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En lo que concierne a armar una producción de teatro, el papel del productor es distinto, pero no menos importe que el del director. Los productores por lo general están a cargo de las labores financieras, administrativas y logísticas de una producción, aunque también pueden aportar en el aspecto creativo del proceso. ¡Lee los pasos a continuación para aprender a producir tu propia obra de teatro!

Parte 1
Parte 1 de 2:

Planificación y organización

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  1. Tú, el productor, eres la primerísima persona que iniciará el proceso de crear una obra. Antes de que pueda suceder cualquier otra cosa, tú (o tu equipo o ambos) debes decidir qué obra producir . Podrías decidirte por un clásico del teatro como Los miserables , Muerte de un viajante , Miss Saigón o Un lunar en el sol , obras muy conocidas como estas tienen producciones con frecuencia, incluso décadas después de su debut. Sin embargo, también podrías decidir debutar con una obra nueva. Si este es el caso, deberás darle mucha importancia a buscar guiones de calidad de escritores talentosos, a quienes puedas encontrar en una variedad de lugares como universidades, compañías de teatro o a través de un agente o editor.
    • Ten en cuenta que las obras son propiedades intelectuales y, como tales, a menudo tendrás que pagar regalías para poder usarlas. Asegúrate de contactar al escritor, su agente o al dueño de los derechos si el guion que has elegido no es de dominio público.
  2. El director es el "jefe" de la obra en lo que concierne a las decisiones creativas. Él dirige a los actores cuando ensayan, tiene la palabra final en las decisiones estéticas como el diseño de la utilería y de la escenografía, y al final será quien reciba gran parte de la gloria (o desprecio) que la obra genere tras ser estrenada. El productor es el responsable de encontrar un director apropiado para la obra. Este puede ser un amigo, un socio profesional o alguien que recién empieza y muestra mucha potencial. Sin embargo, ten en cuenta que el director siempre podría declinar la invitación a dirigir o intentar negociar una tarifa más alta. Como productor, es tu trabajo encontrar directores de reemplazo o participar en las negociaciones conforme sea necesario.
    • Algunos productores también asumen el papel de director. Esto es una gran carga de responsabilidad para una sola persona, así que sé cauteloso respecto a tomar este doble papel a menos que tengas mucha experiencia.
  3. Una de las funciones más importantes del productor es pagar por la obra. Si tienes los recursos suficientes para pagar toda la obra tú mismo, podrías elegir ser su único financiador. Sin embargo, muchas obras reciben financiamiento de un grupo de inversionistas, personas adineradas que esperan cobrar un porcentaje de las ganancias. En este caso, es tu trabajo como productor hacer una "propuesta de venta" de la obra a los inversionistas, sin importar si son tus amigos personales o desconocidos ricos, en un intento por conseguir que acepten pagar por ella.
    • También es tu trabajo mantener felices y al día a estos inversionistas a lo largo de la producción, notificándoles de cambios de producción, nuevas proyecciones de venta y cosas por el estilo.
  4. Las obras necesitan un espacio físico para los ensayos y las presentaciones. Como productor, tu trabajo es conseguir este espacio para tu producción. Este local debe albergar los aspectos técnicos de tu producción (en términos del tamaño del escenario, sistema de sonido, etcétera) y debe tener el tamaño suficiente para alojar a tu audiencia proyectada. Otros aspectos que quizás debas considerar son:
    • El costo de usar el local. Diferentes locales tienen diferentes reglas sobre cómo repartir las ganancias de las entradas y cosas por el estilo.
    • Si el local provee su propio equipo de empleados (recolectores de entradas, etc.).
    • Si el local proporciona o no un seguro de responsabilidad.
    • Las cualidades estéticas y acústicas del local.
    • La historia del local.
  5. Toda obra necesita un elenco, incluso los unipersonales. Si tienes buenos contactos, podrías tener algunos actores en mente para ciertos papeles en tu producción, en cuyo caso podrías contactarlos directamente para ofrecérselos. Si no, deberás programar audiciones. Asegúrate de publicitar estas audiciones para que los actores potenciales sepan dónde y cuándo estar para intentar conseguir un papel en tu producción.
    • Concentra tus esfuerzos promocionales en lugares donde es probable que se reúnan actores como compañías de teatro, escuelas de arte y grupos con los que probablemente estén en contacto con agencias de talento.
  6. Los actores no son para nada las únicas personas que trabajan en una obra. Los tramoyistas, técnicos de iluminación y sonido, diseñadores de vestuario, coreógrafos e innumerables miembros más del personal de apoyo colaboran para hacer una producción exitosa. Como productor, tendrás que supervisar la contratación del equipo de apoyo, aunque no necesariamente los dirigirás en sus tareas diarias, pues esto por lo general se delega a distintos administradores.
    • Ten en cuenta que, si bien muchos locales proporcionan su propio equipo de trabajadores para la entrada, boleterías y sala, algunos no lo hacen y en estos casos tendrás que contratarlos por tu cuenta, además de los demás miembros del equipo.
  7. Por lo general, el director tiene la última palabra en lo que concierne al elenco, pues él es quien trabajará con los actores para crear el producto final. Sin embargo, dependiendo de tu relación con el director, tu opinión podría tener peso en el proceso de selección del elenco, especialmente si ya has trabajado en los aspectos creativos de la producción teatral.
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Parte 2
Parte 2 de 2:

