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La aparición de callos plantares, también llamado pododermatitis, es un problema común en los conejos mascota. [1] Se da cuando aparecen heridas en la parte inferior de la pata del conejo que pueden llegar a inflamarse e infectarse. Existen muchas causas, como por ejemplo el sobrepeso y el piso de malla metálica de la jaula. [2] Estos callos pueden ser muy dolorosos para el animal, por lo que es importante tratarlos de inmediato. Si tu mascota sufre este problema, trata las heridas con medicamentos y encárgate de arreglar aquello que lo causó.

Método 1
Método 1 de 3:

Buscar tratamiento veterinario

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  1. Un conejo con callos plantares puede llegar a sentir tanto dolor que se le hace imposible descansar cómodamente en su jaula. Asimismo, la parte inferior de las patas puede estar roja e inflamada y producir secreciones (lo que indica que hay una infección). Si notas que el conejo no puede estar tranquilo en su jaula y sus patas no se ven normales, llévalo a la veterinaria tan pronto como puedas para que reciba un tratamiento adecuado. [3]
    • Procura llevarlo a un consultorio con experiencia en el tratamiento de conejos. [4] Si vives en Estados Unidos, puedes utilizar la lista proporcionada en la siguiente página de Internet para encontrar un veterinario en tu localidad: http://rabbit.org/vet-listings/ .
  2. Una vez que confirme que se trata de callos plantares, el especialista procederá a tratar las áreas afectadas cuidadosamente utilizando un medicamento para limpiar heridas. [5] Si el conejo siente mucho dolor, quizá trate de oponer resistencia a cualquier contacto. Pero recuerda que es necesario que las patas estén limpias antes de que se les aplique cualquier otro medicamento.
    • Es posible que el veterinario utilice jabón antibacteriano para limpiar las patas del conejo. Una vez que estén limpias, se puede aplicar un antibiótico en crema en las áreas afectadas. [6]
    • Después de limpiar y aplicar el antibiótico, es posible que el veterinario vende las patas afectadas. A los conejos no les gusta tener este tipo de prenda en las patas. Por ello, no te sorprendas si tu mascota intenta roerlas para quitárselas.
  3. Luego de la limpieza inicial que realiza el veterinario, tendrás que continuar con la limpieza y el tratamiento en casa. Es probable que el especialista recomiende varios productos (como Betadine, Nolvasan y sales de Epsom) para remojar las patas del animal de 2 a 3 veces diarias. [7] Los dos primeros son soluciones antibacterianas que puedes conseguir en cualquier farmacia.
    • Utiliza un tazón pequeño para remojar las patas del conejo. Sostenlo bien y sumerge la pata afectada cuidadosamente. El veterinario te indicará cuánta solución debes utilizar y cuánto tiempo debes esperar.
    • Luego de remojar las patas del conejo, sécalas suavemente con una toalla limpia, aplica el antibiótico en crema (de ser necesario) y coloca las vendas.
  4. Puedes conseguir materiales para vendar (gasa estéril y vendas elásticas) en cualquier farmacia de tu localidad. Para empezar, coloca un pedazo de gasa en la parte inferior del área afectada y envuelve la pata y la parte inferior de la pierna con la venda elástica, dejando los dedos libres. Procura no ajustar demasiado el material para no cortar la circulación. [8]
    • Vendar la pata de un conejo puede ser complicado, así que pídele al veterinario que te enseñe el método más apropiado para hacerlo.
    • Es posible que el animal se resista al proceso de remojo y vendado, sobre todo si siente mucho dolor. En este caso, puedes tratar de darle premios mientras lo sostienes y tratas las patas. Si no funciona, conversa con el veterinario sobre algunas estrategias para mantenerlo quieto mientras aplicas el tratamiento.
  5. Si las patas se infectan, el veterinario recetará antibióticos. Pueden aplicarse directamente sobre el área afectada (como crema o ungüento) o administrarse por vía oral. El segundo tipo se recomienda en casos graves de este problema, cuando hay una infección muy grave. [9]
    • Algunos antibióticos pueden causar problemas gastrointestinales graves en los conejos, ya que reducen la cantidad de bacterias “buenas” del sistema gastrointestinal. Si tu mascota necesita estos medicamentos, el veterinario debe ser muy cuidadoso al seleccionar la opción más apropiada. [10]
    • Además de los antibióticos, es posible que el veterinario recomiende algunos probióticos, los cuales contienen bacterias saludables que contribuyen a la digestión. [11]
    • Los antibióticos orales son líquidos y suelen administrarse con una jeringa por uno de los lados de la boca del animal. [12] Cuando apliques una crema, asegúrate de no tocar la herida infectada con la boca del contenedor.
    • Asegúrate de seguir las instrucciones de la receta cuidadosamente al darle los antibióticos a tu mascota.
  6. Para reducir el dolor de tu mascota, es posible que el veterinario recete un analgésico. Este tipo de medicamento también puede ser un antiinflamatorio, como Carprofeno o Naproxeno. [13] Al igual que con los antibióticos, debes seguir las instrucciones de administración del medicamento.
    • Los analgésicos pueden venir en forma de tableta. Para dársela a tu mascota, puedes esconderla en su premio favorito o triturarla y mezclarla con su alimento favorito o un jugo de fruta. Puedes usar la parte posterior de un cuchillo para mantequilla para hacerlo. [14]
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Método 2
Método 2 de 3:

Modificar el hábitat del conejo

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  1. En su ambiente natural, los conejos se desplazan en césped y tierra suave, lo que les permite hundir las uñas y dedos en el suelo y obtener un soporte adecuado para las patas. Lamentablemente, es difícil recrear este tipo de superficie para las mascotas. [15] Si la jaula tiene un piso de malla metálica y el conejo no cuenta con un espacio suave para descansar las patas, tendrás que cambiar el piso por una opción más cómoda.
    • Si no es práctico para ti comprar una jaula con piso liso, cubre toda la malla con otro material suave. [16] Por ejemplo, puedes colocar una toalla sobre la malla y añadir una capa gruesa de material de lecho, como paja, encima.
    • Asimismo, puedes colocar un cartón sobre la malla. Pero recuerda que es un material bastante absorbente, así que tendrás que cambiarlo frecuentemente. [17]
    • Si la jaula tiene un piso liso, considera cubrirlo con una alfombrilla de algodón con jebe en la parte inferior. Esta le dará tracción y evitará que se resbale o se deslice en la superficie. [18]
    • Asegúrate de que el material de lecho sea absorbente y añade una capa gruesa, de manera que proporcione el soporte adecuado a las patas.
  2. La orina puede irritar la piel y crear los callos plantares. Si a tu conejo le gusta quedarse en la caja de arena, sus patas quedarán expuestas a la orina constantemente, lo que podría ser una causa de este problema. [19] Retira el material sucio de la jaula del conejo por lo menos una vez al día mientras sigues el tratamiento.
    • Asegúrate de retirar las heces del conejo junto con el material de lecho sucio. Tanto la orina como las heces contribuyen a la acumulación de bacterias en la jaula, lo que puede empeorar una infección de este tipo. [20]
  3. Además de cambiar el material de lecho regularmente, también tendrás que mantener toda la jaula limpia. Retira los alimentos que no haya comido todos los días y limpia sus platos de agua y alimento con agua caliente y jabón. Cada dos semanas, limpia la jaula a profundidad: limpia la jaula misma y los juguetes que haya adentro con una solución de vinagre diluido (4 partes de agua y 1 de vinagre).
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Método 3
Método 3 de 3:

Solucionar posibles causas

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  1. Las uñas largas pueden curvarse por debajo de las patas y dañar la piel, lo que crea los callos plantares. Si tu mascota tiene las uñas largas, recórtalas a lo largo del tratamiento. Una vez que se cumpla el periodo, mantenlas cortas para evitar que el problema reaparezca. Si no te sientes cómodo haciéndolo tú mismo, pídele al veterinario que lo haga.
    • Si decides cortarlas tú mismo, asegúrate de no cortar más allá del hiponiquio. Este es el vaso sanguíneo que atraviesa las uñas. Si lo cortas, podría ser bastante doloroso para el conejo y podría causar sangrado.
  2. Normalmente, los conejos con sobrepeso no pueden pararse correctamente, lo que hace que distribuyan el peso de su cuerpo de manera antinatural y dispareja en las patas. La presión puede crear callos plantares. [21] Si el animal tiene sobrepeso o es obeso, tendrás que reducir su peso gradualmente a fin de aliviar la presión sobre las patas. Esto implica darle una dieta saludable e incrementar la cantidad de ejercicio que realiza.
    • Conversa con el veterinario antes de implementar la dieta de tu conejo. Un especialista te ayudará a saber cuánto peso debe perder tu mascota y a desarrollar un plan efectivo para lograrlo.
    • Algunas opciones de ejercicio incluyen excavar, perseguirte y correr en una pista de obstáculos. No olvides que al inicio del tratamiento tu mascota podría estar muy adolorida como para ejercitarse.
    • Una dieta saludable para un conejo incluye heno, verduras frescas y una cantidad limitada de alimento balanceado y premios.
  3. Un conejo con artritis u otro problema en los huesos tendrá problemas para mantener una postura correcta, lo que incrementa la posibilidad de que se creen los callos plantares. [22] Si tu mascota tiene problemas ortopédicos además de los callos, el veterinario se encargará de tratar ambos problemas.
    • Puedes colocar una caja de arena con un borde bajo al frente y darle platos de alimento y agua poco profundos para hacer su jaula más cómoda.
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Consejos

  • Encargarse de lo que causa los callos plantares es muy importante. De lo contrario, el tratamiento veterinario general podría volverse frustrante.
  • Algunas razas de conejo específicas (como el rex y el lop holandés) tienen pelaje corto o delgado en la planta de las patas, por lo que son propensos a sufrir este problema. [23]
  • Los callos plantares suelen ser un mal recurrente debido al daño que sufre la piel y el folículo piloso o capilar en las patas.
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Advertencias

  • El tratamiento para los callos plantares puede ser difícil y tomar bastante tiempo. [24]
  • Incluso luego del tratamiento, el pelaje de las patas no suele volver a crecer. Asimismo, es posible que las patas hayan sufrido daños permanentes.
  • Los casos más graves de este problema requieren la amputación de los dedos, patas o hasta de la pierna completa. [25]
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