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Si alguno de tus seres queridos, o incluso tú, padece autismo, en ocasiones podrías verte en la necesidad de explicarles a las demás personas en qué consiste esta discapacidad. Antes de que puedas explicarla de la manera adecuada, es útil que aprendas lo más posible al respecto. Luego, podrás explicar cosas tales como la manera en que el autismo afecta las manías sociales, la expresión de la empatía, los problemas sensoriales y los comportamientos físicos de una persona.

Método 1
Método 1 de 5:

Comprender el autismo para poder enseñárselo a los demás

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    Determina cuál es la definición general de autismo. El autismo es una discpacidad del desarrollo que generalmente conlleva a diferencias en las habilidades sociales y de comunicación, patrones únicos de pensamiento y comportamiento y experiencias sensoriales divergentes. Es un problema neurológico que puede presentar dificultades significativas, aunque también tiene algunas ventajas. [1]
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    Infórmate acerca de lo que las personas con autismo tienen que decir con respecto a esta condición. Los autistas experimentan en carne propia las diferencias y urgencias, y pueden brindar una mejor perspectiva de la manera en que funciona el autismo. También poseen un punto de vista más inclusivo que muchas organizaciones dirigidas por padres. [2]
    • Mantente alejado de las fuentes demasiado negativas como las charlas autistas.
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    Ten en cuenta que todas las personas autistas son únicas. Las personas autistas son extremadamente diversas, por lo que dos autistas podrían ser muy diferentes entre sí. Uno podría tener problemas sensoriales graves con habilidades sociales sólidas y una buena función ejecutiva, mientras que otro podría tener problemas sensoriales menores y no ser capaz de llevar a cabo una interacción social básica. No todas las personas autistas agitan sus manos o se mueven de manera incontrolable. Por lo tanto, puede ser difícil hacer generalizaciones o suposiciones.
    • Ten en cuenta este hecho cuando les expliques la definición de autismo a otras personas. Es importante señalar que no todas las personas que sufren de autismo se comportan de la misma manera, así como no todas las personas neurotípicas actúan del mismo modo.
    • Cuando describas a un autista, haz hincapié en sus necesidades únicas, sus fortalezas y sus diferencias.
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    Ten en cuenta las diferencias de la comunicación. Para algunos autistas, comunicarse con otras personas es muy difícil. Algunas de estas dificultades pueden ser fáciles de detectar, mientras que otras podrían ser mucho más sutiles. Las personas autistas podrían experimentar los siguientes síntomas:
    • un tono de voz inusual o monótono que crea ritmos y modulaciones extraños
    • repetición de preguntas o frases (ecolalia)
    • dificultad para expresar las necesidades y deseos
    • un mayor tiempo para procesar las palabras habladas, no responder a las instrucciones con rapidez y confundirse cuando se dicen muchas palabras con demasiada rapidez
    • interpretación literal del lenguaje (confundir el sarcasmo, la ironía y las figuras retóricas)

    Algunos autistas pueden usar términos técnicos en contraposición al lenguaje coloquial e incluso pueden emplear sinónimos extranjeros. Esto último no significa que no se sientan orgullosos de su nacionalidad, sólo que no suelen demostrarlo; además, como suelen leer mucho eso les enriquece su vocabulario.

