Es fácil hervir agua y servirla sobre una bolsita de té, pero si quieres una taza de té perfecta, existe un arte para hacerlo bien. Comienza con agua pura y hiérvela, luego viértela sobre tu té elegido y déjalo reposar hasta que el sabor llegue a su deliciosa cúspide. El proceso es ligeramente diferente dependiendo de si estás haciendo té verde, negro, blanco o de hierbas. Mira el paso 1 para comenzar a preparar una infusión.
Pasos
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Selecciona tu té preferido. No existe un límite de los tipos de té que puedes comprar. Elige entre cientos de tipos de té verde, negro, blanco, rojo y de hierbas, cada uno con un perfil de sabor diferente. Puedes comprar té suelto o comprarlo embalado previamente en bolsitas. Elige el té más fresco que puedas encontrar para un mejor sabor y beneficios para la salud.
- Elige un té con las propiedades que estés buscando. Ten en cuenta que el té verde es conocido por sus beneficios a largo plazo para la salud, [1] X Fuente confiable Harvard Medical School Ir a la fuente el té negro provee un pequeño golpe de cafeína y los tés de hierbas podrían utilizarse como remedio para todo desde el insomnio hasta la mala digestión.
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Decide cómo puedes filtrar tu té. Si tu té ha sido previamente empaquetado, tu sistema de filtración ya está establecido. Sin embargo, si tienes té suelto, necesitarás una manera de retirarlo del agua después de remojarlo.
- Puedes comprar tus propias bolsitas de té y llenarlas con té para un solo uso.
- Las bolas de té son otra opción popular. Estas son mejores para utilizar con té negro que con otros tipos de té que tienden a expandirse más durante el proceso de preparación. Para preparar una buena taza de té, el agua necesita ser capaz de fluir libremente a través de las hojas.
- Los cestas infusoras son una buena opción para cualquier tipo de té.
- Puedes servir el agua directamente sobre té suelto y filtrarlo después de que se remoje usando un colador fino.
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Prepara tus accesorios de té. ¿Qué tipo de equipo de té tienes? Puedes hacer toda una tetera de té usando una tetera o haciendo una taza a la vez usando una taza de té y un colador, una bola de té o una bolsita de té. Usa el método que sea más conveniente para tus necesidades. El té y el agua son los dos componentes más importantes de una buena taza de té; el equipo es secundario.
- Dicho esto, tener una linda tetera y tazas bonitas puede sumarse al efecto calmante de beber y disfrutar del té. Beber té ha sido un ritual importante en muchas culturas por miles de años. Puedes mantener esta tradición viva para crear tu propio ritual de té, ya sea preparando una taza a la vez en tu taza favorita o usando una bonita tetera de cerámica con tazas y platillos.
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Usa agua purificada si es posible. Ya que el agua potable contiene fluoruro y otros químicos, usarlo para preparar té puede tener un impacto negativo en el sabor. Aunque el agua potable siempre está bien en un apuro, si quieres el mejor sabor y beneficios para la salud posibles, usa agua mineral u otro tipo de agua pura y filtrada.Anuncio
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Mide tu té. Si tu té viene en bolsitas, está todo listo. Para el té suelto, necesitarás aproximadamente 1 cucharadita por ración de 177 ml (6 onzas) de agua. Usa una cucharita de té para medir la cantidad correcta en tu bolsita de té, bola de té o cesta infusora. Colócala en la taza o tetera que estés usando.
- Ten en cuenta que una ración de 177 ml (6 onzas) es el tamaño estándar de una taza de té. Si estás haciendo suficiente té para una taza grande, tal vez quieras utilizar un poco más.
- Si estás haciendo un té más pesado y denso, como muchos tipos de té negro, puedes utilizar un poco menos de una cucharadita por ración. Para tés más ligeros y voluminosos, como tés verdes y de hierbas, utiliza un poco más de una cucharadita. Después de las primeras tazas que hagas, puedes comenzar a medir tu té al gusto.
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Calienta tu agua hasta que hierva. Mide un poco más de lo que necesites para el té basado en tu tamaño de ración preferida y hiérvela. Sin importar qué tipo de té estés preparando, necesitarás llevar el agua al punto de ebullición como primer paso. Puedes hacerlo rápidamente usando una tetera, pero funciona tan bien como llenar una pequeña olla con agua y hervirla en la cocina a fuego alto. También puedes utilizar un microondas para calentar tu agua en un recipiente adecuado para microondas.
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Precalienta la tetera. Vierte un poco del agua hirviendo en la tetera vacía y sacúdela. Deja que toda la tetera esté tibia al tacto. Deshazte de esta agua e inmediatamente coloca la cantidad correcta de té en la tetera. Colocar el té inmediatamente en la tetera causará que esta se agriete y precalentarla evita esto.
