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Puede ser muy frustrante y confuso cuando quieres tener relaciones sexuales pero tu novia parece completamente indiferente. Ya sea que te hayan dicho que eres "sexualmente demandante" o tan solo te sientas culpable por querer más intimidad física, la buena noticia es que la comunicación abierta puede ayudarte a volver a encaminar tu vida sexual. Este artículo ahondará en la psicología de lidiar con libidos desiguales y las formas respaldadas por expertos de resolver problemas que surgen cuando una pareja tiene un mayor deseo sexual.

Este artículo se basa en una entrevista con nuestra terapeuta psicosexual licenciada, Jacqueline Hellyer, fundadora de The Love Life Blog y The LoveLife Clinic.

Método 1
Método 1 de 3:

¿Por qué sientes que eres sexualmente demandante?

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  1. Es completamente normal que las parejas tengan distintos niveles de deseo sexual, aunque es posible que esas diferencias no surjan cuando apenas empiecen a salir. La terapeuta psicosexual Jacqueline Hellyer explica: "cuando apenas empiezan a salir […], no pueden esperar para arrancarse la ropa. Pero así no es la vida para la mayoría de las personas. Hacer la transición de eso [puede ser difícil]". Cuando las diferencias en libido empiecen a surgir, quizás sientas culpa o vergüenza por querer "demasiado sexo" si tu deseo sexual es mayor. Mientras tanto, quizás tu pareja empiece a ser menos cariñosa o a distanciarse para evitar cualquier cosa que podría conducir al sexo. [1]
    • Las libidos desiguales no implican que algo ande "mal" con ninguno de ustedes. [2] Distintas necesidades sexuales pueden ocasionar tensión en las relaciones, pero puedes mejorar la situación mediante la comunicación y la colaboración.
    • La compatibilidad sexual abarca más que solo acordar la frecuencia con la que quieran tener relaciones. Quiere decir que ambos están de acuerdo con lo que el sexo representa en una relación y se sienten cómodos con comunicar sus deseos y límites.
  2. El contacto físico crea una sensación de seguridad y vínculo debido a que libera un torrente de hormonas que hacen sentir bien (por ejemplo, la oxitocina y la dopamina). Según tu estilo de apego (la forma como abordes las relaciones), quizás ansíes el contacto físico para sentirte seguro y amado. El deseo de validación por parte de tu pareja suele ser normal. Sin embargo, así es como puedes determinar si la necesidad de contacto sexual proviene de una dependencia emocional mayor y poco saludable de tu pareja: [3]
    • Pregúntate lo siguiente: "¿Necesito tener relaciones para sentirme 'completo', para mejorar mi autoestima o para sentirme apaciguado en la relación?".
    • Si la respuesta es sí, quizás sea momento de hablar con tu pareja acerca de las inquietudes emocionales que tengas en la relación, tomarte el tiempo de trabajar en tu propia autoestima o acudir a un terapeuta para que te brinde ayuda profesional.
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Método 2
Método 2 de 3:

Cómo hablar con tu pareja acerca del sexo

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  1. Quizás debas restaurar lo que consideras una vida sexual saludable, pero es posible que tu novia tenga otra idea de lo que es una vida sexual saludable para ella. La terapeuta psicosexual Jacqueline Hellyer hace énfasis en la importancia de la comunicación: "[El sexo] es como un pasatiempo mutuo. Es algo que haces por placer en tus ratos de ocio, ¿verdad? Si juegan tenis juntos, si fueran a tomar clases de cocina juntos, lo hablarían. […] La incomodidad [es] solo un mito. No es real, no sucede. Todo lo bueno en la vida requiere concentración y comunicación. Hay dos personas involucradas. Esa es la única forma en la que tendrán un buen partido de tenis o prepararán una buena comida juntos".
    • Elige un momento para hablar cuando los dos estén relajados y no teniendo intimidad activamente. Pregúntale a tu novia qué significa el sexo para ella en una relación y si está satisfecha con la cantidad de sexo que tengan. [4]
    • "Me encanta cuando tomas la iniciativa en el sexo. Creo que es sexi y me hace sentir deseado. ¿Qué te gusta de nuestra vida sexual? ¿Qué te gustaría que fuera diferente?". [5]
    • "Me gusta tener sexo contigo porque me hace sentir cerca de ti. Tengo curiosidad: ¿con cuánta frecuencia te gusta tener sexo en una semana?".
    • "He notado que no tenemos sexo con tanta frecuencia como antes. Sé que es normal, pero quería preguntarte: ¿quieres que hagamos algo de forma diferente?".
  2. Pregúntale qué es lo que la pone de ánimo y qué le resulta placentero. La terapeuta psicosexual Jacqueline Hellyer les recuerda a los lectores: "Muchas personas tienen este mito de que el [sexo] simplemente debe suceder, como si uno no tuviera que hacer nada. Y que si uno tiene que hacer algo, bueno, es forzado o incómodo o de algún modo está mal. Y siempre digo 'Chicos, no, no, no' esto es muy normal. Así que incluso solo saber que es normal [tener que] ponerse de ánimo elimina un poco de la incomodidad". Al hablar de manera abierta acerca de lo que te gusta y lo que no, puedes asegurarte de que tú y tu novia le saquen el mayor provecho a su vida sexual. Y no olvides que la comunicación no debe ser algo por única vez. Hablen antes, durante y después del sexo. [6]
    • "¿Prefieres cuando alguien inicia el sexo con el contacto físico o con las palabras?".
    • "¿Qué tipo de ánimo, contacto físico y ritmos te excitan?".
    • "¿Hay un momento del día en el que tienes más ganas de tener sexo que en otros momentos?".
  3. Apunta a encontrar un punto intermedio que respete los límites del otro y los ayude a los dos a conseguir algo que quieran. Es importante que el sexo tenga relación con una conexión compartida y no con el placer de una persona. La terapeuta psicosexual hace énfasis en que "la única forma en la que algo puede estar bien y funcionar para ti es si estás en sintonía con lo que sientes y te comunicas con tu pareja. Y viceversa. […] Entonces están cocreando algo que les funciona a los dos". Independientemente de las concesiones que hagas, no olvides que tú y tu pareja deben consentir de manera entusiasta a cualquier cosa antes de hacerla. [7]
    • Por ejemplo, tu pareja podría no querer sexo penetrante, pero quizás le guste el contacto físico ligero o besarte mientras te masturbas.
    • Quizás tu novia no quiera tener sexo después de un largo día de trabajo, pero podría gustarle tener sexo por la mañana.
    • Puede ser que prefiera programar el sexo en lugar de tener que iniciarlo y preocuparse por el posible rechazo. [8]
  4. Es fácil sentirte rechazado o frustrado si tu pareja te dice que no. Sin embargo, el desinterés de tu pareja en el sexo quizás no tenga ninguna relación contigo. Su falta de deseo podría deberse a un deseo sexual más bajo por naturaleza, cambios hormonales, efectos secundarios de un medicamento o incluso el estrés y la fatiga cotidianos. [9]
    • Independientemente del motivo por el cual tu pareja no quiera tener sexo, es importante que no la presiones ni te molestes con ella.
    • Nunca está bien obligar a alguien a tener sexo, y hacer que tu pareja se sienta culpable puede disminuir aún más el deseo sexual. [10]
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Método 3
Método 3 de 3:

Qué hacer cuando tienes un deseo sexual más alto que el de tu pareja

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  1. Para muchas mujeres, la conexión emocional es un prerrequisito para el deseo sexual. [11] Al enfocar tu atención en hacer que tu novia se sienta especial y valorada en tu relación, quizás de hecho mejores su vida sexual. Prueba con volver a encender la chispa llevándola a una cita romántica, dejándole notas tiernas por la casa y escuchándola cuando tenga un mal día.
    • Elige una actividad que le encante y esfuérzate por practicarla junto con ella, ya sea ver su película favorita o probar con su pasatiempo favorito.
  2. Si bien quizás parezca contradictoria, la clave para restablecer la intimidad mediante el cariño es dejar ir las expectativas de sexo. Si el sexo deja de ser una opción, tu novia no se sentirá presionada y tú no te sentirás decepcionado si una sesión de arrumacos no conduce al sexo. Podrías saludar a tu novia con un beso, acurrucarte con ella en el sofá u ofrecerte a hacerle un masaje en la espalda. [12]
    • El contacto físico no sexual está vinculado a una mayor satisfacción en las relaciones.
  3. Piensa en un momento en el que te hayas sentido satisfecho sexualmente en tu relación. ¿Qué era diferente entonces? Es normal que el deseo sexual cambie con el tiempo, y es posible que debas esforzarte un poco para ponerle un poco de pimienta a las cosas, sobre todo si han estado saliendo por un tiempo. La terapeuta psicosexual Jacqueline Hellyer explica: "muchas personas creen que el sexo es coito o que el sexo [solo tiene relación con] llegar al orgasmo. [De hecho,] tiene relación con la conexión y el placer y la intimidad y sentirse bien el uno con el otro. Eso no tiene nada de performativo". Trabajen juntos para señalar algunas cosas clave que solían encender el deseo en su relación y tráiganlas de vuelta. [13]
    • Si sientes que te falta el romance relámpago de cuando apenas empezaban a salir, podrías sorprender a tu novia con una escapada por el fin de semana o una noche divertida en su restaurante favorito.
    • Si te preocupa que simplemente no tienen tanto tiempo para conectar, podrías planificar una noche de cita semanal en la que desconecten sus dispositivos y pasen tiempo de calidad el uno con el otro.
    • Si solían pasar días sin verse pero ahora viven juntos, podrían recrear la anticipación y el entusiasmo enviándose mensajes de texto subidos de tono durante el día mientras estén fuera.
  4. Si tu novia no quiere tener relaciones y te dice que no, es importante que respetes lo que quiere. La masturbación es una forma perfectamente saludable de satisfacer tus necesidades sexuales y puede serte de ayuda para entrar en contacto con tu propio cuerpo. [14]
    • Asimismo, puedes recurrir a actividades como el ejercicio y el arte como una forma de ocuparte con algo físico y tangible para poder distraerte del sexo. [15]
  5. Un terapeuta sexual profesional puede ayudarlos a determinar cómo navegar sus distintas necesidades sexuales si las cosas no mejoran. La terapeuta sexual Jacqueline Hellyer les recuerda a los lectores que es normal pedir ayuda: "hay doctores, dentistas, contadores, asesores financieros, entrenadores personales, quiroprácticos, mecánicos para el auto. Hay tantas personas a las que acudimos cuando no tenemos conocimiento y habilidades para algo. […] Pero en lo que respecta al sexo, y de hecho muy a menudo en las relaciones en general, muchas personas creen 'Ah, debemos poder arreglarlo nosotros mismos' [aunque] es la única área de la vida en la que en realidad no tenemos ninguna información ni capacitación".
    • Gran parte del trabajo de un terapeuta sexual se enfoca en tan solo reestablecer la comunicación y ayudarlo a cada uno a comprender la perspectiva de la otra persona.
    • Los terapeutas sexuales también pueden ayudar a tratar la posible adicción al sexo, que es cuando alguien experimenta pensamientos y ansias fuertes, no deseados e incontrolables en torno al sexo. [16]
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