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    Entiende que los autistas interactúan de una manera distinta con su entorno. Al conversar con un autista, podrías llegar a preguntarte si en realidad te presta atención o que si quiera le interesa hablar contigo. No permitas que esto te moleste. Ten en cuenta lo siguiente:
    • Algunas personas autistas parecen “perderse en su propio mundo” cuando son interrumpidas en sus propios pensamientos.
    • Un autista podría escuchar de una manera diferente. Es normal que una persona autista evite el contacto visual y se ponga inquieta mientras presta atención. Esto le ayuda a concentrarse. Por lo tanto, lo que parece una falta de atención en realidad es una señal de las modificaciones que esta persona hace para poder escuchar mejor.
    • Las personas autistas pueden sentirse abrumadas en conversaciones y parecer distraídas. Pueden distraerse o quizás la conversación va demasiado rápido. Ofrécele dirigirse a un lugar más tranquilo y dale pausas en la conversación para permitirle pensar en lo que has dicho.
    • Para los niños autistas, podría ser todo un desafío jugar con otras personas, pues involucra reglas sociales difíciles o experiencias sensoriales abrumadoras. Jugar a solas podría ser más sencillo.
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    Ten en cuenta que los autistas disfrutan de las rutinas estructuradas. Pueden crear rutinas sumamente estructuradas para su día. Esto se debe a que los estímulos desconocidos pueden sorprenderlos fácilmente y a que la seguridad de una rutina se siente más cómoda. Es necesario que sepas algunas de las cosas que caracterizan a las personas con autismo:
    • Siguen una rutina estricta.
    • Los cambios inesperados les resultan muy estresantes (p.ej. un cambio en el entorno escolar).
    • Utilizan un objeto que les permita lidiar con el estrés.
    • Colocan las cosas en orden (p.ej. alinean los juguetes por colores y tamaños).
    • Si quieres explicarle a un amigo el autismo de tu hijo, compara cómo se prepara para ir a la escuela. Existe una rutina básica en la preparación para ir a la escuela: desayunar, lavarse los dientes, vestirse, arreglar su mochila, etc. Si bien es la misma rutina, algunos de estos pasos pueden confundirse algunas mañanas. A un niño neurotípico no le importaría vestirse antes de desayunar una mañana, lo cual estaría fuera de la rutina normal. En el caso de un niño autista, estos cambios pueden ser extremadamente desorientadores. Si está acostumbrado a una determinada rutina, es mejor apegarse a ella.
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Método 2
Método 2 de 5:

Explicarle a un adulto las habilidades sociales de las personas autistas

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    Explícale que los autistas podrían comportarse de una manera un tanto distinta y que eso es normal. A diferencia de las personas neurotípicas, los autistas lidian todo el tiempo con barreras y factores estresantes, [3] de modo que pueden comportarse de una manera inusual o exhibir diferentes habilidades sociales. Esto dependerá de las necesidades y fortalezas de la persona en cuestión.
    • Las personas con habilidades sociales más fuertes simplemente podrían parecer incómodas y un poco torpes. Podrían tener dificultades para comprender lo que esperan de ellos, por lo que podrían decir o hacer cosas que te sorprendan.
    • Algunos autistas encaran grandes desafíos conversacionales y podría no ser capaces de tener una charla típica.
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    Déjale en claro que la persona autista podría no hacer contacto visual. El contacto visual puede ser increíblemente abrumador para un autista y es posible que no pueda ver a una persona a los ojos y escuchar sus palabras al mismo tiempo. [4] Explícale que para un autista, mirar a otra parte no significa que no escuche una conversación.
    • Nunca fuerces un contacto visual. Esto podría asustarla o hacerla sentir incómoda, [5] sus habilidades de comunicación podrían disminuir radicalmente y podría sufrir una sobrecarga sensorial .
    • Algunos autistas son capaces de hacer contacto visual sin que les moleste demasiado. Una vez más, esto depende de la persona y de sus zonas de confort.
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    Explícale a la persona que los autistas son diferentes, no necesariamente desinteresados. Enséñale que un autista podría tener la necesidad de moverse nerviosamente y evitar el contacto visual para poder concentrarse. El autista podría observar la boca, las manos o los pies de la persona con quien conversa o incluso mirar en la dirección opuesta. Molestarse con un autista solo hará que quiera evitar a la persona.
    • Recuérdale que debido a las diferencias sensoriales y de atención, un autista puede tener dificultades para concentrarse en una conversación. Esto no significa que ignore a las demás personas, sino que tiene dificultades para participar completamente en la interacción.
    • Enséñale a la persona a dejar en claro el momento en que quiera hablar con el autista. La persona debe acercarse físicamente, utilizar el nombre del autista y de preferencia estar en su campo de visión. Si el autista no responde cuando se le habla, inténtalo de nuevo, pues es posible que no se haya dado cuenta.
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    Déjale en claro que algunos autistas son no verbales (incapaces de hablar). Podrían comunicarse a través del lenguaje de señas, imágenes, escritura, lenguaje corporal o por medio de su comportamiento. Explícale que solo porque alguien no hable, no significa que no pueda entender lo que le dicen o que no tenga nada que decir.
    • Algunas personas hablarán sobre una persona autista que no habla como si no estuviera en la habitación. No obstante, es muy probable que la persona autista pueda oírlas y recordar lo que dicen.
    • Recuérdale que “denigrar” siempre se considera como una actitud altiva. Los autistas no verbales deben recibir un trato igual al de las personas de la misma edad.
    • Demuéstrale el trabajo de las grandes personas no verbales, tales como la escritora y defensora de los derechos de los autistas, Amy Sequenzia.
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    Ten en cuenta que el autista podría no estar interesado en el sarcasmo, el humor o en el tono de la voz. Podría tener dificultades para entender los distintos tonos de voz, en especial cuando las características faciales de la otra persona no encajan con ellos.
    • Cuando expliques esta dificultad, podrías comprarla con el uso de emoticones en los mensajes de texto. Si una persona te enviara un mensaje de texto con la frase “Bueno, eso estuvo genial”, podrías asumir que la persona está siendo sincera. Sin embargo, si la persona utiliza un emoticón como “:-P” junto con la frase, el cual representa a alguien que está sacando la lengua, podría interpretarse como sarcasmo.
    • Los autistas pueden aprender a entender el lenguaje figurado. Algunos saben muy bien como reconocer los matices del sarcasmo y del humor.

