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Ha pasado mucho tiempo desde la invención de los lentes de contacto, pero su uso aún puede causar incomodidad de vez en cuando. Algunas de las causas más comunes son la suciedad o los residuos; los lentes rasgados, viejos o mal colocados; y los ojos secos. En algunos casos, el dolor y la incomodidad podrían deberse a una complicación médica subyacente, por lo que siempre será mejor consultar con un oculista si no sabes con certeza cuál es el problema. Un diagnóstico básico te ayudará a identificar el problema y adoptar medidas para corregirlo.

Método 1
Método 1 de 4:

Identificar y diagnosticar el problema

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  1. Si los lentes de contacto te generan incomodidad, podrías experimentar diversas sensaciones en los ojos. Quizás haya otros síntomas que no sientas, pero que podrías notar en el espejo o cuando los demás te los señalen. Estos son algunos de los síntomas más comunes de los lentes incómodos: [1]
    • escozor, quemazón o comezón en los ojos;
    • incomodidad cada vez mayor mientras más uses los lentes;
    • sentir un objeto externo en el ojo;
    • producción excesiva de lágrimas;
    • secreción de líquido inusual;
    • visión reducida o borrosa;
    • arcoíris, halos u orbes alrededor de los objetos en tu campo de visión;
    • sensibilidad a la luz;
    • sequedad;
    • enrojecimiento.
  2. Estas son una causa común de la irritación en los ojos; en especial, para las personas que usan lentes de contacto. Los alérgenos transmitidos por el aire pueden adherirse con facilidad a los lentes. Si no los eliminas y no limpias ni reemplazas los lentes con la frecuencia debida, la exposición a ellos podría irritarte los ojos. [2]
    • Si experimentas alergias estacionales, a las mascotas u otras de tipo ambiental comunes; podrías tomar un medicamento contra la alergia a diario.
    • Podrás comprar gotas para los ojos de venta sin receta que contengan antihistamínicos. Esto puede ser de utilidad para reducir la hinchazón y la irritación de los ojos.
    • Siempre sigue las indicaciones en el envase de los lentes o las pautas del doctor sobre la frecuencia con la que debas quitártelos o reemplazarlos.
  3. Si los usas por un tiempo mayor al recomendado, esto puede generar acumulaciones en la superficie de los lentes, lo que podría causarte una irritación leve o grave. [3] Siempre revisa el tiempo de uso recomendado para así evitar este problema sencillo.
    • Todos tenemos un nivel de comodidad diferente en torno a lo que se considera un uso continuo prolongado de los lentes de contacto.
    • Toda marca que fabrique lentes de contacto tendrá sus propias pautas sobre el tiempo durante el cual deban usarse antes de quitárselos o reemplazarlos. La FDA es el ente encargado de aprobar estas pautas, y su nombre deberá figurar en el envase. [4]
  4. Si los usas por un tiempo mayor a la fecha de reemplazo recomendada, esto puede generar las mismas acumulaciones de proteínas y minerales que surgen al no quitártelos. Si reutilizas los lentes antiguos, esto también puede elevar el riesgo de rasgarlos, lo que puede irritarte o lesionarte los ojos.
    • Siempre sigue el cronograma recomendado para su reemplazo, el cual estará señalado en el envase.
    • Como regla general, los lentes de hidrogel de silicona de dos semanas deberán reemplazarse en dicho tiempo; los de un mes tendrán que cambiarse cada 4 semanas; y los diarios, cada día. [5]
  5. Si recién has empezado a usarlos, tus ojos necesitarán un tiempo para adaptarse a ellos. Podrías sentir irritación, dolor e incomodidad si intentas usarlos todo el día cuando nunca antes los habías usado. [6]
    • Solo úsalos por unas horas o menos en los primeros 2 días.
    • Podrás aumentar el tiempo de uso a 8 horas al tercer y al cuarto día.
    • El quinto y el sexto día, solo deberás usarlos por 6 horas.
    • Tendrás que aumentar el tiempo a 10 horas el séptimo y el octavo día.
    • Podrás usar lentes de contacto por 12 horas o más una vez que empieces a sentirlos cómodos.
  6. Este suele ser el problema con las personas que los usan, ya que podrían no percatarse de que están al revés y colocárselos de forma incorrecta, lo que les causará incomodidad. Una manera sencilla de verificarlo es colocar la punta de un dedo (limpio) y observar su forma. Mantenlo cerca del ojo para así observarlo de forma minuciosa. ¿Luce como la mitad de una pelota o como un tazón de sopa, con bordes anchos? Si los lentes lucen como una esfera cortada a la mitad, esta será su forma correcta y podrás colocártelos en los ojos. Si los lados están hacia afuera, estarán al revés. [7]
  7. La mayoría de los casos de irritación e incomodidad se deben a factores ambientales (como los alérgenos y los residuos) o al uso inapropiado de los lentes. No obstante, a veces la incomodidad puede deberse a un problema más grave. Acude al doctor de inmediato si padeces alguno de los siguientes síntomas: [8]
    • dolor de ojo grave
    • hinchazón
    • enrojecimiento o irritación persistentes
    • signos de infección
    • destellos de luz
    • visión borrosa persistente
    • pérdida repentina de la visión
    • descargas pegajosas
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Método 2
Método 2 de 4:

Eliminar los residuos de los ojos

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  1. Siempre deberás hacerlo antes de tocarte los ojos o los lentes de contacto. De este modo, evitarás que la suciedad y los gérmenes ingresen a los ojos, lo que podría irritarlos o infectarlos. [9]
    • Mójate las manos con agua corriente limpia.
    • Aplícate jabón y forma espuma en las manos. Tendrás que cubrir la parte delantera y la trasera de las manos, entre los dedos y debajo de las uñas.
    • Frótatelas por 20 segundos como mínimo para así cubrirlas en su totalidad y permitir que el jabón te limpie la piel.
    • Enjuágate por completo con agua corriente limpia. [10]
    • Sécate con una toalla limpia sin pelusas.
    • Deberás tener las uñas cortas y lisas, así no te rasguñarás el ojo por accidente.
  2. Aprieta con suavidad cada lente y quítatelos con mucho cuidado. Luego de quitártelos, tendrás que enjuagarlos con una solución especial a fin de eliminar todo residuo que podría estar irritándote los ojos.
    • Aplícate una cantidad pequeña de la solución en la palma de la mano, luego echa algunas gotas en la parte abierta de los lentes con forma de “tazón”.
    • Usa el otro dedo índice para frotar el lente con cuidado en la solución que has aplicado en la palma de la mano. No dejes que la uña lo rasguñe.
    • Retira el exceso de solución y repite el proceso con el otro lente. [11]
    • Deberás revisarlos cuando te los quites, para así detectar todo rasgado. Los lentes rasgados pueden generar mucho dolor e incomodidad, y podrían lastimarte los ojos.
  3. Luego de enjuagarlos (y con las manos aún limpias), estarás listo para volver a colocártelos. Tendrás que ser muy cuidadoso para no lastimarte los ojos ni dañar los lentes, en especial con las uñas.
    • Deberás tener las manos secas; de lo contrario, los lentes se te adherirán a los dedos.
    • Coloca el lente en la punta del dedo índice.
    • Usa la otra mano para levantar y sostener el párpado y las pestañas superiores. Deberás mantener estas últimas totalmente fuera de los ojos.
    • Haz que el lente toque la superficie del ojo poco a poco. No lo introduzcas a la fuerza, ya que podrías lastimarlo.
    • No parpadees hasta que el lente se ubique en su posición correcta. [12]
  4. Deberás enjuagar el estuche de los lentes a diario y lavarlo con jabón como mínimo una vez a la semana. Tendrás que comprar un estuche nuevo cada 3 meses, así garantizarás que los lentes se mantengan limpios.
    • Toma una solución para lentes de contacto y enjuaga el estuche siempre que te los pongas. Cambia la solución en el estuche todos los días para así evitar la contaminación.
    • Usa jabón líquido (ya sea lavavajilla o antibacteriano para manos) y agua tibia para lavar bien el estuche como mínimo una vez a la semana.
    • Al terminar de lavar el estuche, tendrás que agregarle solución nueva y cerciorarte de que los lentes estén totalmente sumergidos cuando los guardes.
    • Reemplaza el estuche cada 3 meses o según sea necesario.
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Método 3
Método 3 de 4:

