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Una planta híbrida es cualquier planta obtenida de dos especies distintas. Crear la versión híbrida de una planta asegura la diversidad genética, produce una versión más fuerte de las dos plantas parentales y sirve para crear nuevas verduras y frutas. Los dos métodos principales para hibridar son la polinización cruzada y el injerto. En términos generales, la polinización cruzada es el método más adecuado para las plantas con flores. El injerto (proceso de unir una porción de una planta a una especie distinta) es una mejor opción para las maderas duras, los árboles y las plantas asexuales que se reproducen por sí solas.

Método 1
Método 1 de 3:

Evaluar plantas para cruzar

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  1. Aunque existen algunas excepciones, no es posible cruzar especies de plantas de distintas categorías. Es decir, puedes cruzar 2 especies de plantas, árboles, verduras o flores con semilla, pero no puedes mezclar y combinar. Selecciona 2 especies existentes para combinarlas según lo que seas capaz de cultivar en interiores o en tu jardín. En general, es más fácil hacer la polinización cruzada de las flores e injertar árboles, arbustos y plantas de madera dura. [1]
    • La polinización cruzada es el proceso de utilizar una especie de planta para polinizar otra de una variedad distinta. Algunas buenas plantas para este método son las variedades de frijoles, las orquídeas, las rosas y los pimientos.
    • El injerto consiste en cortar una porción de una especie para unirla físicamente a una especie distinta. Es posible injertar cualquier planta con tallo, pero las mejores son las variedades de madera dura como el enebro, el abedul y los árboles cítricos.
    • Para que las plantas con flores se crucen, deben tener cierta superposición en su periodo de floración. Por ejemplo, las peonías Atenea florecen a inicios de primavera, mientras que las peonías Bartzella florecen a inicios del verano. Estas dos plantas no pueden cruzarse.

    Consejo: solo puedes polinizar de forma cruzada las verduras de la misma especie. Por ejemplo, no puedes hacer la polinización cruzada del brócoli y la calabaza, pero sí puedes hacerlo con la calabaza y el calabacín, puesto que se relacionan. Aunque puedes polinizar de forma cruzada dos especies de zanahoria, no es posible combinar las zanahorias y el brócoli.

  2. La hibridación tiene muchas ventajas. Las plantas con diversidad genética tienden a ser más resistentes, más fuertes y menos propensas a enfermedades. Cruza especies de plantas fuertes con variedades más débiles para mejorar la resistencia de las más débiles en tu jardín. Por ejemplo, si tienes rosas francesas con dificultades para desarrollarse en tu jardín, crúzalas con rosas de repollo para mejorar sus probabilidades de crecer fuertes en el jardín. [2]
    • Por lo general, es mejor combinar variedades de flores que sean de distintas variedades de la misma especie.
    • Si tienes chiles picantes que han estado muriendo con mucha rapidez, pero tus pimentones han crecido bien, cruza las dos especies para crear una variedad picante y dulce que tendrá mejores probabilidades de sobrevivir.
  3. Si cultivas hierbas o verduras en tu jardín, crea sabores únicos combinando distintas variedades. Por ejemplo, injertar raíces de papa en una planta de tomate puede crear tomates con un perfil de sabor único y dinámico. Otra opción es cruzar distintos pimientos para crear nuevos niveles de picor. Experimenta con distintas plantas de tu jardín para crear variedades únicas. [3]
    • Si combinas chiles picantes y pimentones, el resultado será una variedad moderadamente picante con un sabor dulce único.
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Método 2
Método 2 de 3:

