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El melón chino es conocido por tener una pulpa muy jugosa de color verde, además, es excelente como tentempié o como complemento para el desayuno. Sin embargo, antes de comprar o cosechar un melón, es fundamental que sepas reconocerlo cuando está maduro y jugoso. Hay diversos aspectos que tomar en cuenta a la hora de elegir el melón más fresco y jugoso para tus comidas, desde signos visibles hasta sonidos y aromas.

Método 1
Método 1 de 4:

Observar el melón

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  1. Si bien puedes disfrutar de un melón en cualquier época del año, encontrarás los más frescos a partir de medio año hasta la temporada de invierno. Así que acude al supermercado o coséchalos de tu huerto durante estos meses. [1]
    • Si vives en los Estados Unidos, la época de cultivo y de cosecha del melón chino es de junio a octubre.
    • Lo mejor siempre es cosecharlos 3 meses después de la siembra.
  2. Aquellos que están maduros y listos para comer son de superficie lisa y forma redondeada. Evita escoger los que tengan bultos o protuberancias, significa que no maduraron adecuadamente. [2]
    • La mayor parte de los melones chinos son de forma ligeramente más oval.
  3. Mientras más amarillo sea, más maduro estará. No te preocupes si encuentras algunas manchas marrones, son las partes más dulces, así que no descartes aquellos que tengan unas cuantas. [3]
    • Descarta los melones con manchas verdes o venas entrecruzadas en la parte externa de la cáscara.
    • Evita cosecharlos antes de que adquieran un color amarillo, de lo contrario, nunca madurarán.
    • Si quieres un melón super dulce, elige uno que tenga pequeñas pecas marrones en la parte externa de la cáscara.
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Método 2
Método 2 de 4:

Examinar el melón al tacto

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  1. Este es el extremo opuesto al inicio del crecimiento del tallo. Presiona suavemente con el dedo, la fruta debe ceder un poco y luego retomar su forma original. Si no cede en lo más mínimo, significa que el melón no está maduro. [4]
    • Busca uno que ante la presión no esté demasiado suave ni demasiado duro.
    • Verifica que el lugar donde solía estar el tallo, en la terminación, tenga una ligera hendidura. Además, asegúrate de que no haya ningún resto del tallo seco, encallecido o con moho.
  2. Si encuentras finas rugosidades en el exterior de la cáscara, es probable que el melón esté en su punto. Sin embargo, no estará tan maduro si tiene la cáscara lisa. [5]
    • La parte externa de la cáscara debe sentirse cerosa al tacto.
  3. Si un melón luce demasiado pesado para su tamaño, esto indica que está bien jugoso. Primeramente, sostén en tus manos dos posibles alternativas y elige el más pesado. Continúa haciendo esto hasta que logres determinar cuál es el melón que pesa más. [6]
    • Si quieres obtener el máximo nivel de precisión, utiliza una balanza para productos agrícolas.
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Método 3
Método 3 de 4:

Probar la sonoridad del melón y sentir su aroma

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  1. Mientras más maduro esté el melón, más dulce será su aroma. Agrupa los melones de acuerdo a la intensidad de su aroma y elige aquel cuyo olor te indique que está listo para comer. [7]
    • Descarta cualquier melón que despida un olor extraño o huela mal.
  2. Golpea ligeramente el melón con los nudillos y presta atención al sonido que emite. Un sonido hueco indica que está maduro. [8]
    • Golpea todos los que aparentemente están maduros y separa los que emiten un sonido hueco.
  3. Sostén las posibles alternativas, mantenlas junto a tu oído y agítalas de lado a lado. Si percibes el movimiento de las semillas de un lado a otro, significa que está en su punto. [9]
    • Si tienes que elegir entre varios melones que parecen bastante similares según las otras características, utiliza la prueba de las semillas.
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Método 4
Método 4 de 4:

Almacenar y comer un melón chino

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  1. Puedes guardar un melón chino sin cortar de 2 a 3 semanas entre 7 y 10 °C (entre 45 y 50 °F). Ponlo en el refrigerador ya sea envuelto en papel transparente o descubierto. [10]
    • Si en casa existe un lugar frío con una temperatura de 7 a 10 °C (de 45 a 50 °F) donde puedas almacenar el melón, puedes prescindir del refrigerador.
  2. Corta el melón y sírvelo. El melón chino sabe mejor si se corta justo antes de servirlo. Combínalo con rodajas de plátano, tus frutas del bosque favoritas, un poco de ensalada verde, melón cantalupo, sandía o un poco de yogur bajo en grasa. [11]
    • Si te gusta combinar la fruta con carne, envuelve el melón chino en jamón crudo.
    • Prepara una salsa deliciosa que combina de maravilla con mariscos mezclando el melón con cebolla roja finamente picada, un poco de cilantro fresco y un chorrito de jugo de lima.
  3. Envuelve firmemente con papel transparente las partes que están sin cortar y vuelve a colocarlas en el refrigerador. Una vez transcurridos 3 días, deberás desechar cualquier sobrante. [12]
    • Todos los trozos sin cortar deben permanecer con sus semillas para evitar que maduren demasiado.
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Consejos

  • En algunas tiendas, quizá encuentres una nueva variedad de melón, el melón chino anaranjado. En el caso de esta variedad, los más maduros son los que tienen la parte externa de la cáscara de color blanco amarillo verduzco pálido. Solo ten presente que esta clase de melón chino no es tan dulce como los convencionales.
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