PDF download Descargar el PDF PDF download Descargar el PDF

Si bien es cierto que crear un presupuesto no es el proyecto más emocionante en el mundo, es una manera fantástica de tomar el control de tu vida financiera. Si sabes cuántos ingresos y gastos tienes, podrás tomar decisiones financieras más inteligentes. Calcular tus ingresos y gastos semanales totales es un punto inicial grandioso. Busca maneras de ahorrar, como salir a comer fuera con menos frecuencia. Si creas un grupo de metas para la elaboración de presupuestos (como ahorrar para el pago inicial de tu casa soñada), esto te mantendrá motivado. ¡Puedes hacerlo!

Parte 1
Parte 1 de 3:

Establecer un marco para el presupuesto

PDF download Descargar el PDF
  1. Antes de sentarte a elaborar tu presupuesto, imprime o busca de forma digital todo documento financiero de los últimos seis meses. Esto comprende a todo estado de cuenta bancaria o cuenta de ahorros, comprobante de pago, estado de cuenta de préstamo, factura mensual y recibo de tienda. [1]
    • Tan pronto como decidas crear un presupuesto, empieza a guardar los recibos en lugar de triturarlos.
  2. Anota todas tus fuentes de ingresos para todo un mes. Si tus ingresos suelen variar en gran medida, suma los de los tres meses anteriores y divide dicha cifra entre tres para tener un promedio mensual. Para conseguir la cifra de tus ingresos semanales, toma el promedio mensual y divídelo entre cuatro. [2]
    • Para la elaboración del presupuesto, solo incluye tus ingresos del trabajo luego de deducir los impuestos, tal como se muestran en los recibos de tus pagos.
  3. Consigue un bolígrafo y un papel, o usa un programa para crear presupuestos (como Mint), y suma todos los gastos del mes anterior. Divide todos estos gastos en categorías temáticas, como cenas fuera, abarrotes y gasolina. Luego calcula la cantidad total que hayas gastado en el mes y divídela entre cuatro para conseguir la cantidad semanal. Haz lo mismo con las facturas mensuales, como las del agua, la electricidad o el teléfono. [3]
    • Revisa tus estados de cuenta bancarios y de tus tarjetas de crédito, o anota todo lo que compres si usas efectivo, para así tener una idea de cuánto gastas.
    • Si elaboras el presupuesto basándote en la manera en la que gastas el dinero, podrás ceñirte a él con mucha más facilidad, incluso si tienes que hacer modificaciones más adelante.
  4. Los gastos no esenciales son los que surgen de tus elecciones de estilo de vida, como comer fuera o las membresías de gimnasio. Estos gastos no deben superar el 30 % de tus ingresos totales. Los gastos esenciales son necesarios y solo puedes modificarlos un poco, como el pago del alquiler o la hipoteca. Estos deben abarcar al 50 % de tus ingresos totales cada mes (o menos). [4]
    • Este paso debe darte una idea de si gastas demasiado o no en cosas no esenciales, como salir a comer. Asimismo, te indicará si tu costo de vida actual (incluidos los gastos como una hipoteca) es muy alto para tus ingresos.
  5. Suma los gastos semanales de la categoría de gastos esenciales y no esenciales, y réstale esta cantidad a tus ingresos semanales. Si tienes dinero sobrante, asígnalo a tus ahorros o a cumplir tus otras metas. Si solo tienes la cantidad exacta que necesitas, no tendrás un exceso de ingresos. Si tienes una cifra negativa, tendrás que hacerle algunos cambios considerables a tu presupuesto. [5]
    • Reserva dinero suficiente cada semana para todos los gastos fijos, incluido el alquiler o la hipoteca, los servicios básicos y las suscripciones en línea. El dinero que sobre es el que puedes usar en los gastos no esenciales, ya sea comprar alimentos, ir de compras o asignar dinero a tus ahorros.
  6. Si no te sobra dinero o gastas demasiado cada semana, revisa tus gastos no esenciales para reducir los costos. Evalúa cada compra para decidir si era absolutamente necesaria. Prueba con las cifras para determinar cuánto debes reducir en una categoría determinada a fin de tener los ahorros que deseas y recuperar una proporción positiva de ingresos y gastos. [6]
    • Por ejemplo, un punto débil para tu situación financiera podría ser comer fuera con demasiada frecuencia cuando las comidas en casa podrían ayudarte a ahorrar dinero.
    Anuncio
Parte 2
Parte 2 de 3:

Crear metas para el presupuesto

PDF download Descargar el PDF
  1. Esto se centra más en ser realista con el tipo de estilo de vida que quieres tener en el futuro, en lugar de crear metas específicas. ¿Planeas realizar inversiones importantes (como comprar una casa) o te gustaría usar tus fondos para viajar? ¿Quieres acumular tu dinero en ahorros o establecer un fondo de seguridad y luego gastar como lo desees? ¿Tienes que ayudar a otros con tus fondos? [7]
    • Algunas personas indican que cortar imágenes de lo que consideran como un estilo de vida exitoso a nivel económico (como la foto de una casa de vacaciones) las motiva y las mantiene centradas.
  2. Suma todo dinero que tengas actualmente en tus cuentas corrientes o de ahorros, todo interés o capital en fondos de jubilación o inversiones, y el valor ajustado de toda propiedad importante, como un auto o una casa. Conocer esta cantidad podría no parecerte importante, pero te indica cómo fijar metas realistas que puedas aplicar a tu bienestar financiero en general. [8]
  3. Estas son metas que puedes lograr de forma realista en menos de un año. Crea una lista de todas las posibles opciones y ordénalas según la prioridad y el costo. Luego decide en cuáles puedes empezar a trabajar basándote en los fondos disponibles en tu presupuesto. [9]
    • Por ejemplo, podrías tener que ahorrar hasta $3000 para un fondo de emergencia. Divídelo en la cantidad que puedas guardar para este fin cada semana mientras sigues tu presupuesto.
  4. Busca ideas que requieran más de un año y de 5 a 10 años para completarlas. Esto podría consistir en comprar una casa o incluso aumentar los fondos de jubilación. Calcula cuándo te gustaría alcanzar cada meta y asigna un valor monetario. Luego divide el valor monetario entre la cantidad de semanas que tome. Esta es la cantidad que tendrás que guardar para dicha meta a largo plazo. [10]
    • Por ejemplo, imagina que tu meta es ahorrar $30 000 para tu jubilación en los siguientes cinco años. Hay 52 semanas en un año. Divide 30 000 entre 260 (52 semanas por 5 años) y tendrás que ahorrar $115 adicionales cada semana para lograrlo.
  5. Determina en qué metas financieras te gustaría enfocarte primero. Con frecuencia, lo mejor es empezar con algo pequeño. incluye en el presupuesto las cantidades que tendrás que ahorrar cada semana para lograr tus metas y observa si sigue siendo factible y realista. [11]
    • Tu presupuesto podría mostrar actualmente que solo puedes ahorrar $200 para tus metas cada semana. Luego tendrás que buscar metas que no excedan esta cantidad, como guardar $50 a la semana para un fondo de emergencia.
    • Este es un paso importante porque hace que las metas dejen de ser una ilusión y se vuelvan una realidad. Esto también ayuda a inculcar el hábito de ahorrar, en lugar de gastar.
    Anuncio
Parte 3
Parte 3 de 3:

Tomar decisiones financieras inteligentes

PDF download Descargar el PDF
  1. Los presupuestos cambian de forma constante, y requieren una supervisión y actualizaciones continuos. Reserva un día y una hora cada semana para sentarte a revisar las cifras del presupuesto y hacer todo cambio necesario. [12]
    • Cuando revises tu presupuesto, debes actualizar los gastos incluyendo todo descuento que hayas podido negociar.
  2. Comunícate con todas las compañías a las que les pagues con frecuencia y consulta sobre todo programa de ahorro o descuentos. Podrías calificar para un programa del cual quizás no estés informado. Si has sido su cliente por un largo tiempo y pagas las facturas a tiempo, debes indicárselo al encargado. [13]
    • Por ejemplo, la compañía de teléfono podría darte una tarifa promocional para mantenerte como cliente.
    • Como siempre, trata de ser amigable y estar centrado cuando converses con los empleados de atención al cliente. Si te frustras demasiado, solo agradéceles, cuelga y vuelve a llamar en otro momento.
  3. Hay muchas aplicaciones para elaborar presupuestos (como BillGuard o Dollarbird) que puedes usar en tu teléfono, computadora o en ambos. Experimenta para determinar cuál te parece la mejor, ya que algunas cobran un monto y otras son gratuitas. Asegúrate de ingresar datos en la aplicación de manera fiable, ya que solo será de ayuda si le brindas información útil. [14]
    • Incluso podrías usar una aplicación para pagar facturas, así pagarás de forma puntual y podrás notar cómo cambian los montos de las facturas con el tiempo.
    Anuncio

Consejos

  • Si no te gusta usar papel y bolígrafo, hay muchos programas informáticos fantásticos para crear presupuestos. Estos programas te mostrarán cómo ingresar tus ingresos y gastos, y completarán todos los cálculos por ti. [15]
  • Algunas personas consideran que es útil asignar un monto semanal para gastos no esenciales. Ellas colocan este monto en efectivo dentro de un sobre, y es lo único que gastan en artículos no esenciales durante la semana.
Anuncio

Advertencias

  • Es normal que la elaboración de un presupuesto tome mucho tiempo, por lo menos las primeras veces. Tan solo ten paciencia y mantén la información lo más detallada posible. Puedes tomarte un descanso y retomarlo si es necesario. [16]
Anuncio

Acerca de este wikiHow

Esta página ha recibido 6851 visitas.

¿Te ayudó este artículo?

Anuncio