Hacer la polinización cruzada

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  1. Agarra una lupa y ve a tu jardín o al vivero de plantas. En el caso de las flores, las plantas macho tienen estambres, que producen el polen utilizado para la reproducción. Por lo general, los estambres parecen tallos largos que se extienden lejos de la planta. Algunas flores tienen 5 o 6 estambres. Las plantas hembras tienen pistilos, que son tallos más cortos y más delgados que siempre se ubican en el centro de la flor. En cuanto a las variedades de verduras y árboles, será necesario buscar las características de género de cada planta por separado, puesto que muchas de las cualidades varían de una planta a otra. [4]
    • El pistilo y el estambre son un poco difíciles de identificar. Mira en el centro de la planta donde los pétalos se encuentran en el medio y busca trozos pequeños de tallo de color distinto al de los pétalos. Si son diminutos y delgados, es probable que los tallos sean pistilos. Si solo hay de 1 a 3 tallos y son un poco grandes, son estambres.
    • Solo puedes polinizar de forma cruzada las plantas con flores, como las margaritas, los juncos, los pimientos y las orquídeas. Si la planta tiene un capullo y una flor, puedes aplicar este método.
    • Muchas flores presentan partes masculinas y femeninas. En estos casos, no tienes que preocuparte por los géneros de las plantas.
    • Algunos árboles tienen partes masculinas y femeninas, así que no será necesario preocuparte por combinar variedades macho y hembra.
  2. Busca una porción de la planta que aún no haya florecido. Corta la planta debajo de su tallo con tijeras de podar o tijeras comunes. Manipula con cuidado el capullo sin abrir y trasládalo a una superficie de trabajo estable. [5]

    Consejo: los capullos sin abrir son bulbosos y más gruesos que otras partes de la planta. Puedes localizarlos al final de los tallos de la planta. Su ubicación varía de una planta a otra.

  3. Los sépalos son las partes de hojas verdes alrededor de la base del capullo y protegen su parte sensible. Con la ayuda de unas pinzas, arráncalos suavemente. Una vez que tengas acceso a los pétalos, quítalos para acceder al interior del capullo. [6]
  4. Las anteras son las partículas pequeñas semejantes a semillas que contienen el polen. Coloca un pedazo de papel y dobla los bordes hacia arriba o sostén el capullo sobre una placa de Petri. Inclina el capullo sobre el papel o cepilla la parte superior del capullo con las pinzas. Si te preocupa dañar la planta, utiliza un hisopo o un pincel. Deja caer las partículas de polen y las anteras en el papel o la placa de Petri. [7]
    • Si afuera hay mucho viento, hazlo dentro de tu casa. Mientras más anteras puedas recolectar, mayores serán las probabilidades de realizar una polinización cruzada exitosa.
  5. En realidad no es necesario hacer nada con las anteras para secarlas, puesto que la humedad desaparecerá naturalmente con el paso del tiempo. Deja la placa de Petri o el frasco de vidrio sin tapar y ponlo a secar en una zona seca al menos 12 horas. [8]
    • Traslada las anteras y el polen a un frasco de vidrio hermético si las recolectaste en un papel. Este facilita la recolección de una gran cantidad de anteras.
    • Secar las anteras aumentará las probabilidades de que la nueva planta se polinice de forma correcta.
  6. Busca un capullo sin abrir de una planta hembra con la que vas a hacer el cruce. Sin retirar el capullo del tallo, pela los sépalos alrededor de la base de la yema. Pela los pétalos, dejándolos intactos si es posible. De lo contrario, también quítalos. [9]
    • Este es un proceso muy delicado. Ten cuidado de dejar intactos los estigmas (que son el filamento en el centro del capullo) mientras lo haces. Este proceso podría fallar si dañas el centro de la planta.
  7. Toma las anteras secas y cepíllalas sobre el centro del capullo femenino. Puedes aplicarlas con el dedo un cepillo limpio y seco. Añade todas las anteras que puedas para aumentar las probabilidades de que la planta crezca con éxito. [10]
    • Debes ser muy delicado si lo haces a mano, para no arrancar ninguna parte del capullo interior.
  8. La cantidad de tiempo que requiere el capullo híbrido para crecer dependerá del tipo de flores que estás polinizando de forma cruzada. Con frecuencia, verás que se desarrolla un nuevo capullo en el transcurso de 2 a 3 semanas. Este nuevo capullo se verá muy distinto a otros capullos de la planta. Una vez que haya tenido cierto tiempo para desarrollarse, córtalo con tijeras de podar o tijeras comunes. Corta de 5 a 7,5 cm (2 a 3 pulgadas) debajo del tallo y retíralo. [11]
    • Determinar en qué momento cortar el nuevo capullo puede requerir algo de ensayo y error. Debes cortarlo después de que hayan crecido nuevas semillas, pero antes que el capullo tenga la oportunidad de desarrollar rasgos juveniles.
  9. Coloca el capullo sobre un pedazo de papel o placa de Petri. Con la ayuda de una navaja multiusos pequeña, corta hasta la mitad del capullo y ábrelo suavemente. En el interior hay semillas. Localízalas en la membrana de la planta y retíralas con la mano o un par de pinzas. Guárdalas en un recipiente hermético junto con un poco de tierra húmeda para macetas. [12]
    • Dado que vas a recolectar las semillas después de que la planta ya ha empezado a brotar, plantarlas de inmediato será un fracaso. Debes esperar hasta el próximo periodo vegetativo para plantar la planta híbrida.
  10. Cuando estés listo para sembrar, retira las semillas del refrigerador y déjalas alcanzar la temperatura ambiente. Luego, cava un agujero de 15 a 30 cm (6 a 12 pulgadas) en una zona fértil del jardín, a unos 30 cm a 1,2 m (1 a 4 pies) de distancia de la planta madre. Siembra las semillas de la misma manera que sembraste la planta madre. [13]
    • Dado que la nueva planta es una variedad totalmente nueva, es difícil predecir qué tipo de agua, fertilizante o tierra necesita para desarrollarse. En general, trátala de la misma manera que tratarías a la planta madre en términos de riego, fertilizante y luz. Si tiene dificultades para crecer bien, cultívala como la planta padre. Alguna combinación de los dos métodos te ayudará a determinar qué funciona y qué no.
    • Siempre hay cierto riesgo de que la planta híbrida no crezca. Sin embargo, no siempre es tu culpa. Algunas combinaciones no funcionan y es imposible saberlo de antemano.
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Método 3
Método 3 de 3:

