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Existen pocas cosas más lujosas que una alfombra suave y acolchada. Sin embargo, a pesar de tus mejores esfuerzos por mantener tus pisos impecables, las alfombras inevitablemente necesitan recibir un poco de cariño de vez en cuando. Por fortuna, es fácil darles el amor que se merecen con herramientas que probablemente ya tienes en casa. wikiHow ha reunido un par de métodos para ayudar a que tu piso luzca como nuevo sin necesidad de una máquina limpiadora de alfombras. ¡Échales un vistazo!

Método 1
Método 1 de 3:

Lleva a cabo una limpieza profunda a mano

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  1. Bárrela con un cepillo para alfombras o utiliza una escoba y un recogedor. De esta manera, sacudirás el polvo y los residuos que están profundamente enterrados en la alfombra y los sacarás a la superficie. [1]
  2. Ahora que has cepillado todo el polvo oculto y lo has sacado a la parte superior de la alfombra, te resultará más sencillo barrerla.
    • Debes sacudir y aspirar la alfombra como procedimientos previos para una limpieza más profunda. Sin embargo, aunque no planees realizar una limpieza profunda posterior, debes sacudir y aspirar la alfombra con regularidad (aproximadamente dos veces a la semana) para mantenerla fresca. [2]
  3. En un tazón, mezcla bicarbonato de sodio y sal en partes iguales. Luego, esparce la mezcla sobre la alfombra de manera uniforme. El bicarbonato y la sal ayudarán a eliminar la suciedad de las fibras y absorberán los malos olores. [3]
  4. Aplica el agua con una botella de aerosol. Rocía hasta que la alfombra quede húmeda, pero no empapada.
  5. Utiliza un cepillo para alfombras para trabajar un área pequeña a la vez, por ejemplo, secciones de 1 x 1 m (3 x 3 pies). Restriega en todas las direcciones: primero de adelante hacia atrás y luego de arriba abajo. De esta manera, te aseguras de que la mezcla interactúe por completo con cada fibra de la alfombra. [4] Recoge el exceso de mezcla.
    • También puedes utilizar una combinación de vinagre blanco y agua en partes iguales en lugar del bicarbonato y la sal. [5] Agrega vinagre y agua a una botella de aerosol, rocía la alfombra una sección a la vez y luego seca el exceso de líquido con un paño de microfibra. [6]
  6. Deja que la mezcla de bicarbonato se asiente sobre la alfombra durante al menos una hora. Cuanto más tiempo dejes la mezcla sobre la alfombra, más olores absorberá. [7] ¡Ahora tu alfombra estará fresca y limpia!
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Método 2
Método 2 de 3:

Elimina manchas solubles en agua a mano

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  1. Esta mezcla sirve para aclarar la mayoría de las manchas solubles en agua (por ejemplo, las de café, té, sangre, bebidas alcohólicas, excremento, barro y tinta lavable). Utiliza ¼ de cucharadita (1,2 ml) de detergente para ropa sin cloro y 4 tazas (950 ml) de agua. [8]
    • Es probable que necesites algo más potente para eliminar las manchas solubles en agua más difíciles , incluidas las de café, sangre o vino. Puedes probar con amoníaco. [9] Mezcla 1 cucharada (15 ml) de amoniaco y 1 taza (240 ml) de agua.
    • El amoníaco puede provocar quemaduras o problemas respiratorios si entra en contacto con la piel o se ingiere, así que asegúrate de utilizar guantes y mantener el área bien ventilada si planeas aplicarlo. [10]
  2. Sumerge una toalla blanca limpia en la mezcla y aplícala sobre la mancha con cuidado. Continúa aplicando hasta que la mancha desaparezca.
    • También puedes utilizar una toalla de microfibra para este procedimiento.
  3. Utiliza agua limpia y caliente y asegúrate de no empapar la alfombra. Evita caminar sobre ella hasta que se seque.
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Método 3
Método 3 de 3:

Limpia otras manchas comunes a mano

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  1. Combina vinagre blanco y agua en partes iguales en una botella de aerosol. Después de absorber toda la orina que puedas con un paño seco, restriega la mancha con un paño húmedo y luego rocíala con la mezcla de vinagre y agua. Luego, combina ½ cucharadita (2,5 ml) de detergente transparente, suave y sin cloro y 4 tazas (950 ml) de agua, y aplica esta mezcla a la mancha. Luego, enjuaga y seca. [11]
  2. Coloca el papel sobre la mancha y luego caliéntalo con la plancha. La mancha debe separarse de la alfombra y adherirse al papel. [12]
  3. Humedece el algodón (o un paño suave) con el alcohol y aplícalo sobre la mancha. Una vez que el pegamento se humedezca, frótalo para sacarlo de la alfombra. [13]
  4. Utiliza hielo para eliminar chicle o cera. Aplica hielo sobre la mancha para congelarla. Una vez que el chicle o la cera se congelen, ráspalos con un objeto romo (por ejemplo, el borde de una cuchara o un cuchillo para mantequilla). Aspira los pedazos antes de que se entibien y se adhieran nuevamente a la alfombra. [14]
  5. Combina 1 cucharadita (5 ml) de detergente lavavajillas y 1 taza (240 ml) de agua tibia y aplica la mezcla sobre la mancha. Restriega hasta que la mancha desaparezca y luego deja que se seque. [15]
  6. Sumerge un trapo o un pedazo de papel absorbente en acetona y restriega el esmalte hasta que desaparezca. [16]
  7. Un cuchillo para mantequilla puede funcionar. Raspa suavemente la quemadura con la cuchilla hasta que la mancha desaparezca. [17]
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