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El azúcar es el ingrediente básico de la mayoría de los dulces, pero hay unas cuantas recetas perfectas para resaltar su agradable textura y la deliciosa simplicidad de su sabor. Haz caramelos de azúcar para celebrar una fiesta, un cumpleaños o para tener un capricho especial a mano cuando te apetezca. Lee este artículo para aprender a hacer tres tipos clásicos de dulces de azúcar: piruletas, caramelos de roca y caramelos de mantequilla y azúcar.
Ingredientes
- 1 taza de azúcar
- 1/2 taza de sirope de maíz
- 1/4 taza de agua
- 1 cucharadita de aroma (por ejemplo, de vainilla, rosa, canela o naranja)
- 5 gotas de colorante alimentario
- Moldes y palos para piruletas
- 2 tazas de agua
- 4 tazas de azúcar
- 1 cucharadita de aroma (por ejemplo, de menta o de limón)
- 5 gotas de colorante alimentario
- 1 tarro de cristal
- Pinchos de madera
- 2 1/2 tazas de azúcar
- 3/4 taza de agua
- 1/2 taza de sirope de maíz
- 1 taza de mantequilla, ablandada y cortada en dados [1] X Fuente de investigación
- 1/4 taza de miel
- 1/2 cucharadita de sal
- 1/2 cucharadita de aroma de ron
Pasos
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Prepara los moldes para piruletas. Rocíalos con espray antiadherente de cocina para poder retirar las piruletas, una vez hechas, sin que se quiebren. Coloca los palos para piruletas en los moldes.
- Esta receta funciona con cualquier tipo de molde para caramelos duros. Pues utilizar moldes en forma de gota, estrella, corazón o cualquier otro tipo que te guste.
- Asegúrate de utilizar moldes para caramelos y no para otros tipos de comidas, ya que los moldes para caramelos están diseñados para evitar que los ingredientes se peguen al material.
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Echa el azúcar, el sirope de maíz y el agua en una olla. Pon la olla a calentar a fuego medio-alto. -
Remueve la mezcla hasta que el azúcar se disuelva. Pasa una brocha de repostería por los lados de la olla para evitar que la mezcla se pegue.
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Lleva la mezcla a ebullición. Deja de remover y comprueba la temperatura con un termómetro para azúcar. Deja que la mezcla continúe hirviendo hasta alcanzar los 146 °C (295 °F) y, después, retírala inmediatamente del fuego.
- Es importante retirar la mezcla de azúcar del fuego en cuanto alcance esta temperatura exacta. Utiliza un termómetro para azúcar y no para carne. De esta forma, te asegurarás de obtener resultados precisos.
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Mezcla el aroma y el colorante alimentario.
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Vierte la mezcla de caramelo en los moldes para piruletas utilizando una cuchara.
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Deja que las piruletas se endurezcan antes de retirarlas del molde.Anuncio
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Mezcla el azúcar y el agua en un tarro grande.
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Remueve bien la mezcla.
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Añade el aroma y el colorante alimentario. Los caramelos de roca adquieren un bonito color que, además, es acentuado por su forma de roca. Elige un color acorde al sabor. Puedes probar con combinaciones clásicas u otras que te gusten más:
- Caramelos de roca morados con sabor a lavanda
- Caramelos de roca naranjas con sabor a mandarina
- Caramelos de roca rosas con sabor a rosa
- Caramelos de roca rojos con sabor a canela
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Sumerge los palos de madera en la solución. Colócalos uniformemente por todo el tarro y apóyalos contra el borde. Fíjalos utilizando trozos de cinta adhesiva para que no se deslicen y se junten mientras se forma el caramelo de roca.
- Puedes utilizar palillos chinos en lugar de palos de madera o brochetas.
- Una cuerda colgando de un lápiz también puede servir como base para hacer caramelo de roca.
- Cubre el tarro con film transparente. De esta forma, evitarás que entren insectos o partículas de polvo en el tarro mientras el caramelo de roca cristaliza.
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Espera a que el azúcar se transforme en roca. El azúcar suele tardar una o dos semanas en cristalizar y transformarse en bonitas rocas adheridas a sus correspondientes palos de madera.
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Seca los caramelos de roca. Cuando estés satisfecho con el tamaño de las rocas, saca los palos del tarro y colócalos sobre una superficie plana hasta que se sequen.Anuncio
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Engrasa con mantequilla una sartén de 38 x 25 x 2,5 cm (15 x 10 x 1 pulgadas). Si no tienes una sartén de este tamaño exactamente, utiliza otra que sea suficientemente amplia y poco profunda.
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Mezcla el azúcar, el agua y el sirope de maíz en una olla. Calienta la mezcla a fuego medio-alto y remueve hasta que el azúcar se disuelva.
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Lleva la mezcla a ebullición. Deja de remover y deja que la mezcla se caliente hasta alcanzar los 132,2 °C (270 °F), asegurándote de que sea esa temperatura exacta con la ayuda de un termómetro para azúcar. Retírala del fuego.
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Añade la mantequilla, la miel, la sal y el aroma de ron.
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Remueve la mezcla hasta que alcance los 148,9 °C (300 °F).
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Retira la mezcla del fuego.
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Viértela sobre la sartén engrasada con mantequilla.
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Enfría la mezcla de caramelo durante 5 minutos.
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Corta los caramelos con un cuchillo. Utiliza un cuchillo para hacer cortes diagonales sobre la superficie de caramelo. Puedes hacer los caramelos del tamaño que quieras (cuanto más grandes sean, más fácil te resultará separarlos).
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Enfría del todo los caramelos.
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Parte la mezcla de caramelo siguiendo los cortes diagonales.Anuncio
Consejos
- Envuelve los caramelos de azúcar en papel de plata o en film transparente para guardarlos.
- Cuando enfríes los caramelos, espera a que se endurezcan de forma natural, ya que si los metes en el frigorífico o en el congelador adquirirán un sabor extraño.
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Advertencias
- Los caramelos de azúcar pueden alcanzar temperaturas muy altas. Ten extremo cuidado al manejarlos mientras estén todavía calientes.
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Cosas que necesitarás
Piruletas
- Moldes para hacer piruletas
- Palos de piruleta
- Espray antiadherente para cocinar
- Termómetro para azúcar
Caramelos de roca
- Tarro grande
- Pinchos de madera
Caramelos de mantequilla y azúcar
- Sartén amplia y poco profunda
- Termómetro para azúcar
Referencias
Acerca de este wikiHow
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