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El ADN o ácido desoxirribonucleico es la programación básica de las células de todos los organismos vivos. Aunque es demasiado pequeño para verlo por sí solo, será visible en masa. Con algunos materiales básicos, podrás extraer fácilmente el ADN de una fresa. Esta actividad contribuye a hacer un genial trabajo infantil de ciencias o simplemente una broma para presumir delante de tus amigos o tu familia. Sin embargo, no es algo difícil ni aburrido.
Pasos
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Reúne los materiales de la sección “Cosas que necesitarás”. Encontrarás esta sección al final de la página.
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Coloca el alcohol isopropílico en el congelador. Necesitarás el alcohol isopropílico en un paso que seguirás más adelante, pero debe estar bien frío. A veces, el alcohol isopropílico también se llama etanol, así que si ves el nombre “etanol” en la botella, pero parece ser alcohol isopropílico, es ese.
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Quita la parte verde de la fresa. Sujeta las hojas en un puño y luego quita toda la corona de hojas. Si no puedes tirar de ellas, corta la parte con un cuchillo pequeño de cocina.
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Mezcla en la taza pequeña tres pizcas de sal con 15 mililitros de líquido lavavajillas. Revuelve la mezcla con una brocheta hasta que se disuelva la sal. Colócala a un lado para usarla más tarde.Anuncio
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Coloca la fresa en una bolsa de plástico. Luego expulsa las burbujas de aire de sobra y cierra herméticamente la abertura.
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Mete los dedos en la parte exterior de la bolsa de plástico y luego tritura la fresa durante aproximadamente noventa segundos. No tengas miedo de estropear la fresa.
- El propósito general de este paso es deshacer las membranas y enzimas de las células de la fresa.
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Abre la bolsa de plástico y luego colócala a un lado. Al abrirla, ten cuidado de que no se te derrame el interior de la fresa.
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Vierte en el cilindro graduado diez mililitros de la mezcla de líquido lavavajillas con sal. Al verter el líquido, míralo a la altura de los ojos. Así, podrás asegurarte de haber medido la cantidad adecuada.
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Vierte el líquido que mediste en la pasta de fresa de la bolsa de plástico. Mientras viertes el líquido, asegúrate de que este no quede atrapado sobre las junturas del cierre hermético de la bolsa.
- Es probable que de alguna forma debas inclinar la bolsa. De esta manera, dejarás que fluya todo el líquido en una esquina de la bolsa de plástico.
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Expulsa todo el aire de sobra de la bolsa y vuelve a cerrarla herméticamente. Vuelve a triturar la fresa con los dedos durante aproximadamente un minuto para mezclar la solución con la pasta de fresa.Anuncio
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Mete la estopilla en el embudo. Hazlo hasta que el embudo esté completamente cubierto de estopilla. Ten en cuenta que la estopilla debería ser lo suficientemente grande como para que sobresalga por el borde del embudo.
- Sujeta las esquinas que sobresalen para que la estopilla no se deslice por el tubo del embudo. Otra opción es sujetar la estopilla en el embudo como una taza. Asegúrate de que los dedos pulgar e índice formen un círculo.
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Coloca el embudo cubierto de estopilla. Asegúrate de que el extremo de él esté en el vaso de precipitación o tubo de ensayo.
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Con la fresa medio derretida, haz un corte en la esquina de la bolsa de plástico. Ten cuidado de no hacer un corte demasiado grande; de lo contrario, la fresa medio derretida se te resbalará demasiado rápido. Finge que eres pastelero y haces un agujero en el extremo de una bolsa de glaseado.
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Sobre la estopilla con la que cubriste el embudo, exprime despacio la sustancia líquida de la fresa de la bolsa de plástico. Evita darte prisa o la sustancia líquida podría derramarse en todas partes y causar un gran desastre.
- Es posible que este procedimiento requiera algo de tiempo, pero debería haber un líquido del color de la fresa que gotea en el vaso de precipitación o tubo de ensayo filtrado en la estopilla. Continúa hasta exprimir toda la sustancia líquida de la bolsa de plástico.
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Quita la estopilla de la parte superior del embudo. Hazlo cuando el líquido de la fresa casi haya dejado de gotear. Colócalo en el compost, junto con toda la fresa que antes habías extruido sobre la estopilla.
- Para limpiar la fresa sin que te cause molestias, haz con la estopilla una forma pequeña de tazón mientras la levantas para que no se desprenda nada de los desechos de la fresa.
- Es posible que tengas que usar una toallita de papel para sostener la parte inferior de la estopilla mientras la llevas porque todavía puede gotear algo de líquido.
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Vuelve a tomar del congelador el alcohol isopropílico. Lo necesitarás para extraer el ADN.
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Vierte con cuidado el alcohol isopropílico en el vaso de precipitación o tubo de ensayo. Hazlo hasta que haya una capa de tres centímetros del alcohol sobre el líquido de fresa. La medida no tiene que ser exacta, sino que puede dar igual si es demasiado mayor o menor.
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Revuelve la mezcla con una brocheta de bambú. Revuélvelo poco a poco, pero no mucho; solo lo suficiente como para mezclar las dos capas. Es posible que veas que se forma un grupo de burbujas en el líquido, lo cual es algo normal. Las burbujas forman parte del ADN.Anuncio
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Asegúrate de que haya una sustancia pegajosa dentro del líquido. Usa la brocheta para recoger la sustancia raspándola. Es posible que sea transparente, blanca o rosa translúcido. Dentro del líquido, es posible que sea difícil de ver y se parezca a grupos de burbujas.
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Una vez que la sustancia pegajosa esté fuera del agua, obsérvala. Esta será el ADN.
- Si quieres conservarla, usa la brocheta de bambú para raspar el ADN del vaso de precipitación o tubo de ensayo. Luego colócala en una cápsula de plástico o caja transparente. Es posible que se seque con el tiempo, pero debería durar un rato.
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Terminado.Anuncio
Consejos
- Puede ser útil cerrar herméticamente una bolsa de plástico hasta que solo haya un diminuto agujero sin cerrar. Para expulsar el aire de sobra, presiona con cuidado las burbujas de aire de la bolsa.
- También puedes agregar algo del líquido de fresa con la sustancia pegajosa del ADN para conservarlo. De esta forma, no se seca tan rápido.
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Advertencias
- Es normal que hagas desastres, pero para evitar que sea necesario limpiarlos, ten cuidado al amasar la fresa en la bolsa de plástico. Si la amasas demasiado, es posible que se reviente la bolsa y salpique la fresa medio derretida en todas partes.
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Cosas que necesitarás
- 1 fresa
- alcohol para frotar
- líquido lavavajillas
- sal
- 1 embudo de plástico
- 1 estopilla (con algo de espacio de maniobra debe cubrir fácilmente la abertura del embudo de plástico)
- 1 tubo de ensayo o vaso de precipitación
- 1 taza pequeña
- 1 cilindro graduado
- 1 bolsa resellable de plástico
- 2 brochetas de madera o bambú
Acerca de este wikiHow
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