Tratar los ojos secos

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  1. La recomendación más común para los ojos secos es usar gotas humectantes o lágrimas artificiales. Estas gotas pueden lubricarlos, ya que imitan la composición y el efecto de las lágrimas reales. [13] Si usas lágrimas artificiales, deberás buscar una marca sin conservantes. Los conservantes presentes en las gotas o lágrimas de venta libre comunes pueden generar acumulaciones en los lentes de contacto e incluso alergias.
    • Lávate las manos antes de echarte las gotas o tocarte los ojos de alguna forma.
    • Agita el recipiente con cuidado y retira la tapa. No toques el aplicador para así evitar contaminarlo.
    • Inclina la cabeza hacia atrás y sostén el recipiente boca abajo apuntando a tu frente, justo por encima del ojo.
    • Con la otra mano, jala el párpado y las pestañas inferiores con cuidado, e intenta levantar el párpado superior al mismo tiempo pero sin tocarlo.
    • Aprieta un poco el recipiente hasta aplicar la cantidad deseada de gotas.
    • Cierra los ojos sin apretarlos y pasa un pañuelo limpio con cuidado por su parte exterior.
    • Presiona con cuidado la parte interior de los ojos mientras los tengas cerrados, y mantén la presión por 30 segundos para así prolongar el contacto con las gotas.
    • Siempre ten a la mano gotas para los ojos si eres propenso a que estos se sequen o se irriten.
  2. El doctor podría recomendarte uno de estos medicamentos según la gravedad de los ojos secos. Podrían ser gotas (como Restasis) o esteroides. [14]
    • Los medicamentos antiinflamatorios de venta con receta tratarán la sequedad ocular generada por los químicos, los medicamentos, el calor o determinadas enfermedades autoinmunes.
  3. Algunas de las causas serán inevitables, como los medicamentos o determinadas enfermedades. No obstante, hay otras causas ambientales que podrás evitar o reducir a través de una planificación y cuidados apropiados.
    • Usa protección para los ojos si hay mucho viento al aire libre, y procura limitar tu exposición al mismo.
    • No fumes.
    • Evita el aire seco. Usa un humidificador en casa si el sistema de calefacción está secando el aire. [15]
    • Siempre ten a la mano gotas para los ojos si eres propenso a que estos se te sequen.
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Método 4
Método 4 de 4:

Probar lentes de contacto y opciones diferentes

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  1. Si estos te quedan bien, deberán reposar en una capa de líquido delgada, la cual se renovará cada vez que parpadees. Por otro lado, si no te quedan bien, interrumpirán este proceso, lo que generará incomodidad y podría dañar la córnea. [16]
    • Si el oculista no revisa este aspecto, deberás pedirle que lo haga.
    • El doctor deberá verificar cómo te queda cada lente siempre que lo visites.
    • Si te quedan mal, esto podrá solucionarse con facilidad modificando la curvatura o el diámetro recomendado para tus lentes.
  2. Los lentes de contacto blandos suelen considerarse desechables, pero algunas personas indican que usar un par de lentes nuevos cada día puede reducir la incomodidad en gran medida. Esto es de mucha utilidad para aquellos que sufren de alergia y se exponen a diario al polen, la caspa y otros alérgenos que se transmiten en el aire. [17]
    • Algunos modelos más recientes se producen con un “gradiente de agua” que los vuelve incluso más cómodos que los lentes de contacto diarios comunes. [18]
    • Ten en cuenta el costo. Si desechas los lentes después de usarlos cada día, tendrás que comprar 720 lentes cada año (y quizás más si alguno se pierde o se daña). [19]
    • Si usas los de un día, esto puede aumentar el costo con rapidez, pero el precio exacto dependerá del lugar en donde los compres y el tipo de cobertura que tengas. La mayoría de los fabricantes están al tanto de ello, por lo que ofrecerán descuentos para compensar el costo. También podrías ahorrar dinero, ya que no necesitarás la solución o el estuche.
  3. Los lentes de contacto blandos hechos con hidrogel de silicona son más “transpirables” que los blandos comunes. Esto se debe a que el material permite que el oxígeno fluya a través de ellos, lo que puede evitar que los ojos se sequen. Este tipo de lentes también absorben la humedad con más rapidez y eficacia que los convencionales, lo que reduce aún más el riesgo de sufrir de sequedad. [20]
    • Los lentes de hidrogel de silicona mejoran la comodidad de los ojos, en especial si vas a usarlos por periodos prolongados.
    • Algunos indican haber sufrido reacciones similares a las de la alergia (como enrojecimiento, comezón e incomodidad) al usar los lentes de dicho material. No obstante, actualmente los investigadores no han encontrado evidencia formal sobre las reacciones alérgicas.
    • Si crees que eres alérgico a la silicona, deberás conversar con un doctor antes de tratar de usar los lentes de contacto hechos con este material.
  4. Si sufres de sequedad ocular grave, podrías sentirte cómodo usando lentes de contacto diseñados específicamente para las personas con este problema. La Administración de Alimentos y Medicamentos indica que algunos lentes de contacto desechables pueden aliviar la incomodidad generada por la sequedad. [21]
    • Si padeces de sequedad ocular grave, deberás preguntarle al oculista qué lentes podrían ser los más adecuados para tu afección.
  5. Si los lentes de contacto te causan incomodidad o irritación, tus ojos podrían ser más sensibles de lo normal. No hay ningún problema con ello, y deberás contemplar la idea de usar lentes de contacto con menos frecuencia o evitarlos por completo si crees que podrían ser la causa.
    • Usa gafas siempre que sientas irritación o incomodidad en los ojos.
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Consejos

  • Lávate las manos antes de tocar los lentes.
  • Agrega solución fresca cada vez que te los saques.
  • Si solo te molesta un ojo, tendrás que quitarte los lentes con cuidado y revisar si tiene signos de rasgado.
  • Revisa las pestañas. Podrías tener una pestaña más corta que apunta hacia el ojo, en lugar de estar doblada hacia arriba, lo que hará que toque el lente y lo mueva siempre que parpadees. Si el dolor es intenso, podrías tener que esperar alrededor de una semana, ya que esta habrá crecido para ese entonces y podrás usar los lentes de contacto.
  • Si te queman los ojos luego de ponerte los lentes, podría tratarse de una reacción alérgica. Las alergias a los lentes en sí son muy poco comunes, pero podrías ser sensible a la solución que usas. Consulta con el oculista para que te recomiende otra.
  • Algunas personas tienen ojos sensibles y no pueden usar lentes de contacto con comodidad. Usa gafas si sientes incomodidad en los ojos la mayor parte del tiempo en el que uses los lentes de contacto.
  • Algunas soluciones lubricantes (por lo general, las antiguas) no son compatibles con los lentes de contacto hechos con hidrogel de silicona, y podrían causarte incomodidad al usarlas. [22] Usa otra solución lubricante y observa si te brinda alivio.
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Advertencias

  • Si te duele el ojo luego de quitarte el lente de contacto, este podría haberlo rasguñado. Acude al doctor lo más pronto posible.
  • Si le entra jabón al ojo o está rasguñado, deberás ir al doctor antes de volver a ponerte lentes de contacto.
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