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Los jerbos pueden dar de todo, desde un mordisco juguetón hasta un rasguño o una mordida grave. Si el tuyo muerde o araña, lo mejor que puedes hacer es reaccionar con calma. Los jerbos pueden leer las emociones y si el tuyo cree que tienes miedo o estás asustado, se puede poner nervioso y atacar de nuevo. Para evitar problemas en el futuro, siempre mantén la calma al estar con tu mascota y dale tiempo para acostumbrarse a ti antes de sujetarlo demasiado.

Método 1
Método 1 de 2:

Responder de inmediato a una mordida o rasguño

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  1. Si tu mascota se vuelve agresiva (muerde o araña), sóplale en la cara. Al jerbo le desagrada esto y dejará de morder o arañar. [1]
    • Esta misma técnica funciona si solo te mordisquea.
  2. Las mordidas pueden ser dolorosas, especialmente si te cortan la piel. Tu primer pensamiento podría ser el de retroceder. Sin embargo, esto puede hacer que el jerbo, de hecho, quiera morderte de nuevo. Es mejor guardar la calma. [2]
    • Los jerbos no muerden porque sean malos. Morder es, normalmente, una señal de que el jerbo está asustado. Gritar o estremecerte puede asustarlo más y es más probable que te muerda de nuevo.
    • Los jerbos son buenos para leer las emociones. Pueden sentir si tienes miedo o estás asustado, lo que los pone nerviosos.
  3. Cuando un jerbo mordisquea, puede cerrar sus mandíbulas con un solo movimiento. Esto no será tan doloroso ni dañino como una mordida, aunque aún puede doler un poco. Si te mordisquea es una señal de que quiere que dejes de hacer algo. Déjalo en paz y se detendrá. [3]
    • Por ejemplo, el jerbo podría mordisquear si lo estás sosteniendo y quiere que lo sueltes.
    • También puedes soplarle si lo hace, pero asegúrate de dejar de hacer lo que está molestando a tu amigo peludo.
    • Un mordisco es el movimiento repetitivo al masticar y no duele. No confundas mordiscos con mordidas.
  4. Los jerbos pueden tener gérmenes al igual que cualquier otro animal. Para disminuir el riesgo de infección, asegúrate de lavarte la herida con un jabón antibacterial y agua tibia lo antes posible. Esto es especialmente importante si la piel está cortada. [4]
    • Cubre un corte leve con un ungüento antibacterial y una venda después de haberte lavado.
    • Si ves señales de infección (pus, enrojecimiento, calor), llama a un doctor de inmediato.
    • Es poco probable que un jerbo mascota tenga rabia, pero debes vacunarte por si acaso.
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Método 2
Método 2 de 2:

Evitar más mordidas y rasguños

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  1. Los jerbos se pueden asustar y morder o arañar si los levantas sin advertencia. Acercarte lentamente, háblale con una voz calmada y tiéndele la mano. Si el jerbo parece calmado, puedes levantarlo. [5]
    • No tomes al jerbo de manera rápida ya que esto puede volverlo agresivo.
    • Sostenlo lo suficientemente firme para que no se caiga, pero no tan fuerte como para aplastarlo.
  2. Los jerbos podrían volverse agresivos si tus manos huelen a otro jerbo. Igualmente, si tienes comida en las manos, este podría comenzar a mordisquearte. Lavarte las manos antes de tocarlo evitará que te muerda o arañe. [6]
  3. Comienza por sentarte cerca de la jaula para que el jerbo sepa quién eres. Puedes leerle o hablarle para que se acostumbre a tu voz. Después de unos cuantos días, dale un premio, como semillas de girasol por entre las barras. Deja que se acerque a tu mano para comer. [7]
    • Con el tiempo, el jerbo sentirá menos miedo de ti. Pronto, podrás darle un premio con la mano abierta o este podría saltar voluntariamente a tu mano para que lo sostengas.
  4. Algunos jerbos muerden por miedo hasta que te conocen bien. Usa guantes al agarrar al tuyo, háblale de manera suave y dale premios. Con el tiempo, notarás que deja de morder los guantes. Cuando parezca calmado contigo, intenta levantarlo sin usar los guantes. [8]
    • La mayoría de los jerbos tienen el hábito de arañar, pero si el tuyo lo hace, los guantes evitarán que te lastime.
    • Los guantes de cualquier material servirán, siempre y cuando sean lo suficientemente gruesos para evitar las mordidas y los rasguños.
  5. Si tienes un jerbo que constantemente muerda o arañe, puede ser mejor solo evitar levantarlo. Puedes conseguir otro jerbo para que tenga con quien jugar y usa guantes cuando tengas que levantarlo. [9]
    • Si tienes un jerbo que tenga el hábito de atacarte la mano, también puedes tratar de dejarlo saltar en tu brazo en lugar de levantarlo y tomarlo con las manos. Podría sentirse más cómodo de esta manera.
  6. Algunos jerbos atacan porque están enfermos. Si no puedes ver una razón clara del comportamiento de tu mascota, llévalo al veterinario para que lo examine y ver si existe una causa subyacente. [10]
    • Cualquier enfermedad podría ocasionar que el jerbo se vuelva agresivo. Si el comportamiento está acompañado de diarrea, cambio en el peso, pérdida de pelo, problemas en la piel o falta de actividad, es muy probable que esté enfermo.
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