Descargar el PDF Descargar el PDF

Son dos los tipos de polilla que afectan la lana, la seda, el casimir y otras telas: la polilla de la ropa común y la polilla del estuche. Ambas prefieren vivir en lugares oscuros, como el armario. Ponen sus huevos en las fibras animales (como la lana), que sirven como fuentes de alimento para las larvas que surgen al romperse los huevos. Pero la lana y el casimir, algunos de sus alimentos favoritos, pueden ser muy costosos de reemplazar (si pueden reemplazarse), sin mencionar que podrías perder parte de tus prendas favoritas. Para proteger tu ropa, trata y evita con eficacia las infestaciones de polillas. [1]

Método 1
Método 1 de 2:

Tratar las infestaciones

Descargar el PDF
  1. El primer paso es descubrir dónde se ha originado la infestación de polillas. Busca agujeros en las prendas hechas de fibras animales para intentar averiguar dónde las polillas han dejado sus huevos, puesto que las larvas se alimentan de ellas una vez que nacen. Por lo general, lo que ocurre es que una persona compra una prenda de segunda mano que ya ha sido infestada, lo que traslada la infestación a su propio armario. [2]
    • Según el valor financiero y sentimental de la fuente y el grado de la infestación, puedes decidir limpiar y reparar la prenda o puede ser más económico y seguro para el resto de tu guardarropa tirar las prendas infestadas.
  2. Para las prendas de lana o productos animales, esto implica llevarlas a la tintorería. Infórmales a los profesionales que quieres que limpien tus prendas de forma específica contra las polillas, ya que así utilizarán químicos que matan los huevos de las polillas. [3] Todo lo demás debe ir en la lavadora con agua caliente, de preferencia a 50 °C (120 °F), para asegurarte de destruir las orugas sueltas. [4]
    • Termina este proceso secándolas bajo la luz del sol, lo que mata las larvas.
  3. Después de haber localizado la fuente de la infestación y de haber empezado a limpiar la ropa, debes limpiar tu armario. Los huevos de las polillas pueden terminar en un montón de lugares: el piso, la parte superior y la parte inferior de los estantes e incluso el techo. Haz un trabajo exhaustivo pasando la aspiradora y quitando el polvo, sobre todo en las esquinas y en cualquier zona alfombrada. [5]
    • Dado que los huevos pueden ocultarse en las alfombras y debajo de los muebles, es muy importante pasar la aspiradora minuciosamente por todas partes. [6]
    • Aunque no es necesario utilizar un espray especial para las superficies de madera sólidas donde es fácil quitar el polvo, existen espráis especiales que puedes utilizar en la ropa y las alfombras para repeler y matar las polillas. En Internet puedes encontrar diversas tiendas virtuales que venden estos espráis a precios bastante asequibles.
  4. Estas trampas atraen a las polillas macho al polvo que contiene las feromonas de las polillas hembra. El polvo se pega a sus alas y les da a las polillas macho la apariencia falsa de las polillas hembra. Con las polillas macho y hembra confundidas sobre con quién reproducirse, el ciclo de reproducción puede terminarse de forma eficaz. [7]