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Vierte el agua sobre el té. Si estás haciendo té negro, sigue adelante y vierte el agua hirviendo directamente sobre el té para comenzar el proceso de remojo. Para el té verde, blanco o de hierbas, sácalo del calor y espera 30 segundos hasta que termine de hervir, luego viértelo sobre el té. Esto previene que las hojas delicadas se cocinen de más, lo que resultaría en un sabor amargo. Si quieres hacer de esto una ciencia exacta, usa un termómetro para tomar la temperatura al agua de tal manera que puedas controlar el sabor del té.
- El té negro se prepara mejor a una temperatura de 95 grados Celsius (203 grados Fahrenheit).
- El té verde se prepara mejor a una temperatura de 74 a 85 grados Celsius (160 grados Fahrenheit) antes de servirlo sobre el té.
- El té blanco debe prepararse a una temperatura de 85 grados Celsius (185 grados Fahrenheit).
- El té oolong se prepara mejor a una temperatura de 95 grados Celsius (203 grados Fahrenheit).
- Los tés de hierbas deben preparase usando una temperatura de 95 grados Celsius (203 grados Fahrenheit).
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Remoja el té. La cantidad de tiempo que remojarás el té depende tanto del tipo de té que estés haciendo como de tu gusto individual. Experimenta para descubrir el mejor tiempo de remojo para tu taza de té.
- El té negro debe remojarse por 3 a 5 minutos.
- El té verde debe remojarse por 2 a 3 minutos.
- El té blanco debe remojarse por 2 a 3 minutos.
- El té oolong debe remojarse por 2 a 3 minutos.
- Los tés de hierbas debe remojarse por 4 a 6 minutos.
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Saca las hojas de té y disfruta tu té. Después de que termine el tiempo de remojo, saca las hojas de té. Tu té debe estar lo suficientemente fresco para beberlo. Disfrútalo solo o con miel, leche o azúcar.Anuncio
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Prepara té helado . El té helado se prepara al hacer un té muy concentrado, luego añadiendo agua y hielo para enfriarlo. Para hacerlo, necesitarás duplicar la cantidad de hojas de té por ración. El té helado es un refrigerio maravilloso en un día caluroso y puede prepararse con cualquier tipo de té. Los tés de hierbas y de frutas saben particularmente deliciosos helados.
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Prepara té al sol . Esta es una manera divertida de preparar té usando el calor natural de los rayos de sol. Coloca un contenedor de agua y té afuera bajo el sol brillante por varias horas, permitiendo que se remoje lentamente. Una vez que el té esté lo suficientemente fuerte, puedes sacar las bolsitas de té y colocar el hielo.
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Prepara té dulce estilo sureño . Encontrarás esta variante en cada restaurante sureño. El té negro se prepara fuerte, luego se endulza con bastante miel y limón y se sirve sobre hielo.
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Prepara un ponche caliente con té . Si tienes dolor de garganta, combinar los poderes curativos del té con el efecto calentador del whisky puede ayudar a aliviar la inflamación. Prepara una taza de tu té favorito perfectamente remojado, luego añade un trago de whisky. Endúlzalo con miel y bébelo lentamente a sorbos.Anuncio
Consejos
- Añade hojas de té usadas a tu abono.
- Cuando prepares té, haz suficiente para que dure 1 a 2 días. Es mejor deshacerte del té más viejo.
- Para el té helado, prepara el té por 2,5 minutos. Permite que el té se enfríe completamente antes de agregar el hielo para evitar que el té se enturbie.
- Algunos conocedores de té sugieren remojar el té por más tiempo del necesario para extraer sabores. Ten en cuenta que esto podría resultar en la extracción de taninos, que son sustancias contenidas en el té que provocan que el té remojado tenga un sabor amargo.
Cosas que necesitarás
- Tetera
- Accesorios de té
- Método para colar
- Té
- Agua filtrada
Acerca de este wikiHow
Para preparar una infusión, primero mide las hojas de té que vas a usar. Usa 1 cucharadita de hojas de té sueltas o 1 bolsita de té por cada taza que vayas a preparar. Después de medir el té, échalo en la taza donde lo beberás. Luego, pon a hervir un poco de agua y viértela en la taza sobre las hojas de té. Deja que se concentre de 3 a 6 minutos, dependiendo de lo fuerte que quieres que quede. Cuando termine de concentrarse, ¡tira las hojas y disfrútalo! Si quieres más consejos como, por ejemplo, para hacer té helado, ¡sigue leyendo!