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Un ensayo descriptivo debe crear una imagen vívida del tema en la mente del lector. Tal vez tengas que escribir un ensayo descriptivo para la tarea de una clase o como un divertido reto de redacción. Empieza haciendo una lluvia de ideas. Luego, esboza el ensayo y escríbelo usando detalles sensoriales y una descripción sólida. Siempre debes pulirlo y revisarlo para que quede excelente.

Parte 1
Parte 1 de 3:

Hacer una lluvia de ideas para el ensayo

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  1. Una opción para un tema es describir a una persona que conozcas bien. Podría ser un familiar como tu madre o tu padre. También podría ser uno de tus mejores amigos, un compañero de trabajo o un mentor. Escoge a una persona sobre la que tengas mucho que escribir para que tengas suficiente información para el ensayo. [1]
    • También podrías escoger una persona ficticia sobre la cual escribir, como un personaje en un libro, historia u obra. Podrías escribir acerca de un personaje de tu programa televisivo o videojuego favorito.
  2. Otra opción es concentrarte en un lugar u objeto específico sobre la que tengas fuertes sentimientos. Podría ser un lugar como tu escuela secundaria, tu trabajo o tu casa de la infancia. También podrías escribir acerca de una reliquia de familia importante o un regalo de un amigo. [2]
    • Otra idea para esta opción es escribir sobre un lugar u objeto inventado, como la escuela ficticia de tu libro preferido o la varita mágica de tu programa televisivo favorito.
  3. Algunos ensayos descriptivos se tratan de una emoción con la que te conectas o te relacionas. Podrías escoger una fuerte emoción como la ira, la pérdida, el deseo o la rabia. Luego, podrías tratar de describir la emoción usando tus propias experiencias. [3]
    • También podrías escoger una emoción más específica, como el amor fraternal o el odio a sí mismo. Estas emociones pueden servir para ensayos descriptivos sólidos.
  4. Una vez que hayas escogido el tema, traza cinco columnas en una hoja de papel o documento Word en tu computadora. Posteriormente, etiqueta cada columna con los 5 sentidos: tacto, vista, oído, gusto, olfato. Anota la mayor cantidad de detalles posible en que puedas pensar para el tema según cada sentido. Luego, puedes usar estos apuntes en tu ensayo. [4]
    • Por ejemplo, si estuvieras escribiendo sobre una persona como tu madre, podrías anotar debajo “Oído” lo siguiente: “Voz suave en la noche, ruido seco de sus zapatos en el pavimento, ruido de la cuchara cuando cocina”.
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Parte 2
Parte 2 de 3:

Redactar el ensayo

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  1. Organiza el ensayo creando un esquema temático breve. Hazlo en secciones: introducción, cuerpo y conclusión. El patrón es un ensayo de 5 párrafos: 1 para la introducción, 3 para el cuerpo y 1 para la conclusión. Sin embargo, también puedes usar secciones, permitiéndote redactar la cantidad de párrafos que quieras en la sección de cuerpo del ensayo. [5]
    • Si vas a escribir el ensayo para una clase, el profesor debe especificar si quiere un ensayo de 5 párrafos o si tienes la libertad de usar secciones.
  2. Crea una postura . Esta frase es la idea o tema clave del ensayo. Indica el propósito del ensayo y actúa como una guía para el resto del ensayo. La postura debe aparecer en tu introducción y se debe volver a mencionar en la conclusión. [6]
    • Por ejemplo, si estuvieras escribiendo un ensayo descriptivo sobre tu madre, podrías tener una postura como “De muchas maneras, mi madre es la reina de la casa, llena de contradicciones que nos da demasiado miedo cuestionar”.
  3. La introducción del ensayo descriptivo debe sentar las bases e introducir el tema al lector. Utiliza la lista de detalles sensoriales para describir el tema. Debes empezar con una frase de apertura sólida que llame la atención del lector. Luego, termina la introducción con tu postura. [7]
    • Por ejemplo, si estuvieras escribiendo un ensayo sobre tu mamá, podrías empezar con “Mi madre no es como otras madres. Es una mujer muy protectora y misteriosa con mis hermanas y conmigo”.
    • Si estuvieras redactando un ensayo acerca de un objeto, podrías empezar con “Lo intenté, pero me costó mantener mi piedra mascota viva”.
  4. Usa adjetivos que expresen emoción. Sé lo más específico posible. Por ejemplo, en vez de usar un adjetivo amplio como “molesto”, escoge adjetivos específicos como “enfadado” o “tormentoso”. Elige adjetivos que pinten una imagen clara en la mente del lector. [8]
    • También puedes usar adjetivos que se conecten con los sentidos, como “putrefacto”, “brillante”, “duro” y “picante”.
    • Por ejemplo, podrías describir a tu madre como “brillante”, “dura” y “con aroma a jazmín”.
  5. Las metáforas son cuando comparas una cosa con otra. Úsalas para mostrarle al lector lo que opinas sobre el tema, en vez de simplemente decirle cómo te sientes. Por ejemplo, en vez de decirle “Mi madre se sacrificó mucho por nosotros”, puedes usar una metáfora como “Mi madre es un caballo de batalla. No ha salido de vacacione en décadas”.
    • También puedes utilizar símiles, donde uses “como” para comprar una cosa con otra. Por ejemplo, podrías escribir “Mi madre sería como una guerrera feroz en una batalla, si el campo de batalla fueran las reuniones de padres de familia y la línea de salida estuviera en el supermercado”.
  6. No dudes en expresar tus emociones en el ensayo. Usa la primera persona para hablar de lo que sientes con respecto al tema detalladamente. ¿El tema te causa felicidad, tristeza, ira o repugnancia? ¿Cómo respondes emocionalmente al tema? [9]
    • Por ejemplo, podrías escribir sobre tus sentimientos complicados con respecto a tu madre. Podrías señalar que te da pena el hecho de que tu madre se sacrifique por la familia y que te sientes feliz por los privilegios que tienes en tu vida gracias a ella.
  7. La conclusión debe unir todas las ideas del ensayo. Vuelve a mencionar tu postura en la conclusión y termina con una oración final sólida. No agregues nada nuevo al ensayo en esa sección. Simplemente evalúa tus pensamientos y resume las cosas con una oración final breve. [10]
    • Por ejemplo, podrías terminar un ensayo descriptivo sobre tu madre indicando “En todos sus sacrificios, veo su fuerza, valentía y amor intenso por su familia, características que espero emular en mi propia vida”.
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Parte 3
Parte 3 de 3:

Pulir el ensayo

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  1. Una vez que hayas terminado un borrador del ensayo, léelo en voz alta. Presta atención a cualquier oración incómoda o poco clara. Encierra en un círculo estas oraciones para que puedas corregirlas más adelante. [11]
    • También puedes leer el ensayo en voz alta frente a los demás para escuchar sus comentarios. Pídeles que te digan si hay alguna oración poco clara o imprecisa en el ensayo.
  2. Muéstraselo a tus amigos, profesores, familiares y mentores. Pregúntales si creen que el ensayo es descriptivo y lleno de detalles sensoriales. Pídeles que te digan si tienen una idea clara del tema al final del ensayo. [12]
    • Mantente abierto a las críticas y comentarios constructivos de los demás. Esto solo volverá tu ensayo más sólido.
  3. Revisa el ensayo y elimina cualquier oración que no te parezca necesaria para el trabajo. Reemplaza cualquier adjetivo débil con adjetivos sólidos. Asegúrate de que tus descripciones del tema sean claras y fáciles de seguir. [13]
    • Si te han pedido un requisito de cantidad de palabras, asegúrate de cumplirlo. Agrégale más detalles al trabajo o saca la información innecesaria para llegar a esa cantidad de palabras.
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