    El sarcasmo y el lenguaje figurado es necesario explicárselo para que lo puedan entender.

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Método 3
Método 3 de 5:

Explicar las diferencias en los modos de conversación de los autistas

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    Ayúdale a la persona a entender que el autista podría mostrar empatía de forma diferente. Esto no significa que no la tenga. Las personas autistas generalmente se preocupan por las personas que tienen dificultades para interpretar comportamientos. Recuérdale a la persona a quien le explicas la definición de autismo que muchos autistas muestran empatía de manera distinta, lo que los hace parecer insensibles cuando en verdad no comprenden la emoción que alguien experimenta.
    • Explícale que es mejor dejar en claro la manera en que se siente. Por ejemplo, un autista podría no comprender la razón por la que miras hacia abajo, pero si le dices que te sientes triste porque tu padre está molesto contigo, tendrá una mejor idea de cómo reaccionar ante eso.
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    Cuéntale a la persona acerca de las pasiones intensas que acompañan al autismo. Muchos autistas se sienten profundamente apasionados por algunos temas específicos y podrían hablar de ellos durante periodos de tiempo más prolongados.
    • Hablar sobre los intereses especiales de la persona autista puede ser una excelente forma de conectar con ella.
    • Algunas personas podrían pensar que esto es grosero, pero debido a que las personas autistas pueden tener problemas para saber lo que piensan los demás, no siempre saben cuando alguien está desinteresado.
    • Algunos autistas son sumamente prudentes cuando hablan de sus intereses especiales por miedo a ser groseros. Si ese es el caso con esta persona, es necesario asegurarle de que está bien hablar de sus pasiones de vez en cuando, sobre todo si su compañero de conversación le hace preguntas personales.
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    Indícale a la persona que los autistas podrían no darse cuenta si alguien está desinteresado en una conversación. Si la persona en cuestión desea cambiar de tema o quiere terminar la conversación, un autista podría no darse cuenta de esas señales. Es mejor ser directo.
    • No tiene nada de malo decir “Estoy harto de hablar sobre los patrones del clima. ¿Podemos hablar de ___?” o “Debo irme. ¡Nos vemos!”.
    • Si sabes que la persona puede ser insegura, podría ser útil darle una razón clara para abandonar la conversación, como por ejemplo “Necesito irme porque estoy retrasado” o “Me siento abrumado y necesito algo de tiempo a solas” (algo que muchos autistas pueden entender ).
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    Ayúdale a la persona a entender que los autistas tienen sentimientos al igual que los demás. Es importante que las personas entiendan que los autistas sienten amor, felicidad y dolor al igual que los demás. Solo porque puedan parecer indiferentes en ocasiones no significa que no tienen sentimientos. De hecho, muchos autistas tienen sentimientos muy profundos.
    • Si la persona tiene un problema con las sorpresas o las malas noticias, procura dividirlas con prudencia y consolarla de la manera más conveniente para ella.
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Método 4
Método 4 de 5:

