Descargar el PDF Descargar el PDF

Es hora de que hagas un cambio , ya sea de carrera o simplemente un reto nuevo. El procedimiento para renunciar es muy simple: da el aviso, preferiblemente por adelantado, pero si no quieres cerrarte las puertas y crear obstáculos para futuras oportunidades, deberás tener especial cuidado y ser considerado. Renunciar es fácil, pero renunciar con gracia no lo es. El presente artículo cubre específicamente varias maneras en las que una persona puede hacer que su renuncia sea lo más tranquila y con la menor cantidad de rencores posible.

Parte 1
Parte 1 de 3:

Escoger el momento correcto para renunciar

Descargar el PDF
  1. La mayoría de gente entrega su renuncia cuando está exhausta y siente que ya no puede trabajar más en ese lugar. Esa sensación de cansancio a menudo causa una reducción de la productividad. Si bien es una sensación comprensible, deberás dar tu mejor esfuerzo en tu último proyecto. Quizá quieras una recomendación de tu jefe en el futuro (o hasta podrías querer trabajar con él o ella nuevamente). Lo mejor será que te recuerden como un empleado trabajador que dio todo de sí mientras estaba en la empresa. [1]
    • Ten conocimiento de cualquier tipo de beneficio que podrías gozar. Si estás a punto de que te despidan, podrías recibir un paquete por indemnización de despido o la opción a recibir beneficios por desempleo. Estos podrían serte muy útiles si no te has asegurado con un empleo nuevo. Renunciar a un puesto de trabajo podría hacerte no apto para recibir algo. En algunos casos, sería mejor recibir estos beneficios mientras buscas tu próximo empleo.
  2. Si quieres irte bajo los mejores términos posibles, no dejes a tu jefe a la buena de Dios, haciendo malabares para llenar tu puesto. Comunícaselo por lo menos dos semanas antes (o envía el aviso mínimo especificado en el contrato de tu jefe si es aplicable) para que tu jefe pueda conseguir un reemplazo o para que tenga tiempo para capacitarlo. [2]
    • Aunque tu contrato no especifique un tiempo de aviso específico, deberás comunicárselo con 2 a 3 semanas de anticipación por cortesía. Si lo haces con menos de dos semanas de anticipación, es probable que tu jefe no tenga un reemplazo adecuado; si lo haces con más de tres semanas, tu jefe se preguntará por qué sigues allí.
  3. Una vez que hayas tomado tu decisión, no se lo cuentes a todo el mundo hasta que llegue a oídos de tu supervisor. Piensa con anticipación (como un general) y ten presente que el conocimiento es poder.
    • Dale tiempo a tu jefe o a tu supervisor para absorber y procesar la información. En el caso de que la empresa te haga una contraoferta atractiva, sería una situación incómoda haber anunciado tus planes a tus compañeros de trabajo.
    • Averigua cómo tendrás que comunicar tu partida al resto del personal después de haber hablado con tu jefe. Es probable que tu jefe envíe un correo electrónico a toda la empresa o te pida que lo hagas tú. No hables sobre tu partida con nadie antes de hacerlo con tu jefe.
  4. Hacerlo será algo respetuoso y considerado de tu parte, además tu jefe y tus colegas de seguro te lo agradecerán. Termina los proyectos pendientes y prepara guías para la persona que te reemplazará. Considera la posibilidad de crear un archivo que explique el punto en donde hayas dejado algún proyecto a largo plazo y demás datos esenciales que tu reemplazo pueda necesitar sobre aquello en lo que estabas trabajando. Asegúrate de que todas las capetas estén en orden, estén etiquetadas y sean fáciles de ubicar, porque no querrás que tus colegas te llamen desesperadamente después de que te hayas ido de la empresa diciéndote que no encuentren una de las carpetas. [3]
    • Este punto será muy importante si trabajas en un equipo. Después de haber dado el aviso de dos semanas, conversa con tu equipo sobre quiénes se harán cargo de cierta tareas hasta que encuentren tu reemplazo.
    Anuncio
Parte 2
Parte 2 de 3:

Redactar la carta de renuncia

Descargar el PDF
  1. Nunca escribas nada descortés, derogatorio o malintencionado. Podrías tener que ponerte en contacto con tu jefe después (incluso podrías terminar trabajando con él o ella en el futuro), así que lo mejor será redactar una carta respetuosa. De lo contrario, tus palabras secas y desagradables podrían regresar a asecharte. [4]
    • El siguiente es un ejemplo de lo que no deberás escribir: “Sr. Álvarez: renuncio porque odié trabajar aquí. Usted es feo y estúpido. También me debe $3000 de vacaciones y permisos por enfermedad. Usted es de lo peor. –Antonio”.
  2. Redactar una buena carta de renuncia. Hay varios detalles que diferencian las buenas cartas de las cartas excelentes. En la tuya, tendrás que seguir los consejos que te brindaremos a continuación:
    • Una carta de renuncia estándar será algo así: “Estimado Sr. Álvarez: Ha sido un honor trabajar para Engranajes Siderales S.A. Por el presente le notifico que estaré retirándome de la empresa pues me han ofrecido un nuevo empleo en otra institución a partir del [una fecha de dos semanas COMO MÍNIMO desde la fecha de la conversación y la carta]. Le ruego que acepte mi agradecimiento por nuestro trabajo juntos y les deseo lo mejor a usted y a toda la empresa para el futuro. Atentamente, Antonio Paredes”.
  3. Si llamabas a tu jefe por su nombre, dirígete a él de la misma manera. No habrá necesidad de parecer muy formal si tú y tu jefe se llamaban por sus nombres. Además, usar su nombre le dará a la carta un toque amigable que podría aliviar un poco el impacto.
  4. A veces, las empresas ofrecerán contraofertas ante la renuncia de un empleado. Si estás seguro de que quieres irte de la empresa, asegúrate de dejarlo perfectamente en claro.
    • Escribe algo como “Presento mi renuncia como [tu puesto de trabajo] que se hará efectivo el [fecha que tienes pensado que sea la última]”.
  5. Aunque hayas odiado cada segundo de tu empleo, procura mencionar algo elogioso, algo como “Siento que he aprendido muchísimo del mundo de las galerías de arte” (aunque tu intención sea “He aprendido muchísimo sobre el mundo de las galerías de arte y nunca jamás volveré a ser parte de él”).
  6. No te jactes, pero menciona algunos proyectos en los que hayas trabajado y lo mucho que te enorgullecen. Será importante hacerlo porque tu carta será archivada junto con cualquier comentario negativo que tus superiores podrían agregar a tu carpeta. Mencionar tus logros te ayudará si alguna vez postulas a un empleo que pase por el mismo departamento de RR.HH., pues leerán tu carpeta y tus logros serán una de las cosas que notarán primero.
  7. Menciona lo agradecido que estás de haber tenido la oportunidad de trabajar en esa empresa y lo mucho que valoras sinceramente a todos los que trabajan allí (incluido tu jefe).
    • Decir algo como “Nunca hubiera podido ir tras mi sueño de convertirme en un escritor prolífico sin el entendimiento sobre la industria del mundo editorial que he ganado gracias a la oportunidad de haber trabajado en esta empresa maravillosa”. Quizá debas agradecerle a tu jefe directamente y agregar los nombres específicos de quienes estimas.
  8. Ten una copia de tu carta de renuncia a la mano cuando vayas a hablar con tu jefe. No deberás enviársela por correo electrónico, pues se considera poco profesional. Imprímela y entrégasela personalmente a tu jefe cuando te reúnas con él o ella para hablar sobre tu renuncia.
    Anuncio
Parte 3
Parte 3 de 3:

Reunirte con tu jefe

Descargar el PDF
  1. También podrás asomar tu cabeza y pedirle un momento de su tiempo, solo respeta el hecho de que tu supervisor tiene trabajo qué hacer y tal vez no pueda dejarlo todo en el momento preciso en que tú estés preparado para darle la noticia. Sino también podrías pedirle que te dé una cita para el día siguiente. De esta manera, podrá organizarse mejor para centrarse en tu anuncio.
    • Si están pasando demasiadas cosas a la vez, solo estarás empeorando su malestar, así que si te es posible, espera el momento en que tu jefe tenga unos minutos libres para enfocarse en tu anuncio.
  2. Ensayar en privado te ayudará a estar listo cuando tu supervisor te llame para hablar. La mayoría de gerentes siempre está extremadamente ocupada y valorará tu acercamiento directo, absteniéndote de la tentación de “amortiguar el impacto”, “encontrar la manera correcta de decirle” o como se dice comúnmente “andar con rodeos”. Podrías decir algo como:
    • ”He estado considerando mis opciones por algún tiempo y he decidido que es hora de pasar a lo siguiente”. Le agradezco mucho las oportunidades que he encontrado aquí, pero debo darle mi aviso de dos semanas de anticipación”.
    • O “Necesito hacerle saber que me ofrecieron un nuevo puesto en otra empresa. Realmente he disfrutado trabajar aquí, pero necesito darle el aviso de dos semanas a partir de hoy. ¿Le parece si mi último día es [el día que caiga después de dos semanas a partir de ese día]?”.
  3. Es posible que después de haber trabajado con tu jefe por algún tiempo y sea cual sea la razón de tu partida, él o ella tal vez tenga algunas preguntas. Prepara una respuesta concisa y comprensible. Si vas a renunciar porque odias tu trabajo, procura enmarcar tu respuesta de manera inofensiva. En lugar de decir “Odio trabajar aquí”, podrías decir: “Creo que es hora de embarcarme en una dirección laboral diferente”. [5]
  4. Es probable que tu jefe te valore más de lo que sepas y te haga una contraoferta. Ser amable y serio en tu carta de renuncia podría hacerlo factible. Tendrás que considerar de antemano si te quedarías en el caso de que te ofrecieran un aumento de sueldo , una mejora de beneficios, un ascenso u otros incentivos.
    • Reunirte con tu jefe sería una buena oportunidad para negociar , así que prepárate y define el mínimo que estés dispuesto a aceptar. Si quedarte sería una opción, ¿qué te haría estar dispuesto a aceptarlo? Pero revisa la sección de advertencias en la parte final del presente artículo porque las contraofertas podrían conllevar desventajas serias.
    • Si te ofrece una contraoferta, asegúrate de solicitar que vaya por escrito y esté firmada. Esas firmas deberán ser preferiblemente de tu jefe y del departamento de RR.HH.
    • Si consideras una contraoferta, evalúa honestamente por qué quieres irte y protégete. Aunque un aumento podría ser algo bueno, tal vez no resuelva otros asuntos que requieran un ascenso (si el avance de tu trabajo ha llegado a estancarse) o un traslado a otro grupo (si tienes conflictos de personalidad con tu jefe).
  5. Enfatiza lo positivo . Sé honesto pero educado. Si el jefe te pregunta si él o ella tuvo algo que ver en tu decisión y en efecto fue un factor, te recomendamos hacer uso del tacto y la diplomacia para dar una respuesta honesta que sea agradable.
    • En otras palabras, no te ayudará en nada decir “Sí, usted es un mal supervisor y yo (o cualquiera ) estaría mejor sin usted", aunque fuera cierto. Podrás decir la verdad sin ser cruel : "Ha sido un factor, pero no es toda la razón. Siento que nuestros estilos y estrategias de trabajo no se adecuan y nunca encajamos tan bien como me hubiera gustado. Aun así, la experiencia en sí ha sido positiva y con esta oportunidad, me emociona tener nuevos retos”.
  6. Recuerda que el objetivo de renunciar con gracia será siempre ponerte en una buena posición con la gente con la que hayas forjado una relación en el trabajo. Si mandas a volar a todos en el que será tu próximo ex-lugar de trabajo, probablemente no te escribirán una buena carta de recomendación o tal vez no te contarán sobre el trabajo en ventas del que les contó un amigo. Tener tacto, ser cortés y listo con respecto a tu partida asegurará de que te des la mejor oportunidad posible para tener éxito en el futuro.
    • Recuerda que algunos jefes no toman bien el hecho de que tú seas el que “decida”. Asegúrate de que realmente puedas darte el lujo de dejar tu trabajo ese día , porque a veces los supervisores se toman muy a pecho el hecho de que uno se vaya, es más te podrían decir que no tienes que avisar nada y darte instrucciones de irte de inmediato. Tú serás el mejor juez de esta situación, así que haz tu mejor esfuerzo para evaluar si tu jefe es una de esas personas, pero ten cuidado, porque a veces simplemente no se puede predecir lo que alguna persona pueda hacer. Vuelve a leer el contrato de empleo, pues deberás tener conocimiento de las opciones de rescisión de la empresa y las tuyas. Si no hay un contrato formal de empleo, familiarízate con las provisiones predeterminadas por las leyes de tu estado o provincia.
  7. Estréchale la mano , sonríe y agradécele a tu jefe. Ya sea que tengas que partir por un traslado, un mejor empleo o solo por alejarte de esa persona, dale una clase de elegancia cuando te retires del lugar.
    • Estréchale la mano, agradécele a tu próximo ex jefe (¡viva!) por “todo” y vete.
    • Ve a tu estación de trabajo y quédate allí por lo menos 10 minutos. Ahora ya puedes aflojar la lengua para contárselo a todos, pero no se lo restriegues a tu jefe en la cara. Ten clase y simplemente confirma que te irás.
  8. Después de informarle a tu supervisor, asegúrate de decírselo personalmente a otros gerentes o empleados clave con quienes hayas trabajado. Dilo de manera que le des las “gracias” a la persona por ayudarte a desarrollarte en tu carrera.
    • Por ejemplo: “No sé si ya lo haya oído, pero renuncié para tomar otro puesto en otra empresa. Antes de irme quería asegurarme de hacerle saber lo mucho que disfruté trabajar con usted”. Estas personas podrían dejar la empresa para tomar otros empleos en el futuro, por lo tanto querrás que te recuerden de manera positiva. Quién sabe si podrán tener algún impacto en el siguiente peldaño de tu carrera.
    Anuncio

