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¿Deseas añadir algunas plantas frondosas a tu decoración pero no tienes tiempo para regarlas? Las macetas de autorriego son lo que estás buscando. Absorben toda el agua que necesitan de los depósitos en la base, así que tu único trabajo será volver a llenarlos cuando se vacíen. Son ideales para regar las plantas durante tu ausencia o si tienes una agenda ocupada. Sigue leyendo para aprender cómo funciona una maceta de autorriego y cómo utilizarla para tus plantas.

Cosas que debes saber

  • Coloca las plantas en la sección superior o interior de la maceta de autorriego con una tierra para macetas húmeda.
  • Al utilizar la maceta de autorriego por primera vez, riega la capa superficial para compactar la tierra en las raíces de la planta.
  • Llena el depósito inferior cada vez que esté vacío para regar la planta.
  • Las macetas de autorriego extraen el agua del depósito y la llevan a la tierra. Esta absorbe el agua directamente o a través de una mecha.
Método 1
Método 1 de 4:

Llenar y utilizar una maceta de autorriego

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  1. Fíjate en las piezas que conforman la maceta de autorriego. Localiza un depósito inferior que almacena agua y una maceta con agujeros (o una mecha) que utilizas para plantar la planta. Coloca la maceta por encima del depósito o encájala en su lugar para asegurarla. [1]
    • En algunas macetas de autorriego, el depósito es una maceta exterior más grande y la maceta en la que vas a plantar va dentro de ella.
  2. Puedes utilizar cualquier tierra para macetas estándar. Humedécela con un poco de agua y llena el tercio inferior de la maceta con la tierra. Mantenla suelta y evita compactarla. De ese modo, las raíces de la planta crecerán con facilidad y el agua podrá desplazarse por la tierra más rápido. [2]
    • Para añadir nutrientes y mejorar el drenaje, incorpora 1 parte de composta y 1 parte de perlita a la tierra para macetas.
    • Si la maceta de autorriego tiene una mecha de tela, sostenla hacia arriba mientras la llenas con tierra. Así el agua llegará más arriba en la maceta.
  3. Rompe la tierra alrededor de las raíces de la planta e introdúcela en la maceta. Rellena alrededor de las raíces con la tierra para macetas hasta llegar a 2,5 cm (1 pulgada) por debajo del borde de la maceta. [3]
    • Presiona suavemente la tierra alrededor de la planta pero sin comprimirla por completo. De lo contrario, será difícil que las raíces se establezcan.
  4. Las bolsas de aire en la tierra le impiden hacer el mejor contacto con las raíces de la planta. La primera vez que riegues la maceta de autorriego, riega la tierra de forma directa. Una vez que esté compactada, rellena los puntos bajos de tierra de la maceta con tierra para macetas adicional y vuelve a regarla. [4]
  5. Revisa el depósito de la base de la maceta de autorriego y añade más agua si no está del todo lleno. El depósito suele ser transparente para poder ver el nivel de agua o habrá un medidor de llenado que te indicará la cantidad de agua restante. Llena la maceta de autorriego desde el tubo de llenado que sobresale del costado de la maceta o vertiendo el agua en un pico ubicado en el costado del depósito. [5]
    • Llena la maceta de autorriego cada vez que el nivel de agua del depósito esté bajo. Según la cantidad de agua que necesite la planta, podría ser necesario llenarla cada dos o tres días o una vez cada varias semanas.
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Método 2
Método 2 de 4:

¿Cómo funcionan las macetas de autorriego?

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  1. Si la maceta de autorriego tiene una mecha de tela, la parte inferior de la mecha se asienta en el agua del depósito. La humedad pasa a través de la mecha hasta la base de la maceta y llega a la tierra. Siempre y cuando haya agua en el depósito, la mecha se mantendrá húmeda y mantendrá la tierra húmeda de forma constante. [6]
  2. Algunas macetas tienen una parte que se extiende por debajo de la base y siempre se mantiene en el agua. La tierra lleva el agua hacia las raíces de la planta y las ayuda a crecer más profundamente en la maceta. [7]
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Método 3
Método 3 de 4:

¿Cuáles son los beneficios de las macetas de autorriego?

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  1. Hay plantas que necesitan un riego diario y encontrar el tiempo para hacerlo puede ser difícil si tienes una agenda ocupada. Con una maceta de autorriego, la planta extraerá el agua por sí sola y lo único que deberás hacer es llenarla cuando el depósito esté bajo. [8]
  2. Al regar desde arriba, parte del agua puede evaporarse a causa del sol y secarse antes de llegar a la planta. Una maceta de autorriego riega desde abajo, de modo que la planta solo extraerá la cantidad de agua necesaria. También reducirás el riesgo de riego excesivo, ya que el exceso se drena directamente al depósito. [9]
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    Reducción del riesgo de plagas y hongos. Cuando la capa superficial está húmeda alrededor de la planta, existe un riesgo elevado de formación de hongos y aparición de plagas. Dado que la tierra atrae el agua hacia arriba desde la parte inferior, la capa superficial se mantendrá seca y las plantas se mantendrán saludables durante el periodo de vegetación. [10]
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Método 4
Método 4 de 4:

¿Qué plantas son más adecuadas para las macetas de autorriego?

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  1. Los jardines de hierbas necesitan mucha agua, así que una maceta de autorriego les permitirá tomar toda la que requieren. Planta albahaca, cilantro y menta en estas macetas para poder cultivar un jardín de hierbas en el marco de tu ventana. [11]
  2. Los helechos tienden a secarse al plantarse en macetas, debido a que necesitan mucha agua para su crecimiento frondoso. Por suerte, es posible darles toda el agua que necesitan con una maceta de autorriego grande. [12]
  3. Las begonias son hermosas flores que se desarrollan bien en la tierra húmeda, así que una maceta de autorriego funcionará perfectamente para evitar que se sequen. [13] La maceta también evitará su riego excesivo, lo que es genial ya que son propensas a la pudrición de las raíces. [14]
  4. Las violetas africanas pueden empezar a pudrirse al regarse desde arriba, pero se verán muy bien en las macetas de autorriego que absorben la humedad desde abajo. También se verán hermosas durante todo el periodo de vegetación si correr el riesgo de enfermedades. [15]
  5. Las lenguas de suegra no requieren mucha agua, así que son ideales si no quieres llenar la maceta de autorriego tan seguido. Después de llenar el depósito, puedes dejar la planta por una o dos semanas sin tener que preocuparte por regarla. [16]
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Consejos

  • Para las macetas de autorriego más grandes, deberás regar desde arriba varias veces antes que las plantas logren establecerse y las raíces puedan encontrar la tierra más húmeda de abajo. Esto pasa sobre todo cuando siembras semillas, ya que la superficie de las macetas de autorriego más grandes puede secarse.
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Advertencias

  • Las suculentas y los cactus no son adecuados para las macetas de autorriego, ya que no crecen bien en tierras constantemente húmedas. [17]
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