría las cosas más fáciles si tuvieses a alguien que te ayude a ponértelo. Sin embargo, es posible ponerte un corsé por tu cuenta. Usa un espejo para hacerlo.
    • Es preferible tener algunos espejos alrededor para que puedas ver exactamente lo que estás haciendo.
    CONSEJO DE ESPECIALISTA

    "Para un evento elegante, usa el corsé debajo de un chal o una chaqueta junto con una falda muy larga".

    Stephanie Fajardo

    Estilista profesional
    Stephanie Fajardo es una estilista personal con sede en Portland, Oregon. Stephanie tiene más de 17 años de experiencia en estilismo en consultoría personal, televisión, fotografía y rodajes de películas. Su trabajo ha sido presentado en la revista Esquire y Portland Fashion Week.
    Stephanie Fajardo
    Estilista profesional
  2. El uso diario requeriría algo debajo del corsé. Esto es para absorber la humedad y la suciedad de la piel, evitando que afecte al corsé. Si vas a usar un forro de corsé, consigue uno que sea de algodón u otro material transpirable. Cualquier cosa hecha de licra te hará sudar más. [5]
    • La mayoría de los lugares que venden corsés también venden los forros. También puedes hacer uno si tienes conocimientos básicos de costura, ya que es solamente un tubo.
    • No es necesario usar una prenda inferior si llevarás el corsé como lencería.
  3. El lado con los cordones va en la espalda. El lado con los agujeros y los broches es la parte frontal del corsé. Cuando te estés preparando para ponértelo, la parte frontal del corsé debe estar abierta y los cordones de la parte posterior deben estar cerrados. [6]
    • Si tienes un corsé de bajo busto, distinguir el lado superior o el inferior puede ser difícil. Por lo general, la parte superior de la espalda es más recta que la inferior, pero no siempre es así.
  4. Comienza por cerrar el frente. Es posible que tengas que hacer algunos ajustes. Lo ideal es poder cerrar el frente con bastante facilidad, aunque algo de resistencia es bueno. Lo que no debe pasar es que tengas que respirar profundamente para cerrarlo. [7]
    • A algunas personas les gusta tener que tirar fuerte para cerrarlo. Otras creen que tener la espalda más floja facilita cerrar la parte delantera. Experimenta para encontrar lo que te funcione mejor.
  5. El panel posterior es un rectángulo de tela que muy probablemente estará fijado al lado izquierdo del corsé en la parte de atrás. Cuando te pongas el corsé, asegúrate de que este plano en la espalda y apunte hacia el otro lado del corsé. [8]
    • Desliza el corsé inclinándolo hacia el lado opuesto del panel y girándolo hacia el lado del panel.
    • A medida que aprietes los cordones, es probable que debas volver a acomodar el panel posterior unas cuantas veces.
  6. El frente está formado por las piezas metálicas del corsé con los broches y los agujeros. El corsé ya está listo para ajustarse al frente cerrando los broches. Esto es más difícil de lo que parece. Así es como se hace: [9]
    • Engancha primero el segundo broche desde arriba o el del medio. Simplemente pasa el broche a través del agujero.
    • Aprieta el lado del broche. Ahora, con el pulgar y el dedo índice, aprieta la parte dura del lado del broche.
    • Engancha el resto de los broches.
    • Vuelve a enganchar cualquier broche que haya quedado suelto.
Parte 3
Parte 3 de 3:

Cerrar el corsé

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  1. Los cordones deben estar lo suficientemente apretados como para que el corsé permanezca puesto sin necesidad de ser sujetado. Solo debes juntar los lados y tirar suavemente de los extremos largos del cordón. [10]
  2. Ahora que ya te has encargado de la mayor parte de los cordones, repasa todos los cordones para que queden tan apretados como se pueda. A medida que aprietes, ajusta la tensión de cada “X” para que se mantengan los dos lados derechos y paralelos. Con las “X” apretadas, haz un tirón fuerte final usando las cuatro cuerdas en el centro. Esto te definirá la cintura.
    • Aprieta el centro de las “X” y jálalas hacia afuera, comenzando por los extremos y moviéndote hacia el centro. Esta es la forma más fácil de tensar el corsé para que se ajuste al cuerpo.
    • El corsé quedará tan apretado como la calidad y el ajuste del mismo lo permitan.
  3. Una vez que el corsé esté bien apretado, ata los cuatro cordones en un lazo o un nudo. Puede que queden un poco flojos, pero esto no será un problema. Solo asegúrate de hacer un doble nudo y estarás bien. [11]
    • Si te sobra mucho cordón en las puntas, puedes hacer que se vea mejor dándoles la vuelta alrededor del estómago y luego hacer un lazo o un nudo más pequeño en la espalda.
  4. Ahora que está todo en su lugar, mírate en el espejo. En primer lugar, asegúrate de que sea algo cómodo. El corsé no debe presionarte en los lados, pellizcarte o estar algo más que notablemente firme. Debes ser capaz de respirar. Revisa también los cordones de atrás y fíjate en la forma de la abertura. [12]
    • Un corsé bien ajustado debe tener un espacio en la espalda con lados perfectamente paralelos.
    • Si el espacio es más ancho en la parte inferior o superior, es posible que necesites un corsé a medida. Si hay alguna inclinación en el medio, es probable que necesites un corsé más grande.

Consejos

  • Si tienes una cintura por debajo de los 95 centímetros (38 pulgadas), elige un corsé que sea de 10 a 20 centímetros (4 a 7 pulgadas) más pequeño que tu talla de cintura. [13]
  • Si tienes una cintura por encima de los 95 centímetros (38 pulgadas), opta por un corsé que sea de 18 a 25 centímetros (7 a 10 pulgadas) menos que tu talla de cintura. [14]
  • Los materiales más populares para corsés son el satén, la malla, el algodón, el cuero y el brocado. [15]

Advertencias

  • Debes ser capaz de respirar. Si no puedes hacerlo o te sientes con mucha incomodidad, es posible que lo hayas atado mal o hayas comprado la talla equivocada.

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