  5. Las bolas de naftalina son una forma eficaz de matar las polillas. Contienen naftaleno, una sustancia hecha de petróleo crudo o alquitrán de hulla y se convierte de un sólido a un gas tóxico. Al inhalarse, reacciona con las células, descomponiéndolas y dañando el tejido. [8]
    • Las prendas como los abrigos que tienen bolsillos pueden protegerse colocando bolas de naftalina en ellos.
    • Ten cuidado: utilizar bolas de naftalina cerca de los niños pequeños y las mascotas es potencialmente muy peligroso, sobre todo si se ingiere. [9]
    • La ropa almacenada con bolas de naftalina debe lavarse después para evitar la anemia (cuando la sangre no transporta oxígeno a través del cuerpo) que provocan los vapores del naftaleno.
    • Si presentas dolor de cabeza, náuseas, mareos o vómitos después de exponerte a las bolas de naftalina, deja de utilizarlas y tíralas.
  6. Las temperaturas altas matan los huevos y las larvas de la polilla. Así que utilizar la plancha, que aplica calor directo y elevado a la ropa, matará los huevos y las larvas de la polilla que se adhieren a la ropa. [10]
    • Es seguro planchar la ropa de lana, a menos que las etiquetas digan “no planchar” o “solo lavar en seco”. Si la prenda puede ser planchada, pon la plancha en la opción de “lana”, utiliza calor con vapor y presiona desde el interior con un paño para planchar entre la plancha y la ropa. [11]
  7. Las temperaturas bajo cero matan cualquier larva o polilla en cualquiera de sus etapas de desarrollo. Si vives en un lugar donde hace suficiente frío, puedes dejar tus prendas al exterior durante el día. De lo contrario, puedes meterlas en el congelador por unos días sin necesidad de empacarlas en bolsas de plástico. [12]
    • Si has lavado tu ropa, primero asegúrate de que esté del todo seca antes congelarla; de lo contrario, la humedad puede convertirse en cristales de hielo en la tela.
    • Algunas fuentes recomiendan congelar la ropa en bolsas de plástico por 1 semana para asegurarte de que cualquier plaga esté completamente muerta. [13]
  8. Si todos tus demás esfuerzos por librar tu armario de la infestación de polillas no dan resultado, siempre puedes recurrir al servicio profesional de control de plagas. Por lo general, existen servicios de llamadas de emergencia disponibles las 24 horas que puedes utilizar para reservar una cita de último minuto. Aunque esto método es el más costoso, será el más completo. [14]
    • Para comunicarte con un fumigador local, busca un servicio de control de plagas en tu directorio telefónico o escribe en el motor de búsqueda de Internet la frase "control de plagas cerca de mí". Busca varios servicios para comparar precios y echa un vistazo a las opiniones de los clientes en páginas web como Yelp o Angie's List.
    • Ten presente que si optas por la fumigación, dichos servicios utilizarán pesticidas comerciales. Es posible que tú y cualquier niño o mascota que tengas deban evitar las zonas fumigadas por un día o más.
    Anuncio
Método 2
Método 2 de 2:

Evitar infestaciones

Descargar el PDF
  1. Debes asegurarte de que la prenda no tenga ningún signo de infestación, sobre todo si proviene de una tienda de artículos de segunda mano o de un amigo, sin importar su contenido de fibra. Es posible que las orugas sueltas estén adheridas a la prenda y que terminen saliendo de los huevos en tu armario. En los Estados Unidos, la mayoría de las infestaciones provienen de las polillas de la ropa comunes, pero aún debes inspeccionar ambos tipos de polilla. [15]
    • Busca zonas con hilos de seda y tubos de seda que dejan las polillas de la ropa comunes.
    • Los estuches de las polillas del estuche cambian para coincidir con el color de la ropa que comen. Por esta razón, siempre debes buscar numerosos agujeros pequeños y sospechosos, puesto que son la mejor señal de alerta de una infestación.
  2. Limpia con frecuencia el armario de arriba a abajo. A las polillas les gusta vivir en lugares oscuros y sin perturbaciones. Mueve las cosas: mueve la ropa, limpia las cosas con ropa remojada en detergente y pasa la aspiradora por los pisos y los cajones. [16]
  3. Tal vez crees que tus prendas, sobre todo las hechas de algodón y fibras artificiales, estarán bien siempre y cuando la lana esté guardada por separado. Pero a las polillas les gusta comer los desechos diminutos que deja la piel humana, como el sudor, además de las partículas de comida. La ropa siempre debe estar lavada antes de regresar al armario. [17]
  4. Puedes utilizar bolsas selladas al vacío o incluso contenedores de plástico con tapas herméticas para guardar las prendas de lana cuando no las utilices. Esto es útil sobre todo en los meses de primavera y verano. También puedes forrar dichos espacios con papel antipolillas, cedro o incluso bolas de naftalina para hacerlos más seguros. La mayoría de estos productos (o todos) están disponibles en Amazon , Bed Bath & Beyond , Target o Walmart . [18]
    • Ten cuidado: guardar ropa en un contenedor hermético solo puede impedir la aparición de nuevas infestaciones. Si tus prendas ya tienen huevos, estos nacerán y se las comerán. Primero asegúrate de haber limpiado tu ropa de forma adecuada.
    • Al igual que la ropa, los contenedores también deben estar secos para evitar el moho.
  5. El olor fuerte del cedro ayuda a camuflar la ropa de las polillas. Puedes invertir en muebles de cedro para guardar la ropa, pero si eso es muy costoso, los colgadores de cedro, los bloques de cedro e incluso los difusores de aceite que utilizan aceites aromáticos de cedro son soluciones asequibles. Puedes encontrarlos en JCPenney , Bed Bath & Beyond y Amazon . [19]
    • Existen algunas pruebas limitadas que sugieren que el cedro rojo oriental (en realidad, un enebro) contiene un aceite aromático que mata las larvas pequeñas de polilla, con el paso del tiempo y con una concentración suficiente. Sin embargo, un armario proporciona mucha circulación de aire como para ser letal para las larvas y probablemente solo serviría como un disuasivo para las polillas adultas.
    • El cedro rojo oriental solo es eficaz por unos años. Al cabo de un tiempo, el aceite aromático contenido dentro de la madera se evaporará, lo que lo vuelve ineficaz en el combate contra las polillas.
  6. Durante mucho tiempo se ha pensado que ciertas hierbas y productos alimenticios pueden proteger la ropa de las polillas. Por la misma razón que el cedro es eficaz (un olor muy potente), la teoría es que existen otros olores fuertes que pueden mantener alejadas a las polillas. En un experimento reciente, los investigadores descubrieron que la canela, el clavo de olor y la lavanda son eficaces para evitar que las polillas coman la ropa. Puedes hacer bolsitas o colocar un bol de aceite aromático en tu armario. [20]
    • Ciertas hierbas aromáticas, como las hojas de laurel, el eucalipto, la cáscara de limón y la menta han demostrado ser ineficaces en el experimento, así que ten cuidado con las hierbas que utilizas.
    • Ten presente que algunos de estos aromas son muy difíciles de quitar de la ropa, en caso de que a ti o a tus seres queridos no les gusten estas plantas o tengan alergias a ellas.
  7. Ya sea que intentes evitar la aparición o la recurrencia de una infestación, debes revisar tu ropa durante todo el año. Busca signos de infestación, lo que suele equivaler a varios agujeros sospechosos en la ropa. [21]
    • Aunque esto es muy importante durante los meses en que la ropa no está almacenada en contenedores de plástico, también es importante revisarla al menos una vez después de haberla almacenado: las polillas adultas viven de 75 a 80 días y los huevos se convierten en larvas después de 4 a 10 días. Si los huevos de la polilla lograron entrar en el artículo de almacenamiento y pasaron desapercibidos, puedes encontrarte con ropa arruinada meses más tarde. [22]
    • Mover y revolver la ropa durante este proceso es muy útil, puesto que a las polillas no les gusta poner sus huevos en lugares con perturbaciones frecuentes.
    Anuncio

Consejos

  • Evita tomar o comprar productos de lana o piel de animales de segunda mano, puesto que son las fuentes más comunes para introducir a tu casa las polillas que comen lana. Si debes tener un artículo usado que esté hecho de fibras animales naturales, siempre lávalo primero antes de meterlo en tu armario. [23]
  • Todos los artículos hechos de textiles naturales, incluidas las alfombras, las sillas y los sofás, corren peligro durante una infestación de polillas. Así que asegúrate de controlar el problema si detectas una infestación. [24]
  • Cuando el clima se vuelve más frío, si resistes la necesidad de encender la calefacción, tu casa será menos hospitalaria para las polillas y otras plagas domésticas. [25]
Anuncio

Advertencias

  • Si utilizas repelentes químicos para polillas, siempre debes aplicarlos según las instrucciones, ya que pueden ser tóxicos.
Anuncio

Acerca de este wikiHow

Esta página ha recibido 13 506 visitas.

¿Te ayudó este artículo?

Anuncio