Cuando se trata de hacer fuego, los cerillos son una de las opciones más antiguas y confiables que hay. Los cerillos utilizan el calor creado a partir de la fricción contra una superficie áspera para encender una cantidad pequeña de combustible inflamable. Si bien los cerillos son normalmente una forma segura y fácil de encender fuego, conocer algunas formas diferentes de encenderlos puede ser una habilidad útil si alguna vez te topas con un tipo desconocido de cerillos. Una vez que domines los aspectos básicos para encenderlos, ¡podrás aprender a hacerlo utilizando muchas superficies distintas a modo de truco útil!
Pasos
Si ya sabes cómo encender cerillos de la manera normal y quieres aprender algunos trucos divertidos, lee la segunda sección de este artículo .
Cerillos de madera
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Sujeta el cerillo firmemente por la parte del medio. Utiliza tus dedos índice y pulgar para sujetar el cerillo por la mitad. Si es necesario, puedes colocar los demás dedos alrededor de la base del palo para darle apoyo.
- Si es la primera vez que intentas encender un cerillo, por el momento utiliza unos hechos de madera que se enciendan al roce con la caja, pues generalmente son los más fáciles de encender para los principiantes. Una vez que te acostumbres a ellos, puedes pasar a los cerillos de papel y a los cerillos integrales.
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Presiona la cabeza del cerillo sobre el rascador. Busca una tira áspera de color rojo o marrón en el lado de la caja. A esta tira se le conoce como “rascador”. Sostén la caja en la mano con la que no sujetes el cerillo y presiona la cabeza de este (la parte redondeada en el extremo) sobre el rascador sin moverla aún hacia los lados.
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Arrastra rápidamente la cabeza del cerillo a lo largo del rascador. Sin dejar de presionar, desliza rápidamente la cabeza del cerillo desde un extremo del rascador hacia el otro. Este movimiento debe ser rápido y fuerte. Es casi como si trataras de quitar el material presente la cabeza del cerillo en un solo movimiento fuerte. Si lo haces bien, la cabeza del cerillo se encenderá de inmediato, ¡así que no te alarmes cuando esto ocurra!
- La cantidad exacta de presión necesaria para causar la ignición variará dependiendo del cerillo y del rascador. Existe un término medio entre presionar el cerillo tan fuerte que termina rompiéndose y presionarlo tan suavemente que no se llegue a encenderse. Con algunos intentos, deberás dominar este paso.
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Si es necesario, inténtalo nuevamente. Los cerillos no siempre encienden al primer intento. No te preocupes si no creas una llama de inmediato; simplemente repite el movimiento una vez más hasta que obtengas un resultado. Quizás quieras ejercer un poco más de presión en caso de que te preocupe presionar con demasiada suavidad la primera vez.
- Al cabo de algunos intentos fallidos, el material inflamable en la cabeza del cerillo (generalmente una mezcla de cloruro de potasio y fósforo rojo) se desgastará. [1] X Fuente de investigación Si esto sucede, intenta deslizar el otro lado de la cabeza del cerillo.
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Sujeta el cerillo encendido lejos de la caja. Sabrás inmediatamente cuando el cerillo se encienda con éxito, pues saldrá humo y estallará formando una llama casi al instante. En este punto, sujeta el cerillo cerca de su base para proteger tus dedos del fuego y utilízalo para hacer lo que sea que necesites. Coloca la caja de cerillos en un lugar seguro para que no se encienda de manera accidental. Felicitaciones, ¡acabas de encender tu primer cerillo!
- ¿Quieres averiguar cómo sostener el cerillo para lograr la máxima eficacia? Consulta la tercera sección de este artículo.
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Cerillos de papel
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Arranca un solo cerillo del empaque en forma del libro. Los cerillos de papel casi siempre vienen en una especie de “libro” pequeño de cartón plegable. Desliza esa parte plana de cartón para revelar un puñado de cerillos de papel pequeños unidos en su base al empaque en forma de libro. Si quieres encender uno de estos cerillos, toma uno, dóblalo para que apunte hacia el lado opuesto a los demás y arráncalo desde su base.
- Los cerillos de papel son un poco más difíciles de encender que los hechos de madera, pero con un poco de práctica, podrás dominarlos fácilmente. No te preocupes si tienes que tienes que repetir los trucos en esta sección varias veces hasta que encuentres un método adecuado para ti.
