Descargar el PDF Descargar el PDF

Posiblemente sueñes con tener tu propio caballo algún día, una hermosa criatura que puedes montar cuando quieras. Sin embargo, debes saber que tener un caballo es una gran responsabilidad. Los caballos requieren mucha atención, dinero y esfuerzo. Antes de comprar uno, debes ser consciente de los costos financieros, y estar preparado para su cuidado y mantenimiento. Asimismo, debes reconocer las responsabilidades a largo plazo que conlleva tener un caballo.

Parte 1
Parte 1 de 3:

Ser consciente de los costos financieros

Descargar el PDF
  1. Antes de pasar directamente a ser propietario de un caballo, debes considerar si puedes permitirte el lujo de poseer y cuidar a uno. Tener un caballo es como cuidar a un niño pequeño, y los costos asociados con él pueden ser muy altos. Si buscas un caballo para empezar que te ayude a mejorar en la equitación, puedes terminar gastando hasta 5000 dólares o menos. Si quieres un caballo más maduro y aspiras a ser un jinete profesional, podría costar mucho más.
    • Debes averiguar acerca de los costos de los caballos en los establos de tu área. Posiblemente puedas conseguir un caballo por 3000 a 4000 dólares dependiendo de cuáles estén disponibles. [1] Asimismo, puedes calcular el pago en cuotas mensuales, donde pagarías entre 200 y 400 dólares al mes por la posesión del caballo.
    • Si cuentas con un establo y tienes un entrenador de caballos, debes discutir tus opciones con él. Pregúntale cuánto te costará un caballo específico. El entrenador también te puede recomendar que compres un caballo para empezar o uno que sea más maduro, dependiendo de tu nivel de equitación.
    • Un caballo “gratis” nunca es gratis. No te dejes engañar por este argumento de venta.
  2. Una vez que seas dueño del caballo, debes tener en cuenta dónde lo alojarás y cuánto costará el alojamiento. Pagarás por un establo o una instalación de alojamiento para cuidar al caballo. Las tarifas pueden variar según el mercado en tu área y, si optas por la atención completa, donde la instalación alimenta al caballo y limpia su compartimento por ti; o el cuidado propio, donde tú mismo te encargas de la alimentación y la limpieza.
    • Alojar a un caballo en una instalación con atención completa puede costar entre 200 y 500 dólares por mes, según el mercado en tu área. Sin embargo, si optas por el cuidado propio en una guardería para caballos, puedes terminar pagando solo 100 dólares al mes. [2]
    • Asegúrate de buscar instalaciones de alojamiento que no estén a más de 30 minutos de tu casa, si es posible. Esto hará que sea más fácil para ti ir y venir de las instalaciones todos los días. Luego, debes hacerles preguntas, como “¿qué incluye la atención completa y cuánto cuesta?” y “¿cuánto costaría el cuidado propio en sus instalaciones?”.
    • También debes preguntarles cómo son sus pastos, y por cuánto tiempo y cuándo (día o noche) pasean los caballos. Mira el tamaño del compartimento y considera cuánto pagarías por él. Algunos compartimentos que puedes conseguir tienen una parte interior y otra exterior, lo que significa que el caballo puede caminar afuera cuando lo desee o puede quedarse adentro en el compartimento.
    • Si tienes un terreno, como una granja o un lote grande donde puedes mantener al caballo, así como un establo o granero, los costos de alojamiento pueden ser mucho más bajos. Sin embargo, esto significa que tú mismo debes cuidar y alimentar al caballo.
  3. También debes planificar el costo de la comida para el caballo, ya que una gran parte de tu presupuesto estará destinado a su alimentación. El caballo necesita comer entre el 1,5 % y el 2,5 % de su peso corporal cada día en heno y grano. Si bien el heno y el grano no son muy caros, necesitarás grandes cantidades para mantener bien alimentado al caballo. Debes presupuestar entre 1000 y 2000 dólares al año para su alimentación. [3]
    • También debes considerar el costo del material de suelo del caballo. Si optas por la atención completa en una instalación de alojamiento, posiblemente esta cubra el material de suelo. Si cuidas a tu caballo por tu cuenta, posiblemente debas comprar heno para el suelo, lo que será un gasto mensual adicional.
    • Asimismo, debes considerar el costo de los suplementos, ya que es posible que necesite tomar algunos para mantenerse saludable. El veterinario recomendará suplementos para el caballo, que pueden ser costosos según el tipo que el animal requiera.
  4. Cuando compres tu propio caballo, debes invertir en equipo para montar, como una silla de montar, una brida y artículos de aseo. Asimismo, debes pagar los gastos continuos como el aerosol para moscas, los suministros de aseo personal y las mantas para caballos.
    • Si actualmente tienes un entrenador o instructor de caballos, debes conversar con él acerca de los costos de este equipo y los suministros. Debes optar por equipos de alta calidad y durabilidad, ya que esto reducirá tus gastos más adelante.
    • Busca opciones en tiendas de reventa o en línea. Posiblemente puedas encontrar arreos poco usados a un precio mucho más económico que comprar unos nuevos. También puedes esperar que las ventas de las empresas en línea se abastezcan de arreos a un precio con descuento.
  5. También debes tener en cuenta el cuidado y el mantenimiento del caballo, incluyendo el costo del herrador o cuidador de cascos. Los cascos del caballo deben cortarse y calzarse cada 4 a 6 semanas. Esto puede oscilar entre 350 y 1500 dólares para el herrador, dependiendo de su nivel de habilidad, la frecuencia de sus visitas y el tiempo que tarde en herrar al caballo. Esto es aparte del costo de colocar las botas, reemplazar las que están dañadas y comprar botas especiales para ayudar al caballo con los problemas de salud. [4]
    • Debes considerar el costo del cuidado veterinario del caballo. Esto incluye el costo de chequeos, vacunas, pruebas, desparasitación y atención de lesiones menores. El cuidado veterinario puede promediar al menos 1000 dólares por año, dependiendo de las necesidades del animal.
    • Asimismo, debes tener en cuenta el costo de la atención de emergencia para el caballo en caso de una emergencia o una lesión grave. El costo de esta atención puede ser elevado, según la naturaleza de la lesión.
    • También debes considerar si deseas invertir en un seguro para el caballo. Hay varias compañías que brindan seguros médicos por una tarifa mensual, como el seguro de salud humana, que puede ayudar a brindar protección para algunas de estas situaciones de emergencia y costos de atención preventiva.
    Anuncio
Parte 2
Parte 2 de 3:

Comprometerte con el cuidado y el mantenimiento del caballo

Descargar el PDF
  1. Si optas por el cuidado propio en una instalación de alojamiento o un lote de una casa, debes reservar al menos dos horas al día, todos los días, para el cuidado y mantenimiento. Debes estar dispuesto a comprometerte con el cuidado diario, ya que no puedes simplemente tomarte unas vacaciones u omitir un día cuando te sientas perezoso. El caballo dependerá de ti para comer y beber agua a diario, así como para su atención y cuidado. [5]
    • Debes considerar el horario actual y determinar si tienes tiempo para pasar dos horas al día al menos con el caballo. Esto significa que es posible que debas levantarte varias horas temprano en la mañana para cuidarlo o pasar tiempo después de la escuela o el trabajo para visitarlo.
    • Un caballo es una mascota a la que debes visitar en su casa, a diferencia de un perro con el que pasas tiempo sin salir de casa. Esto cambia drásticamente tu horario diario.
  2. También debes considerar la frecuencia con la que planeas montar a caballo y cuáles son tus objetivos como jinete. ¿Eres un jinete ávido con tiempo suficiente para montar a caballo 6 días a la semana? ¿O eres un jinete más recreativo y solo tienes tiempo suficiente para montar a caballo 2 veces por semana? Como mínimo, debes tratar de montar a caballo 2 o 3 veces por semana. Debes asegurarte de tener suficiente tiempo para comprometerte con un horario de equitación en el que el caballo haga suficiente ejercicio y reciba atención personal. [6]
    • No puedes simplemente dejar de montar al caballo durante meses, ya que a él solo le irá bien y se mantendrá saludable si le brindas amor y atención. Necesitarás tener suficiente tiempo para montarlo y formar un vínculo con él como su dueño de manera constante.
    • Puedes pagarle a alguien en el granero o instalación de alojamiento para que vaya a montarlo todos los días que no puedas o cuando estés fuera de la ciudad. Sin embargo, este es otro costo que debes tener en cuenta en tu presupuesto general.
  3. También debes considerar el tiempo que necesitarás para entrenarlo. Incluso si compras un caballo recién domado y está listo para montar, debes dedicar tiempo y dinero a realizar un entrenamiento básico con él. Puedes contratar a un entrenador para que trabaje contigo y el caballo para que tengas un plan de entrenamiento establecido. [7]
    • Posiblemente quieras hablar con un entrenador de caballos y determinar el tiempo necesario para entrenar una raza de caballo en particular o un tipo de caballo, como un caballo para principiantes. Puedes preguntar “¿cuánto tiempo debo dedicar a entrenar a mi caballo?” y “¿cuántas veces a la semana debo entrenar a mi caballo?”.
    • Asegúrate de tener en cuenta el tiempo de entrenamiento, así como el tiempo de equitación y mantenimiento. En conjunto, es posible que pases mucho tiempo en el establo con el caballo todos los días.
    • Los diferentes niveles de entrenadores tienen diferentes precios. Dependiendo de cuáles sean tus objetivos como propietario de un caballo, las tarifas de los entrenadores pueden elevarse muy rápidamente.
    Anuncio
Parte 3
Parte 3 de 3:

Identificar las responsabilidades a largo plazo de tener un caballo

Descargar el PDF
  1. Los caballos pueden vivir entre 20 y 30 años, y deben tratarse como responsabilidades a largo plazo. Debes estar preparado para dedicar años de cuidado y atención al caballo, al igual que lo harías con un compañero estable. Esto significa que debes visitarlo frecuentemente y esforzarte para mantenerlo feliz y saludable. [8]
    • Los compromisos financieros, así como los compromisos de tiempo, significan que no debes abordar la compra de un caballo a la ligera. Debes aprender a equilibrar las responsabilidades de tener un caballo con las demás responsabilidades de tu vida, como tu educación, tus relaciones personales y tu carrera.
  2. Debes estar preparado para otras responsabilidades a largo plazo de tener un caballo, como cuidarlo si se lesiona gravemente o queda cojo. Algunas veces, los caballos se lesionan y ya no pueden saltar o trotar como solían hacerlo. El caballo también puede desarrollar un problema de salud que produzca una cojera. Como propietario del caballo, entonces es tu responsabilidad decidir cómo darle el mejor apoyo y satisfacer tus necesidades como jinete. [9]
    • Si bien puedes vender o intercambiar al caballo, también debes considerar otras opciones como propietario. Si el caballo se enferma, se lesiona o queda cojo, debes discutir tus opciones con los entrenadores y el veterinario. Trata de encontrar una solución que incluya el cuidado del caballo y el logro de tus objetivos de equitación.
    • Si te encuentras en una situación en la que debes entregar al caballo, habla al respecto con el veterinario, ya que él conocerá instalaciones de retiro, graneros para caballos con necesidades especiales y personas que están equipadas para ayudar a mascotas de pastoreo. Ellos podrán orientarte mejor en la dirección correcta, además de ayudarte a encontrar la mejor solución para el caballo con cojera.
  3. Si no estás seguro de estar listo para las responsabilidades a largo plazo que implican tener un caballo, puedes optar primero por arrendar uno. Puedes hacer una arrendamiento total o parcial por seis meses, en el que pagas una tarifa fija por el tiempo de montar un caballo. Puedes empezar con un contrato de arrendamiento para que puedas tener una mejor idea del tiempo y los costos financieros que implican tener un caballo.
    • Si sientes que necesitas más tiempo con el caballo, puedes estar listo para continuar con la posesión de uno. Arrendar un caballo por un periodo de tiempo puede ayudarte a darte cuenta de si estás preparado para ser el dueño.
    • Arrendar un caballo también es una excelente manera de dividir las responsabilidades de la posesión de un caballo con otra persona. De esta manera, el caballo recibe el doble de amor y tú tienes uno para montar.
    Anuncio

Acerca de este wikiHow

Esta página ha recibido 1384 visitas.

¿Te ayudó este artículo?

Anuncio