Injertar plantas

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  1. El injerto es más eficaz con las plantas de madera dura asexuales, así que no es necesario preocuparte por buscar plantas madre y con flores. Por lo general, el injerto tiene más éxito a inicios de la primavera antes que cualquiera de las plantas haya tenido la oportunidad de crecer. [14]
    • Injerta plantas de madera dura o asexuales a inicios de primavera antes que empiece el periodo vegetativo.
    • Es posible injertar algunas plantas con flores, pero este proceso suele ser menos eficaz que la polinización cruzada para las plantas con flores. Sin embargo, siempre que una planta tenga un tallo firme, puede injertarse en otra planta.
    • Puedes injertar manzanos, cítricos, cerezos, hayas y fresnos. Las plantas de tallo más blando que pueden injertarse son las rosas , los tomates, las berenjenas y los bojes.
  2. Primero, elige una rama fuerte y saludable para quitarla de una de las plantas. Esteriliza las tijeras de podar o de jardinería calentando las cuchillas bajo una llama abierta o remojándolas en una solución esterilizante, como el alcohol isopropílico. Con las tijeras de podar o de jardinería, corta un trozo de 15 a 30 cm (6 a 12 pulgadas). Asegúrate de que haya yemas en la rama que vas a retirar. [15]
    • En términos de injerto, esta porción de la planta se conoce como púa.
    • Las yemas son protuberancias redondas y nudosas en la rama.
    • Por lo general, no importa qué planta retires. Si una de las plantas crece mucho más rápido que la otra, quita una rama de la planta que crece más rápido.
    • Puedes obtener una púa a partir de la piel, la madera o la corteza de la planta. Siempre y cuando sea la parte exterior de la rama, no importa el origen de la materia orgánica.

    Variación: otra alternativa es cortar la mitad superior de la planta del tronco o tallo principal, en un ángulo de 45 grados. Estos injertos más grandes se colocarán en capas contra la planta raíz (la mitad de la planta que ya está plantada) después de hacer un corte de 45 grados. Envuelve los dos cortes y ata bien las ramas. Este proceso es más difícil de realizar, pero suele producir buenos resultados si se hace de forma correcta.

