Descargar el PDF Descargar el PDF

Imagínate el siguiente escenario: llevas recorriendo 11 kilómetros (7 millas) en bicicleta en una ruta de 24 kilómetros (15 millas) en medio de la naturaleza cuando de repente tu llanta delantera se pincha con un clavo viejo y oxidado. ¿Qué haces? ¿Regresas caminando hasta el inicio de la ruta y te vas a casa, o reparas el pinchazo y terminas la ruta como un ganador? Si sabes detectar y parchar los agujeros en la cámara interior de tu bicicleta, y tienes la precaución de llevar contigo un sencillo kit de parches cada vez que realizas una ruta crítica en bicicleta, te darás el lujo de realizar esta elección.

Parte 1
Parte 1 de 3:

Encuentra el pinchazo

Descargar el PDF
  1. Lo primero que debes hacer en caso de que se te desinfle una llanta es retirar la rueda de la bicicleta. Verifica el lado de la rueda al centro de los rayos. Si tienes una liberación rápida (que parece una palanca pequeña), hazla girar hacia la izquierda para aflojarla. Por otro lado, si tienes una tuerca, necesitarás una llave inglesa para aflojarla. Luego, desconecta los frenos, retira las pastillas de freno, y saca la rueda.
  2. Cuando hayas logrado retirar con éxito la rueda pinchada, extrae la llanta exterior. Para esto, puede serte útil utilizar una llave de palanca. Algunas tiendas de bicicletas venden pequeñas herramientas especialmente diseñadas para este fin y se conocen como palancas para desmontar neumáticos. Ya sea que utilices una palanca o cualquier otra herramienta, ten cuidado de no pellizcar la cámara y causar un daño mayor a medida que trabajas con la llanta fuera de la rueda. Puedes dejar un borde de la llanta sobre el borde de la rueda cuando hayas terminado para facilitar su reinstalación.
  3. Una vez que hayas retirado la llanta, retira la cámara desinflada de la llanta y determina el lugar del pinchazo. Puedes hacerlo de varias maneras; a continuación te presentamos algunas:
  4. Los pinchazos que desinflan las llantas pueden ser sorprendentemente pequeños. Una vez que hayas encontrado uno, no querrás perderlo de vista. Usa una tiza blanca para marcar con una cruz o una “x” justo en el punto del pinchazo. Si usas un parche que requiere pegamento, haz una marca grande para que puedas verla después de haber untado el pegamento.
    • Si no tienes tiza en tu kit de parches, puedes valerte de un bolígrafo o cualquier otro tipo de utensilio para escribir. Sin embargo, es preferible la tiza blanca porque obviamente es más fácil verla sobre la goma negra que un bolígrafo de color azul o negro.
    Anuncio
Parte 2
Parte 2 de 3:

Parcha el agujero

Descargar el PDF
  1. Una vez que encuentres el agujero, revísalo con cuidado para ver si fue causado por un objeto extraño (por ejemplo, un trozo de cristal roto, una piedra afilada, etc.) o si fue un pellizco (lo que provocará un pinchazo parecido a la mordedura de una serpiente, pero que no dejará ningún objeto extraño). [1] Verifica cuidadosamente el borde interior de la llanta para ver si sobresalen objetos extraños, y elimínalos si los encuentras. No querrás que el mismo objeto que causó el agujero en primer lugar vuelva a perforar la llanta porque no lo viste.
  2. Todos los parches funcionan de diferentes maneras. Algunos requieren pegamento, mientras que otros no. Algunos requieren que se les pase la lija, mientras que otros pueden adherirse suavemente a la goma de la cámara interior sin ningún problema. Consulta las instrucciones incluidas en el kit de parches. Si te sugieren lijar, utiliza un pequeño cuadrado de papel de lija para raspar la zona alrededor del agujero que debe ser casi tan ancha como el parche que vas a utilizar. Al hacer la goma un poco menos suave puedes mejorar el poder de adhesión de algunos adhesivos.
    • Si no estás seguro de lijar, no te preocupes pues es poco probable que si lijas ligeramente, esto reduzca la capacidad de adhesión a la cámara de la mayoría de los parches. Por lo que es mejor que lijes por si acaso.
  3. A continuación, coloca el parche sobre el agujero de acuerdo a las instrucciones incluidas. Algunos parches requieren pegamento, mientras que otros pueden adherirse a la llanta por sí solos. Mientras que estos últimos son más convenientes, a veces pueden ser menos fiables. Puedes encontrar las instrucciones generales para ambos tipos de parches líneas abajo. Si las instrucciones incluidas en el parche son diferentes, sigue esas instrucciones en lugar de las que te mostramos aquí.
  4. En situaciones en las que tienes una cámara severamente dañada, es posible que no quieras desperdiciar tu parche y optes simplemente por reemplazar la cámara. Las cámaras que tienen daños graves no pueden permanecer infladas mucho tiempo con el parche, por lo que no vale la pena usarlo. Una mejor opción sería reemplazar la cámara por completo. Si puedes conseguirte una cámara nueva, el proceso de reemplazar la anterior no es difícil. A continuación, te presentamos algunos tipos de daños en las cámaras que pueden indicar que es mejor renunciar al parche:
    • Agujeros múltiples
    • Rasgaduras grandes
    • Fuga de aire incluso después de aplicar el parche.
    Anuncio
Parte 3
Parte 3 de 3:

Coloca la rueda de vuelta

Descargar el PDF
  1. Luego de que se establezca el parche, toma la cámara reparada y colócala con cuidado en la parte interior de la llanta. Esto suele ser más fácil si se infla ligeramente la cámara y deslizas dentro primero un lado, y luego vas colocando el resto. Cuando hayas terminado, verifica una vez más para asegurarte de que ningún lado de la cámara esté colgando fuera de la llanta.
  2. Utiliza tus pulgares para deslizar la llanta (que contiene la cámara parcialmente inflada) en la rueda. Presiona los bordes externos de la llanta sobre el borde de metal de la rueda para que se "bloqueen" de manera segura en su sitio. Ten cuidado de no pellizcar la cámara entre la llanta y el borde de la rueda. Es posible que necesites usar la palanca u otra herramienta para ayudarte con la última parte de la llanta (que a menudo puede ser difícil de deslizar sobre el borde de la rueda).
    • Ten en cuenta que algunas llantas de gama alta están diseñadas para girar solo en una dirección. En este caso, la dirección prevista de rotación por lo general se indica mediante flechas pequeñas en las paredes de las llantas. Nunca instales las llantas al revés. Esto puede reducir el rendimiento de la bicicleta y hacer que la llanta se desgaste incorrectamente.
    • No te olvides de retirar la tapa de la válvula antes de volver a colocar la cámara en la rueda. La válvula de inflado (sin la tapa) debe deslizarse a través de un agujero en forma de círculo en la rueda de modo que se pueda acceder fácilmente a esta para inflar la cámara.
  3. Utiliza un inflador automático o de accionamiento manual y empieza a inflar poco a poco la llanta. Debes inflar de a pocos para que la cámara se desplace y se establezca dentro de la llanta mientras se expande. Cuando esté completamente inflada, presiona la llanta; deja que la bicicleta repose por unos minutos, y luego presiona la llanta nuevamente. Si el segundo apretón se siente tan firme como el primero, entonces estás listo para montar tu bicicleta.
    • Si te preocupa que la cámara no se establezca correctamente dentro de la llanta, puedes inflarla antes de volver a colocar la llanta en la rueda. Sin embargo, ten en cuenta que esto puede dificultar que la llanta regrese a su sitio.
  4. Ya casi terminas. Todo lo que tienes que hacer ahora es deslizar la rueda en la bicicleta. Asegura la liberación rápida o tornillo en la tuerca de la rueda. Vuelve a conectar los frenos, y listo (a menos que hayas estado trabajando con la rueda trasera, en cuyo caso, debes volver a abrochar cuidadosamente la cadena alrededor de los engranajes). Pedalea con cautela hasta que te sientas seguro de que el parche no va a estallar de repente. Ahora, puedes manejar tu bicicleta como normalmente lo haces.
  5. Mientras que los parches de la cámara interior son muy útiles, no están necesariamente destinados a durar para siempre. Estos parches son buenos para sacarte de un bosque cuando se te pincha una llanta y no tienes un reemplazo, pero no constituyen una buena solución a largo plazo para una cámara interior perforada. Mientras que los parches de buena calidad tienen una fiabilidad muy cercana a la de una cámara nueva, otros pueden presentar fugas al poco tiempo de haberse colocado o pueden ofrecer solo una protección temporal. [2] No se puede comparar una de estas soluciones a una cámara nueva; así que por lo menos debes comprar una cuando tengas la oportunidad, para que la tengas a la mano si sufres otro pinchazo en el futuro.
    Anuncio

Consejos

  • Algunas cámaras vienen con un líquido en el interior que llena el agujero y automáticamente lo repara. A veces, esto no funciona. Una cosa que puedes hacer es retirar la cámara interior e inflarla con suficiente aire para que el líquido salga. Si no lo hace, entonces debes limpiar la suciedad alrededor del agujero para que el líquido pueda salir. Si lo hace, entonces simplemente coloca nuevamente la cámara interior en su sitio, ínflala y maneja tranquilo. Si no percibes el líquido, es momento de conseguir una cámara nueva o parcharla de la manera habitual.
  • Los kits de parches sin pegamento suelen funcionar durante poco tiempo, hasta que el aire del agujero logra traspasar el propio parche. Sin embargo, los kits de parches con pegamento fusionan químicamente el parche con la cámara, evitando esta situación.
  • El pegamento que viene con el kit de parches es seguro para la piel, así que no tengas miedo de tocarlo.
Anuncio

Advertencias

  • El objeto que perforó tu cámara podría estar afilado. En caso de que aún se encuentre dentro de la llanta, ten mucho cuidado cuando lo busques con las manos.
Anuncio

Cosas que necesitarás

  • Un kit de parches
  • Un inflador
  • Una llave inglesa o ruedas de liberación rápida
  • Una palanca para desmontar neumáticos

Acerca de este wikiHow

Esta página ha recibido 82 133 visitas.

¿Te ayudó este artículo?

Anuncio