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Hacer un huevo duro perfectamente cocido es más difícil de lo que parece. Para prepararlo, tienes que hervir un huevo crudo durante 10 a 15 minutos. Después de la cocción, puedes revisar si está bien cocido cortándolo o con un termómetro de lectura instantánea.

Método 1
Método 1 de 2:

Cortar el huevo

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  1. Haz un huevo duro . Para prepararlo de esta forma, haz hervir una olla grande de agua en la estufa. Después, ponle los huevos en el agua con cuidado y déjalos hervir entre 8 y 14 minutos. Otra opción para hervirlos es ponerlos en una olla de agua fría, hacerla hervir y, luego, sacarla del fuego. Deja reposar los huevos en el agua entre 9 y 15 minutos. [1]
    • Si hierves los huevos por 8 minutos, obtendrás las claras firmes y las yemas doradas.
    • Si los hierves por 12 minutos tendrán una yema completamente dura.
    • Hervir los huevos por 14 minutos o más resultará en una yema arenosa que se desmenuza. [2]
  2. Si vas a cocinar varios huevos, no hay razón para revisarlos todos. Saca uno del agua hirviente y pruébalo. Si está cocido, quiere decir que el resto de los huevos también lo estarán. [3]
  3. Los huevos duros estarán muy calientes al tocarlos apenas los saques del agua. Ponlos debajo del grifo por un minuto para enfriarlos de modo que puedas quitarles la cáscara. [4]
  4. Pela la cáscara del huevo . Una opción es golpearlo en una superficie plana y luego quitarle la cáscara con los dedos. También puedes romper su superficie con la parte posterior de una cuchara y deslizarla debajo de la cáscara para quitarla. [5]
  5. Córtalo directamente por el centro y verás la yema amarilla rodeada de la clara. [6]
  6. Cuando lo cortes, la yema estará sólida y amarilla. Si esta tiene un anillo verde alrededor, quiere decir que está un poco recocida. Si la parte interior aún está aguada, significa que no está totalmente cocida. Las claras deben quedar firmes, pero no gomosa. [7]
    • Si el huevo no está bien cocido, hierve los demás por unos 30 a 60 segundos más.
    • Si, por el contrario, está recocinado, saca el resto del agua para que no se cocinen aún más.
  7. Si están como te gustan, pásalo de inmediato a un baño de hielo para evitar que se recocinen. Pon unos cuantos cubos de hielo en un recipiente y llénalo con agua hasta la mitad. Después, usa una cuchara ranurada para pasar los huevos de la olla al recipiente con cuidado. [8]
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Método 2
Método 2 de 2:

Usar un termómetro

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  1. Saca un huevo del grupo si estás cocinando varios. Levántalo con cuidado e inclina la cuchara un poco para quitarle el agua. [9]
  2. Estará caliente cuando lo saques del agua, pero no lo dejes enfriar pues obtendrás una lectura errada en el termómetro. Más bien, usa guantes de cocina gruesos para manipularlo. [10]
  3. Empuja el extremo puntiagudo en la cascara hasta llegar al centro del huevo. Déjalo por unos cuantos segundos hasta que te dé una lectura. [11]
    • Puedes comprar un termómetro de lectura instanténea en Internet o en una tienda por departamento o de implementos de cocina.
  4. La yema debe tener entre 70 y 77 °C (158 y 170 °F). Si la temperatura es menor, regresa el huevo al agua y cocínalo por más tiempo. Si es mayor, quiere decir que lo has recocinado. [12]
    • Una yema de huevo recocinada será seca y arenoso, pero comestible.
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Vídeo


Consejos

  • Si no sabes bien si un huevo está crudo o duro, agarra otro que esté crudo y gira los dos en una superficie dura. Si giran al mismo ritmo, ambos están crudos. Si uno lo hace mucho más rápido que el otro, es porque está cocido.
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Cosas que necesitarás

Cortar el huevo

  • agua fría
  • un cuchillo

Usar un termómetro

  • guantes de cocina
  • un termómetro de lectura instantáneo

Acerca de este wikiHow

Resumen del artículo X

La mejor manera de saber si los huevos ya están duros es cortándolos. Utiliza una espumadera para sacar con cuidado uno de los huevos del agua hirviendo. Pon el huevo en agua fría durante un minuto. Luego, pela la cáscara del huevo y colócalo de lado. Usa un cuchillo afilado para cortar el huevo por la mitad. Si la yema está líquida, hierve los huevos durante unos minutos más y prueba con otro. Si la yema del huevo está sólida y amarilla, significa que están listos. Luego, puedes transferir los huevos a un baño de hielo para que se enfríen. Sírvelos y disfrútalos.

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