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Sostén el cerillo contra el rascador. Existen unas cuantas maneras distintas de encender los cerillos de papel, pero la más sencilla es un ligeramente diferente a la que utilizas para encender un cerillo de madera. Comienza colocando el cerillo sobre el rascador (el cual generalmente se trata de una tira pequeña de color ubicada en la parte posterior de la caja de cerillos). La cabeza del cerillo debe estar aproximadamente a la mitad del rascador y la base debe sobresalir un poco más allá del borde del empaque.
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Dobla la solapa de papel para cubrir el cerillo. Sin mover el cerillo, dobla la “cubierta” de la caja hacia atrás y por encima del cerillo. Solo deberás ver la base del cerillo saliendo por el lado de la caja. Siente la cabeza redondeada del cerillo por debajo del cartón. En este punto, sujeta la caja aplicando una presión suave sobre la cabeza del cerillo a través del cartón utilizando tu pulgar.
- Procura utilizar la cubierta de cartón para cubrir bien la cabeza del cerillo. Si el borde está expuesto al momento de deslizar el cerillo, podrías quemarte el pulgar.
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¡Aprieta y jala! Utiliza la mano dominante para sujetar la base del cerillo que sobresale de la caja doblada. Utiliza la otra mano para sostener el empaque, presionando la cabeza del cerillo. Haciendo un movimiento rápido, aprieta la cabeza del cerillo a medida que lo jalas hacia un lado. Si lo haces correctamente, la fricción producida entre el rascador y la cabeza del cerillo deberá encender este último.
- Al igual que con los cerillos de madera, este cerillo a veces podría no encender aun cuando sigas todos los pasos. Prepárate para repetir el procedimiento descrito algunas veces. Si no obtienes ningún resultado, dale la vuelta al cerillo para exponer el otro lado y frotarlo sobre el rascador.
- Ten cuidado, pues si aprietas la caja con demasiada fuerza, puedes arrancar la cabeza del cerillo al tratar de encenderlo. Esto será un desperdicio, así que evítalo en caso de que no tengas muchos cerillos.
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También puedes encender el cerillo sin doblar el empaque. Puedes encender un cerillo de papel sin tener que apretarlo entre la cubierta de la caja y el rascador. Esto es un poco más complicado si eres un principiante debido a que será más fácil quemarte los dedos, pero es un método ligeramente más rápido. Para hacerlo, sigue los pasos a continuación:
- Sostén el cerillo con la mano dominante utilizando el pulgar y el dedo medio. Coloca el dedo índice detrás de la cabeza del cerillo. Sostén la caja de cerillos con tu mano no dominante.
- Ejerce presión con el dedo índice y arrastra el cerillo a lo largo del rascador realizando un solo movimiento rápido, casi como lo harías para encender un cerillo de madera.
- Tan pronto como notes que el cerillo se enciende, aleja tu dedo índice de la llama o sujeta el cerillo con la otra mano. Debes hacerlo rápido para no quemarte.
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Para obtener mejores resultados, utiliza cerillos integrales para realizar estos trucos. Para encender la mayoría de los cerillos, no es necesario que uses el rascador que viene incluido en la caja. Mientras acumules la fricción suficiente para calentar la cabeza del cerillo, podrías encender muchos cerillos casi en cualquier parte seca. No obstante, normalmente es más fácil si utilizas cerillos integrales. Estos cerillos están diseñados para encenderse bien en diversas superficies.
- Los cerillos integrales generalmente son cerillos de madera que puedes identificar porque tienen este nombre en el empaque. No son particularmente caros: una caja de 250 cerillos puede costar unos 2 dólares. [2] X Fuente de investigación www.industrialrev.com/strike-anywhere-matches.html
- Los cerillos integrales solo funcionan en superficies secas .
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Intenta encender uno sobre una roca. Este truco es necesario para los campistas y para cualquier otro que quiera mejorar sus habilidades para sobrevivir en la naturaleza. Para obtener mejores resultados, busca una roca seca con una superficie ligeramente “áspera” o abrasiva. La textura debe ser similar a la una acera de concreto. Como se indicó anteriormente, la roca también debe estar seca. Si no puedes encontrar una con estas características, busca una que esté lo suficientemente seca, luego límpiala con tu ropa y llévala en tu bolsillo durante algunas horas o ponla en un lugar seco.
- Sostén el cerillo con el dedo medio y el pulgar, y utiliza el dedo índice para presionar la cabeza sobre la roca. Esta técnica es la misma que utilizarías para encender un cerillo de papel sin doblar la cubierta. Mientras más áspera sea la superficie de la roca, más suave deberás presionar para lograr la fricción necesaria que te permita obtener una llama.
