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En algunas situaciones, las bebidas alcohólicas son parte de la atmósfera social. Si quieres abstenerte del alcohol, podrías sentirte presionado a beber y no saber cómo evitarlo. Quizá te preocupe que te vean como un aguafiestas. Ten un plan antes de ir a la fiesta o al evento especial. Cuando te ofrezcan una bebida alcohólica, podrás rechazarla con buena educación pero con firmeza.

Parte 1
Parte 1 de 3:

Rechazarla con buena educación

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  1. Di “no” directamente. Si alguien te ofrece alcohol, la respuesta más fácil es un simple “No, gracias”. Verás que no te insistirán por algún motivo y respetarán tu decision. Pero, si la persona que te ofrece la bebida te hace preguntas, puedes probar respuestas más detalladas.
    • Por ejemplo, puedes decir “Gracias, pero soy el conductor del grupo”.
  2. Sé cortés, pero firme. Ten confianza en tus razones para no beber. A veces, decir “no” puede hacerte sentir como un aburrido. Pero comprender tus razones para estar sobrio y defenderlas ayudará a que los demás sepan que hablas en serio. [1]
    • Halagar a la persona puede ayudar a que respete tu decisión. Puedes decir “Te agradezco mucho por pensar en mí, pero no voy a beber esta noche”. [2]
    • Si alguien refuta tu rechazo, puedes decirle que te incomoda que rechace tus decisiones.
  3. El buen humor puede aligerar la tensión. Puedes contar chistes para distraer a tus amigos de la situación, en especial si insisten con el mismo tema. Por ejemplo, puedes decir “No, hombre. Ya he bebido lo suficiente. ¡Y quizá tú también!” o “Jaja, no gracias. Ninguna bebida del mundo tiene el alcohol suficiente para solucionar mis problemas”.
    • Tus chistes deben ser siempre corteses y de buen gusto. Si la persona se siente insultada por beber, podría sentirse atacada.
  4. Tener una bebida alcohólica en la mano disuadirá a los demás de ofrecerte alcohol. Pídele al barman tu soda favorita o pide agua si quieres reducir tu consumo de bebidas azucaradas en general. Si optas por una bebida virgen (como un Shirley Temple o un Roy Rogers), quizá los demás ni se den cuenta. [3]
    • Muchos cocteles pueden pedirse “virgen”, o sin alcohol. Prueba una piña colada o un daiquiri vírgenes.
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Parte 2
Parte 2 de 3:

Rechazar los ofrecimientos persistentes

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  1. Si alguien te sigue ofreciendo una bebida, no tengas temor de sonar como disco rayado. Nuevamente dile con firmeza que no vas a beber esa noche. No tienes por qué darle explicaciones a nadie.
  2. Quizá tu doctor te haya recomendado dejar la bebida o estés entrenando para una competencia atlética. Quizá estés embarazada y no quieras afectar al bebé. Sea cual sea el motivo, dilo con calma y responde cualquier pregunta con la que te sientas cómodo.
    • Por ejemplo, puedes decir “Te agradezco el ofrecimiento, pero no bebo por motivos religiosos” o “Sabes, antes era alcohólico, pero llevo 2 años sin probar alcohol. Sería una pena romper mi récord ahora”.
  3. Si alguien te ofrece una bebida persistentemente, cambia el tema a otra cosa. Puedes preguntar si alguien quiere una o puedes usar el tema de las bebidas para hablar de la nueva limpieza con jugos que quieres probar.
    • Los halagos pueden ser una gran distracción, ya que la atención pasará a la otra persona. Por ejemplo, puedes decir “Vaya, siempre estás al pendiente de mí. ¡Eres un gran amigo! ¿Cómo te va últimamente? ¿Terminaste la presentación por la que andabas estresado?”. [4]
  4. Prepara con anticipación un plan de contingencia con tus amigos, y haz que otras personas participen. Cuéntale a un amigo de confianza o familiar acerca del evento especial y pregúntale si puedes llamarle si te sientes presionado. Si eres menor de edad, ten una clave secreta con tus padres. De esta manera, podrán recogerte si te encuentras en una situación incómoda.
    • Si la clave secreta es “Biología de tercer grado”, por ejemplo, puedes llamar a ese amigo o familiar y decirle “Acabo de conocer a un chico de mi clase de biología de tercer grado aquí, ¡qué pequeño es el mundo!”.
  5. Los amigos que no respetan tus decisiones no velan por tus intereses. Aléjate de quienes te presionan para beber y evita las situaciones con ellos donde haya alcohol de por medio. Hazte amigo de las personas que acepten tus decisiones, aunque no las comprendan. [5]
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Parte 3
Parte 3 de 3:

Tener un plan antes de ir

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  1. Si tu grupo va a ir al evento en coche, ofrécete a ser el conductor asignado de la noche. Tener un motivo para estar sobrio ayudará a los demás a respetar tu decisión. Muy pocos ofrecerán una bebida a la persona que llevará a los demás a su casa después. Si lo hacen, tendrás una excusa comprensible.
    • Pasa tu tiempo con los demás conductores oficiales de la noche durante la fiesta o evento especial. Muchas veces, el número es un factor importante contra la presión de grupo.
  2. Ve al evento especial con un grupo y diles con anticipación que no quieres beber. Puedes decirles por qué si te sientes cómodo o que solo quieres reducir tu consumo de alcohol. Tus amigos te ofrecerán su apoyo si los demás empiezan a presionarte.
    • Escoge a los amigos en quienes confías y que sepas que respetarán tu decisión. Si tienes un amigo que tampoco bebe, pídele que vaya.
    • No dependas demasiado en el apoyo de tus amigos. Es probable que no estés con ellos durante todo el evento, así que necesitarás tu propia motivación.
  3. Dile al anfitrión que no bebes alcohol para evitar momentos incómodos. Así sabrá que no te deberá ofrecer una bebida ni brindar contigo. Además, evitarás herir sus sentimientos y que te ponga en una situación incómoda.
  4. Decide con antelación qué frases decir en el caso de que alguien te ofrezca una bebida alcohólica. Si no tienes un par de frases preparadas, podrías no saber qué decir cuando llegue el momento. Estas no tienen que ser complejas ni delicadas; incluso un simple “No gracias” será suficiente.
  5. Evita las situaciones donde sepas que te verás tentado. Si crees que te verás tentado, aléjate de las personas o de los lugares que podrían hacerte ceder. Beber cuando has decidido no hacerlo solo afectará tu respeto personal a la larga. Para no terminar en una situación comprometedora, evítalas por completo. [6]
    • Hazte preguntas si te sientes presionado: ¿Por qué quiero ceder? ¿Qué perderé si tomo una? Y más importante aún, ¿satisfacción a largo plazo o placer a corto plazo?
    • No dejes que nada ni nadie ponga en peligro tus convicciones personales.
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Consejos

  • Tu motivo para no beber es asunto tuyo y no tienes que explicarlo si no quieres. Muchas personas evitan el alcohol por muchos motivos diferentes.
  • Confía en tu instinto. Si te sientes incómodo o presionado en determinada situación, recuerda que puedas retirarte.
  • No tomes los ofrecimientos persistentes muy a pecho. Algunos consideran el alcohol como un facilitador social y no entienden cómo alguien puede rechazarlo.
  • Pregúntale al anfitrión con anticipación si habrá bebidas no alcohólicas.
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Advertencias

  • Los amigos de verdad respetarán tus decisiones y no te obligarán a beber. No andes con gente que te haga sentir menos por abstenerte del alcohol.
  • Nunca aceptes una bebida de alguien en quien no confías o que te parezca raro.
  • Si estás en proceso de recuperación del alcoholismo, quizá no te sientas listo para estar en un contexto rodeado de bebidas alcohólicas. Si te sientes tentado, retírate. Nada es más importante que tu salud física o emocional.
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