Consejos

  • Recuerda que hay muy pocas personas que tienen libertad y personas que no tienen nada que perder, pero no te servirá en el futuro si andas soltando improperios por allí solo porque vas de salida. No te matará ser amable por dos semanas, porque ya te irás y pronto toda la experiencia quedará atrás.
  • El cretino que dejas atrás hoy bien podría ser tu jefe de nuevo o tal vez peor, podría ser tu subalterno en el futuro. Y recuerda también que a veces esos cretinos no tienen idea del hecho de que no caen bien. Si te recuerda como alguien que fue positivo y generoso en el pasado, es posible que estés aceitando los engranajes hacia un futuro grandioso mientras este ex jefe tuyo quien ahora es tu “nuevo jefe” te pone a ti (la cara amigable que él recuerda del pasado) antes que a un extraño en el nuevo puesto. Esto podría facilitar tu traslado a otras oficinas en otra división, a mejores asignaciones y más.
Anuncio

Advertencias

  • Deberás estar físicamente preparado para irte ese día: antes de renunciar, guarda en tu disco o en tu correo electrónico en una cuenta privada todo lo que necesites y a lo que tengas derecho a llevarte como información de contacto de clientes, proveedores u otras referencias; muestras de trabajo; una lista de proyectos en los que hayas trabajado, etc. (recuerda que mucha de la información y otras cosas a las que tuviste acceso mientras eras empleado frecuentemente son propiedad de la empresa. Asegúrate de actuar conforme a lo estipulado en el contrato y la ley antes de tomar este consejo).
Anuncio

Acerca de este wikiHow

Esta página ha recibido 63 495 visitas.

¿Te ayudó este artículo?

Anuncio