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Las escaleras ruidosas pueden ser irritantes, pero por suerte son fáciles de arreglar. Una vez que determines con precisión la ubicación exacta de cada ruido, es cuestión de apretar los componentes existentes de las escaleras para que no se rocen entre sí. Ya sea que puedas trabajar desde abajo o desde arriba del armazón de la escalera, cada ruido tardará un par de minutos en ser reparado, ¡incluso si la escalera está alfombrada!

Método 1
Método 1 de 3:

Ubicar los ruidos

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  1. Es de esperar que consten de tres partes principales: huellas, contrahuellas y zancas. La huella del escalón es la pieza horizontal de madera donde se pisa. La contrahuella es la pieza de madera vertical que se eleva desde el fondo de cada escalón. La zanca es la viga sobre el que se apoyan las huellas y las contrahuellas. [1]
    • La escalera tendrá por lo menos tres zancas: una a cada lado y una en el medio.
    • Las escaleras anchas pueden tener más zancas para aumentar el soporte.
  2. Sube y baja las escaleras. Cuando una escalera haga ruido, prueba todos los escalones pisando en cada huella, de frente hasta el fondo y de lado a lado. Determina exactamente de dónde se origina el ruido. Es de esperarse que el ruido sea causado por un espacio que comienza a crecer entre las partes de la escalera en ese punto específico. Este espacio hace que la escalera se afloje, por lo que las partes rozarán entre sí o con los clavos o tornillos que las mantienen unidas. [2]
    • Si no tienes acceso a la parte inferior de la escalera, te resultará fácil localizar la contrahuella a simple vista, pero para encontrar las zancas necesitarás el oído. Golpea suavemente el escalón con un martillo. Cuando el área suene más seca que el resto, te indicará que hay una zanca justo debajo. [3]
    • Lo normal es que cada zanca tenga un grosor aproximado de 3,8 a 5 cm (1,5 a 2 pulgadas). [4]
  3. Si tienes acceso a la parte inferior de las escaleras, pídele a alguien que suba y baje las escaleras para encontrar el ruido. Párate debajo de las escaleras para que puedas ver o escuchar cuando un escalón se mueva y haga ruido. [5] De esta forma, podrás ahorrar tiempo y no tener que subir y bajar las escaleras para reparar cada ruido que vayas encontrando.
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Método 2
Método 2 de 3:

Silenciar las escaleras ruidosas desde abajo

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  1. Cuando tu ayudante pise sobre un escalón y cause un ruido, busca un espacio entre la huella y la contrahuella o entre la huella y la zanca. Si ves uno pequeño, introduce el borde más delgado de una cuña entre las dos partes. [6] Utiliza un martillo para golpear suavemente el lado más grueso de la cuña hasta que esta quede firme en su sitio. [7]
    • Ten cuidado de insertar la cuña solo lo suficiente para llenar el espacio existente. Evita insertarla hasta el punto en que la parte más gruesa comience a separar aún más los componentes de la escalera.
    • Para aumentar el nivel de seguridad, aplique pegamento para madera a ambos lados de la cuña antes de insertarla.
    • Las cuñas también pueden ser llamadas calzas.
  2. Si encuentras que el espacio debajo de la huella se extiende total o parcialmente a lo largo de toda la contrahuella o de la zanca, usa pegamento para madera o un adhesivo de construcción para llenar el espacio. Pídele a tu ayudante que se baje del escalón. Inserta la boquilla en el espacio, si es posible. Si no, esparce una línea de pegamento a lo largo del espacio y empújalo usando algún objeto largo que sea lo suficientemente delgado para entrar en él. [8]
    • El pegamento para madera y el adhesivo de construcción son productos diferentes. El pegamento normalmente funciona mejor en los proyectos de madera sobre madera. Sin embargo, en este caso, el adhesivo de construcción también es adecuado si las escaleras están expuestas a mucha humedad, ya que su fórmula es más resistente al agua que el pegamento para madera. [9]
    • Coloca un objeto pesado sobre la huella del escalón mientras el pegamento se seca, de manera que quede a ras de la zanca o de la contrahuella que hay debajo.
  3. Si la zanca o la contrahuella han cambiado su forma original debido al desgaste o la deformación, dale a la huella un trozo de madera más nuevo sobre el que apoyarse. Corta una tabla de madera a la medida necesaria. Aplica pegamento para madera o adhesivo de construcción en el lado que hará contacto con la huella. Coloca la tabla en forma plana contra la zanca o la contrahuella, con la parte superior presionada al ras contra la huella del escalón. Luego clávala o atorníllala a la zanca o al contrahuella. [10]
    • Este método solo permite eliminar los espacios causados por pequeñas deformaciones o el desgaste y no para reforzar las escaleras débiles.
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Método 3
Método 3 de 3:

Silenciar las escaleras desde arriba

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  1. Si cada escalón de la escalera está hecho de más de una tabla de madera, el ruido puede ser causado por el roce entre esas dos piezas. En este caso, vierte un poco de lubricante entre ellas. Usa un paño limpio para frotar con la mano o el pie y hacer que el lubricante llegue más adentro. [11]
    • Los lubricantes adecuados para este método incluyen los polvos de grafito, de esteatita y de talco.
  2. Coloca un objeto pesado a cada lado del área ruidosa para que la huella se mantenga en contacto con la zanca o la contrahuella debajo. Usa dos clavos de acabado de 65 o 75 mm (2,5 o 3 pulgadas) para asegurar huella en su lugar. Para garantizar que permanezca a ras de la zanca o la contrahuella con el tiempo, martilla los clavos en un ángulo de 45 grados, con la punta de cada uno apuntando hacia el otro. [12]
    • Primero, marca dos puntos en la huella, siguiendo la zanca o la contrahuella que hay debajo, para hacer los agujeros guía para los clavos.
    • Asegúrate de que estos puntos estén separados por un margen suficientemente amplio para que los clavos no se crucen.
    • Usa un taladro con una broca de diámetro menor que el de los clavos para crear un agujero guía superficial para la punta de cada clavo.
    • Martilla los clavos hasta que las cabezas queden un poco por debajo de la superficie de la huella.
    • Utiliza masilla para madera para cubrir las cabezas de los clavos y rellenar las hendiduras que se produzcan.
  3. Lo ideal es que programes los proyectos para que puedas reparar las escaleras ruidosas mientras cambias el alfombrado. Si esto no es posible, encuentra un kit de atornillado en alfombra. Estos kits vienen con tornillos, brocas y un dispositivo de trípode especialmente diseñado para esta tarea. [13]
    • Coloca el trípode sobre el lugar en la huella donde debes atornillar para fijarla a la zanca o la contrahuella que hay debajo. [14]
    • Coloca uno de los tornillos especiales en el agujero en el centro del trípode.
    • Taladra el tornillo a través del centro del agujero, a través de la alfombra y la huella para fijarla en la zanca o la contrahuella.
    • Levanta el trípode y busca la cabeza del tornillo que sobresale de la alfombra.
    • Utiliza la pinza del trípode para romper la cabeza especialmente diseñada del tornillo, de la misma manera que quitarías una chapa de botella con un abrebotellas.
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