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Las chimeneas de piedra se deben limpiar cuando la suciedad se acumula. Este tipo de chimeneas pueden ser difíciles de limpiar debido a la porosidad y forma irregular de las piedras. Con un poco de tiempo y esfuerzo, sin embargo, puedes realizar una rutina de limpieza sin la ayuda de un profesional. Primero debes preparar la chimenea, hacer una limpieza inicial y, después, limpiar profundamente de ser necesario.

Parte 1
Parte 1 de 3:

Preparar la chimenea para la limpieza

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  1. El exterior de la chimenea se debe limpiar al menos una vez al mes. El interior se debe limpiar cada vez que se acumulen 6 mm (1/4 de pulgada) de hollín. Para algunos, esto podría significar limpiarla una vez al año. La chimenea se debe limpiar unas cuantas veces al año si se utiliza con frecuencia. [1]
  2. Asegúrate de cubrir el área alrededor de la chimenea con una lona. Debes hacer esto para proteger la chimenea y el piso de los químicos de limpieza. Puedes comprar lona o usar cortinas de baño económicas compradas en la tienda. Sella la lona con cinta adhesiva.
  3. Extiende toallas o sábanas en el área alrededor de la lona. Esto atrapará cualquier goteo o derrame de la solución de limpieza. Usa sólo toallas o sábanas que ya no necesites. [2]
  4. Usa una escoba y un recogedor para barrer toda la ceniza y polvo que puedas. Barre alrededor de la chimenea y usa un cepillo pequeño para limpiar el polvo. Después, rocíala con agua. Esto hará la chimenea más susceptible a las soluciones de limpieza. [3]
  5. Usa siempre protección para los ojos y guantes de goma cuando uses químicos. Puedes elegir no hacerlo si usas soluciones suaves, pero definitivamente debes estar protegido cuando trabajes con lejía, limpiadores fuertes o fosfato trisódico. También debes abrir una ventana para dejar entrar aire fresco mientras limpias. [4]
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Parte 2
Parte 2 de 3:

Limpiar con un limpiador multiusos

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  1. Lava la chimenea con un limpiador multiusos. Algunos de estos limpiadores son de marcas reconocidas. Rocía el limpiador y usa una esponja para limpiar los residuos acumulados. [5]
  2. Después de fregar la primera vez, usa un jabón suave. Mézclalo con agua. Continúa fregando las piedras. [6]
  3. Regresa al limpiador multiusos después de haber fregado con el jabón. Friega durante un rato y después usa de nuevo el jabón si es necesario. Sigue cambiando del limpiador al jabón hasta que quedes satisfecho con el resultado. Deja pasar unos minutos hasta que las piedras se hayan secado. [7]
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Parte 3
Parte 3 de 3:

Limpieza profunda con fosfato trisódico

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  1. Usa ½ o 1 taza de fosfato trisódico. Viértela en 4 litros de agua tibia. Este es un químico muy fuerte, así que asegúrate de usar protección para manejarlo. [8]
    CONSEJO DE ESPECIALISTA

    Raymond Chiu

    Profesional en limpieza de casas
    Raymond Chiu es el director de operaciones de MaidSailors.com, un servicio de limpieza residencial y comercial líder. Maid Sailors se enorgullece de ofrecer servicios de limpieza excepcionales para el hogar y la oficina a precios razonables.
    Raymond Chiu
    Profesional en limpieza de casas

    Nuestro experto señala: mezcla fosfato trisódico con 4 litros de agua en una cubeta. Puedes comprar el fosfato trisódico en las ferreterías. Usa un cepillo para fregar la piedra con suavidad y luego limpia las áreas tratadas con un paño húmedo a fin de eliminar el exceso del químico. Siempre asegúrate de usar guantes, gafas de seguridad y una mascarilla, así como de que el área esté bien ventilada.

  2. Sumérgelo en la mezcla. Comienza a fregar la chimenea. Deberás hacerlo con fuerza para eliminar todos los residuos. Asegúrate de llegar a todos los lugares difíciles, rincones y grietas. [9]
  3. Si las manchas difíciles no se quitan, entonces prepara una pasta con un poco de agua y fosfato trisódico. Aplica la pasta directamente sobre la mancha. Friega hasta eliminarla. [10]
  4. Sumerge una esponja limpia dentro del agua. Enjuaga cada parte de la chimenea en dónde utilizaste fosfato trisódico. Déjala secar. [11]
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Consejos

  • Si se acumulan residuos entre una limpieza y otra, puedes usar jabón suave, agua y una esponja para limpiar las manchas.
  • Contempla la posibilidad de llamar a un profesional una vez al año para limpiar a fondo hollín y ceniza. [12]
  • Haz una prueba de limpieza con cualquier solución con la que no estés familiarizado. Pruébala en una parte oculta de la chimenea y espera 24 horas. [13]
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Advertencias

  • Limpia la chimenea únicamente cuando esté fría. No intentes limpiarla cuando esté caliente o en uso. [14]
  • Usa lejía con moderación porque podría decolorar las piedras. [15]
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Cosas que necesitarás

  • cubeta
  • lona
  • toallas
  • fosfato trisódico
  • agua
  • limpiador multiusos
  • jabón suave
  • cepillo para fregar
  • esponja

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