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Una extensión de calidad puede hacer que cada día sea un buen día para el cabello. Sin embargo, al igual que el cabello normal, las extensiones deben ser cuidadas o, de lo contrario, terminarás con un desastre de hebras enredadas. Si la tuya ya está en ese punto (¡uy!), no necesariamente tienes que reemplazarla por completo. Puedes restaurarla a sus hebras sedosas y lisas originales, en casa y con los productos que ya tengas. Tanto si la extensión está hecha de cabello humano como de sintético, puedes usar vinagre de sidra de manzana para arreglar los daños menos graves, y puedes usar lejía Clorox si necesita un poco de amor y cuidado extra.

Método 1
Método 1 de 2:

Enjuagar con vinagre de sidra de manzana

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  1. Peina suavemente el cabello, comenzando por las puntas y subiendo hasta las raíces de la extensión. Un cepillo para pelucas, hecho específicamente para extensiones y pelucas, también puede ayudar a aflojar los nudos.
  2. Por ejemplo, si usas 8 tazas (1900 ml) de agua, usarás 2 tazas (470 ml) de vinagre de sidra de manzana. Luego añade este último ingrediente, el cual funcionará para eliminar cualquier producto o grasa que se haya acumulado en las hebras. [1]
    • El vinagre de sidra de manzana tiene un nivel de pH más bajo que la extensión, por lo que remojarla en vinagre ayuda a restaurar el equilibrio del pH y a sellar de nuevo las cutículas del cabello. [2]
    • ¡No te preocupes por el olor! Una vez hayas terminado el proceso, se enjuagará.
    • Si dejas la extensión en la cabeza, pon el vinagre de sidra de manzana y el agua en un rociador. Rocía por todo el cabello y deja reposar durante 20 minutos.
  3. Sujétala de la trama y deja que el agua la atraviese de arriba a abajo. Evita frotar el cabello, ya que esto puede causar que se enrede. [3]
  4. Los champús clarificantes contienen más surfactantes (compuestos de limpieza) que un champú normal, por lo que pueden eliminar con más eficacia la acumulación de productos y aerosoles para cabello. [4] Aplica el champú desde las raíces hasta las puntas. y enjuágalo con agua corriente.
    • Probablemente también veas champús clarificantes denominados como de “limpieza profunda” o “purificante”.
    • Si el agua se vuelve marrón, es simplemente la acumulación que sale de la extensión, lo que significa que el champú está funcionando.
  5. Los sulfatos pueden quitar al cabello sus aceites naturales, secándolo y haciéndolo más propenso a quebrarse. [5] Dado que el champú clarificante puede secarse por sí solo, es importante elegir un champú menos fuerte para el segundo lavado de la extensión.
  6. Si tienes una extensión con ondas o rizos, busca un acondicionador hidratante o desenredante. Si es lisa, es mejor que uses un acondicionador más ligero que no haga más pesado el cabello. [6] Trabaja el acondicionador a lo largo de la extensión, centrándote en los extremos, que tienden a ser el área más seca.
  7. Séllala firmemente. Esto atrapará la humedad y permitirá el máximo acondicionamiento.
    • Si tienes la extensión puesta, colócate una gorra plástica de baño sobre la cabeza para obtener el mismo efecto. [7]
    • Añadir calor con una secadora de pelo puede hacer que el acondicionador sea aún más eficaz.
  8. Pasa agua por el cabello hasta que el acondicionador se haya eliminado por completo. Si tienes prisa, puedes secar el cabello con el secador, pero es mejor evitar el uso de calor cuando sea posible. Al igual que el cabello normal, los productos de calor pueden dañar la extensión, por lo que el secado al aire es la opción más saludable.
    • Si no vas a usar la extensión inmediatamente, asegúrate de que esté completamente seca antes de guardarla. Cualquier humedad que quede podría causar la formación de moho. [8]
    • Usa agua fría cuando enjuagues, tal como lo harías con tu propio cabello. El agua fría sella la cutícula y retiene la humedad.
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Método 2
Método 2 de 2:

Dar un baño de lejía a la extensión

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  1. Este es un producto químico de limpieza súper fuerte, y puede causar quemaduras dolorosas y daños si toca la piel expuesta. El uso de guantes de vinilo o nitrilo también funciona.
    • Debido a lo peligroso que es la lejía para la piel, nunca debes usar este método mientras la extensión esté todavía unida a la cabeza. Tienes que quitarla si quieres hacer un baño de lejía.
  2. Solo debes usar lejía Clorox normal. En un recipiente, combina el agua más caliente que puedas conseguir del grifo con la lejía. [9] La lejía impide que las cutículas del cabello se cierren, evitando que se enreden.
    • Ten cuidado al verter la lejía en el agua, para que los productos químicos no salpiquen a la piel.
    • Usar un recipiente mantendrá la lejía separada del amoníaco que usarás más tarde. Si el amoníaco y la lejía se tocan, pueden crear un gas potencialmente mortal.
  3. Mueve el cabello alrededor, para saturar completamente las hebras, y luego pasa rápidamente al siguiente paso. [10] Si mantienes la extensión en contacto con la mezcla de lejía por más de 2 minutos, puedes dañar enormemente el cabello.
  4. Comienza por los extremos de la extensión y sube gradualmente hasta las tramas para reducir la pérdida. No hagas nudos con el peine. Esto puede arrancar las hebras de la trama, así que usa los dedos para aflojar suavemente el nudo antes de pasar el peine por él.
    • Recuerda: solo tienes 2 minutos para desenredar el cabello antes de que tengas que retirarlo de la lejía.
  5. El champú clarificante ayudará a eliminar cualquier producto o químico restante que aún esté en las hebras. Mantén la extensión en posición vertical (sosteniéndola por la trama) mientras la enjuagas, de modo que no se enrede. [11]
  6. Es crucial que coloques el amoníaco en un recipiente separado del que usaste para la lejía, ¡ya que mezclar la lejía y el amoníaco puede crear un gas de cloro altamente peligroso! El amoníaco actúa para neutralizar los químicos corrosivos de la lejía. Si la extensión está súper enredada o raída, puedes duplicar la cantidad de amoníaco a 1⁄2 taza (120 ml).
  7. Sumerge el cabello en el líquido unas cuantas veces, hasta que esté totalmente saturado. Si notas que se forman nudos o se enreda, no dudes en pasarle el peine de dientes anchos otra vez.
  8. Mantén la base de la extensión hacia arriba, de modo que no se voltee mientras la lavas. Si lo haces, aumentas las posibilidades de que se enrede. [12]
  9. ¡La extensión debería estar libre de nudos! Elimina el exceso de agua presionando firmemente un papel toalla sobre el cabello. Luego, tiende la extensión plana, de modo que se seque de forma natural.
    • También puedes colgar la extensión en un colgador mientras se seca.
    • Si tienes una cabeza para pelucas, puedes cubrirla con la extensión de modo que se seque de la forma correcta. Fija la extensión a la cabeza para pelucas, con alfileres para cabello, para mantenerla en su lugar.
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Cosas que necesitarás

Enjuagar con vinagre de sidra de manzana

  • extensión
  • peine de dientes anchos
  • recipiente
  • agua
  • vinagre de sidra de manzana
  • champú clarificante
  • champú sin sulfato
  • acondicionador profundo
  • bolsa resellable

Dar un baño de lejía a la extensión

  • extensión
  • peine de dientes anchos
  • guantes de látex
  • 2 recipientes
  • lejía Clorox normal
  • agua caliente
  • lejía
  • amoníaco
  • champú clarificante

Advertencias

  • Trabajar con lejía puede causar quemaduras graves si tienes una reacción alérgica. Nunca dejes que la lejía entre en contacto directo con la piel.
  • Si la lejía y el amoníaco se mezclan, pueden crear un gas de cloro potencialmente mortal . Usa siempre recipientes separados para cada líquido y desecha los productos químicos en desagües separados.
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