Explicar la etiqueta física

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    Explícale a la persona que algunos autistas no pueden manejar el contacto físico. Esto se debe a los problemas sensoriales. Las diferentes personas autistas tienen diferentes sensibilidades. Para evitar molestar a alguien, la forma más fácil es simplemente preguntarle.
    • Algunos autistas disfrutan el contacto físico. Muchos de ellos estarán felices de abrazar a sus amigos cercanos y familiares.
    • En caso de duda, es mejor preguntar. Pregunta algo como “¿Te gustaría un abrazo?” o muévete con lentitud para que el autista pueda verte y tenga la oportunidad de pedirte que te detengas. Nunca es bueno aparecer por detrás para tocarlo, pues podría sorprenderse hasta el punto de entrar en pánico.
    • No asumas que siempre se sentirán de la misma manera. Por ejemplo, quizás a tu amigo le gustan los abrazos en un buen día, pero le desagradan si se siente abrumado o está ocupado. Simplemente pregunta.
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    Explícale a la persona que muchos autistas tienen dificultades con los estímulos sensoriales, a veces con los dolorosos. Un autista podría tener dolor de cabeza a causa de las luces brillantes o saltar y comenzar a llorar si se deja caer un plato al suelo. Recuérdale a la persona lo sensibles que son los autistas para que pueda brindar su apoyo.
    • Explícale que es normal preguntarle a un autista acerca de sus necesidades con la finalidad de amoldarse a ellas. Por ejemplo, “¿Esta habitación te parece muy ruidosa? ¿Deberíamos ir a otra parte?”.
    • NUNCA es correcto fastidiar a alguien a causa de sus sensibilidades (p.ej. cerrar los gabinetes con fuerza para ver la reacción del autista). Esto puede provocar dolor , miedo o incluso ataques de pánico intensos y además se considera como bullying.
    CONSEJO DE ESPECIALISTA

    Luna Rose

    Experta de la comunidad
    Luna Rose es miembro de la comunidad autista que se especializa en escritura y autismo. Tiene una licenciatura en informática y ha hablado en eventos universitarios para mejorar la comprensión sobre las discapacidades. Luna Rose lidera el Proyecto de autismo de wikiHow.
    Luna Rose
    Experta de la comunidad

    Puede ser difícil salir de tu perspectiva. Luna Rose, miembro de la comunidad autista, nos comparte: "Las personas no se dan cuenta de la gran diversidad que hay con respecto al cerebro humano y con la forma en que todos experimentan los eventos de manera distinta. Por ejemplo, mi mamá escucha sonidos fuertes y no le importa, pero para mí, puede sentirse como si me golpearan, un gran nivel de dolor. Esa es la razón por la que huyo cuando comienza a descargar el lavaplatos, porque es físicamente doloroso. Lo mismo se aplica para la convivencia cerca de las motocicletas y los autos deportivos, son muy ruidosos".

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    Indícale a la persona que es más fácil manejar los estímulos cuando se le advierte al autista para que pueda prepararse. [6] En general, los autistas manejan mejor las situaciones cuando saben qué esperar, así que indícale a la persona que primero debe preguntar antes de hacer algo que pueda sorprender al autista.
    • Ejemplo: “Voy a cerrar la puerta del garaje en este momento. Si quieres salir de la habitación o cubrirte los oídos, adelante”.
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    Menciona que el autista podría exhibir algunos comportamientos inusuales. A esto se le conoce como comportamiento de autoestimulación debido a que estimula los sentidos. Esto puede ayudarlo a tranquilizarse, a concentrarse [7] , communication [8] y a prevenir los colapsos emocionales. Estos son algunos ejemplos de autoestimulación:
    • mecerse de un lado a otro
    • repetir palabras o sonidos (ecolalia) [9]
    • agitar las manos
    • chasquear los dedos
    • saltar y aplaudir con entusiasmo
    • cantar o tararear
    CONSEJO DE ESPECIALISTA