Hacer la puesta en escena

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  1. Las obras requieren mucha preparación y ensayos para estar listas y presentarse en frente de una audiencia. Colabora con el director para establecer un programa riguroso pero razonable que gradualmente incremente en intensidad conforme se acerque la noche de estreno. Ten en cuenta el precio, la disponibilidad del espacio para practicar y las fechas de los demás eventos que se vayan a realizar en el local de tu elección. Algunos recursos informativos de teatro recomiendan programar cuando menos 1 hora de ensayo por cada página en el guion. [1]
    • Asegúrate de reservar tiempo al final de tu programa de ensayos para realizar ensayos técnicos y cuando menos un ensayo general. Los ensayos técnicos les dan a los actores, al director y al equipo técnico la oportunidad de recorrer la obra completa y arreglar cualquier problema en el aspecto técnico de la producción: luces, sonido, vestuario y efecto especiales. Los ensayos generales consisten en realizar la obra en su totalidad como si una audiencia estuviese viendo sin descansos ni interrupciones. Por ejemplo, si un actor se olvida de su parlamento, la obra debe continuar como lo haría en una presentación real.
  2. Algunos locales tienen seguro de responsabilidad en sus producciones teatrales, otros no. En caso de que algún actor o miembro de la audiencia se lastime durante la obra, los paquetes de seguro de responsabilidad cubren el costo, protegiéndote a ti y al local de pagarlo de sus bolsillos. Por ende, te recomendamos tener seguro de responsabilidad en la mayoría de las producciones, especialmente las que tengan muchas acrobacias, pirotécnicos y cosas por el estilo.
  3. Hacer utilería, escenografías y vestuarios especialmente diseñados puede demorar mucho. ¡La construcción de escenografías particularmente complicadas; por ejemplo, podría tener que iniciarse incluso antes de que los actores empiecen a ensayar! Como productor, tendrás que contratar, coordinar y delegar diseñadores y técnicos para que le den vida a tu obra.
    • Si tu producción cuenta con poco capital, no necesariamente tienes que crear de la nada todos los aspectos físicos de tu obra. Podrías, por ejemplo, organizar una búsqueda de ropa vieja y pasada de moda como una fuente de vestuario. También podrías pedir voluntarios en la comunidad local para que te ayuden a construir tus escenografías. El teatro puede ser una excelente oportunidad para unir a tu comunidad con un propósito divertido y entretenido.
  4. Por lo general, las producciones teatrales no se presentan una sola vez. Las producciones de gran envergadura en teatros famosos pueden presentarse muchas veces a la semana durante meses, pero incluso las producciones más pequeñas suelen tener un "recorrido" teatral que consiste en varias presentaciones. Como productor, tendrás que decidirte por un programa de presentaciones que tenga en cuenta los días feriados, los compromisos de tu equipo y las fuerzas de mercado como las temporadas de mayor y menor asistencia al teatro y cosas por el estilo.
    • Intenta presentar tu obra por todo el tiempo que creas poder vender suficientes boletos para generar ingresos. Si la obra agota los boletos, tienes la posibilidad de agregar presentaciones extra.
  5. La publicidad es parte esencial del trabajo del productor y quizás sea el factor más importante para determinar si tu local estará repleto el día del estreno. Deberás correr la voz sobre tu obra con todos los métodos dentro de los límites de tu presupuesto. Podrías, por ejemplo, comprar una pauta comercial en radio y televisión, alquilar un panel comercial o distribuir volantes en las universidades locales. Dependiendo de la envergadura de tus recursos de publicidad, el dinero que gastes en el presupuesto publicitario de tu producción puede variar de insignificante a enorme.
    • No todas tus opciones promocionales cuestan dinero. Si puedes atraer a un periódico o canal de noticias local a tu producción para que realice un reportaje o nota, obtendrás publicidad gratis. Además, Internet ofrece muchas opciones promocionales sin costo pues las redes sociales y el correo electrónico son completamente gratis.
  6. Tus labores como productor no terminan después de la noche de estreno. Si bien debe quedar poca, si es que alguna, preparación o planificación, aún seguirás siendo el principal responsable de casi todos los aspectos de la producción de la obra. Prepárate para resolver los problemas conforme aparezcan. Podrías tener que coordinar la reparación o el reemplazo de utilería con desperfectos, eliminar conflictos de programación reprogramando presentaciones y cosas por el estilo. Le conviene a tu obra tener una trayectoria sin baches ni problemas, así que no asumas un papel inactivo después de su estreno.
    • Como hemos indicado anteriormente, algo que casi siempre tendrás que hacer es mantener a tus inversionistas al día en el estado de la obra, particularmente con respecto a su éxito financiero. Quizás esperen que les presentes informes financieros, lo que puede ser una experiencia estresante si la obra no genera dinero.
  7. Cuando tu obra empiece (esperemos) a generar ganancias con la venta de entradas, tendrás que empezar a pagarle un porcentaje del dinero ganado a los inversionistas financieros. A menudo, el local pedirá un porcentaje considerable de la venta de las entradas. Como productor, estarás a cargo de distribuir el dinero que ganes de manera que llegue a las manos correctas. Sin importar si tu obra genera ganancia o no, también tendrás que asegurarte de que a tus laboriosos actores y equipo de producción les paguen lo que se les debe.
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Advertencias

  • Tus actores, equipo técnico y actrices podrían no hacer exactamente lo que quieres que hagan. Trata de ayudarlos, pero recuerda que a nadie le gusta un director constantemente quisquilloso.
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