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Admitámoslo, no importa qué tan buen pescador seas, es inevitable que los anzuelos se queden atascados en el pez, especialmente si se los traga. Pero no hay de qué preocuparse, ¡quizás no sea necesario que cortes la línea!

  1. Determina si necesitas un alicate (preferiblemente con punta de aguja) o solamente una mano firme.
  2. Actúa con precaución en este método. Si la punta del anzuelo se atora, las cosas se volverán mucho más difíciles. En lugar de esto, rompe la punta con un alicate para permitir que el anzuelo se pueda extraer más suavemente. Romper la punta significa aplastarla hacia el gancho principal para que no se enganche en el pez. Si esto no funciona, no dejes el anzuelo adentro y corta la línea.
  3. Los peces tienen un diafragma en la parte posterior de la garganta que se abre brevemente y se cierra de inmediato mientras comen.
  4. Asegúrate de tener holgura en la línea, porque el anzuelo tiene que moverse libremente.
  5. Este paso puede ser complicado y podría tomar tiempo. Debes acabar con el anzuelo fuera de la boca del pez, aunque la línea podría quedar casi entretejida en su garganta.
  6. De esta forma, no perderás tu anzuelo, solo tendrás que atar la línea nuevamente con un nudo barril.
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Consejos

  • Asegúrate de mantener al pez en el agua por intervalos de un minuto para que no se muera. Un minuto fuera del agua equivale a un minuto dentro de ella.
  • Puede ser necesario cortar la línea con el anzuelo todavía en el pez. Esta no es una forma segura de recuperar el anzuelo.
  • Si es necesario, entreteje el anzuelo a través de las ranuras de las branquias del pez. Esta podría ser la única forma de tener acceso al anzuelo.
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