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Tener relaciones sexuales después de una sequía larga debe ser emocionante y placentero. Sin embargo, por desgracia, quizás te des cuenta de que volver a la cama con tu pareja es más doloroso que divertido. El dolor durante el sexo puede ser un choque desagradable, pero no es tan poco común. La buena noticia es que puedes hacer algunas cosas para mejorarlo. Este artículo te guiará en cuanto a algunos de los motivos comunes por los que el sexo podría doler después de no tenerlo por un tiempo y lo que puedes hacer al respecto.

  1. Al pasar mucho tiempo sin tener relaciones sexuales, puede disminuir el flujo de sangre a los genitales. [1] Si tienes vagina, un mayor flujo de sangre allí abajo implica una mayor lubricación. [2] Si no has tenido mucho sexo u otro tipo de estimulación últimamente, quizás te resulte más difícil lubricarte.
    • Si la sequedad es un problema para ti o para tu pareja, podrías usar un lubricante a base de agua (por ejemplo, K-Y Jelly o Astroglide). Esto podría ser de ayuda para reducir tu nivel de dolor y hacer que el sexo sea más placentero para los dos. [3]
    • Asimismo, la lubricación apropiada ayudará a mantener un equilibrio saludable de pH en la vagina y evitar las infecciones dolorosas. [4]
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  1. Si estás con una pareja nueva o si tú y tu pareja de largo plazo no han tenido sexo en un tiempo, quizás tengas un poco de tensión. La tensión o la ansiedad pueden hacer que el sexo sea incómodo o incluso doloroso. [5] Si tienes nervios, transmíteselo a tu pareja. Tómenselo con calma y dile si puede hacer algo para ayudar a que te relajes más. Asimismo, podrían hacer algo relajante antes de tener sexo. Por ejemplo:
    • respirar profundamente, meditar o hacer un estiramiento ligero
    • pedirle a tu pareja que te dé un masaje íntimo
    • tomarse el tiempo de acurrucarse y abrazarse antes de ponerse pícaros
    • escuchar música romántica relajante para ponerse de humor
    • tomar una ducha o baño caliente
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Falta de juego previo

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  1. Si tienes vagina, también incrementará la lubricación de forma que no esté dolorosamente seco allí abajo. [6] Antes de ponerse a ello, tómate el tiempo de juguetear con tu pareja y ponerse de humor. Experimenta con tu pareja para encontrar el tipo de juego previo que te funcione mejor. Por ejemplo, pueden hacer lo siguiente: [7]
    • besarse y tocarse íntimamente
    • compartir fantasías o decirse obscenidades
    • ver juntos algo que a los dos les resulte excitante
    • usar vibradores u otros juguetes sexuales
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"Bolas azules" o "vulva azul"

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  1. Si tienes pene y testículos, quizás hayas experimentado el dolor de las "bolas azules", una sensación de dolor en los genitales ocasionada por excitación sexual sin liberar. Las personas con vagina tampoco son inmunes a este tipo de incomodidad. El mayor flujo de sangre hacia los genitales al excitarte puede ocasionar inflamación y dolor en la vulva y el clítoris, conocido como "vulva azul". [8] Por fortuna, estos problemas no son serios y tan solo son temporales. Puedes aliviarlos de las siguientes formas:
    • masturbarte o usar un juguete sexual para tener un orgasmo
    • tener sexo con una pareja
    • descansar y esperar a que la excitación pase de forma natural
    • distraerte con una actividad que no tenga relación con el sexo
    • usar una compresa fría en los genitales o darte una ducha fría
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Posiciones incómodas

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  1. Por ejemplo, la posición del perro puede ser dolorosa si tienes problemas en las rodillas, un cuello uterino sensible o determinados problemas médicos, como la endometriosis o la enfermedad inflamatoria pélvica (EIP). [9] Asimismo, las posiciones nuevas o desconocidas pueden darte ansiedad, y esto puede ocasionar dolor. [10] Sin embargo, no te preocupes. Si una posición es dolorosa para ti, experimenta con otras hasta encontrar una que te funcione. [11]
    • Por ejemplo, quizás sientas más comodidad haciendo la posición del misionero (el sexo cara a cara), teniendo sexo en la posición de la cucharita o sentándote a horcajadas sobre tu pareja.
    • No olvides que el sexo penetrativo no es el único tipo de sexo. Si no puedes encontrar una posición cómoda, diviértete experimentando con el sexo de otro tipo (por ejemplo, el sexo oral, la frotación de los genitales, el uso de juguetes sexuales o la masturbación mutua). [12]
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Irritación o alergias

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  1. Si bien las alergias por contacto y la irritación son una causa común de dolor en relación con el sexo, pueden ser difíciles de diagnosticar. Si tú y tu pareja usan lubricante, condones, espermicidas, juguetes u otros productos durante el sexo, quizás uno de ellos esté ocasionando la irritación. [13] Si crees que podrías tener una alergia genital por contacto, conversa con tu médico. [14] Él te ayudará a encontrar la causa y elegir una alternativa saludable.
    • Quizás tengas alergia a los aditivos (por ejemplo, tintes, perfumes o sabores) del lubricante, los condones u otros productos que utilices durante el sexo.
    • Si tienes alergia al látex, opta por los condones de otros materiales (por ejemplo, el poliuretano o el intestino de oveja). [15]
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Tensión de la vagina

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  1. Esto ocurre principalmente en las mujeres mayores que han pasado por la menopausia. [16] Algunas personas también experimentan una tensión involuntaria de la vagina durante la penetración, por lo general con relacionada con la tensión o la ansiedad. A este problema se le conoce como vaginismo. [17] Si bien estos problemas pueden ser muy frustrantes, son tratables. Conversa con tu médico si tienes la vagina demasiado tensa como para la penetración cómoda. Quizás te recomiende lo siguiente:
    • usar un dilatador vaginal para ayudar a estirar y relajar suavemente la vagina [18]
    • hacer ejercicios del suelo pélvico para relajar y fortalecer los músculos de la vagina y la pelvis [19]
    • usar cremas para entumecer la vulva o la vagina y aliviar el dolor
    • acudir a un terapeuta para abordar la ansiedad u otros problemas subyacentes que podrían ocasionar la tensión y el dolor vaginal
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Problemas médicos

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  1. Él puede ayudarte a identificar y tratar la causa del dolor. Quizás tu médico quiera realizar algunos exámenes, y es probable que te haga preguntas detalladas sobre tus síntomas, antecedentes de salud y actividad sexual. Estas son algunas causas comunes de dolor durante el sexo: [20]
    • músculos del suelo pélvico tensos o hiperactivos [21]
    • enfermedades de transmisión sexual
    • problemas ginecológicos (por ejemplo, endometriosis, adenomiosis o enfermedad inflamatoria pélvica)
    • problemas psicológicos (por ejemplo, depresión o ansiedad)
    • un desequilibrio hormonal o cambios hormonales naturales en relación con el envejecimiento
    • inflamación en la próstata
    • tensión en el prepucio
    • inflamación o infección en los testículos

Consejos

  • Si bien el dolor durante el sexo es común, no es algo con lo que debes vivir. Si tienes dolor durante el sexo con frecuencia, no dudes en acudir al médico. Quizás sea un poco incómodo hablar sobre estos problemas, pero tu médico está ahí para ayudarte. [22]
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