  3. Esteriliza el cuchillo para injertar sosteniendo la hoja bajo una llama abierta o lavándola con un agente esterilizante. Inserta el borde de la hoja en la piel de la rama o tallo donde haya al menos 1 yema y cava de 0,5 a 1,3 cm (1/4 a 1/2 pulgada) en la piel. Gira la hoja alrededor de la piel. Repite el proceso de 7,5 a 10 cm (3 a 4 pulgadas) por debajo del primer corte y quita la piel de la planta. Recorta partes de la piel para hacer un trozo rectangular de piel. [16]
    • El cuchillo para injertar es parecido a una navaja de bolsillo, pero tiene un borde desafilado que facilita la extracción de la piel. Puedes hacerlo con una navaja de bolsillo o una navaja multiusos si tienes cuidado.
    • Solo necesitas una porción pequeña de piel para injertar la planta de forma exitosa.
    • Esto no funcionará si no hay una yema en la piel que retiras.
  4. Toma la corteza o piel de la púa y sostenla contra el tronco o el tallo de la planta, en cualquier lugar cerca del tercio inferior de la planta. Con un cuchillo para injertar esterilizado, haz un corte en la planta receptora arrastrando la hoja alrededor de la púa. Una vez que hayas cortado las bases en la planta receptora, deja la púa a un lado. [17]
    • No es necesario ser preciso. Esto funcionará siempre y cuando la púa quepa en la abertura que hagas en la planta receptora.
  5. Retira el material superficial de la planta receptora donde hiciste las incisiones. Clava la hoja en la piel y pela con cuidado la superficie. Retira suficiente piel, madera o corteza de modo que la púa pueda asentarse al ras de la planta receptora. [18]
  6. Sostén la púa sobre la zona que retiraste de la planta receptora. Presiónala en su lugar y envuelve la púa contra el tallo el tronco utilizando cinta de vinilo. Tira de la cinta lo más fuerte posible para asegurarte de que la púa no se mueva mientras se une a la planta receptora. Corta el exceso de cinta y envuelve toda la porción en papel aluminio. Añade unas cuantas capas más de cinta para proteger el injerto. [19]
    • El papel aluminio evitará que la humedad se escape mientras mantiene alejada a la luz solar, lo que puede hacer que la planta receptora rechace el injerto.
  7. Al cabo de este tiempo, el injerto habrá sanado y la planta receptora lo habrá aceptado o rechazado. Retira el papel aluminio. Pela con cuidado la cinta de vinilo. Hazlo lo más suavemente posible para asegurarte de no arrancar la púa de la planta. [20]
    • Si el injerto se cae de inmediato o parece muerto, significa que no pegó y debes volver a intentarlo.
  8. El injerto no crecerá si la porción con hojas y saludable de la planta que está por encima, está acaparando todos los recursos. Para asegurarte de que el injerto reciba muchos nutrientes y empiece a crecer, corta la mitad superior de la planta. Utiliza tijeras de jardinería para las plantas más pequeñas y una sierra de podar para los árboles jóvenes y las plantas más fuertes. [21]
    • Poda las zonas saludables con hojas cerca del injerto para quitarlas.
    • Corta algunas hendiduras de 7,5 a 10 cm (3 a 4 pulgadas) por encima del injerto para herir a la planta. Así ella enviará más recursos a esta zona para ayudarle a sanar, lo que aumentará las probabilidades de que el injerto crezca.
    • En esencia, la sierra de podar es un cuchillo grande con un borde dentado. Está diseñado para podar vegetación más dura.
  9. Puede tardar varias semanas en crecer. En casos extremos, puede pasar un año entero antes que crezcan las yemas del injerto. Cuida de la planta de la misma manera que lo harías con la planta receptora en términos de agua, poda y fertilizante. Una vez que el injerto crezca de 20 a 40 cm (8 a 16 pulgadas) de largo, átalo con un cordel a la porción restante del tronco o tallo. Así te asegurarás de que crezca de manera uniforme y recta a medida que se desarrolla. [22]
    • Esta planta nueva es una especie totalmente nueva. Con el paso del tiempo, sobrepasará al tallo de la planta receptora y el antiguo sistema radicular se incorporará por completo a la nueva planta.
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Consejos

  • Si dejas las variedades con flores cerca una de la otra en tu jardín, las abejas las polinizarán naturalmente de forma cruzada con el paso del tiempo.
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Cosas que necesitarás

Hacer la polinización cruzada

  • pinzas
  • una lupa
  • papel o una placa de Petri
  • un recipiente hermético
  • tierra para macetas
  • un pincel (opcional)

Injertar plantas

  • tijeras de podar o tijeras comunes
  • un cuchillo para injertar
  • un agente esterilizante
  • cinta de vinilo
  • papel aluminio
  • cordel
  • un cuchillo de podar (opcional)

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