    Luna Rose

    Experta de la comunidad
    Luna Rose es miembro de la comunidad autista que se especializa en escritura y autismo. Tiene una licenciatura en informática y ha hablado en eventos universitarios para mejorar la comprensión sobre las discapacidades. Luna Rose lidera el Proyecto de autismo de wikiHow.
    Luna Rose
    Experta de la comunidad

    Relaciona la autoestimulación con una conducta inquieta. La experta en la comunidad, Luna Rose, comenta: "Es bueno para las personas no autistas recordar que la autoestimulación en realidad no es inusual. Todos se inquietan un poco. Las personas no autistas generalmente lo hacen poco y normalmente no lo necesitan tanto, pero considerarlo como algo relacionado con tu propio comportamiento podría ser de utilidad para comprenderlo en caso de que alguien tenga dificultades para lograrlo".

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    Resalta que el comportamiento autoestimulatorio es importante para el bienestar de una persona autista. Al igual que las rutinas, puede crear una idea de seguridad y previsibilidad. Por ejemplo, un autista podría saltar repetidamente en un solo lugar. También podría tocar la misma canción una y otra vez o dibujar la misma imagen. Los comportamientos repetitivos se relacionan con sus niveles de comodidad.
    • Nunca está bien avergonzar a una persona autista por tener movimientos repetitivos o tratar de forzarla a detenerse. [10] [11]
    • Si una persona autista tiene un comportamiento autoestimulatorio de una forma dañina (p.ej., se golpea la cabeza o se muerde), es necesario redirigirla para que haga algo más seguro.

    Es muy común que ellos tiendan a verbalizar sus pensamientos y esto puede hacer que los juzguen como que "hablan solos". Si te parece que es incomodo que lo escuchen redirígelo a que lo haga por escrito en un papel. Lo que no se debe hacer es obligarlo a callarse ni mucho menos decirle que "eso es de locos/desquiciados".

    En el caso de los movimientos repetitivos nunca, bajo ningún concepto, se te ocurra decirle cosas como por ejemplo "eso solamente lo hacen los retrasados mentales" ¡ni mucho menos se te ocurra juzgarlo como tal! De lo contrario, eres tú el que va a quedar como un ignorante.

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Método 5
Método 5 de 5:

Explicarle el autismo a tu hijo

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    Asegúrate de que tu hijo esté preparado para esa conversación. Es importante ser honesto con tu hijo, en espacial si es autista o si se pregunta por el comportamiento de un amigo que tiene esta condición. Sin embargo, también es importante asegurarte de que tu hijo tenga la edad suficiente para entender lo que le digas sin que se confunda o se abrume. Todos los niños son diferentes, así que no existe una edad establecida para hablarles. Depende de ti determinar el momento adecuado para tener la conversación.
    • Si tu hijo es autista, opta por hablarle del tema a una edad temprana. Puede ser estresante sentir que eres diferente, pero nadie te dirá la razón. Los niños pequeños pueden escuchar algo tan simple como “Tienes una discapacidad llamada autismo, lo que significa que tu cerebro funciona de una manera un poco diferente y ese es el motivo por el cual hay terapeutas que pueden ayudarte”-

    Un error muy común en la mayoría de los padres y algunos terapeutas consiste en "invisibilizar" o aun negar el autismo (particularmente el de grado I también llamado síndrome de Asperger) tratando a la persona como si fuera neurotípica y obligándola a actuar como tal. Esto puede hacer que esa persona se sienta confundida y frustrada al no entender el porqué de su conducta y su consecuente rechazo.