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Enciende el cerillo sobre materiales de construcción. Si aún estás en medio de la civilización pero no tienes acceso a un rascador de cerillos, por lo general puedes utilizar los materiales a tu alrededor en caso de un apuro. Simplemente desliza el cerillo de la misma manera en que lo harías si usaras un rascador normal o una piedra, ejerciendo menos presión si se trata de un material más áspero. Sin embargo, para que funcione, el material que emplees debe estar completamente seco. Algunos materiales que puedes utilizar son:
- Concreto
- Lechada (el material entre los azulejos, etc.)
- Ladrillo
- Cerámica
- Ten en cuenta que deslizar los cerillos puede dejar marcas en el material que uses, así que tal vez no quieras hacerlo sobre las pertenencias de otras personas.
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Utiliza papel de lija. Este truco es útil cuando te quedas atrapado en el garaje o en el taller y no tienes una caja de cerillos. El papel de lija para acabado muy fino funciona mejor para este propósito, pues uno más áspero puede lijar la cabeza del cerillo sin llegar a encenderlo. Simplemente coloca una parte del papel de lija sobre una superficie plana, luego presiona la cabeza del cerillo sobre este punto y arrástrala tal como lo harías sobre un rascador normal.
- Nunca enciendas cerillos cerca de virutas de madera (las cuales son comunes en muchos lugares donde hay un papel de lija). Este es un material altamente inflamable que puede causar incendios con facilidad.
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Intenta encender un cerillo con cuidado utilizando tu cremallera. Este es un truco excelente para una fiesta, pero es algo que deberás hacer con cuidado para evitar lastimarte a ti o a los demás. Abre el doblez frontal de tu pantalón para exponer la cremallera. Utiliza una mano para estirar la tela de modo que la cremallera quede lo más recta y plana posible. Sostén el cerillo con la otra mano, presiónalo sobre la parte superior de tu cremallera y desliza hacia abajo aplicando una presión ligera. Esto puede ser muy difícil de hacer, así que no te sorprendas si te toma muchos intentos.
- Siempre desliza el cerillo en dirección hacia el piso, no hacia tu cuerpo. De esta manera, si pierdes el control del cerillo, solo se caerá en lugar de salir volando hacia tu camisa.
- Solo hazlo si utilizas un pantalón hecho de un material grueso y resistente, como la mezclilla, la cual tiene pocas probabilidades de quemarse. No lo hagas si tienes shorts o unos zapatos abiertos.
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Enciende un cerillo sobre una ventana. Lo creas o no, incluso las ventanas de cristal perfectamente lisas pueden servir para encender cerillos. Necesitas ejercer una buena cantidad de presión para realizar este método, así que trata de colocar el dedo índice justo detrás de la cabeza del cerillo para que puedas apretarlo sobre la superficie del cristal aplicando un poco más de fuerza. Presiona la cabeza del cerillo sobre el cristal, luego deslízala rápidamente en un solo movimiento rápido mientras mantienes la presión por detrás. Aleja el dedo índice de la cabeza del cerillo tan pronto como se encienda para no quemarte.
- Esto puede dejar marcas en la ventana, así que tal vez no debas hacerlo sobre una donde la gente pueda notarlo. Sin embargo, por lo general, las marcas pueden limpiarse sin problemas.
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Si quieres un desafío extremo, utiliza tus dientes para encender el cerillo. Este truco de seguro atraerá la atención de las personas a tu alrededor, pero solo inténtalo si estás dispuesto a protegerte a ti y a los demás con mucho sentido común. En primer lugar, seca lo mejor posible la parte delantera de tus dientes utilizando un trapo limpio o una toalla de papel. Luego, manteniendo la punta de la cabeza del cerillo contra tus dientes, deslízala a lo largo de ellos mientras aplicas una presión firme. Aleja inmediatamente el cerillo de tu boca, aun si no crees haberlo encendido. Lávate la boca con agua después de terminar.
- Otra variante de este truco consiste en sostener el cerillo detrás de los dos dientes delanteros y jalarla hacia abajo y hacia afuera. [3] X Fuente de investigación
- Esto debe ser evidente, pero este truco requiere mucho cuidado para llevarlo a cabo de forma segura. Es muy posible que te quemes la boca y los labios al realizarlo. No es recomendable realizar intentos reiterados, ya que se desconoce los efectos que los químicos presentes en la cabeza de un cerillo tienen en los dientes.
