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Mudarse a menudo es un proceso difícil para las familias, y puede ser especialmente duro para los niños, quienes no suelen tener la posibilidad de aportar su opinión. Si tus padres han decidido mudarse y quieres quedarte donde vives ahora, es importante que les cuentes cómo te sientes. Si bien no siempre es posible persuadirlos para no mudarse, presentar un caso meditado y bien investigado para quedarte es una buena estrategia.

Parte 1
Parte 1 de 3:

Examinar la situación

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  1. ¿Cuáles son los motivos por los que no quieres mudarte? ¿Qué perderás en la mudanza? ¿Qué podrías ganar? Tómate un tiempo para pensar en estas cosas. Esto hará que te resulte más sencillo hablar con tus padres del tema. [1]
    • Pasa un tiempo a solas pensando en tus motivos por no querer mudarte y cómo sería la mudanza. Quizás te resulte útil tomar notas de las cosas que pienses para poder usarlas en tus conversaciones con tus padres más adelante.
  2. Tus padres probablemente tengan buenos motivos para mudarse, pero quizás los desconozcas. Si no sabes por qué han decidido mudarse, pídeles que te expliquen los motivos.
    • Puedes decir algo así como "Creo que me sentiría mejor respecto a la mudanza si supiera por qué tenemos que hacerlo. ¿Pueden por favor explicármelo?".
    • Algunas razones comunes por las que las personas se mudan incluyen un trabajo nuevo, dificultades financieras, no les gusta el vecindario, o necesitan o desean tener una casa más grande (o pequeña). [2]
  3. Consulta si quieren o no mudarse, cuál es su perspectiva y cómo quedarse y mudarse afectará a la familia. Encuentra un terreno común que te ayude a sentirte mejor sobre la situación y que te ayude a fortalecer tu caso para quedarte. [3]
    • Por ejemplo, puedes decir algo así como "Estoy muy molesto por la idea de mudarnos. ¿Cómo se sienten al respecto?".
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Parte 2
Parte 2 de 3:

Prepararte para hablar con tus padres

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  1. Una vez que sepas por qué tus padres han decidido mudarse y cómo se sienten tus otros familiares al respecto, haz una lista de las ventajas y desventajas para toda la familia. [4]
    • Para hacer la lista de las ventajas y desventajas, toma dos hojas de papel y dibuja una línea en el medio de cada una.
    • En la parte superior de una hoja, escribe "Quedarse" y, en la parte superior de la otra, escribe "Mudarse".
    • Luego, en la parte superior de la columna izquierda de cada hoja de papel, escribe "Ventajas". En el lado derecho, escribe "Desventajas".
    • Después de crear las dos hojas de papel, llena los lados con las ventajas (aspectos positivos) y las desventajas (aspectos negativos) de cada papel con tantas razones como puedas. Asegúrate de incluir las ventajas y desventajas que hayas obtenido a través de las conversaciones con tus padres.
    • Comparte las listas que hayas creado e invita a tus padres y hermanos a agregar cosas para que estén completas. Publica las listas en el refrigerador o en algún área de alto tráfico para que tus familiares puedan leer las razones y agregar otras.
  2. Si la mudanza se debe a cuestiones financieras, quizás puedas contribuir de alguna forma para que puedan quedarse. Por ejemplo, si tienes la edad suficiente para tener un trabajo a tiempo parcial, ofrécete a contribuir tu salario para pagar las facturas. Si tienes algún pasatiempo que te cueste mucho dinero, puedes ceder esas actividades para ahorrar algo de dinero. [5]
  3. Tener sugerencias y estrategias alternativas será clave si quieres convencer a tus padres de quedarte. Busca tantas alternativas como sea posible antes de hablar de tus sentimientos con tus padres.
    • Busca lugares más económicos para vivir, trabajos en el área o lo que sea que motive la mudanza. Las finanzas a menudo son el motivo por el que las personas deciden mudarse.
    • Considera cuánto tiempo más planeas vivir en esa casa (por ejemplo, si terminas la escuela dentro de algunos meses o años). Si falta menos de un año para que puedas vivir solo, habla con tus padres para demorar la mudanza.
    • Busca estrategias alternativas para mantener la residencia. Por ejemplo, imagina que tus padres están interesados en vender la casa y mudarse, y eres independiente. Rentar y fijar la residencia puede convertirla en una fuente de ingresos, aunque administrar la propiedad a menudo es una tarea difícil y costosa, y vender la propiedad al no residir en ella tiene enormes repercusiones fiscales.
  4. Antes de presentar tus razones, investigación y soluciones alternativas a tus padres, tómate un tiempo para practicar lo que quieres decir. Practica frente al espejo o pídele a un amigo que escuche tu presentación.
    • Cuando practiques, recuerda conservar la calma y controlar tus emociones. Evita gritar o enojarte.
    • Si te preocupa olvidar algo, toma notas en fichas.
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Parte 3
Parte 3 de 3:

Hablar con tus padres

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  1. Tus padres estarán más dispuestos a escucharte si escoges un momento para hablar cuando estén de buen humor. Quizás sepas cuál es el mejor momento para presentar tu caso, como después de cenar o un domingo tranquilo por la mañana. Si no sabes cuándo estarán más dispuestos a escuchar, pregúntales. [6]
    • Por ejemplo, puedes decir algo así como "Esperaba que podamos hablar de algo, pero quizás tome un tiempo. ¿Cuándo sería un buen momento para los dos?".
  2. Vestirte bien es una estrategia bien conocida para lucir profesional y tener ventaja en una conversación, en especial si estás mejor vestido que las personas a las que te diriges.Tus padres también podrían estar impresionados porque vestirse bien significa que te has esforzado y que es una conversación importante para ti.
    • Usa tu mejor camiseta con un pantalón caqui o un vestido que tu madre haya elegido para ti.
  3. Al compartir tus motivos para no mudarte, asegúrate de hacer algunos elogios. La adulación, siempre y cuando sea sincera, es una manera efectiva de persuadir a las personas para que hagan lo que quieras que hagan.
    • Por ejemplo, puedes decir algo así como "Valoro mucho que trabajen duro para darme una gran vida, y sé que han tomado la decisión teniéndome en cuenta" o "Tengo tanta suerte de tener padres exitosos e inteligentes. Espero que ambos sepan cuánto los valoro". Piensa qué es lo que tus padres querrían o necesitarían escuchar de ti.
  4. Es importante demostrarles a tus padres que has pensado mucho sobre la mudanza y que tu deseo de quedarte no se basa en una respuesta emocional a la idea de mudarte. Por lo tanto, es mejor conservar la calma mientras presentas tu perspectiva y evitar un tono argumentativo o de lloriqueo. [7]
    • No entres en pánico si sientes que te emocionas por algo. Las muestras emocionales pueden ser útiles en un argumento, pero solo con moderación. También son más efectivas si se usan cerca del final de la presentación.
    • Por ejemplo, si se te caen algunas lágrimas al hablar de cuán triste estarías si tuvieras que alejarte de tu mejor amigo, está bien. Si lloras durante casi toda la presentación, podría jugarte en contra porque tus padres podrían interpretarlo como un comportamiento irracional.
  5. Una gran forma de persuadir a las personas de que tienes razón es guardar tus mejores puntos hasta casi haber terminado. De esta forma, podrás construir una base sólida y finalizarla con una excelente razón. Estructurar un argumento de esta forma también ayuda a crear interés en lo que dices. [8]
  6. Al igual que te ha tomado un tiempo formular tu argumento para quedarte, tus padres necesitarán un tiempo para procesar todo lo que les hayas dicho. Diles que comprendes que no es una decisión fácil y que respetas su necesidad de pensar las cosas. También es útil agradecerles por escucharte y considerar tus palabras.
    • Puedes decir algo así como "Gracias por escucharme. Comprendo que necesitan un tiempo para pensar en lo que les he dicho. Por favor, tómense su tiempo y háganme saber cuando quieran volver a hablar".
  7. Es posible que tus padres tengan una respuesta inmediata a lo que hayas compartido. En este caso, dales toda tu atención y escucha bien sus palabras.
    • Demuestra que los escuchas al asentir con la cabeza, mantener un buen contacto visual y decir alguna palabra neutra ocasional como "sí", "comprendo" o "continúa". [9]
    • Si uno de tus padres dice algo que no tiene sentido para ti, repite lo que haya dicho para permitir que lo aclare. Por ejemplo, puedes decir "Parece que lo que dices es que mudarse es nuestra mejor opción, pero eso no significa que será sencillo. ¿Eso es lo que quieres decir?".
  8. Si ha pasado una semana o más y no has tenido una respuesta relacionada con lo que les hayas dicho, está bien preguntarles si quieren volver a hablar. Quizás hayan estado ocupados o no estén seguros de cuál sea la mejor forma de acercarse a ti. Al tomar la iniciativa, demostrarás que quieres continuar la conversación.
    • Por ejemplo, puedes decir algo así como "Si están listos para hablar, esperaba que pudiéramos seguir charlando sobre la mudanza. ¿Algún momento del fin de semana funcionaría para ustedes?".
  9. A pesar de todo tu trabajo duro, existe la posibilidad de que tus padres no compartan tu perspectiva. Quizás te resulte difícil escuchar un "no", pero es importante que respetes su decisión. [10]
    • Recierda que la elección de tus padres de mudarse no es para complicarte la vida, sino mejorarla.
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Consejos

  • Por más que termines mudándote, ten en cuenta que seguir en contacto con tus amigos a la distancia es mucho más sencillo hoy que hace un tiempo. Puedes seguir interactuando con ellos a través de las redes sociales todos los días y planificar visitas regulares para mantener tus amistades valiosas.
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