    Y sobre todo debes abstenerte a toda costa de decirle frases hirientes como "eso del autismo es un invento", "tú lo que tienes es que hacer un esfuerzo y dejar la pereza", etc. ya que eso mina su autoestima y le genera inseguridades y bloqueos mentales.

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    Explícale a tu hijo que el autismo no es algo por lo que deba sentirse triste. Hazle saber que el autismo es una discapacidad, no una enfermedad o una carga, y que está bien ser autista. Los niños mayores pueden beneficiarse del hecho de conocer el concepto de neurodiversidad y del movimiento por los derechos de los discapacitados.
    • Alienta al niño a ver lo bueno en un amigo, hermano o compañero de clase autista. Por ejemplo, “Sí, Lola tiene dificultades para hablar y lidiar con las grandes emociones. He notado que es dulce y buena para las actividades artísticas. ¿En qué crees que es buena?”.
    • Ayúdale a tu hijo a entender que sus diferencias lo hacen único y especial. Explícale las fortalezas del autismo: un fuerte sentido de la lógica y la ética, compasión, pasiones profundas, concentración, lealtad y un deseo de ayudar (responsabilidad social).
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    Luna Rose

    Experta de la comunidad
    Luna Rose es miembro de la comunidad autista que se especializa en escritura y autismo. Tiene una licenciatura en informática y ha hablado en eventos universitarios para mejorar la comprensión sobre las discapacidades. Luna Rose lidera el Proyecto de autismo de wikiHow.
    Luna Rose
    Experta de la comunidad

    Utiliza metáforas para explicar las diferencias y transmitir singularidad. Luna Rose, miembro de la comunidad autista, comenta: "En el juego Calabozos y Dragones, por ejemplo, tienes una determinada cantidad de puntos para darle a tu personaje inteligencia, carisma y otras habilidades. Me gusta imaginar eso con el autismo: todos tus puntos de habilidad se asignan a algunas cosas en las que no eres muy bueno. Por consiguiente, tienes menos habilidad en otras áreas tales como tareas domésticas. Así, algunas de esas otras tareas serán realmente difíciles, pero cuando puedas hacer algo verdaderamente especializado que disfrutes, podrá ser muy divertido".

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    Alienta a tu hijo. Asegúrate de alentarlo diciéndole que su autismo lo hace diferente, pero no menos que los demás. Tu hijo aún puede participar sin problemas en las actividades de la escuela y el hogar, y llevar una vida feliz.
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    Asegúrate de expresar el amor que sientes por tu hijo. Siempre dile lo mucho que lo amas y te preocupas por él. Es importante tener el apoyo adecuado, en especial cuando se enfrenta a una vida con una discapacidad. Además, con ayuda tu hijo podrá vivir una vida feliz y productiva.
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Consejos

  • No te sientas frustrado si la persona a quien le explicas el concepto del autismo parece no “entenderlo”. Mantén la calma y trata de responder a sus preguntas mientras le ayudas a entender de manera más clara esta condición.
  • Proporciónale a la persona algunos sitios web que traten sobre el autismo. Consulta las referencias en este artículo para obtener algunas sugerencias.
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Advertencias

  • Nunca impidas que una persona autista recurra a la autoestimulación.
  • Ten mucho cuidado cuando les proporciones sitios web sobre el autismo a otras personas. Algunas organizaciones (en especial aquellas que dirigen los padres) demonizan el autismo y se enfocan en el martirio en lugar de en el respeto y la inclusión. Otras utilizan la pseudociencia y las estafas para obtener dinero o prestigio. Enfócate en las organizaciones positivas que estén completa o parcialmente dirigidas por personas autistas.
    • Por lo general, los mejores sitios web son aquellos que hablan de la neurodiversidad, que emplean un lenguaje enfocado en la identidad de la persona, [12] que promueven la aceptación y que hablan de cómo adaptarse a esta condición en lugar de curarla.
  • El autismo es muy complejo, por lo que es muy difícil de explicar y no todos los autistas pueden presentar todas las características sine qua non como describen los manuales. En consecuencia, la frase "no pareces autista" es típica únicamente de personas ignorantes.
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