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Sostén el cerillo en un ángulo ligeramente hacia abajo para mantener la llama ardiendo. Como regla general, el fuego arderá mejor si puede viajar hacia arriba. [4] X Fuente de investigación Esto se aplica incluso a una escala muy pequeña. Sostener un cerillo encendido apuntando ligeramente hacia el piso le dará al fuego un camino cuesta arriba para que viaje a medida que lo consume.
- Esto hará que la llama arda intensamente sin que se desplace demasiado rápido hacia tus dedos. Siempre puedes modificar el ángulo del cerillo hacia arriba para reducir la velocidad de la llama en caso de que necesites más tiempo.
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Sostén el cerillo en un ángulo muy bajo para obtener una gran llama. Si quieres obtener una gran llama lo más rápido posible, voltea el cerillo hacia abajo por uno o dos segundos. La llama deberá ascender con mucha rapidez, produciendo una llama más grande. Sin embargo, esta llama también será más caliente y estará más cerca de tus dedos, así que ten mucho cuidado.
- Evita apuntar el cerillo directamente hacia abajo. Esto hará que la llama suba rápidamente en dirección a tus dedos, lo que de seguro te quemará.
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Sostén el cerillo directamente hacia arriba hasta que quede una llama pequeña que se desvanece. Sostener el cerillo hacia arriba hará que el fuego tenga más problemas para consumir el combustible presente en él. La llama se encogerá y se quemará más lentamente. Con el tiempo, bajará gradualmente hacia tus dedos o se apagará por sí sola.
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Ten en cuenta el viento. Si enciendes el cerillo al aire libre, ten cuidado con las brisas, pues pueden apagarlo después de haberlo encendido, lo que será un desperdicio. Podrías ir a un lugar sin brisa o esperar a que el viento cese antes de tratar de encender el cerillo.
- Si tienes que encender un cerillo en un lugar con viento, un buen truco es proteger la llama al colocar tu cuerpo y manos entre ella y el viento. [5] X Fuente de investigación
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Consejos
- Además de todos los trucos mencionados anteriormente, también puedes encender un cerillo con solo sostenerlo boca abajo sobre una llama abierta, como por ejemplo la de una cocina, una fogata o incluso la llama de otro cerillo.
- Cuando utilices cerillos para chimenea (los cuales se parecen a cerillos de madera extra grandes), coloca los dedos a aproximadamente 1,3 cm (1/2 pulgada) de la cabeza para no romperlos al momento de encenderlos.
Advertencias
- Siempre enciende el cerillo lejos de tu cuerpo o hacia abajo. [6] X Fuente de investigación www.industrialrev.com/strike-anywhere-matches.html No querrás tener un cerillo encendido cerca de tu cuerpo por accidente.
- Nunca enciendas cerillos cuando estés cerca de materiales inflamables como combustible, leña, solventes químicos, etc.
- Cuando vayas a encender un cerillo, siempre sé consciente de tus alrededores. No lo enciendas cuando estés cerca de niños, mascotas o cualquier otra cosa que pueda ser vulnerable a una llama abierta.
- No dejes que los niños manipulen o jueguen con los cerillos.
- Los cerillos seguirán muy calientes después de apagarse. Después de utilizar un cerillo, sumérgelo en agua para asegurarte de que no encienda nada más que se encuentre en el tacho de basura.
Referencias
- ↑ http://depts.washington.edu/chem/facilserv/lecturedemo/MatchHeadReaction-UWDept.ofChemistry.html
- ↑ www.industrialrev.com/strike-anywhere-matches.html
- ↑ http://testtube.com/scamschool/matchmouth/
- ↑ http://www.cfa.vic.gov.au/plan-prepare/how-fire-behaves/
- ↑ http://www.outdoorlife.com/blogs/survivalist/2014/06/survival-skills-10-steps-light-one-match-fire
- ↑ www.industrialrev.com/strike-anywhere-matches.html
Acerca de este wikiHow
Para encender un cerillo de manera segura, sostenlo por la mitad del palito de madera de modo que la cabeza del cerillo esté hacia arriba. Luego, pasa rápidamente la cabeza por la banda encendedora, que normalmente es una tira marrón o roja áspera a uno de los lados de la caja de cerillos. Si no funciona la primera vez, solo vuelve a intentarlo. Si no tienes una caja de cerillos, puedes tratar de encender uno pasándolo por concreto, un ladrillo o una lija. Si quieres ayuda para encender cerillos de cajas plegables o para sostener un cerillo encendido, ¡sigue leyendo!